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sábado, 25 de mayo de 2019

La memoria de los peces… @dealgunamanera...

La memoria de los peces…

Dupla. Esta fórmula no debería ser considerada antinatural. Fotografía: Cedoc Perfil

En su reciente libro La belleza del universo, sensible aproximación a temas esenciales de la física, como el origen de la vida, los misterios del tiempo y otros, el físico y filósofo alemán Stefan Klein explica con claridad por qué, aun con decenas de miles de satélites especializados poblando el espacio, los pronósticos meteorológicos fallan un 75% de las veces. Si eso ocurre donde la más avanzada tecnología se interna en las leyes de la naturaleza, no debería sorprender que los pronósticos políticos y electorales, así como las encuestas ad hoc, resulten errados con mayor frecuencia aún. 

© Escrito por Sergio Sinay el Sábado 18/05/2019 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.  

Es que afortunadamente no hay tecnología que pueda penetrar en lo más profundo del inconsciente individual y dé con la verdadera razón (no la supuesta o especulativa) que impulsa las conductas humanas, ni que, mucho menos, logre aprehender la cara oscura del alma. A diferencia del clima, las cuestiones políticas, y a través de ellas los destinos de los países y las sociedades, las determinan seres humanos, que ponen en eso sus valores, sus creencias, sus ideas, sus pulsiones, sus intereses, sus sentimientos, sus emociones, sus deseos, sus talentos, sus perversiones (sí, también eso), sus esperanzas y hasta sus más inconfesables e inconfesadas intenciones. Y quienes hacen cálculos y especulaciones en cuestiones políticas y electorales incluyen esos mismos elementos en sus teorías.

Considerando todo esto, la presentación de la fórmula Fernández-Fernández de Unidad Ciudadana no debería ser vista como un fenómeno antinatural, por mucho que les duela a los analistas políticos el haber sido sorprendidos por el anuncio. Habrá que inventar nuevos supuestos, nuevas especulaciones, nuevas cartas para el juego de la ficción política, que suele disfrazarse de realismo testimonial y de verdad científica.

Como alguien dijo alguna vez, lo único que se puede predecir es el pasado.
Según el ensayista libanés Nassim Nicholas Taleb, padre de la categoría “cisne negro” aplicada a los hechos imposibles que, a pesar de todo, suceden, todo lo demás, más aún en boca de expertos y especialistas, son posdicciones. 

Al contrario de las predicciones, que vaticinan con anticipación, las posdicciones explican los hechos con posterioridad pretendiendo haberlos previsto. Tratan de disimular el no haber sabido, no haber previsto o no haber entendido lo que de veras ocurría.

Como sucede a menudo (sobre todo en Argentina y sobre todo en política y economía, además de la meteorología), los pronósticos fallaron, todo el dinero gastado en encuestas se fue al tacho (¿cuánto de ese dinero es o fue de los contribuyentes, a quienes se estudia como a conejillos de Indias?), y toda próxima especulación nace bajo el signo de la desconfianza.

De manera que vayamos a lo seguro. El pasado. De este hay pruebas, y pertenecen a la memoria histórica, no a la memoria narrativa. Sobre ambas memorias escribí aquí hace dos semanas (https://bit.ly/2W9tUXP)

Esa memoria ofrece pruebas del desprecio, la descalificación y la dureza con que el candidato presidencial Alberto Fernández hablaba de la candidata vicepresidencial Cristina Fernández ayer nomás. Otros testimonios recuerdan la ferocidad con que la candidata y sus cortesanos trataban de traidor al candidato. 

Ambos son marxistas de Groucho (“Tengo estos principios; si no le gustan, tengo otros”) y lo han demostrado sobradamente en el ejercicio del poder y de la política. Lo que cocinen entre sí es cosa de ellos. Pero el destino de una comunidad, de una sociedad, depende de la responsabilidad y la memoria de cada uno de sus integrantes.

Una teoría ya desvirtuada por científicos como Kevin Warburton, experto en el comportamiento de vertebrados de la Universidad Charles Sturt, en Australia, sostenía que los peces tienen solo ocho segundos de memoria. La buena memoria de los peces es hoy, sin embargo, cosa probada. Si la candidatura presentada ayer cuaja en las PASO, la sociedad argentina (parte esencial de ella) estará ante el desafío de demostrar que su propia memoria dura más de ocho segundos.



miércoles, 18 de julio de 2018

Estamos como queremos… @dealgunamanera...

Estamos como queremos…


El Presidente no se hizo cargo de ninguno de los problemas del país. Quedó claro que las papas queman para el Gobierno y que Mauricio Macri, como horas antes María Eugenia Vidal, dio la conferencia de prensa obligado por la caida de su imagen y no como una muestra de su convicción democrática.

© Escrito por Luis Bruschtein el miércoles 18/07/2018 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La conferencia de prensa fue muy democrática después de dos años y medio, con 350 periodistas de Télam despedidos en la puerta, que se suman a los tres mil que ha dejado este gobierno con sus políticas de ahogo a los medios críticos. Todo fue muy democrático pero el Presidente no se hizo cargo de ninguno de los problemas del país: o fueron culpa de la pesada herencia o de la tormenta exterior.

Todo fue muy democrático, pero es la primera vez que hace una conferencia de este tipo, que coincide además, con la que hizo María Eugenia Vidal. Las papas queman para el Gobierno y lo que podría haber sido una muestra de convicción democrática quedó claro que lo hicieron obligados por la caída de imagen de las dos principales candidatos de Cambiemos. 

Las respuestas Mauricio Macri conforman el compendio del malentendido. Por ejemplo, que el gobierno anterior se equivocó con las retenciones y que lo correcto es haberlas sacado. O sea: el gobierno anterior aplicó políticas incorrectas y el país estaba mejor; el gobierno actual aplica medidas correctas y el país está mucho peor. Hay que tener un tubo en la cabeza para no entenderlo.

Más de eso: "Bajar la inflación ha sido siempre nuestra preocupación principal". O sea: el gobierno anterior, tenía la mitad de inflación que este, pero era inflacionario. Este gobierno tiene el doble de inflación que el anterior, pero es antiinflacionario. Ver (o no ver) para creer.

Otra más: "No podemos meter los problemas bajo la alfombra, porque eso nos trajo hasta acá, tenemos casi un tercio de la población en la pobreza". La alfombra para Macri es la "pesada herencia". Y además está desactualizado, porque si había menos de un tercio cuando asumió, ahora más de la mitad de los argentinos son pobres, según esa medición. ¡Más de la mitad! No solamente no hubo ni un pobre menos, sino que con la devaluación y la inflación aumentaron más del 20 por ciento. Y Macri ni lo considera.

Son todas muy bonitas. Para eludir la pregunta sobre si bajaba el Impuesto a las Ganancias (una de sus principales promesas de campaña) empezó a decir que había hablado con gobernadores y legisladores "con todo el mundo" para la reforma tributaria. O sea; va a responsabilizar a los gobernadores y los opoficialistas porque el Impuesto a las Ganancias no va a bajar, ni siquiera lo que ya aumentó con Macri. Y además no habló con todos, dejó fuera a la oposición principal que es el kirchnerismo.

Otra perlita: cuando le preguntaron por los aportantes truchos de la provincia de Buenos Aires, dijo que iban a proponer una ley para bancarizar los aportes y hacerlo más transparente. El periodista le había aclarado en su pregunta que en la elección de 2017, Unidad Ciudadana presentó su declaración de campaña con más del 90 por ciento de sus aportes bancarizados. En cambio, Cambiemos había presentado todo en efectivo. Más turbio imposible. Los que necesitan la ley son ellos mismos.

Y para terminar, una lista corta de las grandes verdades del macrismo: "No nos está yendo mal" (111 por ciento de inflación desde que empezó el gobierno); "vamos a trabajar con transparencia" (causas por offshore, por el Correo y los aportes truchos bonaerenses), "sinceridad" ("lamento cada uno de los miles de despedidos") y "respeto a los derechos humanos". Quedó en el aire la pregunta por los derechos humanos de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel.





domingo, 8 de octubre de 2017

CFK no clasifica… @dealgunamanera...

CFK no clasifica…
Cuesta Arriba. Cristina Fernández. Dibujo: Pablo Temes

Está abajo en las encuestas y los peronistas quieren prescindir de ella en la reconstrucción.

Es una campaña polarizada y bastante aburrida. No hay casi disputa de encuestas. Todas las consultoras coinciden en la ventaja que Cambiemos tiene sobre Unidad Ciudadana en la provincia de Buenos Aires.

Por ende, gran parte de la atención se encuentra centrada en la situación interna que atraviesa cada una de las fuerzas políticas a la búsqueda de su sostenimiento y su reconstrucción futura. La tensión y el enigma acorralan al peronismo y sus variantes.

Encuestas. 

El repaso de los números respecto de la intención de voto tanto en Capital Federal como en territorio bonaerense muestra que los tres primeros puestos en CABA no sorprenden, de acuerdo con la última encuesta de Poliarquía. Carrió podría superar la abultada ventaja de más de treinta puntos sobre Filmus; por su parte, Martín Lousteau se sostiene con una cosecha muy similar a la obtenida en las PASO. La única sorpresa sería el crecimiento del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), que, con Marcelo Ramal como candidato, podría arrebatarle el cuarto puesto a Matías Tombolini, de 1País.

Para la provincia de Buenos Aires, la mayoría de los encuestadores sostiene que la ventaja del oficialismo estará entre cuatro y siete puntos. Los votos que suma Cambiemos provienen de 1País y les restan caudal a Sergio Massa y Margarita Stolbizer. La explicación más razonable radica en la mejora de los índices y el crecimiento de la economía, que, ahora de manera más visible, llegaron justo a tiempo para darle aire al Gobierno.
Mientras tanto, el peronismo continúa en estado deliberativo, y la CGT –debilitada en su conducción– trata de hacer pie poniendo en discusión los puntos ásperos de la reforma laboral que propone el macrismo y buscando soluciones y apoyo peronista, donde probablemente no lo haya. Es que el peronismo es hoy una masa heterogénea de dirigentes que van y vienen. Ahora, la palabra de moda es “unidad”. La propia Cristina Fernández de Kirchner quiso apostar a ello luego de haber dividido el movimiento con saña. Sergio Massa trabaja en el mismo sentido, y los gobernadores justicialistas y la CGT intentan –sin visos de lograrlo hasta ahora– darle forma. La tarea será difícil, las aguas están agitadas.

CFK es el límite. 

Una fuente de primera línea dentro de las filas de Randazzo aseguró: “El peronismo tiene que ser capaz de construir una opción que exprese futuro y sea competitiva para ganar las elecciones de 2019. Las cosas no están para cerrarle las puertas a nadie, pero no hay que contar a CFK en esa reconstrucción, porque ella expresa un pasado de división y desacuerdos”. 

En esa visión coinciden los gobernadores peronistas de la nueva camada y la cúpula de la CGT. Uno de los triunviros expresó: “Buscamos encontrarnos y no parece posible que las opciones de desencuentro tengan lugar en un movimiento que ya no quiere la discordia como forma de construir”. El tiro por elevación a la ex presidenta es claro.

En el massismo se quejan de la polarización y cimientan por lo bajo el acercamiento al peronismo y el encuentro opositor como la mejor forma de poner límites al oficialismo. Parecen haber caído en la cuenta de que los componentes personales hoy no le juegan a favor al ex intendente de Tigre.

En ese sentido Sergio Massa cosecha críticas, aunque sin llegar a ser una divisoria de aguas: “Sergio se fue del peronismo y tiene, además, un gran problema de credibilidad producto de las decisiones políticas oportunistas que ha venido mostrando. No podemos dejarlo afuera porque necesitamos a todos los actores, pero inteligencia no es lo mismo que ventajismo”, asestó un peronista que apuesta por la reconstrucción.

El gran problema del movimiento es la ausencia de un conductor o jefe. Nadie cosechó la cantidad suficiente de votos como para mostrar una espalda capaz de generar conducción en la provincia de Buenos Aires. “Hay un voluntarismo para encontrar en los gobernadores ese eje de conducción, pero si vamos al terreno real, Urtubey o Uñac son opciones interesantes que expresan futuro, pero sin nivel de conocimiento y liderazgo alguno al día de hoy”, reflexionó un analista.

Este desagregado de figuras lleva directamente, a nivel nacional, a pensar en un peronismo representado por dos figuras: Florencio Randazzo y Sergio Massa. El dilema peronista es la falta de simpatía que existe entre ambos: “No tenemos relación. No hay diálogo ni puentes; el tiempo dirá”, dijo un randazzista que tomó distancia del tigrense.

Intentos. 

Cristina parece esforzarse por mantener su folklore. Esa misma conjunción en la que abundan la reiteración de frases hechas, sus contradicciones, su no hacerse cargo de ninguna de las cosas malas acaecidas durante su gobierno y su personalidad les ha ganado a los cambios de forma implementados en las PASO, circunstancia que le cierra las puertas a su proyecto presidencial de 2019.

“Es ella, con o sin maquillaje. Punto. Es cierto que mantiene un núcleo duro de votantes, pero está más aislada en su círculo que nunca. Wado de Pedro, Andrés ‘Cuervo’ Larroque, Oscar Parrilli, la juventud camporista y no mucho más”, asegura un ex cristinista que supo correrse a tiempo. La novedad es la entrada en esa pequeña logia de Vinicio Alvarado, a quien llaman “el Duran Barba de Cristina”. “Es el único jugador nuevo al que escucha, y le hace bastante caso. Pero te diría que le divierte, lo toma como un juego y no deja de someter su estrategia al tamiz de su pensamiento propio. Es como si ella validara las ideas del especialista y las hiciera suyas”, indica la misma fuente.

Mientras tanto, los desafíos de la Argentina siguen en pie. Son retos que requieren acuerdos políticos como condición sine qua non. Lo saben el Gobierno y buena parte de la oposición. Es lo que espera la mayoría de la ciudadanía después del 22 de octubre. 

“No preguntemos si estamos plenamente de acuerdo, sino tan sólo si marchamos por el mismo camino” (Johann Wolfgang von Goethe).


Producción periodística: Santiago Serra.