La vida es un tablero de ajedrez en donde los cuadros blancos son los días y los cuadros negros son las noches... Nosotros, somos las piezas que vamos de aquí para allá para caer al final en el cuadro de la nada... De Alguna Manera... Una Alternativa…
Newell’s
sorprendió a Huracán en Parque Patricios…
Victoria clave de la Lepra para zafar
del descenso: 2-0 con goles Luciano Herrera y "Cocoliso" González en
el primer tiempo. Rompe un racha de 7 partidos sin ganar. El Globo perdió 3 de
los últimos cuatro.
Newell’slogró una victoria clave en su visita al
estadio Tomás Adolfo Ducó al imponerse por 2 a 0 sobreHuracán, en el marco de
ladecimoquintafechadelTorneo Clausura de la Liga Profesional.
Luciano Herrera y Carlos Gonzálezmarcaron los tantos del
conjunto rosarino, que volvió a sonreír después de seis fechas y dio un paso
gigante pensando en la salvación del descenso. El “Globo”, por su parte, volvió
a decepcionar y se aleja de los puestos de playoffs.
El equipo deLucas Bernardise puso en ventaja a los 27 minutos,
tras un largo saque del arqueroJuanEspínolay una peinada del
delanteroGonzález,Herreracontroló y definió cruzado para abrir el marcador.
Juan
Espínola; Alejo Montero, Saúl Salcedo, Víctor Cuesta, Luca Sosa; Facundo Guch,
Luca Regiardo, Martín Luciano; Valentino Acuña; Carlos González y Luciano
Herrera.DT: Lucas Bernardi.
Goles en
el primer tiempo:27m Luciano Herrera (N); 35m Carlos González (N).
Cambios en el segundo tiempo:0m Eric Ramírez por Leonardo
Sequeira y Juan Bisanz por Leonel Pérez (H); 16m Leonardo Gil por Facundo
Waller y Ramón Ábila por Luciano Giménez (H); 19m Éver Banega por Facundo Guch
y Jherson Mosquera por Luciano Herrera (N); 25m Luciano Lollo por Martín
Luciano (N); 33m Martín Fernández por Valentino Acuña y Juan Manuel García por
Carlos González (N); 34m Thaiel Peralta por Tomás Guidara (H).
Huracán consiguió una gran victoria en su visita a Defensa y Justicia al
imponerse por 3 a 1 en el estadio Norberto “Tito” Tomaghello, por la
decimocuarta fecha del Torneo Clausura de la Liga Profesional.
Los goles del “Globo”
fueron convertidos por el delantero Luciano Giménez, Leandro Lescano y Matko
Miljevich liquidó el partido. Por el lado del “Halcón”, Abiel Osorio había
puesto el empate parcial.
El primer tiempo mostró
a un Huracán más decidido, que aprovechó su momento para golpear, ya que, a los
18 minutos, Giménez abrió el marcador tras una buena jugada colectiva por la
derecha, dándole al “Globo” la ventaja parcial.
En el complemento,
Defensa y Justicia encontró rápidamente la igualdad, apenas a los dos minutos,
cuando Osorio aprovechó un rebote en el área y definió para el 1 a 1. El
conjunto de Mariano Soso se animó y adelantó sus líneas, pero a los siete
minutos se quedó con un jugador menos por la expulsión directa de Alexis Soto
tras una dura falta sobre Leonardo Sequeira.
Con superioridad
numérica, Huracán volvió a tomar el control, ya que, a los 27 minutos, Lescano
-recién ingresado desde el banco de suplentes- marcó el 2 a 1 con un potente
remate cruzado tras un pase de Facundo Waller.
El conjunto de Frank
Kudelka no bajó el ritmo y, a los 36 minutos, Miljevich selló el resultado
definitivo con una gran definición desde el borde del área. El volante
ofensivo, figura del encuentro, coronó una actuación brillante y sentenció el 3
a 1 que desató la alegría en el banco visitante.
Con este triunfo,
Huracán se posicionó en el octavo puesto con 19 unidades, mientras que Defensa
y Justicia finalizó en el séptimo lugar con la misma cantidad de puntos que el
"Globo".
- Síntesis -
Defensa y
Justicia: 1 Enrique
Bologna; Lucas Ferreira, Damián Fernández, Rafael Delgado; Ezequiel Cannavo,
Benjamín Schamine, Aaron Molinas, Alexis Soto; Juan Gutiérrez, Lucas González,
Abiel Osorio. DT: Mariano Soso.
Huracán: 3 Hernán Galíndez; Hernán
De La Fuente, Fabio Pereyra, Nehuen Mario Paz, César Ibáñez; Emmanuel Ojeda,
Leonel Pérez, Facundo Waller, Matko Miljevic; Leonardo Sequeira, Luciano
Giménez. DT: Frank Darío Kudelka.
Cambios, PT: 43m David
Barbona x González (D) y 43m Agustín Hausch x Ferreira (D); ST: 1m Juan
Miritello x Schamine (D); 10m Samuel Lucero x Gutiérrez (D); 14m Tomás Guidara
x Fuente (H) y 14m Juan Bisanz x Ojeda (H); 19m Erik Ramírez x Sequeira (H) y
19m Leandro Lescano x Ibáñez (H); 24m Tobías Rubio x Hausch (D); 38m Lucas
Carrizo x Miljevic (H).
No hubo tregua para Guillermo
Francos. El protagonismo que Javier Milei le dio en la noche triunfal del
domingo no fue más que el reconocimiento postrero que se le da a alguien en el
medio de una despedida. Los que conocían al dedillo el devenir de las relaciones
entre uno y otro marcaban con tono asertivo que ese lazo estaba roto.
Recuérdese que el ahora exjefe de Gabinete se había quejado por las
desautorizaciones verbales y fácticas a las que lo venía sometiendo Santiago
Caputo y hasta había reclamado públicamente –aunque sin nombrarlo– por la falta
de responsabilidad que implica no estampar la firma en los actos de gobierno.
Seguramente, al hacerlo, debió haber tenido la esperanza de que Javier Milei lo
respaldara y acabara con esa situación. Pero nada de eso ocurrió. Fue una
esperanza vana. Desde el lunes mismo las versiones alrededor de su salida del
gabinete rodaron sin cesar en una especie de continuado. Esas versiones
incluían los nombres posibles de sus sucesores. El nombre que más sonaba era el
de Santiago Caputo. Sin embargo, algunas de esas murmuraciones de pasillo daban
el nombre de Manuel Adorni como el del posible sucesor. A quienes sostuvieron
esa posibilidad les cabe el reconocimiento de un acierto.
Es el mismo acierto que tuvieron los que, hace muchos meses, anticiparon
que Adorni no asumiría su banca en la Legislatura porteña. Finalmente,
entonces, la candidatura del ahora ex vocero fue testimonial.
La interna del Gobierno le fue mostrando a Francos que sus días en el
gabinete estaban contados. En su última entrevista con Eduardo Feinmann dijo
con toda claridad que no se veía en ningún otro cargo que no fuese el de jefe
de Gabinete. Jugó su pleno en un mensaje claro para el Presidente, para su
hermana Karina y para el propio asesor estrella. Durante esas horas, también,
buscó tener un diálogo directo con Milei, intento que no prosperó. Mientras
tanto seguía estando en el centro de las especulaciones y, ante cada micrófono
se veía obligado a tener que responder –una y otra vez– que nada sabía de su
futuro. Ese hartazgo hizo eclosión el viernes por la tarde, cuando, finalmente,
tuvo lugar la conversación final con el jefe de Estado. A los que conocían las
internas en el entorno del Poder Ejecutivo, la noticia de la renuncia de
Francos no los sorprendió. Tal vez sí los sorprendió el momento, al igual que
su texto de renuncia. “Ante los persistentes trascendidos sobre modificaciones
en el Gabinete Nacional, me dirijo a Usted con el objeto de presentarle mi
renuncia al cargo de jefe de Gabinete de Ministros, para que pueda afrontar sin
condicionamientos la etapa de gobierno que se inicia luego de las elecciones
nacionales del pasado 26 de octubre”. Hay una entrelínea de reproche
indisimulable al Presidente que, ante esos “persistentes trascendidos” no hubo
por su parte –ni de su entorno– ningún movimiento para desmentirlos. Tampoco
hubo ninguna acción para frenar la salida de Francos.
En el medio de todas estas tribulaciones, el desafío del Gobierno es
uno: llevar adelante las transformaciones que la Argentina necesita para
modernizar su legislación laboral y modificar su estructura impositiva en pos
de crear las condiciones que permitan generar crecimiento y desarrollo para que
haya más y mejores fuentes de trabajo genuino, bien remunerado y en blanco.
Junto con ello está la necesidad de un Estado moderno que cumpla con su rol de
brindar educación, salud, seguridad, justicia y defensa. Esto exige consensos.
Es lo que desde todos los sectores de una sociedad que está harta de
enfrentamientos estériles le reclaman a Javier Milei. ¿Lo comprenderá? ¿Lo
comprenderá su hermana Karina? ¿Lo entenderá Santiago Caputo? En este contexto
la salida de Francos está muy cerca de ser un gol en contra. Su cintura
política y su capacidad para tender puentes en medio de los ataques de furia de
Milei contra sus aliados y sus rivales han sido únicas dentro del equipo
violeta. ¿Acaso Milei tuvo que sacrificar una de sus piezas más valiosas para
zanjar las terribles internas en el seno del poder entre su hermana y el joven
Caputo? Es probable. Lo seguro es que los tiempos se aceleraron y lo que
parecía que tendría lugar luego del recambio legislativo estalló de repente.
Varios ministros dejaron trascender que el aire en la cima del poder era
irrespirable. Rápido de reflejos, el Presidente optó por intentar equilibrar el
poder puertas adentro del triángulo de hierro. Al dejar ir a Francos, le allanó
el camino a Caputo. Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que Adorni es,
junto a los Menem, uno de los mimados de la hermana Karina; con su
nombramiento, se aseguró el control de la Jefatura de Gabinete para que no
caiga en manos de su rival político interno. Volviendo al futuro del joven
maravilla, aún no se conoce cuál será su nuevo rol pero ha trascendido que
quedaría al frente de una supercartera que podría absorber interior, con
amplias funciones de interlocutor político con los gobernadores, algo para lo
que Manuel Adorni no parece tan habituado. “Ganó Karina” –aseguró una voz al
tanto de esas luchas de poder–. Nadie puede asegurar que en la convivencia
interna vuelva a reinar la concordia; lo único cierto es que el triunfo
arrasador del Gobierno en las urnas le dio el poder suficiente para hundir aún
más al peronismo en su crisis y le dio la oportunidad de poder avanzar con las reformas
antes mencionadas para que el país arranque de una vez y para siempre. La
contracara es que se acabaron las excusas, el momento de despegar es ahora o no
lo será por un largo tiempo más.