domingo, 13 de septiembre de 2020

Joseph Stiglitz. Las lecciones que ya dejó la pandemia... @dealgunamanera...

Las reglas de Joseph Stiglitz para la economía pos coronavirus...

El mundo pospandémico podría experimentar desigualdades aún mayores a menos que los gobiernos hagan algo", afirma Joseph Stiglitz. Imagen: Leandro Teysseire

El primero Nobel postula que será necesario un programa integral para reducir la desigualdad de ingresos. Aconseja políticas monetarias que se centren en garantizar el pleno empleo. La legislación laboral debe mejorar la protección de los trabajadores porque hoy existe una economía plagada de poder de mercado y explotación.

© Escrito por Joseph Stiglitz (*) el domingo 06/09/2020 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.

La Covid-19 no ha sido un virus de igualdad de oportunidades: persigue a las personas con mala salud y aquellas cuya vida diaria las expone a un mayor contacto con los demás. Esto significa que persigue desproporcionadamente a los pobres, especialmente en países pobres y en economías avanzadas como Estados Unidos, donde el acceso a la atención médica no está garantizado. 

Una de las razones por las que Estados Unidos se ha visto afectado por el mayor número de casos y muertes (al menos en el momento de esta publicación) es porque tiene uno de los estándares de salud promedio más pobres de las principales economías desarrolladas, ejemplificado por la baja esperanza de vida (más baja ahora incluso que hace siete años) y los niveles más altos de disparidades en salud.

En todo el mundo existen marcadas diferencias en la forma en que se ha gestionado la pandemia, tanto en lo que respecta al éxito de los países en el mantenimiento de la salud de sus ciudadanos y la economía como en la magnitud de las desigualdades que se muestran. 

Hay muchas razones para estas diferencias: el estado preexistente de la atención médica y las desigualdades en salud; la preparación de un país y la resistencia de la economía; la calidad de la respuesta pública, incluida la confianza en la ciencia y la experiencia; la confianza de los ciudadanos en la orientación del gobierno; y cómo los ciudadanos equilibraron sus “libertades” individuales para hacer lo que quisieran con su respeto por los demás, reconociendo que sus acciones generaban externalidades. Los investigadores pasarán años analizando la importancia de estos varios efectos.

Lecciones

Dos países ilustran las posibles lecciones que surgirán. Si Estados Unidos representa un extremo, quizás Nueva Zelanda represente el otro. Es un país en el que un gobierno competente se basó en la ciencia y la experiencia para tomar decisiones, un país donde existe un alto nivel de solidaridad social (los ciudadanos reconocen que su comportamiento afecta a los demás) y confianza, incluida la confianza en el gobierno. 

Nueva Zelanda ha logrado controlar la enfermedad y está trabajando para reasignar algunos recursos infrautilizados para construir el tipo de economía que debería marcar el mundo pospandémico: una que sea más verde y más basada en el conocimiento, con mayor igualdad, confianza y solidaridad

Desafortunadamente, por muy mala que haya sido la desigualdad antes de la pandemia, y como con tanta fuerza la pandemia ha expuesto las desigualdades en nuestra sociedad, el mundo pospandémico podría experimentar desigualdades aún mayores a menos que los gobiernos hagan algo

La razón es simple: la covid-19 no desaparecerá rápidamente. Y el miedo a otra pandemia persistirá. Ahora es más probable que tanto el sector público como el privado se tomen los riesgos en serio. Y eso significa que ciertas actividades, ciertos bienes y servicios y ciertos procesos de producción se considerarán más riesgosos y costosos. 

Si bien los robots contraen virus, son más fáciles de administrar. Por lo tanto, es probable que los robots, cuando sea posible, al menos al margen, reemplazarán a los humanos. El "zoom" sustituirá, al menos en el margen, a los viajes en avión. 

La pandemia amplía la amenaza de la automatización de los trabajadores de servicios de persona a persona pocos calificados que, hasta ahora, la literatura ha considerado menos afectados, por ejemplo, en educación y salud. Todo esto hará que disminuya la demanda de determinados tipos de mano de obra. Es casi seguro que este cambio aumentará la desigualdad, acelerando, de alguna manera, las tendencias ya vigentes.

Nueva economía, nuevas reglas

La respuesta fácil es acelerar la mejora de las competencias y la formación junto con el cambiante mercado laboral. Pero hay buenas razones para creer que estos pasos por sí solos no serán suficientes. Será necesario un programa integral para reducir la desigualdad de ingresos

El programa debe reconocer primero que el modelo de equilibrio competitivo (mediante el cual los productores maximizan las ganancias, los consumidores maximizan la utilidad y los precios se determinan en mercados competitivos que igualan la oferta y la demanda) que ha dominado el pensamiento de los economistas durante más de un siglo, no proporciona un buen resultado

Esta es la imagen de la economía actual, especialmente cuando se trata de comprender el crecimiento de la desigualdad. Tenemos una economía plagada de poder de mercado y explotación

Debilitamiento de las limitaciones del poder empresarial; minimizar el poder de negociación de los trabajadores; y la erosión de las reglas que gobiernan la explotación de consumidores, prestatarios, estudiantes y trabajadores han sumado juntos para crear una economía de peor desempeño caracterizada por una mayor búsqueda de rentas y una mayor desigualdad.

Necesitamos una reescritura integral de las reglas de la economía

Por ejemplo, necesitamos políticas monetarias que se centren más en garantizar el pleno empleo de todos los grupos y no solo en la inflación; leyes sobre quiebras que estén mejor equilibradas, reemplazando aquellas que se volvieron demasiado favorables a los acreedores y proporcionaron muy poca responsabilidad a los banqueros que participaron en préstamos predatorios; y leyes de gobierno corporativo que reconocen la importancia de todas las partes interesadas, no solo de los accionistas. 

Las reglas que gobiernan la globalización deben hacer algo más que servir a los intereses corporativos; los trabajadores y el medio ambiente deben estar protegidos. La legislación laboral debe mejorar la protección de los trabajadores y brindar un mayor margen para la acción colectiva.

Pero todo esto no creará, al menos a corto plazo, la igualdad y la solidaridad que necesitamos. Tendremos que mejorar no solo la distribución de ingresos en el mercado, sino también la forma en que los redistribuimos. De manera perversa, algunos países con el mayor grado de desigualdad de ingresos del mercado, como Estados Unidos, tienen sistemas tributarios regresivos en los que los que más ganan pagan una proporción menor de sus ingresos en impuestos que los trabajadores que se encuentran más abajo en la escala.

Igualdad

Durante la última década, el FMI ha reconocido la importancia de la igualdad para promover un buen desempeño económico (incluido el crecimiento y la estabilidad). Los mercados por sí mismos no prestan atención a los impactos más amplios que surgen de las decisiones descentralizadas que conducen a un endeudamiento excesivo en moneda extranjera o a una desigualdad excesiva. 

Durante el reinado del neoliberalismo no se prestó atención a cómo las políticas (como la liberalización del mercado de capitales y financieros) contribuyeron a una mayor volatilidad y desigualdad.  O cómo hubo políticas como la jubilación con beneficios definidos, o de pensiones públicas a privadas que llevaron a una mayor inseguridad individual, así como a una mayor volatilidad macroeconómica, al debilitar los estabilizadores automáticos de la economía.

En algunos países, esas reglas alentaron la miopía y las desigualdades, dos características de las sociedades que no han manejado bien la Covid-19. Esos países no estaban adecuadamente preparados para la pandemia: construyeron cadenas de suministro globales que no eran lo suficientemente resistentes. Cuando llegó la covid-19, por ejemplo, las empresas estadounidenses ni siquiera pudieron proporcionar suficientes suministros de cosas simples como máscaras y guantes, y mucho menos productos más complicados como test y respiradores.

La covid-19 ha expuesto y exacerbado las desigualdades entre países al igual que lo ha hecho dentro de los países. Las economías menos desarrolladas tienen peores condiciones de salud, sistemas de salud menos preparados para enfrentar la pandemia y personas que viven en condiciones que las hacen más vulnerables al contagio, y simplemente no tienen los recursos que las economías avanzadas tienen para responder a las consecuencias económicas.

La pandemia no se controlará hasta que se controle en todas partes, y la recesión económica no se dominará hasta que haya una sólida recuperación mundial. Por eso es una cuestión de interés propio, así como una preocupación humanitaria, que las economías desarrolladas proporcionen la asistencia que necesitan las economías en desarrollo y los mercados emergentes. Sin esa asistencia la pandemia mundial persistirá más de lo que lo haría de otro modo, entonces las desigualdades mundiales aumentarán y habrá divergencia mundial.

Si bien el Grupo de los Veinte anunció que utilizaría todos los instrumentos disponibles para brindar este tipo de ayuda, ésta hasta ahora ha sido insuficiente. En particular, no se ha empleado un instrumento utilizado en 2009 y fácilmente disponible: una emisión de 500.000 millones de dólares en derechos especiales de giro (DEG)

Hasta ahora, no se ha podido superar la falta de entusiasmo de Estados Unidos o India. La provisión de DEG sería de enorme ayuda para las economías en desarrollo y los mercados emergentes, sin costo o con un costo mínimo para los contribuyentes de las economías desarrolladas. Sería incluso mejor si esas economías contribuyesen con sus DEG a un fondo fiduciario que las economías en desarrollo utilizarían para hacer frente a las exigencias de la pandemia.

Las reglas del juego afectan no solo el desempeño económico y las desigualdades dentro de los países, sino también entre países, y en este campo las reglas y normas que gobiernan la globalización son centrales. Algunos países parecen estar comprometidos con el "nacionalismo de las vacunas". Otros, como Costa Rica, están haciendo todo lo posible para garantizar que todo el conocimiento relevante para abordar la covid-19 se utilice para todo el mundo, de manera análoga a cómo se actualiza la vacuna contra la influenza cada año.

Deuda

Es probable que la pandemia provoque una serie de crisis de deuda. Varios países tienen más deuda de la que pueden pagar dada la magnitud de la recesión inducida por la pandemia. Los acreedores internacionales, especialmente los acreedores privados, ya deberían saber que no se podrá sacar agua de la piedra. Habrá una reestructuración de la deuda. La única pregunta es si será ordenada o desordenada.

Si bien la pandemia ha revelado las enormes divisiones entre los países del mundo, es probable que la propia pandemia aumente las disparidades dejando cicatrices duraderas, a menos que haya una mayor demostración de solidaridad mundial y nacional

Las instituciones internacionales, como el FMI, han proporcionado un liderazgo global, actuando de manera ejemplar. 

En algunos países también ha habido un liderazgo que les ha permitido abordar la pandemia y sus consecuencias económicas, incluidas las desigualdades que de otro modo habrían surgido. 

Pero por dramáticos que hayan sido los éxitos en algunos lugares, igualmente dramáticos son los fracasos en otros lugares. Y aquellos gobiernos que han fallado internamente han obstaculizado la respuesta global necesaria. 

A medida que la evidencia de los resultados dispares se vuelve clara, ojalá haya un cambio de rumbo 

Es probable que la pandemia nos acompañe durante un tiempo y sus secuelas económicas durante mucho más tiempo. Todavía no es demasiado tarde para un cambio de rumbo, por supuesto.

(*) Profesor en la Universidad de Columbia y premio Nobel de Ciencias Económicas. Este artículo apareció en la edición de septiembre de la revista Finanzas & Desarrollo del Fondo Monetario Internacional.



Crece la Grieta. Otra vez La Bonaerense…@dealgunamanera...

Otra vez La Bonaerense…


Hoy, más que nunca... Codo a codo. Alberto Fernández - Horacio Rodríguez Larreta. Dibujo: Pablo Temes

Fue una rebelión, que iluminó zonas oscuras. El Presidente, lejos del diálogo y cerca de Cristina.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 12/09/2020 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.


La crisis que se desató en la policía de la provincia de Buenos Aires puede ser definida como la crónica de un conflicto anunciado. Para decirlo con todas las letras: fue una rebelión. Como tal, es reprochable. El asedio a la residencia presidencial y del gobernador fueron hechos inaceptables. Fue fuerte ver a miembros de la policía manifestando por las calles al son de bombos y redoblantes. Las imágenes que se vieron en los distintos puntos de la protesta parecían extraídas de uno de los tantos piquetes que forman parte de la geografía política y social de la Argentina.

Dicho esto, es menester analizar la causa de los reclamos. Allí aparece una enumeración de demandas que pasan por la miseria de los salarios del personal policial, la falta de equipamiento –se deben pagar ellos mismos el uniforme–, la falta de entrenamiento, la falta de protección, el calamitoso estado de los patrulleros, y un largo etcétera de carencias.

El detonador del conflicto fue el anuncio del plan de seguridad que hizo el Presidente el viernes 4 de septiembre. Cuando se lo examina en detalle, se aprecia claramente que, en verdad, más que un plan de seguridad de lo que se trata es de un plan de compras. Como tal, le faltó atender las necesidades de un factor clave: el personal policial. “Hay que entender la idiosincrasia del policía. No está del todo cuerdo quien se bate a tiros por un sueldo de 35 mil pesos al mes”, señala con toda crudeza un ex jefe policial.

Estos reclamos vienen desde hace años. Tampoco hubo mejoras significativas en la gestión de María Eugenia Vidal en la que, más allá del slogan “tenemos que cuidar al que nos cuida”, poco y nada se hizo para mejorar las condiciones laborales y salariales de los policías.

El conflicto desnudó la falta de información y de gestión de Axel Kicillof. Sólo una lectura endogámica de la crisis -algo que abunda en el kirchnerismo- puede hacer creer que el gobernador salió bien parado de este entuerto. Que el problema haya llegado sin escalas a las puertas de la quinta de Olivos habla de las falencias del gobierno bonaerense.     

En un municipio del conurbano gobernado por un kirchnerista de paladar negro, los policías le avisaron de la protesta al secretario de Seguridad, y le pidieron permiso para ir al “sirenazo”.

El silencio de los intendentes peronistas del conurbano fue otro de los datos políticos del conflicto. Ninguno salió a apoyar de viva voz ni al gobernador ni al ministro de Seguridad.

Sergio Berni ha quedado indiscutiblemente dañado por esta crisis, independientemente de lo que se pretenda hacer creer desde las esferas del oficialismo. La relación del ministro con los intendentes kirchneristas del conurbano es cada vez peor. Se lleva mejor con los intendentes opositores. Las diferencias vienen desde hace tiempo y, lejos de zanjarse, se ahondan día a día. “Dice cosas que la gente quiere escuchar pero que nosotros no compartimos”, señala lapidariamente una voz que expresa el pensamiento de uno de los jefes comunales de rancia estirpe K, quien agrega: “En verdad no se sabe cómo se termina de bancar a Sergio, porque él dice que es de Cristina pero uno no sabe hasta dónde. ¿Es orgánico o se corta solo?”

Las mentiras del Presidente. 

“Fue una jugada a tres bandas. Primero porque ratifica la centralidad de Alberto y le devuelve gobernabilidad, frente a las dudas de los que decían de que no podíamos gobernar; segundo porque ratifica su alianza inquebrantable con Cristina a través de Axel, a quien le da una mano muy grande al resolver el conflicto; y tercero, porque le da un cachetazo a Rodríguez Larreta. Es una jugada arriesgada pero para valorar”.

Los dichos, que corresponden a un colaborador estrecho del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, describen el ánimo imperante en el Gobierno y sirven para dejar al desnudo las falacias del Presidente. No es verdad que Alberto Fernández sea un hombre interesado en dialogar. En su incesante proceso de kirchnerización ha perdido esa capacidad. Tal como lo hace su jefa, Cristina Kirchner, AF impone.

En política, las formas tienen un enorme valor y hacen al fondo de los asuntos de su concernimiento. Este es un concepto que el Presidente conoce perfectamente, por lo que pudo haber encarado el espinoso tema de los fondos asignados a la Ciudad de Buenos Aires de una manera absolutamente distinta, con clase y jerarquía. Una determinación de semejante envergadura y consecuencias políticas y económicas no se comunica a través de un WhatsApp un minuto antes de ser anunciada. AF pudo haber convocado a Horacio Rodríguez Larreta para hacerle conocer la decisión que estaba a punto de tomar.

En esa reunión podría haberle informado acerca de las compensaciones que –según prometió– le dará a la Capital Federal. Sin embargo, nada de esto hizo. Optó en cambio por una decisión tipo manu militari. Así es como hacía las cosas CFK durante sus presidencias. Así es como las sigue haciendo ahora.

Más allá de la validez de la discusión sobre la repartición de fondos entre la Nación y las provincias –vale recordar que María Eugenia Vidal supo presentar un recurso ante la Corte Suprema para reclamar por una reasignación de fondos a la provincia de Buenos Aires– la apertura de este foco de conflictividad entre Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta tiene consecuencias dañinas para la Argentina.

Nadie se siente atraído hoy en día a invertir en un país atravesado por este nivel de división política y social. No deja de sorprender que el Presidente no lo advierta. Es por eso que ni siquiera la muy buena noticia del arreglo con los acreedores privados ha podido regenerar un clima de expectativas económicas favorables. Todos los días el Banco Central pierde dólares. Todos los días algún argentino busca irse a probar suerte a otras orillas.  

En el fondo del conflicto entre la Nación y la Ciudad de Buenos Aires, despunta, además, una razón fundamental: desde su llegada al poder, CFK viene desplegando un accionar destinado a dañar a Rodríguez Larreta a fin de perjudicar sus chances electorales ante su eventual candidatura presidencial.

El proyecto de la vicepresidenta es muy obvio: empoderar a Axel Kicillof para hacer de la provincia de Buenos Aires el bastión desde el cual el kirchnerismo pretende alimentar su proyecto político de permanencia indefinida en el poder.

Y para esos fines, cualquier medio es válido, tal como lo decía Nicolás Maquiavelo.

Video de Horacio R. Larreta. © Diario La Nación




sábado, 12 de septiembre de 2020

La corbeta A.R.A. Granville (P-33) culminó un nuevo patrullado marítimo… @dealgunamanera...

La corbeta A.R.A. Granville (P-33) culminó un nuevo patrullado marítimo…


Arribó ayer a su apostadero en la Base Naval Mar del Plata luego de varias semanas de operaciones en el mar.

© Publicado el jueves 10/09/2020 por el Periódico Digital Gaceta Marinera de la Ciudad de Punta Alta, Provincia de Buenos Aires, República de los Argentinos.



Mar del Plata – Ayer por la mañana arribó a la dársena de la Base Naval Mar del Plata la corbeta A.R.A. Granville (P-33), luego de efectivizar una nueva operación de control de los espacios marítimos nacionales en los límites de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) del Mar Argentino.

La unidad naval, dependiente de la División Patrullado Marítimo (DVPM), había zarpado para monitorear la actividad pesquera y el tránsito de embarcaciones por aguas nacionales. Para ello sumó a la dotación de Visita Registro y Captura (VRC) de la unidad a personal de la Agrupación Buzos Tácticos, y un inspector de pesca del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

Durante la navegación, el buque de la Armada Argentina concretó el control efectivo de buques de interés en distintas zonas del Atlántico Sur, obteniendo el resultado positivo y colaborativo de los mismos mediante comunicaciones radiales que permitieron corroborar sus permisos de pesca, sus datos técnicos y comerciales, y llevar a cabo un detallado registro fotográfico de cada embarcación.

En tal sentido, el Jefe de Operaciones de la corbeta, Teniente de Navío Nelson Preveth, destacó que “resulta de vital importancia llevar a cabo este tipo de actividades a fin de contribuir a la protección de los recursos nacionales, siendo esta tarea una de las principales de la División Patrullado Marítimo”.

Luego de algunos días de escala técnica en el Puerto de Ushuaia para cumplir tareas de apoyo logístico en el Área Naval Austral, la A.R.A. Granville (P-33) efectuó una etapa de navegación junto al aviso A.R.A. Teniente Olivieri (A-2), la lancha rápida A.R.A. Indómita (P-86) y la lancha A.R.A. Surubí (P-55), desarrollando distintos tipos de ejercitaciones tácticas. Concluido esto, la A.R.A. Granville (P-33) y el A.R.A. Teniente Olivieri (A-2) continuaron navegando juntos hasta las inmediaciones de la zona denominada Punta Loyola en la provincia de Santa Cruz, donde el aviso se destacó para cumplir tareas de mantenimiento de las ayudas a la navegación, en coordinación con el Servicio de Hidrografía Naval.

Posteriormente, la unidad de la DVPM se destacó al límite de la ZEE, donde continuó sus tareas de monitoreo y control de los espacios marítimos jurisdiccionales. Luego de varias semanas operando para contribuir al resguardo los recursos nacionales en el mar, la corbeta A.R.A. Granville (P-33) ingresó a la dársena de la Base Naval Mar del Plata culminando su misión, siendo relevada por otro buque de la Armada en el mar.

Al respecto, su Comandante, Capitán de Fragata Manuel Alejandro Lazarte, expresó: “El balance de esta navegación fue sumamente positivo; permitió a la dotación de la corbeta A.R.A. Granville (P-33) consolidar su adiestramiento de todos los conjuntos operativos a nivel individual y grupal, con énfasis en las tareas de control de los espacios marítimos. Este tipo de navegaciones representan algunas de las actividades que realizamos en forma continua con las unidades de la División de Patrullado Marítimo pertenecientes al Área Naval Atlántica”.

Al tomar puerto, y sin mediar pausa de por medio, la corbeta inició un nuevo alistamiento con el objetivo de regresar al mar a la brevedad, en respuesta al plan anual del Comando del Área Naval Atlántica.

Adiestrarse en el mar

También durante la navegación, la dotación de la corbeta pudo llevar a cabo su adiestramiento individual de unidad mediante diversos niveles de instrucción de acuerdo al plan de adiestramiento anual establecido por el comando superior.

Con condiciones climáticas y marítimas variadas, la A.R.A. Granville (P-33) recreó a bordo situaciones con niveles de complejidad diferentes, motivando el desarrollo de distintos roles como control de averías; lucha contra incendios; abandono de la unidad; maniobras de rescate de hombre al agua; maniobras marineras generales y rol de combate.

También, y con especial énfasis dada sus funciones como parte de la DVPM, la corbeta incrementó su adiestramiento en procedimientos de VRC, para lo cual la dotación especializada de buzos tácticos embarcada en la unidad transmitió sus conocimientos y experiencias al grupo VRC propio de la unidad, bajo una hipótesis de interceptación marítima.

En dicho marco, el personal trabajó técnicas de aproximación con botes a un buque de interés; seguridad y desplazamiento a bordo; manejo de armamento liviano con tiro efectivo; combate cuerpo a cuerpo; e interacción con tripulaciones cooperativas y no cooperativas.

El Jefe de Armamento de la A.R.A. Granville (P-33), Teniente de Navío Germán Arbizu, explicó que “el adiestramiento de VRC es necesario para que el personal adquiera las destrezas necesarias relacionadas con las tareas que realizarán para contribuir en la protección de los recursos nacionales y las leyes internacionales estipuladas bajo el marco legal de la CONVEMAR (Convención del Mar)”.




viernes, 11 de septiembre de 2020

Último discurso de Salvador Allende… @dealgunamanera...

Último discurso de Salvador Allende…

El 4 de septiembre de 1970 el médico socialista Salvador Allende triunfaba en los comicios presidenciales de Chile después de tres derrotas electorales. 


© Publicado el miércoles 09/09/2020 por el www.elhistoriador.com.ar de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos. 

La poderosa coalición de izquierda que encabezó Allende estaba conformada por los partidos Comunista, Socialista, radicales, Izquierda Cristiana, Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU), Acción Popular Independiente, entre otros. 

A diferencia de los intentos anteriores, la coalición era dirigida por primera vez por los sectores ligados a la clase trabajadora. El programa del Frente Popular contenía propuestas de larga aspiración popular, como una política exterior independiente, la reforma agraria y la nacionalización del cobre. 

El 4 de noviembre, Allende asumió la presidencia, pero durante toda su gestión, debió enfrentar las conspiraciones internas y la injerencia externa, hasta que finalmente fue derrocado por el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973. Transcribimos aquí el último discurso que pronunciara en esa fecha poco antes de suicidarse en el Palacio de la Moneda. 

Fuente: Salvador Allende, Textos escogidos, Selección e introducción James D. Cockcrot, Buenos Aires, Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo, 2003, págs. 274-275. 

11 de septiembre de 1973 

Seguramente ésta será la última oportunidad en que pueda dirigirme a ustedes. La Fuerza Aérea ha bombardeado las torres de Radio Postales y Radio Corporación. Mis palabras no tienen amargura sino decepción. Que sean ellas el castigo moral para los que han traicionado el juramento que hicieron: soldados de Chile, comandantes en jefe titulares, el almirante Merino, que se ha autodesignado comandante de la Armada, más el señor Mendoza, general rastrero que sólo ayer manifestara su fidelidad y lealtad al Gobierno, y que también se ha autodenominado Director General de carabineros.

Ante estos hechos sólo me cabe decir a los trabajadores: ¡Yo no voy a renunciar! Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que hemos entregado a la conciencia digna de miles y miles de chilenos, no podrá ser segada definitivamente. Tienen la fuerza, podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos. 

Trabajadores de mi Patria: quiero agradecerles la lealtad que siempre tuvieron, la confianza que depositaron en un hombre que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. En este momento definitivo, el último en que yo pueda dirigirme a ustedes, quiero que aprovechen la lección: el capital foráneo, el imperialismo, unidos a la reacción, creó el clima para que las Fuerzas Armadas rompieran su tradición, la que les enseñara el general Schneider y reafirmara el comandante Araya, víctimas del mismo sector social que hoy estará en sus casas esperando con mano ajena reconquistar el poder para seguir defendiendo sus granjerías y sus privilegios. 

Me dirijo, sobre todo, a la modesta mujer de nuestra tierra, a la campesina que creyó en nosotros, a la abuela que trabajó más, a la madre que supo de nuestra preocupación por los niños. Me dirijo a los profesionales de la Patria, a los profesionales patriotas que siguieron trabajando contra la sedición auspiciada por los colegios profesionales, colegios de clases para defender también las ventajas de una sociedad capitalista de unos pocos. 

Me dirijo a la juventud, a aquellos que cantaron y entregaron su alegría y su espíritu de lucha. Me dirijo al hombre de Chile, al obrero, al campesino, al intelectual, a aquellos que serán perseguidos, porque en nuestro país el fascismo ya estuvo hace muchas horas presente; en los atentados terroristas, volando los puentes, cortando las vías férreas, destruyendo lo oleoductos y los gasoductos, frente al silencio de quienes tenían la obligación de proceder. Estaban comprometidos. La historia los juzgará. 

Seguramente Radio Magallanes será acallada y el metal tranquilo de mi voz ya no llegará a ustedes. No importa. La seguirán oyendo. Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal con la Patria. 

El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.

Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo en el que la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. 

¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores! 

Estas son mis últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano, tengo la certeza de que, por lo menos, será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición. 




miércoles, 9 de septiembre de 2020

Así serán los aviones comerciales del futuro… @dealgunamanera...

Así serán los aviones comerciales del futuro…

El espectacular avión Flying-V diseñado para KLM por la Universidad Tecnológica de Delft ya tuvo su vuelo de bautismo.

Mirá cómo voló el prototipo de este revolucionario modelo que la Universidad Tecnológica de Delft diseñó para KLM, se llama Flying-V y ubica a los pasajeros y la carga en las alas, ganando en aerodinamia y reduciendo el consumo de combustible.

© Fuente: Aviacionline. Publicado el miércoles 09/09/2020 por la Revista Week End de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.

KLM y la Universidad Tecnológica de Delft presentaron el primer vuelo del Flying-V, el avión energéticamente eficiente del futuro. Este primer vuelo fue de un prototipo a escala que mostró cómo cambiará la aviación comercial.

Hace un año y medio, la Universidad Tecnológica de Delft (TU Delft) y KLM habían anunciado el inicio del proyecto Flying-V durante el encuentro IATA 2019. Luego de extensas pruebas en túnel de viento y en tierra, el modelo finalmente estuvo listo.

El primer vuelo de prueba fue un éxito.

Un equipo de investigadores, ingenieros y un piloto de drones de TU Delft viajaron a una base aérea en Alemania para el primer vuelo de prueba. "Teníamos mucha curiosidad por las características de vuelo del Flying-V.

El diseño encaja perfectamente dentro de nuestra iniciativa Fly Responsibly, que representa todo lo que estamos haciendo y seguiremos haciendo para mejorar nuestra sostenibilidad. Queremos un futuro sustentable para la aviación y la innovación es parte de ello.


KLM está entre las tres aerolíneas más sostenibles del mundo en el Índice de Dow Jones desde hace muchos años. Queremos seguir teniendo ese protagonismo en el futuro.

Por eso, estamos muy orgullosos de haber podido lograr esto juntos y en tan poco tiempo", comentó Pieter Elbers, Presidente y CEO de KLM.

El Flying-V es un tipo de avión de larga distancia con gran eficiencia energética. El diseño de la aeronave integra la cabina de pasajeros, la bodega de carga y los tanques de combustible en las alas, creando una espectacular forma de V.

Los cálculos informáticos predijeron que la forma aerodinámica mejorada y el menor peso de la aeronave reducirán el consumo de combustible en un 20 % en comparación con las aeronaves más avanzadas de la actualidad.


Colaboración e Innovación


KLM presentó el modelo a escala por primera vez durante su 100º aniversario, en octubre de 2019. Actualmente, varios socios están involucrados en el proyecto, incluido el fabricante Airbus. En ese momento aseguraron que el siguiente paso será volar el Flying-V con combustible sostenible.