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domingo, 27 de julio de 2025

Cierre de listas - Todo fue casta, nada más… @dealgunamanera...

Cierre de listas - Todo fue casta, nada más…

“Res... non verba”. Dibujo: Pablo Temes.

Karina Milei impuso la lealtad ciega, el peronismo se enredó en su propia oscuridad y nadie discutió ideas, solo cargos.

© Escrito por el Doctor Nelson Castro el domingo 27/07/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.


Si se tuviera que hacer una síntesis de lo que significó el cierre de listas para las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires del próximo 7 de septiembre, se debería remarcar lo siguiente: la casta se impuso en todos los órdenes. Todo lo que hubo fueron disputas encarnizadas por los cargos. Fue sólo eso y nada más que eso. Quien sostenga otra cosa falta a la verdad en forma flagrante.

En La Libertad Avanza se vivió una especie de principio de revelación para los que pudieran haber tenido alguna duda sobre el poder real de Karina Milei. Lo terminaron de comprobar Santiago Caputo y sus secuaces. “La Jefa” barrió con todos ellos. Los limpió a todos los que creyeron sentirse sus pares, empezando por el asesor estrella que quedó estrellado.

En el transcurrir de este traumático proceso emergió con toda claridad y potencia un modo de hacer política brutal basado en la sumisión y no en la discusión. “La lealtad no es una opción sino una condición”, expresó la hermana del Presidente en la red X el jueves pasado, para agregar que “quien cuestione a quienes llevan esa bandera no está criticando un armado; está cuestionando al Presidente mismo y a la causa que nos trajo hasta acá”. O sea que no hay lugar para quien osare criticar, disentir o tener puntos de vista distintos respecto de medidas relativas a la instrumentación del programa del Gobierno. Según esta postura, a quien así lo hiciere le corresponderá tal vez el descalificativo de traidor. Esta concepción de poder casi absoluto, suele traer problemas a la hora de enfrentar crisis o correcciones en el rumbo. Está claro que no habrá discusiones de liderazgo, pero será muy difícil aprender a confiar y discernir entre aquellos que quieren dar una mano real y sincera. La historia reciente lo ha demostrado. Cuando el círculo más cercano al expresidente Mauricio Macri quedó cegado por los deseos de su entonces jefe de Gabinete, Marcos Peña, resultó a todos sus colaboradores mucho más difícil llegar a su líder para recalcular la dirección del gobierno de Cambiemos. El final es un capítulo conocido por todos.

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Lealtad a una persona no equivale a decir amén a todo lo que ella piensa, expresa, hace u ordena. Uno de los sinónimos de lealtad es franqueza. Por lo tanto, lealtad a una persona es también señalarle sus errores o plantearle discrepancias. La lealtad con una causa no excluye el análisis crítico de las formas y la metodología que se aplican para su implementación. Hay que tener siempre presente que el líder no es infalible. La infalibilidad es una característica del síndrome de Hubris, de lo que tuvimos suficiente muestra de ello durante los desgraciados años en que gobernó el kirchnerismo. Cristina Fernández de Kirchner no toleraba las críticas ni de los propios ni de los ajenos. Sus largas peroratas de maestra ciruela resonaban en cadena nacional.

Javier Milei repite ese patrón de comportamiento que es muy propio de la casta política tanto en la Argentina como así también en el mundo entero.

En el bochornoso cierre de listas de candidatos todo fue casta. O sea, todo por lo que se peleó con fiereza dentro de La Libertad Avanza y en el peronismo fueron cargos. Nadie –absolutamente nadie– discutió ni una sola idea o propuesta concreta. Hasta el momento la sociedad no ha tenido oportunidad de escuchar nada provechoso. Nada que sorprenda. Veremos qué ocurre con la bandera de largada de la campaña que, en los hechos ya ha comenzado.

Por supuesto que lo mismo ocurrió dentro del peronismo. Los “oportunos” cortes de energía eléctrica que ocurrieron en los lugares en donde se debían terminar de confeccionar las listas le agregaron obscuridad al escenario de grisura por el que se mueve habitualmente el peronismo en general y el kirchnerismo en particular. Pasar del balcón de la Casa Rosada al balcón de la calle San José no debe ser fácil de digerir para Cristina Fernández. En realidad se disputan el poder distintas vertientes con un fondo muy similar. Axel Kicillof en abierto enfrentamiento con La Cámpora, contó con el apoyo de varios intendentes que son acusados desde el kirchnerismo duro de figurar en las listas de modo testimonial, Sergio Massa, siempre silencioso y beneficiándose del río revuelto logró colocar a su esposa Malena Galmarini y a dos candidatos más del Frente Renovador en Fuerza Patria. La aparición de Somos Buenos Aires, una coalición que suma parte de la UCR bonaerense, Juan Schiaretti, Florencio Randazzo, la Coalición Cívica y el GEN de Margarita Stolbizer para competir tanto en las legislativas provinciales de septiembre como en las nacionales de octubre amenaza con llevarse algunos votos de los peronistas hartos de las disputas internas del kirchnerismo. “No puede ser que luego de 20 años crean que nos puede seguir llevando de las narices una figura perimida y condenada” –se le escuchó decir a un intendente del Conurbano.

Advierta el lector que este aquelarre se desató solo por el capítulo provincial que tiene fecha en septiembre. En octubre se contará una nueva-vieja historia con los mismos personajes de siempre moviendo los hilos del poder real.

Mientras tanto el gobernador bonaerense Axel Kicillof y la intendenta camporista de Quilmes Mayra Mendoza, se mostraron juntos en una actividad proselitista para intentar hacerle creer a la gente que existe algún tipo de unidad en el arranque de la campaña. Relato y más señales de una clase política decadente.


 

domingo, 20 de julio de 2025

Laboratorio PBA - Listas, internas, traiciones… @dealgunamanera...

 Laboratorio PBA - Listas, internas, traiciones…

Todo marcha sobre ruedas... Dibujo: Pablo Temes.

La política, entre acuerdos precarios, choques feroces y hasta riesgo institucional. La caldera del “Primer Estado”.


© Escrito por el Doctor Nelson Castro el domingo 20/07/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Al momento de cerrar esta columna prosiguen aún las negociaciones, tanto en el oficialismo como en la oposición, para terminar de confeccionar las listas para las elecciones de autoridades provinciales en el así llamado “Primer Estado Argentino”.

En efecto, lo que pase allí en esta primera ronda electoral, tendrá consecuencias nacionales significativas. Habrá una segunda ronda –no confundir con segunda vuelta– que tendrá lugar en octubre cuando se elijan legisladores nacionales, es decir, diputados y senadores. En ambos bandos lo que abunda es la pelea. La escasez, o directamente la falta de “affectio societatis” domina hoy en día la política vernácula. Es la unión por el espanto. En el caso del acuerdo electoral entre La Libertad Avanza y el PRO, el descontento y la sumisión son elocuentes. “Es un acuerdo indigno con ventajas nulas para nosotros. Es el esfuerzo que estamos haciendo para terminar de una vez por todas, con el kirchnerismo y salvar la provincia de Buenos Aires” –graficó un exlegislador del PRO que coqueteó con LLA antes de su llegada al poder. El éxodo –más bien huida– de intendentes amarillos que rechazan el acuerdo en los términos actuales es un síntoma claro del descontento. Los primeros fueron Javier Martínez de Pergamino, y Diego Reyes de Puán, los siguió María José Gentile, de 9 de Julio. En duda está Soledad Martínez de Vicente López, quien responde a Jorge Macri. Uno de ellos lo graficó a la perfección: “si me llenan el Concejo Deliberante de libertarios no solo no es negocio, sino un riesgo para la gobernabilidad futura.” Tiene razón. Karina Milei va por todo y no hay nada que la detenga.

También es curioso lo que está sucediendo en la Ciudad de Buenos Aires donde a Jorge Marcri ya lo entregaron propios y ajenos. Su gestión es decididamente mala y hacia allá va la motosierra para avanzar sobre la Capital. Una curiosidad que no es menor: mientras el jefe de Gobierno intenta desesperadamente reflotar algo parecido a lo que fue Juntos por el Cambio, aliándose con otros partidos locales para sostener su gobernabilidad, su primo Mauricio es el principal ideólogo de un acuerdo con la LLA en la Ciudad. La relación entre los Macri está rota y el primo Jorge tiene el boleto picado.

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Al interior del Gobierno, las disputas entre Karina Milei y Santiago Caputo no paran de crecer. Es curioso lo que pasa ahí. Los que conocen esa interna señalan que el asesor exhibe una actitud acuerdista con el PRO mientras que, “La Jefa”, sostiene una postura contraria. Esta postura podría sorprender si se estuviera hablando de personas con un pensamiento lógico. Pero, como se verifica cada día, esa es una cualidad de la que adolecen los hermanos Milei. Las encuestas –desde las más a las menos confiables– están señalando que la unión entre La Libertad Avanza y el PRO le otorga al oficialismo la posibilidad de un triunfo sólido en la provincia de Buenos Aires. Un detalle importante: sólido no es lo mismo que arrasador. Eso hoy no está presente en ninguno de los escenarios que reflejan los encuestadores, aun entre aquellos que resultan más afines al Gobierno.

Un ejemplo de esa interna creciente entre los dos miembros del así llamado “Triángulo de Hierro” es lo sucedido con la empresa de seguridad de Martín Menem y sus hermanos, que resultó ser la adjudicataria de una licitación del Banco Nación por casi 4 mil millones de pesos. Se trata de la empresa Tech Security de cuyas acciones el presidente de la Cámara de Diputados asegura haberse desprendido. Más allá de esta circunstancia, lo cierto es que la compañía sigue perteneciendo a la familia Menem. Por ende, el conflicto de intereses es indiscutible, más allá de que la empresa hubiera prestado servicios con anterioridad a la llegada del actual gobierno. En las cercanías de Karina se le atribuye a Santiago Caputo haber azuzado la difusión del tema que, cuanto menos, la fastidia.

Otro ejemplo de la ferocidad de esa interna es lo sucedido en Corrientes: el asesor presidencial bregaba por un acuerdo entre La Libertad Avanza y el gobernador Gustavo Valdés; la hermana del Presidente, en cambio, no. Conclusión: no hubo alianza. El joven Caputo ha demostrado, al menos en esta contienda electoral, que tiene un pensamiento bastante más pragmático de lo que muchos hubieran imaginado. Supo parar la pelota y mirar en toda la cancha antes de mover cualquier ficha por mero impulso límbico. No es poca cosa. A la hermana Karina eso le disgusta.

Los que hablan con Caputo señalan su preocupación por la falta de control existente en el Congreso y lo que puede significar eso para la gobernabilidad. Lo sucedido en el Senado hace diez días, le da la razón.

Por el lado del peronismo las cosas no son muy diferentes. Las rencillas, los rencores y los enojos entre el gobernador Axel Kicillof con Máximo Kirchner y La Cámpora están a la orden del día. Todo, absolutamente todo está atravesado por un toma y daca, cuya única finalidad es ver quién de todos ellos tiene más poder para meter más candidatos propios en las listas. El spot de presentación de Fuerza Patria habla de lo que representa: un verdadero tren fantasma. Lo que se ve y se escucha es un sinfín de clichés y lugares comunes, con objetivos que, durante los cuatro años del gobierno a cargo del triunvirato integrado por Cristina Fernández de Kirchner, Sergio Massa y Alberto Fernández, no se pudieron lograr. Y un detalle más: los rostros de CFK, Kicillof; Massa y Máximo Kirchner no se muestran (sic). Es preferible esconder la mugre debajo de la alfombra.

Como telón de fondo, una expresidenta condenada que ya no bailotea tanto en su pequeño balcón y los ecos judiciales de los principales líderes de La Cámpora, implicados en el acto vandálico a la casa del diputado Espert con bosta de caballo incluida. El nivel de la dirigencia argentina sigue desilusionando a todos los que esperamos un mañana mejor que nunca llega.





sábado, 19 de julio de 2025

Los dilemas del dólar - Hay aquelarre en la cima… @dealgunamanera...

Los dilemas del dólar - Hay aquelarre en la cima…

“Hay que pegarle al chancho, para que aparezca el dueño”. Dibujo: Pablo Temes.

Cruces públicos, internas cada vez más ásperas y un Presidente que apuesta al caos para sostener su relato.

© Escrito por el Doctor Nelson Castro el domingo 13/07/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Nada que haya sorprendido: lo sucedido el jueves en el Senado era cantado. El Gobierno sabía que el Senado le infligiría una derrota categórica. Y eso fue lo que ocurrió.

No hay lógica en los comportamientos del Presidente. . . ¿O sí? Todo está muy revuelto tanto puertas afuera como adentro. Javier Milei llamando “traidora” a Victoria Villarruel, a cuyo denuesto se sumó con vehemencia Patricia Bullrich. La vicepresidenta, a su vez, llamando “terrorista” a la ministra de Seguridad. Guillermo Francos, por su parte, señalando que Villarruel había actuado según lo marcan los reglamentos del Senado. Santiago Caputo y Karina Milei cada vez más peleados. Los pocos puentes de diálogo con los legisladores y gobernadores “dialoguistas”, rotos con la necesidad imperiosa de reabrirlos para evitar que el inminente veto presidencial sea revocado. En fin, un verdadero aquelarre.

Los rostros de la mayoría de los asistentes al acto en la Bolsa de Comercio en el que habló Milei fueron harto elocuentes: sorpresa, azoro, desconcierto, preocupación y poco espíritu celebratorio. Nadie ve un futuro venturoso más allá de los logros indiscutibles que en algunos rubros el Gobierno ha obtenido. A ningún inversor entusiasma una nación con una dirigencia política tan patológica como la de nuestro país. El dólar inquieto de los últimos diez días es producto de esto. Se conocen algunas situaciones de tensión entre Milei y Luis Caputo. El ministro todavía está pagando el costo por la bravuconada que se mandó hace unos días con el dólar, que le está saliendo cara al Banco Central. “El dólar flota. Si tienen pesos y creen que el tipo de cambio está baratísimo, compren”, afirmó Caputo. Lo escuchaban unos 700 ejecutivos que se inquietaron ante las expresiones con aires de canchereada con las que el ministro intentó desafiar a quienes critican la política económica del Gobierno. Nadie se las sabe todas, y al que así lo crea la realidad se encarga de darle su lugar.

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Se está repitiendo un clásico de la Argentina para el cual, hasta aquí, el Gobierno no ha encontrado aún la solución: la falta de dólares. A eso contribuye el dólar barato, que significa que el país es caro. Eso representa una puerta abierta para la salida de divisas y no solamente para los pocos que pueden darse el gusto de viajar y gastar su dinero en el exterior. Un hombre de negocios expresó su preocupación en términos dramáticos: “Volvemos a los extremos de una dirigencia que, más allá del color político, no deja de pegar volantazos. Alguna vez nos tiene que tocar un líder moderado, aunque todos somos responsables de lo que hay”.

La narrativa maniquea entre buenos y malos la usó el kirchnerismo hasta el hartazgo. Ahora trae insultos.

No hay dudas de que la intransigencia de Javier Milei se acentuó luego del plantón que los gobernadores le enrostraron con su ausencia al acto por el 9 de Julio. La rebelión había comenzado semanas atrás, cuando se materializaron los reclamos por un reparto más acorde de la coparticipación. Enseguida aparecieron los primeros papers que terminaron traducidos en proyectos de ley. Hasta allí el diálogo era conducido por Guillermo Francos –como es habitual– pero, al parecer, el Presidente tenía otros planes y necesitaba la excusa perfecta para llevarlos a cabo. Veamos. El equilibrio fiscal es innegociable y al Gobierno le quedaban pocas fichas por jugar a la hora de contener el reclamo de los mandatarios provinciales. En realidad, con razón o no, no tenía el más mínimo deseo de ceder en sus objetivos de política económica. Tampoco hay dudas de que la verborragia del Presidente no ha nacido luego del acto fallido en Tucumán. Si no había demasiado para ofrecer en la negociación, qué mejor que tensar la cuerda para exponer a quienes quieren “destruir al Gobierno”. El relato maniqueo entre buenos y malos, amigos y enemigos, es algo que ya había utilizado el kirchnerismo hasta el hartazgo. Una película trillada que ya nos han contado. Sin embargo, ahora viene en remake con insultos para propios y ajenos, y nuevos estallidos de furia. Una carta que, además de sostener los objetivos macroeconómicos, sirve para fidelizar la tropa propia aunque siempre sean los mismos los que tienen que salir a juntar los platos rotos. Habrá que ver cuánto más soporta el vapuleado grupo dialoguista que todavía cree que vale la pena hacer política.

Si todo este acting fue planeado o espontáneo, poco importa ya. El Presidente sabe que tiene margen para este tipo de maniobras mientras las encuestas le muestren números a su favor. “Jodan todo lo que quieran, los espero el 11 de diciembre”, desafió a todos en alusión a que, luego de las elecciones, con más diputados y senadores logrará revertir todas las leyes que la oposición pueda aprobar hasta fin de año. Habría que recordarle al primer mandatario que, en última instancia, ese es el juego de la democracia. ¿Para qué tanta furia entonces?

Los riesgos de un modelo político y comunicacional taxativo, agresivo y con una alta cuota de chicana y soberbia están a la orden del día. El caso del avión privado que llegó a Aeroparque el 26 de febrero proveniente desde Miami, cuyo equipaje no pasó por la revisión de rutina, es otra muestra de que las cosas no siempre son tan terminantes. El periodista Carlos Pagni había dado a conocer esa información, lo que le valió una catarata de críticas del coro oficial. Sin embargo, los fiscales Claudio Navas Rial y Sergio Rodríguez presentaron un dictamen en el que reconstruyeron los detalles de ese arribo con, al menos, diez bultos de equipaje. Manuel Adorni había dicho que era “imposible” que hubiera ingresado equipaje sin control, que se hicieron todos los controles de rutina y que la pasajera Laura Belén Arrieta solo había entrado al país con un carry on. La Justicia mostró lo contrario y seguirá investigando el caso, cuyas imágenes significaron un baldazo de agua fría para el Gobierno.

La negación y la confrontación sistemática no pueden ser una política de Estado para un país que trata de reconstruirse y salir adelante en paz y con normalidad.



 

lunes, 2 de junio de 2025

¿Dónde quedó la libertad?... @dealgunamanera...

¿Dónde quedó la libertad?...

Luis Capuo. Dibujo: Pablo Temes.

Las agresiones contra Ricardo Darín fueron incesantes. Se llame relato o batalla cultural, el adoctrinamiento siempre es malo.


© Escrito por el Doctor Neson Castro el domingo 01/06/2025 y públicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.


La empanada cuyo origen, contra la creencia de muchos, nos lleva a la antigua Persia –hoy Irán– era la comida principal que se ingería durante una larga travesía. Este alimento tan arraigado a nuestra cultura tiene su efeméride: el 8 de abril. En esa fecha se celebra el Día Mundial de la Empanada. No obstante, durante estos últimos siete días pareció celebrarse en la Argentina la “Semana de la Empanada”. Comenzó en el mismísimo momento en que Ricardo Darín se quejó en la mesa de Mirtha Legrand del precio de la docena. La andanada de agresiones y descalificaciones lanzadas desde el oficialismo hacia el actor fueron incesantes, empezando por el ministro de Economía, Luis Caputo, y culminando en el Presidente. Todo tan lamentable como planificado. ¿Dónde quedó la libertad?

Son los mismos métodos que usaban Néstor y Cristina Kirchner para con quienes los criticaban.

Según manifestó Javier Milei en la red X, “el liberalismo es el respeto irrestricto del proyecto de vida del prójimo, basado en el principio de no agresión (PNA) y en defensa del derecho a la vida, la libertad y la propiedad privada”. Parece que tanto él como sus seguidores han olvidado esta definición, sobre todo cuando habla del principio de no agresión (PNA). El pueblo argentino votó en las elecciones por un cambio. Ese cambio no significa sostener los métodos con otro contenido. El adoctrinamiento es siempre malo, viniendo de quién viniere.

Otro ejemplo lamentable que hemos sufrido los argentinos en épocas del kirchnerismo fue la omnipresencia de ciclos como 6,7,8 cuyo fin último era sostener el relato y despedazar a quien se atreviera a pensar distinto. Para los más chicos –más grave aún– estaba Paka Paka que se encargaba de bajar línea reescribiendo la historia de forma muy cuestionable. Resulta que ahora el Gobierno de los Milei apuntará a dibujos animados enlatados por el mismo medio para sostener la visión ideológica opuesta.

Más kirchnerismo no se consigue. ¿Hasta cuando los gobiernos de turno buscarán controlar la mente y el pensamiento de los ciudadanos como si estos no fueran capaces de razonar por sí mismos? Es la Argentina pendular, la de los extremos... otra vez la grieta. Lo que antes era relato ahora se llama batalla cultural. Concepto un poco más elegante, pero igual de peligroso, según quién sea el iluminado que seleccione los contenidos.

La capitulación del PRO sigue su marcha. Inexorable. La comenzaron algunos la misma noche del domingo 18 de mayo en que Manuel Adorni ganó las elecciones porteñas. La oficializó Mauricio Macri con la carta de felicitación que le envió a Javier Milei. Y tuvo una última y contundente manifestación que fue la decisión de Jorge Macri de echar al consultor político y asesor de campaña Antoni Gutiérrez-Rubí. Así las cosas, la reunión que tuvo lugar en la Casa Rosada el lunes pasado entre Karina Milei, Diego Santilli y Cristian Ritondo fue un paso clave en dirección a tejer acuerdos entre los dos espacios. Esto es producto de una necesidad que emerge de la más estricta realidad: si en la provincia de Buenos Aires no se unen, lo que les aguarda en las próximas elecciones es una derrota segura y lapidaria. Claramente no los ha unido el amor sino el espanto, como diría Jorge Luis Borges. A esta altura está claro que La Libertad Avanza es un lugar en el que no se observa ni la generación ni la dación de amor. A eso habría que agregarle el reproche de un número significativo –y seguramente mayoritario– de los ciudadanos y ciudadanas que viven en el primer Estado argentino y que, desde hace largo tiempo, están hartos de ser gobernados por el peronismo en general y por Axel Kicillof en particular.

Que se entienda bien, desde esta columna hemos insistido en la necesidad de unidad opositora para competir en la PBA, pero los últimos pasos del PRO se parecen más a una entrega total del partido –o lo que queda de él– que a un frente o coalición. Otro dato clave: en la Ciudad de Buenos Aires las cosas no son muy distintas. El último anuncio de la vocera de Uspallata, Laura Alonso, intentó –por orden de su jefe– simular la idea de que habían entendido el mensaje de las urnas y que se encaminan a una reestructuración del Gabinete y de sus prioridades. Se trata de más humo de una gestión que se viene quemando desde hace rato. “Si no se construye una nueva coalición similar a lo que fue Juntos por el Cambio en la Ciudad, todos van a terminar pintados de violeta, muy a pesar de Jorge Macri –apuntó un legislador al tanto de todas las internas. El clima en el Gobierno porteño es irrespirable. El último que apague la luz.

Hay en el fondo un problema compartido entre el PRO y el peronismo, como principales opositores: ni Mauricio Macri ni Cristina Fernández tuvieron la grandeza política de preparar un sucesor. El poder se agotó en dos figuras extremadamente personalistas y ahora están pagando el precio. El único ganador en esta orfandad de ideas y liderazgos de peso es el propio presidente Javier Milei, quien se limitó a prender la aspiradora para absorber a los dirigentes que necesita y que todavía le sirven para sostener sus planes de Gobierno. El éxodo es interminable.

La otra nota triste de la semana la ha dado la jueza del caso Maradona, Julieta Makintach, la cara viva de la degradación institucional del Poder Judicial. No todos los jueces son iguales, pero este caso de frivolidad e inmadurez inconmensurable ha desparramado mugre en todas las direcciones. ¿Qué puede tener en la cabeza una magistrada que aspiró a convertirse en figura pública grabando un documental autorreferencial, banal, adolescente y libidinoso?

El guión y las tomas que se dieron a conocer dan vergüenza ajena. Sin mencionar que utilizó un juicio público y la muerte de Maradona para uso personal. ¿Dinero, poder, fama? Habría que preguntarle al ideólogo y guionista qué tipo de buzón le vendió. Sea cuál fuere la especie, la única responsabilidad es de la magistrada que para colmo, tuvo el tupé de intentar resistir en su cargo a pesar de la abrumadora cantidad de pruebas en su contra.

Argentina necesita desintoxicarse de esta clase de funcionarios y elevar drásticamente la vara si quiere llegar a ser un país de verdad. Aún estamos a tiempo.




domingo, 4 de mayo de 2025

Una explosión tras otra. El Presidente sin paz... @dealgunamanera...

El Presidente, sin paz...

Carnívoro, Javier Milei. Dibujo: Pablo Temes

Milei se duerme en los laureles de una estabilidad cifrada en un dólar que les sirve a muy pocos.

© Escrito por el Doctor Nelson Castro el sábado 03/05/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

No hay un momento de sosiego. El carácter explosivo de Javier Milei –recuérdese lo señalado en esta columna hace dos semanas sobre los rasgos de su personalidad compatibles con el llamado trastorno explosivo intermitente– no cesa. “La tienen adentro”, fue la expresión que utilizó el Presidente para referirse a sus críticos durante su discurso ante hombres y mujeres de negocios en la edición 2025 de la exposición de Economía, Finanzas e Inversiones. La riña es con todos, incluidos los propios. En esa cercanía se ubican los embates contra Mauricio Macri, quien, con gesto de hartazgo, le salió a contestar con un torpedo: “No subieron un solo lugar en el ranking de transparencia”, dijo en tono fulmíneo.

Es claro que, los que en la cena de la Fundación Libertad, en la que coincidieron el expresidente y Santiago Caputo, se ilusionaron con la idea de que el tiempo de la beligerancia entre ellos había terminado, se equivocaron. La posibilidad de que el expresidente sea invitado nuevamente a la quinta de OIivos a comer milanesas con puré parece cada vez más lejana. Lo cierto es que, como consecuencia de las peleas entre Milei con Macri y las de este con Horacio Rodríguez Larreta, las encuestas están pronosticando un posible triunfo de Leandro Santoro en la elección de legisladores porteños. No parece que el Presidente haya hecho una apreciación correcta del impacto político negativo que esto tendría para su gobierno en medio de un ajuste que no cesa. “Ya sabíamos que lo de la Ciudad era inviable. Karina siempre quiso marcarle la cancha al PRO en su territorio, y el eslabón suelto de Larreta terminó apuntalando esa estrategia más allá de los resultados. El objetivo es mayor”, dijo una fuente de LLA que recorre la Legislatura porteña. Entre los empresarios la paciencia también está llegando a su límite, al menos en lo referente a la estrategia política del Gobierno: “No te podés dormir en los laureles de la estabilidad con un dólar que no le sirve a casi nadie. La reactivación debe ir mucho más allá de lo que se está viendo. Ya hemos tenido gobiernos encerrados en sí mismos y siempre se hace cuesta arriba”, se quejó un hombre de negocios.

"La tienen adentro", lanzó Milei a sus críticos ante un auditorio de hombres y mujeres de negocios.

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La estabilidad del precio del dólar –con el valor del blue por debajo del oficial–, un requisito fundamental para estabilizar la economía, ha transformado a la Argentina en un país caro –y en algunos rubros, muy caro– en dólares, algo negativo para el desarrollo económico. Se asiste así a la repetición de un fenómeno pendular que refleja los problemas estructurales de la economía vernácula que ningún gobierno, sea de la ideología que fuere, ha podido solucionar hasta aquí. Y, si esto no ocurre, asistiremos, una vez más, a la reiteración del pasado.

Consciente de esta situación, Luis Caputo salió el miércoles pasado a advertir a las automotrices que si rompían la confianza y aumentaban los precios de los autos cero kilómetro, el Gobierno usaría todas las herramientas disponibles para asegurar la defensa de los consumidores. La amenaza dio sus resultados. Solo dos automotrices cruzaron tímidamente esa línea. ¿Un émulo de Guillermo Moreno? ¿No era que el Estado no sirve para nada? Otra vez la Argentina pendular. La realidad no pasa ni por el Estado omnipresente con aires chavistas que pergeñó el kirchnerismo ni por su destrucción total. El Estado tiene un rol, y cuando lo cumple adecuadamente, la sociedad se beneficia. Un dato más: por primera vez desde 2008, Aerolíneas Argentinas dejará de pedir subsidios. Es decir que, bien administrada, la compañía estatal puede funcionar y ser rentable o, al menos, no convertirse en un agujero negro donde se dilapidan millones. Los principales factores que pusieron en riesgo la viabilidad de Aerolíneas fueron el kirchnerismo y el grupo de dirigentes sindicales que, durante muchos años, se apropiaron de la empresa y la llevaron a un virtual estado de quiebra. La aerolínea de bandera fue un refugio para militantes de La Cámpora y un sostén de privilegios para lo peor de la diligencia tanto política como gremial.

El jefe de Gabinete tuvo que salir a aclarar hasta dónde llega la autoridad del asesor Santiago Caputo.

El Gobierno no se equivocó en ese aspecto de la batalla cultural, pero, sin dudas, erró el tiro en tantos otros. No se puede generar enemigos sistemáticamente de forma tal que ni siquiera se suban peldaños en la cohesión interna. Salvo en un selecto grupo de hombres ligados al Ministerio de Economía, hay –en todas las áreas de gobierno– una parálisis provocada por el temor a las cuitas y rencillas internas. “He tenido que generar reuniones fuera de mi oficina para no despertar suspicacias en otros sectores del poder. Una forma muy incómoda y contraproducente de trabajar. Desde las decisiones importantes hasta las más triviales, todo debe pensarse tres o cuatro veces por temor al qué dirán”, reconoció un funcionario todavía sorprendido. Los apuntados son siempre los mismos: Santiago Caputo y Karina Milei. El propio jefe de Gabinete, Guillermo Francos, tuvo que salir a aclarar hasta dónde llegaba la autoridad del asesor estrella, respecto de su propia persona.

En la misma línea, los ataques constantes a la prensa no hacen más que recordar a lo peor del kirchnerismo. Alguien debería señalarle al Presidente que la ciudadanía votó otra cosa.

Mientras tanto, la pobre dinámica política actual continúa dándole un respiro al oficialismo. La única razón por la cual aún no se ha cerrado un acuerdo con la oposición dialoguista –en especial con el PRO– en la provincia de Buenos Aires es la división interna del peronismo, el kirchnerismo y La Cámpora que tiene su máxima expresión en la pelea entre Axel Kicillof y CFK. Llegó la hora del destete y ambos ya se encuentran haciendo campaña por separado. El propio Milei debería tomar cartas en el asunto y dejar de dar ventajas en un territorio mayormente hostil y difícil de domar con motosierra, como el conurbano profundo. La cuenta regresiva ha comenzado.




domingo, 20 de abril de 2025

Dominado por la Furia... @dealgunamanera...

Dominado por la furia…

El desempleado del mes, Milei. Dibujo: Pablo Temes. 

El equipo económico dio muestras de carácter. Es tiempo ahora de que Milei frene sus arranques. 

© Escrito por el Doctor Nelson Castro el sábado 19/04/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina. 

Ni aún en los momentos de logros indiscutibles hay paz en los espíritus y en las mentes de los que constituyen el Triángulo de Hierro instalado en la cúpula del poder. Por si algún distraído no lo supiera, estamos hablando de Javier Milei, de su hermana Karina y de Santiago Caputo. No importa cuál sea el hecho y la circunstancia, todo es bienvenido para generar disputas tanto con los adversarios como así también entre los mismos integrantes del oficialismo.

Dominado por la euforia causada por la decisión del Fondo Monetario Internacional de concretar el préstamo de 20 mil millones de dólares que le permitió al Gobierno dar comienzo al proceso de progresivo levantamiento del cepo, y por una incontenible verborragia, el Presidente se dedicó en sus apariciones mediáticas del lunes pasado –una entrevista con Luis Majul y otra muy extensa con Alejandro Fantino– a descalificar y a agredir a políticos, economistas y algunos de los periodistas que osaron discrepar y/o criticar aspectos de la gestión. Esto –que ya no sorprende– se ha transformado lamentablemente en parte de un folklore que deja al descubierto –una vez más– un aspecto patológico de su personalidad que, con sus expresiones agresivas y sus reacciones de furia, exhibe rasgos que bien podrían ser compatibles con algunas de las manifestaciones de conductas que corresponden a lo que se conoce como trastorno explosivo intermitente.

El presidente se dedicó esta semana a agredir periodistas y economistas, sus blancos predilectos.

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Las consecuencias políticas negativas de esta conducta disruptiva ya tuvieron una primera evidencia en la elección a constituyentes del último domingo en la provincia de Santa Fe. Hubo no sólo una ausencia absoluta de voluntad para acordar con el gobernador Maximiliano Pullaro y con el PRO, sino también entre Karina Milei y Santiago Caputo para consensuar candidaturas. Conclusión: el Gobierno, que pudo haber sido parte de una coalición victoriosa, debió morder el polvo de la derrota. De cara al futuro, lo mismo podría estar ocurriendo en la Ciudad de Buenos Aires, en donde la falta de acuerdos entre La Libertad Avanza y el PRO le está abriendo el camino a una posible victoria al candidato del kirchnerismo, el radical K Leandro Santoro. Algo impensado hace no mucho tiempo atrás. Lo mismo sucederá en la provincia de Buenos Aires, si no se alcanzan los acuerdos entre el oficialismo y el PRO. Por si alguien no lo recuerda, eso ya pasó en 2023 cuando Néstor Grindetti y Carolina Píparo se negaron a unir fuerzas en pos de obtener una victoria que era segura, regalándole así la elección a Axel Kicillof. No aprenden.

Lo increíble de todo esto es que Milei no se dé cuenta de lo ilógico que es conducir a sus candidatos a una derrota y de lo nocivo que eso sería para el futuro de su gobierno. En efecto, un fracaso electoral en la Capital Federal y en la provincia de Buenos Aires a manos del kirchnerismo afectaría severamente la fortaleza política del oficialismo. Le impediría, además, sumar legisladores en ambas Cámaras del Congreso, algo que necesita imperiosamente para revertir su situación de extrema debilidad que, de prolongarse, lo alejaría de cualquier posibilidad de obtener las leyes que necesita para continuar con las medidas que precisa implementar a fin de seguir adelante con su programa de gobierno. “Todos los logros obtenidos hasta aquí, han sido bajo esta misma mecánica de manejo del poder. Mal no nos ha ido” –retrucó una alta fuente de La Libertad Avanza. Lo que no debería olvidar el oficialismo es que, con o sin acuerdos rubricados de manera formal, el PRO de Mauricio Macri los apuntaló en distintas oportunidades. La paciencia tiene un límite y nadie puede prever si la oposición dialoguista seguirá acompañando de la misma manera. Por las dudas, los libertarios mantienen en alto su plan de seducción para pintar de violeta a todo el que se le cruce.

El PRO de Mauricio Macri apuntaló el déficit político libertario: la paciencia tiene un límite.

A pesar de sus conductas dañinas para la construcción política, el Gobierno es pragmático. La primera semana de apertura del cepo cambiario trajo los resultados que el Presidente y su equipo económico esperaban. El régimen cambiario anunciado con una flotación entre bandas de mil pesos y $ 1.400 no ha tenido sobresaltos. El lunes, primera prueba sin cepo para los ahorristas, el dólar oficial subió 12% y cerró en $ 1.230. El martes se mantuvo alrededor de ese valor para luego cerrar el miércoles a la baja a $ 1.160. Es decir, bastante más cerca de la banda inferior. Los supermercadistas –grandes cadenas, mayoristas, pero también pequeños almacenes– hicieron sonar las alarmas al recibir listas de precios que contenían aumentos desmedidos, incluso antes de que hubieran trascendido los valores reales de la divisa norteamericana. Avisaron que no estaban dispuestos a convalidar las subas de precios impulsadas por las empresas alimenticias. 

Discretamente, desde la Secretaría de Comercio habían operado para lograr la ayuda de los hombres vinculados al retail. Incluso el propio Luis Caputo salió a celebrar la medida en la red social X. Las empresas apuntadas fueron Molinos y Unilever. La presión surtió efecto y volvieron sobre sus pasos. El Gobierno se plantó e hizo valer su poder de control con éxito. El Presidente y sus funcionarios deberían darse cuenta que la intervención del Estado de forma adecuada y sin abuso de poder no es algo de lo que deban arrepentirse. Una cosa es el Estado bobo, cuna de militantes y fuente de corrupción de los tiempos del kirchnerismo. Inaceptable; otra muy distinta es condenar al Estado de antemano haciéndolo responsable de todos los males del país.

El equipo económico ha dado una muestra de carácter. Ahora, es necesario que el Triángulo de Hierro pueda calibrar sus arranques de furia y de euforia para reaccionar en su justa medida a los desafíos que demanda el ejercicio del poder.