martes, 24 de noviembre de 2015

Nuevos Avisos de Mar... @dealgunamanera...

Nuevos Avisos de Mar...


Avisos de la Armada Argentina recalaron en costas brasileñas. Las unidades navales de origen ruso, adquiridas recientemente por el país, realizan una escala técnica en San Salvador de Bahía, Brasil.

Los cuatro avisos adquiridos en Rusia por el Ministerio de Defensa a través de la Armada Argentina, cruzaron el Océano Atlántico durante el trayecto de su viaje hacia el país, y arribaron a las costas de Brasil.

Los buques recalaron en San Salvador de Bahía para realizar una escala técnica. Además de dar cuenta, una vez más, de los lazos que unen a la Marina de Brasil con la Armada Argentina, como así también de cooperación y diplomacia existente entre ambos países latinoamericanos.

La mencionada iniciativa se suma a las numerosas actividades que realizan ambas naciones en materia de conservación de recursos marítimos y desarrollo para la defensa a través de la UNASUR; y ejercicios militares de cooperación como el Fraterno y Acrux.

Este tipo de vínculos y visitas son recíprocos ya que las unidades de la Marina de Brasil, en su paso por aguas del Atlántico Sur visitan frecuentemente los puertos argentinos, principalmente las bases navales de Mar del Plata y Ushuaia.

Esos vínculos se extienden hasta la Antártida, donde la Armada Argentina brindó apoyo logístico a la Marina de Brasil en la reconstrucción de la Estación Antártica Comandante Ferraz, ante el incendio ocurrido en 2012, trasladando los elementos que iban a conformar esta nueva base desde Punta Arenas, Chile, a la Antártida.

Rumbo a su nuevo apostadero

A principios de diciembre se espera el arribo al Apostadero Naval Dársena Norte de Buenos Aires, de los cuatro avisos con capacidad polar adquiridos para la Armada Argentina. Los mismos han recibido el nombre de ARA “Estrecho de San Carlos”, ARA “Puerto Argentino”, ARA “Islas Malvinas” y ARA “Bahía Agradable”.


Las nuevas embarcaciones fueron compradas a la Empresa Petrolera Estatal rusa ARKTIKMORNEFTEGAZRAZVEDKA, JSC. Se trata de avisos con capacidad polar clase “NEFTEGAZ”; unidades de sostén logístico aptas para navegar en aguas con presencia de hielos.

Las funciones que tendrán estas unidades para el servicio naval una vez arribadas al país, serán las que están indicadas en la decisión administrativa del Jefe de Gabinete de Ministros del 9 de mayo de 2015, como:

• Búsqueda y rescate en el área marítima de responsabilidad SAR (Search And Rescue) 14 millones de km², responsabilidad asumida por nuestro país ante la Organización Marítima Internacional, OMI, mediante Ley N° 22.445.

• Remolque y salvamento de buques y/o submarinos hundidos.

• Contribuir al control de los espacios marítimos de interés para defender los derechos y recursos de los argentinos en el mar.

• Sostén logístico móvil a nuestras bases antárticas y a las actividades en el litoral marítimo atlántico y fluvial.

• Apoyo a la comunidad con atención sanitaria.

• Apoyo a los organismos nacionales competentes (CONICET, IAA, SIHN), para la investigación científica dentro del Proyecto Pampa Azul.

Asimismo, por su gran autonomía y economía, permitirá realizar con mayores prestaciones y flexibilidad la contención y mitigación de incidentes ambientales de largo alcance y efectuar la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC), actividad de protección de la vida humana que se realiza anualmente con la Armada de Chile.

Los avisos adquiridos tienen un desplazamiento de 2.723 toneladas, una eslora de 81,37 metros, una manga de16,30 metros y 5 metros de calado. Además cuentan con una grúa hidráulica y una cubierta libre en popa para transporte de material de 414 m². Tienen una autonomía de 40 días navegando a 12 nudos de velocidad sin necesidad de reabastecimiento de combustible.

Los buques zarparon desde los puertos rusos de Múrmansk y Arcángel con una tripulación de treinta personas cada uno. Los mismos, al momento de su arribo, reemplazarán a unidades que a lo largo de los últimos años se fueron desafectando, reforzando la presencia de la Armada Argentina en el mar, brindando mayor seguridad a la navegación y siendo más económicos por ser más modernos.


Características operativas

Eslora: 81,37 m.
Manga: 16,30 m.
Calado: 5 metros
Tonelaje: 2.723 toneladas
Propulsión:         Motores diésel
Cubierta: 414 m²
Maniobra: 2 hélices de paso variable en popa y 1 hélice en proa
Autonomía: 40 días a 12 nudos sin reabastecimiento

Tripulación: 30 personas

© Publicado el lunes 23/11/2015 por la Gaceta Marinera de la Ciudad de la Punta Alta, Provincia de Buenos Aires.






Confiar por Confiar, no más: Rarezas del Macrismo... @dealgunamanera...

Rarezas del Macrismo...


La consagración de Mauricio Macri representa una alegría importante para muchos argentinos. Millones de personas que han depositado su esperanza en él, le abrirán una línea de crédito político que Macri deberá saber administrar, para que no le ocurra lo mismo que a Cristina Kirchner luego del 2011, cuando dilapidó de manera extraordinaria aquél 54% de apoyo popular, cometiendo un error tras otro.

Hay dos maneras de intentar confiar en Macri. La primera, que es la más directa, y la que ha seguido la enorme mayoría de sus votantes, consiste en hacerlo, más por necesidad imperiosa de sacarse de encima al kirchnerismo, que por otro asunto.

La otra ya es más compleja. Porque parte del análisis de lo ofrecido, y de las personas que lo están ofreciendo.

Y ahí es donde, a este cronista, se le complica mucho poder confiar.

Porque PRO me dice que, para confiar en ellos, debo asumir que Mauricio Macri no tiene nada que ver con Franco Macri, que Adrián Menem no tiene nada que ver con Carlos Menem, y que Jorge Triaca hijo, (que suena para Trabajo), no tiene nada que ver con el Jorge Triaca que vació SOMISA, para que Techint la pueda comprar al 10% de su valor.

La misma Techint de Paolo Rocca que ha sido financista sustancial de la campaña de Mauricio Macri.

Y la verdad es que a mí me resulta demasiado extraño que en PRO se hayan juntado tantos muchachos que piensan con 180 grados de divergencia respecto de los que portan su mismo apellido, y hasta su misma cara.

Me explican, incluso, que la primera diputada nacional, Patricia Bullrich, no tiene nada que ver con la Patricia Bullrich que bajó 13% sueldos y jubilaciones.

O que Federico Sturzenegger no es el mismo que fuera procesado por el megacanje, ni es el que explicó en USA que, para debatir, la estrategia consistía en no decir jamás lo que pensaba hacer, y , simplemente, engañar a la gente.

Para confiar en PRO, o en Cambiemos, o en Macri, debo asumir que un ex Shell en YPF, que un ex Monsanto en Asuntos Agrarios de Bs Aires, o que un ex J.P.Morgan en economía, han hecho un vuelco absoluto respecto de los intereses que defendieron en el pasado, y ahora vienen a cumplir funciones públicas en defensa de lo nacional.

Otra vez, me resulta durísimo creer que en PRO se nucleen personas que han girado 180 grados respecto de los intereses que defendieron hasta hace 5 minutos.

Respecto del presidente Macri, se supone que debo olvidarme del origen espurio de su fortuna, de sus varios procesamientos judiciales, y de sus actitudes y expresiones del pasado reciente.

Debo creer que el presidente Macri no es el mismo que con la UCEP apaleaba indigentes por las calles, ni tiene algo que ver con aquél que reprimió pacientes y enfermeros en el Borda, que el presidente que ahora promete luchar contra la corrupción no tiene nada que ver con el intendente del decreto 556/10, mediante el cual se extrajeron millonarios fondos de la ciudad de Buenos Aires con fines insondables, o que el Macri que se quejaba de la fundación de nuevas universidades, que decía que el salario es un gasto, o que ponía alumnos a estudiar dentro de containers, era un Macri diferente a este que ganó la elección.

Mire...en cualquier parte del mundo, incluso aquí, para obtener un buen conchabo usted debe presentar un curriculum vitae. Se presenta para conocer qué cosas usted es capaz de hacer, pero básicamente, para saber cuáles fueron las cosas que ya hizo.

Personalmente estoy convencido de que la mejor forma de conocer quién es alguien, consiste en observar quién fue. Es un asunto simple, pero que prácticamente nunca falla.

Y cuando miro quiénes fueron estos muchachos, de dónde vienen, y qué es lo que representaron, es cuando se me hace arduo poder confiar en ellos.

La política argentina me quiere obligar a formatear razonamiento y memoria, e instalarme, periódicamente, un nuevo sistema operativo. Y todo en nombre de la esperanza, aunque eso consista en elegir a estas personas.

Lo siento. Pero me resisto a eso. Conmigo no, muchachos: Conmigo no.

El 15 de octubre de 2011, cuando CFK ganó con aquél 54% de los votos, escribimos para este mismo medio un artículo que contenía la siguiente frase.

"La mitad de los argentinos hoy me ha dicho que no le interesa que le contemos o analicemos lo que ellos desconocen. No les importa el pasado ni el futuro, y son clara y legítima mayoría".

4 años más tarde, la sensación es prácticamente la misma.

No diré lo que todos dicen "ojalá que a Macri le vaya bien", porque históricamente, cuando le fue bien a Macri, me fue mal a mí, y a un montón de tipos como yo.

A Macri le fue fantástico en los ´70 y en los ´90. A la argentina le fue espantosamente mal en esos lapsos.

Digamos que los intereses de Macri nunca estuvieron vinculados a los míos, ni a los del 90% de la gente que conozco.

Sí diré "ojalá que a los argentinos nos vaya bien", que es otro asunto sustancialmente diferente, y comparativamente mucho más importante.

© Escrito por Fabián Ferrante el lunes 23/11/2015 y publicado por Tribuna de Periodistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

lunes, 23 de noviembre de 2015

Presidente electo y el anticipo de sus primeras medidas... @dealgunamanera...

Las definiciones de Macri sobre el dólar, ganancias, inseguridad y política exterior…

Macri brinda precisiones sobre su futuro gobierno. Prensa PRO

El Presidente electo anticipó sus primeras medidas de Gobierno y la conformación de su gabinete.

Mauricio Macri brindó esta mañana en la Usina del Arte su primera conferencia de prensa como Presidente electo en la que arrojó algunas definiciones sobre la conformación de su gabinete y las primeras medidas que impulsará. A continuación sus expresiones más destacadas.

Gobernabilidad: "La idea es gobernar para todos, ya probamos demasiados años enfrentados y queriendo focalizar más en las diferencias que en las coincidencias". Macri se mostró hoy confiado en tener "un buen diálogo" con el peronismo a partir del 10 de diciembre, aunque descartó que algún dirigente de ese sector integre el nuevo Gobierno al advertir que "van a ser parte de la oposición".

Economía: "No voy a designar ministro de Economía, va a haber Hacienda y Finanzas. Seis ministros que van a ser los integrantes del gabinete económico para que rápidamente tomen contacto y sepan cuál es la situación. Necesitan saber cuál es el estado real de las cuentas públicas, el estado real de la situación del Banco Central. El gabinete económico se conforma por un ministro de Trabajo, ministro de Hacienda y Finanzas, ministro de Energía, ministro de Transporte, y ministro de Agricultura".

Funcionarios militantes: "Espero que tengan la dignidad y la generosidad" de presentar la renuncia luego del traspaso de gobierno, entre ellos el titular del Banco Central, Alejandro Vanoli, y la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó. "Lo que hemos dicho se mantiene vigente. Queremos realmente que tengan la dignidad y la generosidad de facilitarle el camino el nuevo gobierno, permitiéndole designar gente en la cual yo y todo mi equipo confiamos". "Son militantes de un partido antes que expertos técnicos en lo que están haciendo".

Relación con Cristina Kirchner: "Me llamó y me felicitó y me invitó mañana a la residencia de Olivos". "Dijo que estaba contenta porque había sido el primer balotaje en la historia de este país en una jornada democrática en que los argentinos eligieron un cambio".

Corrupción: "La Justicia va a tener toda la libertad que corresponde para que vayan a fondo" con "aquellos que cometieron actos que violan la ley" y prometió que no habrá "impunidad" en su gobierno. "Estoy comprometido en que en mi gobierno estarán todos a disposición de la Justicia. Debemos dar el ejemplo en lo que uno hace y que no haya ningún tipo de impunidad". "La Justicia va a tener toda la libertad que corresponde para que vayan a fondo".

Tres gabinetes para tres gobiernos: "Es un triple desafío, pero por suerte en Argentina hay mucha gente valiosa, vamos a tener la generosidad de convocarlos, y estamos haciéndolo. Se sorprenderán con mucha gente que no ha estado en política antes". Sin embargo, anunció que Ernesto Sanz no será parte del gabinete como ministro de Justicia, tal como se había anticipado meses atrás.

Política exterior: "Necesitamos estar en el mundo. Necesitamos ingresar en el siglo XXI con toda la fuerza que los argentinos somos capaces de tener". Hay que afianzar buenas relaciones con todos nuestros hermanos de Latinoamérica" y con el resto de los países, en tanto que subrayó que tiene "la mejor" relación con el Papa y que espera que visite la Argentina. Respecto de Venezuela y el Mercosur, anticipó que pedirá que se aplique "la cláusula democrática" para ese país, por "los abusos que está haciendo con los opositores y la libertad de expresión". En cuanto a las relaciones con la Unión Europea, adelantó que buscará lograr "convenios con la Unión Europea y avanzar en la Alianza del Pacífico". Respecto del Memorandum de Entendimiento con Irán: "Voy a proponerle al Congreso que lo deroguemos, es algo que no ayudó en unir a los argentinos y mostrarnos coherentes frente al mundo. Queremos que el mundo sepa que somos previsibles".

Dólar, tipo de cambio: Macri aseguró habrá "un único tipo de cambio" que contará con la intervención del Banco Central para que "esté administrado en franjas". "Cuando Argentina se ordene y genere las condiciones para que vuelva a crecer y vuelva la inversión, va a haber un único tipo de cambio, donde el Banco Central ordenadamente va a intervenir para que esté administrado en franjas".

Ganancias: Confirmó que cuando asuma a partir del 10 de diciembre va a "ajustar el mínimo no imponible" del impuesto a las Ganancias. Reiteró que está dispuesto a terminar con esa "estafa" que sufren "gran cantidad de trabajadores" que por la inflación terminan tributando pese a tener ingresos medios.

Derechos humanos y juicios a represores: Continuarán los juicios de lesa humanidad contra represores que actuaron durante la última dictadura militar. "La Justicia actuará independientemente para que haga su tarea, como también las políticas contra la violencia de género". "Por supuesto que me comprometo con ambas cosas", dijo Macri.

Inseguridad: Macri anunció que una vez que asuma el 10 de diciembre declarará la "emergencia" en seguridad y consideró "necesario tomar control del territorio" nacional. "Vamos a declarar la emergencia y poner en marcha la profesionalización de las fuerzas de Seguridad en el país. Lo que logramos con Metropolitana debemos lograrlo en todo el país".

Medios de comunicación: Tendrá "una política de diálogo y transparencia" con los medios de comunicación, y adelantó que "no debería haber conflictos". "Apostamos a una política de diálogo y transparencia. No debería haber conflictos", expresaron desde Cambiemos.

YPF: Aclaró que será "evaluada" la continuidad de Miguel Galuccio en la presidencia de YPF. Calificó su gestión como "profesional", por lo cual dijo que después de un análisis: "Ahí tomaremos la decisión".

Campo: Ratificó que la política para el campo que prometió en la campaña electoral, como la quita de retenciones al maíz y el trigo, "va a empezar a funcionar lo antes posible". "La sostenemos, lo que nos hemos comprometido va empezar a funcionar lo antes posible, creo yo desde el primer día. Queremos que el productor siembre, porque eso da trabajo", respondió Macri al ser consultado sobre la quita de retenciones en trigo y maíz, y una reducción por 90 días en la soja, para que pueda ser vendida en el corto plazo.

© Publicado el lunes 23/11/2015 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



domingo, 22 de noviembre de 2015

Los Socialistas NO votamos derechas… @dealgunamanera...

El Partido Socialista y el Balotaje… 
Frente a tanta impaciencia periodística por saber a cuál de los dos candidatos de la elección del 22 de noviembre va a votar cada dirigente y cada Partido en el país, bien vale la pena aclarar algunos puntos de vista.

Una cosa es que un Partido Político pueda fijar su posición institucional con respecto al apoyo o preferencia por alguno de los candidatos que disputan el balotaje o el rechazo a los dos.

O que un dirigente de un Partido pueda expresar a quien va a votar y es natural que el periodismo esté interesado en saberlo y que incluso eso pueda formar opinión.


Pero creo que debemos avanzar a una concepción en donde se entienda que los votos no son cautivos de ningún Partido, que los ciudadanos vuelven a foja cero su confianza en quien han votado en el mismo momento que sus votos fueron escrutados y que en cada elección las distintas opciones políticas deben volver a renovar o ganar la confianza de esos ciudadanos.

En este balotaje y en todas las elecciones, la decisión del voto es de la gente y no de los Partidos.

Con esta filosofía, la conducción nacional del Partido Socialista ha decidido institucionalmente, no apoyar las candidaturas Presidenciales ni de Macri ni de Scioli, lo que se traducirá en un voto en blanco.


Si se analiza con cuidado es una decisión lógica. Efectivamente, nuestras ideas progresistas y nuestra visión de país no pueden estar representadas por ninguno de los dos candidatos en pugna. Hemos sido y seguimos siendo críticos y consecuentes opositores al gobierno nacional y también tenemos una visión del país que difiere sustancialmente de lo que representa y propone el Macrismo.

La verdad es que estamos lejos de las ideas y los modelos de gestión pública de los dos candidatos que disputan el balotaje.

Es importante insistir en lo que explico al principio: esta postura es una postura institucional, abarcativa esencialmente a los dirigentes del Partido y no pretende inmiscuirse en el derecho que tienen los afiliados y simpatizantes partidarios a que individualmente tomen sus propias decisiones al momento de entrar al cuarto oscuro.


Al fin y al cabo tener dudas sobre cómo votar en un balotaje en una Argentina convulsionada por las fracturas políticas y culturales, no hace a nadie menos socialista.

Que haya balotaje por primera vez en la historia del país es definitivamente un hecho positivo para nuestra democracia. Recuerdo haber dicho junto a muchos dirigentes políticos en la última elección porteña, que un balotaje permite exigirle más a los candidatos, conocer mejor sus propuestas y comprometerlos mucho más con las mismas.

Fue válido en esa elección y es tan o más válido en esta elección presidencial.


Me permito ser módicamente optimista, porque gane quien gane va a ser un país mucho más equilibrado. La gente sabiamente con su voto, distribuyó el poder. Sea cual sea el resultado, todos los sectores políticos estarán obligados a dialogar y eso también es bueno para Argentina.

Por último, esta situación compleja a la que ha llegado el Partido Socialista (magra performance electoral, crisis del liderazgo del Centroizquierda, retroceso de nuestra gravitación política nacional y un alto grado de desazón y confusión de nuestros afiliados y militantes) deberá ser motivo de un análisis y debate en el futuro inmediato.

Yo saludo que hayamos podido realizar rápidamente la Mesa Ejecutiva para resolver nuestra posición frente al balotaje.


Pero no comparto cierta ambigüedad de importantes dirigentes a los que les cuesta administrar con más equilibrio, la siempre compleja relación entre formar parte de un Partido y tener la responsabilidad de Gobernar.

Definitivamente no comparto las declaraciones del todavía gobernador de Santa Fe, Bonfatti, que claramente significaron un guiño a la candidatura de Scioli.

Ni tampoco esa actitud incomprensible de invitar a Macri y a Scioli para escuchar las propuestas que tiene para Rosario. ¿Qué cosa extraña significa eso? En todo caso eso lo podrán hacer los propios candidatos que no necesitan de la intermediación de la Intendenta. Intendenta que es socialista y que sabe que estamos en una campaña electoral donde el Socialismo no participa y ella ya fue elegida para gobernar, gane quien gane.


Impostar una actitud neutra y sobreactuar institucionalismo, no ha dado resultados en estos últimos 12 años, tampoco los dará ni con Macri ni con Scioli .

Para los que quieren ver en cada elección Derecha e Izquierda como si estuviéramos en Bruselas en 1848 redactando El Manifiesto Comunista: ¿Podemos tener dudas que Macri y Scioli son dos expresiones politicas de Derecha? ¿Podemos tener dudas de que apoyar a Scioli significa apoyar al gobierno que acusa al socialismo santafesino de narcosocialismo y lo ha atacado permanentemente o que discrimina económicamente a dicha provincia, por el solo hecho de que es gobernada por el PS, al punto que hemos llevado ese reclamo a la Corte Suprema?

Pienso que tantos puntos de vista diversos no hablan de pluralidad (no seamos ingenuos o cínicos) hablan de desorientación y confusión acerca de lo que somos y lo que queremos ser. Y ese es el debate pendiente si queremos constituir un Partido Socialdemócrata en serio.


Urge hacerlo para que en las próximas elecciones no estemos envueltos en las dificultosas decisiones de quienes tiene que optar en un balotaje, por no ser lo suficientemente representativos para poder competir en él.

© Escrito el domingo 1º/11/2015 por el Diputado Nacional Roy Cortina y publicado en http://psciudad.org.ar


Haciendo tiempo… @dealgunamanera...

Haciendo tiempo…


El futuro está en el futuro y habrá que llegar para confirmarlo. Quien asome de la final del 22N deberá jurar vestido de overall y por coche presidencial utilizar uno del Servicio de Bomberos.

Cada tres meses una citación altamente sensible sacude mi biografía: debo ir en persona a probar que estoy vivo. Levemente kafkiano este acto tiene lugar en un Banco y como ya se instaló en mi costumbre lo asumo con calma. De acudir o no, depende cobre una flaca jubilación que me obliga a no desactivarme. Este certificado de supervivencia que impone el Anses es, seguro, un adelanto de la civilización. Y, su instancia decisiva se asienta, como digo, en esta trimestral obviedad: demostrar que estoy vivo.

Son dos minutos. No duele. Pruebo mi identidad y veo cómo tras la reja, el cuidador del dinero manipula y verifica. El protocolo de este trámite siempre es grato y me atienden con una cortesía que llega a turbarme. Estimo que los empleados aprecian en mi cuerpo una fragilidad que mi cerebro no registra (o al menos no me informa). Esta curiosa disrupción me empuja a ser protagonista de una secuencia que se convirtió en mi clásico trimestral. No bien Ingreso a la sucursal, y sea corta o larga la cola, me abren el paso como si se tratara de un obispo, una ex presidente o cosa así. Esta atención casi hospitalaria se evidencia más cuanto mayor es el número de clientes en espera. Es este caso, el privilegio de ser atendido en primer lugar me avergüenza un poco. Supongo que se trata de una pulsión obrera que guarda mi persona. Un clic que me alegra llevar.

Solo una vez (julio de 2014) varió la escena de mi peregrinación al Banco. Una mujer con beba en brazos iniciaba la fila por lo que me situé detrás de ella, a la espera. Al indicar el cajero que el siguiente debía ser yo, cedí el beneficio a la madre quien no quiso aceptarlo. Insistí, también ella y la puja trivial se zanjó con argumento oportuno: “su beba debe pasar antes que nosotros”. Hubo sonrisas de conformidad en la fila, adhesión ante la que (no lo ví, pero lo se) “me puse colorado” Una frase que ya no se usa, pero que por añosa podría también servirme de prueba de supervivencia (en este caso, guardada en el subsuelo del lenguaje)

Y prosigo. Tras comprobar mi existencia en el mundo el cajero me devolvió la cédula saludándome con una onda, además de buena, expansiva.

–Cuidesé, don. ¡Lo espero el 31 de enero, eh!.

Su deseo y su gesto resultaron tan fantásticos que me vi impulsado a no se donde y sin saber cómo. Lo cierto es que al salir fui sorprendido por un calor espeso que me mareó. Un diariero me ofreció asiento y vaso de agua. Durante unos minutos permanecí entubado, como la vez que descendí a un refugio atómico, en Zurich. Al reponerme lo primero que pregunté fue donde estaba y que día era. La respuesta casi me noquea. El deseo del cajero proseguía su curso glorioso: “estaba” en Buenos Aires y “era” 20 de enero de 2016. Siendo así, vivía y coleaba, ahora con flamantes 86 cumplidos en un diciembre que mi memoria no guardó. En pocos días más debería volver al Banco a renovar mi crédito de vida. Y agradecer al cajero, claro.

No me fue fácil sostener el suceso. Cosa es decirlo y otra habituarme a sorpresa tan inmensa. Dudé, compré un diario y me interné en la plaza a pensar y confirmar. Y allí, cual pequero que morosamente vistea su chance, chequeé el calendario del celular. Un 2016 flamante se paseaba vacío por la agenda virgen. Abrí el periódico, y nomás de arranque, me atraparon dos noticias de tapa. En Canadá habían verificado que los medicamentos falsos (placebos) respondían mejor que los normales, lo que complicaba “la aprobación de nuevos fármacos”. Fue un primer glup. 

El siguiente título me hizo alzar la vista hacia la Capilla Sixtina del jacarandá y quedar en Babia. Los chinos habían concretado otro trasplante de cabeza seccionándola del cuerpo de un donante cadavérico. El Adán en emergencia había mostrado leves temblores vitales durante cinco minutos. La prensa mundial se plagiaba a sí misma en la frase “Pequeño paso de un neurocirujano pero gran paso de la humanidad”. La primicia me sacudió con tres glups.

Pero… ¿Y el país? ¿Qué había sucedido en el país desde aquel 30 de octubre en el Banco? No era justo anteponer la peripecia privada al flash sobre lo sucedido después del 22 de noviembre. La inquietud del lector era también la mía y con avidez comencé a recorrer las páginas.

Di primero en títulos genéricos como “Macri en Berlín”, “Scioli en Italia”, ansiedad que pronto aquietaron dos subtítulos: “El presidente negocia ayuda alemana”, uno, y “Abren sucursal de La Ñata en Toscana”, el otro. El tamaño de estos futuribles me dejó sin aire. También leí que los ministros ya no eran de un solo partido y que la mayor parte de las noticias se ocupaban de urgencias sociales en arrastre. Más rápido pasaba de hoja en hoja más datos aumentaban mi estupor. Fuera como fuese ya nada sería normal. Un susto me rizó los nervios. 

Recordé un cuento inglés en donde un apostador de carreras encuentra un sábado un diario del día siguiente con los nombres de los caballos ganadores. Tras una noche de Insomnio acude el primero al abrirse las ventanillas. Esa tarde no para de apostar y ganar libras con pala. Al salir del hipódromo siente el peso de una piedra en el pecho, de detiene jadeante y acaba desplomado sobre el asfalto. El periódico que llevaba cae a su lado y una ráfaga repentina mueve sus páginas. Cuando se aquietan queda visible la de la sección Necrológicas y en ella, la primicia que no llegó a leer el día anterior.

Nunca me gustaron las carreras de caballos. El futuro está en el futuro y habrá que llegar para confirmarlo. Las palabras han sido dichas y ahora hay que llenarlas. Se acabó el verso. Quien asome de la final del 22N deberá jurar vestido de overall y por coche presidencial utilizar uno del Servicio de Bomberos. No tendrá minuto que perder.

Desactivar conflictos será misión de cada día. Al país nunca se le había prometido un paisaje político tan amplio y atractivo como el escuchado en 2015. Ahora se trata de convertir la esperanza social en historia cotidiana. Espero vivirlo. O seguirlo desde el Purgatorio. Al paso que va, para entonces Francisco ya le habrá puesto wifi.

© Escrito por Esteban Peicovich el jueves 12/11/2015 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



Épica K vs. "Revolución de la Alegría"... @dealgunamanera...

El primer acto opositor del PJ…

“País Barrio Parque”, metáfora de Scioli del modelo de Macri. Cedoc

Parecería que el discurso que Scioli asumió es porque considera irremediable que el FpV pase a la oposición mañana.

“En qué te has convertido Daniel” tiene múltiples significados. La puesta en palabras de la genuina sorpresa que muchos analistas sienten frente a un Scioli que abandonó su perfil conciliador y se fue transformando –cada vez más– en un agresivo atacante. La de un Macri que usa la frase para sobrarlo durante el debate colocándose en una posición de superioridad como lo haría un hermano mayor frente a un afecto descarriado. La de los paranoicos que piensan que el kirchnerismo –aprovechando que las encuestas perdieron credibilidad al errar en primera vuelta– prepara un sofisticado fraude electoral para que Scioli le gane a Macri por pequeña diferencia justificando lo que no sería previsible por ese cambio violento de estrategia con la campaña negativa. O, y quizás la más plausible de todas las interpretaciones, que Scioli asumió el discurso opositor porque considera irremediable que el Frente para la Victoria pase a la oposición a partir de mañana, y no está tratando de mejorar su performance electoral sino de posicionar mejor el sector que él representa para el día después.

No hay una lucha estética entre un grasa y un cheto: Macri era el hijo de un tano con plata para los ricos

Un Scioli que le hablaría al futuro diciendo de alguna forma: “yo les avisé” para cuando Macri tome medidas antipopulares pueda reaparecer, él mismo o alguien del Frente para la Victoria, con un discurso a lo Lilita Carrió, pero invertido. Como si Scioli se estuviera despidiendo del traje de candidato seductor para colocarse el de representante de la oposición a un gobierno nacional de Macri prácticamente ya electo.

La estrategia esperable de un candidato en el debate previo a las elecciones sería que tratara de seducir a quienes podrían también tener alguna simpatía con su contrincante. En un texto clásico del análisis del discurso titulado La palabra adversativa. Observaciones sobre la enunciación política, Eliseo Verón explicaba que en el campo discursivo de lo político durante un debate  se plantea una lucha entre  enunciadores donde “el desdoblamiento se sitúa en la destinación”: un destinatario positivo y otro negativo. El vínculo con el destinatario positivo reposa en creencia presupuesta de quien “participa de las mismas ideas, adhiere a los mismos valores y persigue los mismos objetivos que el enunciador”, denominado protodestinatario y a quien el enunciador podría llamar “nosotros”. El destinatario negativo sería el contradestinatario y es un inverso del anterior, a quien el enunciador llama “ellos”. Pero la parte más importante de la audiencia de un debate político es aquella que no entra en ninguna de estas dos categorías: el paradestinatario a quien el enunciador debe convencer apelando a un discurso del orden de la persuasión. Polemizar con el contradestinatario reforzará el vínculo con el protodestinatario, pero poco haría por convencer al paradestinatario.

Esa fue la estrategia de Scioli, y las encuestas –independientemente del resultado, donde todas coinciden en dar ganador a Macri, aunque ahora son menos creíbles– muestran que Scioli estaría perdiendo dos puntos en la tercera semana de noviembre  (tras el debate y el progresivo aumento de la virulencia discursiva de Scioli). Las encuestas también muestran  que salvo los votantes de Del Caño, los electores consultados de todos los otros candidatos presidenciales de la primera vuelta se vuelcan en mayor proporción a optar por Macri que por Scioli, incluso los votantes de Adolfo Rodríguez Saá.

Durante el debate la kinestesia de Scioli lució nerviosa, lo que los analistas del discurso llaman “un cuerpo no sincero”. Probablemente se sintiera más cómodo ejerciendo el papel que  representaba más genuinamente su condición, porque es cierto que el padre de Macri fue más rico que el de Scioli, pero sería desproporcionado calificar de pyme a la Casa Scioli de electrodomésticos que alcanzó para ser socia de Romay en  Canal 9, cuando siendo el único privado condensaba el rating que hoy suman El Trece más Telefe. Scioli contó que iba a buscar a su novia Carmen Barbieri al teatro, cuando ambos tenían 18 años, en una coupé Mercedes-Benz.

Es cierto que los gustos de Scioli siempre fueron más populares, pero tampoco se podría decir que estemos frente a una confrontación estética entre un grasa y un cheto porque Macri nunca fue considerado por las familias tradicionales de la Argentina como un representante de su grupo social, sino que siempre fue visto como el hijo de un inmigrante italiano que hizo plata.

Pero más allá de lo que sean de verdad cada uno, es probable que Scioli al calificar a Macri de un “creído de Barrio Parque” haya comenzado a bautizar la época que viene. Y así como el menemismo fue “pizza con champán”, y al ascenso económico de los kirchneristas lo sintetizó Puerto Madero, quizás Barrio Parque pueda terminar siendo el símbolo del macrismo.

Hay una lucha entre lo estoico y lo hedónico, entre la severa épica K y “la revolución de la alegría” de Macri

La confrontación de estilos entre Scioli y Macri pasa más porque Scioli asume el papel estoico del sufriente, el que se esfuerza, supera adversidades y todo le cuesta. Mientras que Macri, al que todo le fue saliendo bien en la vida, es hedónico y le gusta el clima de fiesta.

Exageradamente la confrontación que los antiguos griegos expresaban entre lo apolíneo (la moderación y la armonía) y lo dionisíaco (el exceso, Dioniso es Baco para los romanos) y que Nietzsche interpretó libremente como la lucha de la norma y lo racional (apolíneo) contra la embriaguez creadora (dionisíaco).

Ya hace tres domingos la tapa de Perfil publicó las conclusiones de neurocientíficos sobre la pulsiones reflexivas y emocionales que impulsaban a los votantes de Scioli y de Macri respectivamente (http://e.perfil.com/mente-votante).

Mañana veremos si los argentinos finalmente se cansaron de la severa épica K y prefieren la “revolución de la alegría”.

© Escrito por Jorge Fontevecchia el sábado 21/11/2015 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.