Mostrando las entradas con la etiqueta Daniel Gollan. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Daniel Gollan. Mostrar todas las entradas

domingo, 26 de septiembre de 2021

Kirchnerismo en acción… Gobiernos intervenidos… @dealgunamaneraok...

 Kirchnerismo en acción… Gobiernos intervenidos… 


El discurso del odio. Dibujo: Pablo Temes. 

El nacional como el bonaerense están ahora bajo control de Cristina y de Máximo, respectivamente.

 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 25/09/2021 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos. 


Hay heridos, ofendidos y humillados en los dos lados. “El caradura de Kicillof no puede hacer como que no pasó nada y que está bajo el paraguas de los ganadores, porque le coparon el gabinete.” La llegada de Insaurralde fue un mensaje bien claro a favor de los que creen en la territorialidad que el gobernador despreció.

 

Además, su trato con los intendentes siempre fue frío. Máximo e Insaurralde venían tejiendo juntos hace tiempo, ahí está el mensaje para el que se creía intocable. Otro de “los padres de la derrota” –asegura una voz que recorre con frecuencia la Rosada. Como se ve, no solo hay críticas internas; también hay descalificaciones. La de “caradura” es de las más suaves y educadas.

 

Los dos gobiernos –el nacional y el bonaerense– han sido intervenidos. Y éste no es un eufemismo o una cita figurativa sino literal. A la administración de Alberto Fernández la intervino directamente Cristina Fernández de Kirchner. A la de Axel Kicillof, Máximo Kirchner. 

 

El desplazamiento de Carlos Bianco de su cargo como jefe de Gabinete ha sido un duro golpe para el gobernador que viene sosteniendo una puja subterránea y creciente con el primogénito de la ex presidenta en funciones. Kicillof es una persona tremendamente desconfiada que, por ende, se apoya en un núcleo muy pequeño y cerrado de personas. A Bianco lo conoce desde 1998, cuando fue su alumno en un curso que el hoy gobernador dio en la Universidad de Quilmes sobre “Corrientes Económicas Contemporáneas”.   

 

El desembarco en  la Jefatura de Gabinete provincial del ahora ex intendente de Lomas Zamora no fue solitario. Lo hizo acompañado de gente suya, entre los que se cuentan Juan de Jesús, del Partido de la Costa, y Hernán Y Zurieta de Punta Indio.

 

“Lo que está pasando con el despilfarro de guita es lo que vas a ver en mayor o menor medida en todo el Conurbano de acá hasta las elecciones.” 

 

“Es lo que saben hacer los pragmáticos de la vieja escuela. ¿Qué otra cosa se puede esperar de Manzur y Aníbal? Ya lo reconoció Gollan. En el caso de Aníbal también optaron por reciclar un tipo hábil en el barro que nunca se prende fuego. Pero no creo que alcance. La gente la está pasando muy mal”–continúa el funcionario con despacho en Balcarce 50 que no deja de acumular un enojo que no disimula.

 

El oficialismo ha decidido emular lo hecho por el gobierno de los Rodríguez Sáa en San Luis en 2017. En ese entonces, luego de perder las PASO contra Claudio Poggi, hubo un aluvión de fondos públicos en planes sociales, inodoros, chapas, colchones, juegos de dormitorio y comedor, prótesis, sillas de ruedas, electrodomésticos y ayuda para pequeños comerciantes que le permitieron dar vuelta el resultado. Habían perdido por 19 puntos y ganaron por 12.  

 

Las expresiones del ex ministro de Salud bonaerense y segundo en la lista de candidatos a diputados nacionales, Daniel Gollan, fueron un sincericidio que desnuda el pensamiento de la mayor parte del kirchnerismo y el peronismo que lo acompaña. La dignidad de la persona vale un electrodoméstico o un poco de plata en su bolsillo. 

Es la radiografía del pensamiento del populismo que necesita que haya mucha gente pobre como sustento para sus ambiciones de permanencia indefinida en el poder. 

 

“Un poco de platita en el bolsillo” habla de una vida de subsistencia.  

 

“Un poco de platita en el bolsillo” habla de personas cuya dignidad no tiene ningún valor para los que gobiernan.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla de un desprecio por la educación.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla de un menosprecio hacia la salud pública.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla de una desestima hacia el sufrimiento de gente que durante la pandemia lloró la pérdida de sus seres queridos.


“Un poco más de platita en el bolsillo” habla de no asumir los garrafales errores cometidos por el Gobierno durante la pandemia.


“Un poco más de platita en el bolsillo” habla de no hacerse cargo del escándalo del “Vacunatorio vip”.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla del desdén hacia quienes se quedaron sin el fruto de una vida de trabajo.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla de la convalidación del vale todo.


“Un poco de platita en el bolsillo”  habla de la apología de la inmoralidad.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla del vilipendio hacia la capacidad de pensamiento de quien se ve sometido a las adversidades de la pobreza.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla del ideario de quienes hoy están al frente del Gobierno.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla del tiempo por venir que le aguarda a nuestro país si esto no se modifica.


“Un poco de platita en el bolsillo” habla de gente a la que dejan sin la posibilidad de soñar con un futuro mejor para ellos y/o para sus hijos.

 

La elección no está terminada.

 

El oficialismo ha salido a la caza de los ciudadanos y ciudadanas que no fueron a votar el 12 de septiembre pasado. Si todos ellos lo hicieran por el “Frente de todos contra Todos”, el oficialismo podría dar vuelta la elección en la provincia de Buenos Aires y otros distritos.   

 

La oposición por estas horas enfrenta dos grandes problemas: “El control y fiscalización de la elección y la retención del que nos votó en las PASO, pero que siempre estuvo más cerca del oficialismo. El voto bronca es muy fuerte, pero muy volátil, ahí tenemos que trabajar”. Aseguran en Juntos.

 

Así planteada, la elección del 14 de noviembre será no solo una contienda electoral sino también una radiografía de una parte de la sociedad argentina, fundamentalmente de aquélla sumergida en la pobreza.

 

Si con “un poco más de platita en el bolsillo”, una licuadora, un lavarropa, una heladera, una cocina y un largo etcétera de electrodomésticos, el Gobierno consiguiese su objetivo, el populismo habrá obtenido un triunfo que le permitirá dar alas a su proyecto de permanencia en el poder para siempre. 





domingo, 25 de julio de 2021

Cierres reveladores… @dealgunamaneraok...

 Cierres reveladores… 


Sputin-V. Vladimir Putin. Dibujo: Pablo Temes

Las listas mostraron el deterioro de la autoridad de Alberto F y las asperezas internas de la oposición. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 24/07/2021 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos. 

La interna en el Frente de Todos –que venía volando bajo radar hasta esta última semana– explotó de la manera más cruenta con la filtración de la carta de Cecilia Nicolini, asesora de confianza “estrella” del presidente Alberto Fernández, a Anatoly Braverman, mano derecha de Kirill Dmitriev, el CEO del Fondo Ruso de Inversión Directa. 

Sobre el filo del cierre de las listas de candidatos para las elecciones legislativas de noviembre, la noticia cayó como una bomba dentro del oficialismo y confirmó la existencia de intereses comerciales y geopolíticos en la trama de la adquisición de vacunas. Conviene recordar que las dos grandes apuestas fallidas del Gobierno fueron con Rusia por la llegada de la Sputnik V y con AstraZeneca en alianza con Hugo Sigman, muy cercano al ex ministro Ginés González García. 

La carta de Cecilia Nicolini no hizo más que confirmar la situación incómoda y desesperante en la que se encuentra nuestro país principalmente por la falta de la segunda dosis –el componente AD 5–. Los últimos cálculos muestran que más de 6 millones de personas aguardan su segunda dosis de la vacuna rusa. De esos más de 6 millones, unas 800 mil personas ya tienen el plazo vencido para la aplicación del segundo componente, lo cual les produce una gran incertidumbre y una creciente angustia. Cabe destacar que, de ese universo de 6 millones, hay 2,7 millones de personas mayores de 60 años. 

Trastienda de una carta. La filtración de la misiva –escrita en inglés con groseros errores de ortografía, conectores mal usados, sintaxis defectuosa y erratas gramaticales que fueron el hazmerreír y objeto de duras críticas de profesores de inglés– y el uso de la oportunidad política no fueron casualidades. 

“Es evidente que hubo un pase de factura. Tanto para la propia Nicolini que ya venía generando celos y envidias internas, como para los aliados en la cruzada rusa encabezada por Axel Kicillof, Daniel Gollan y la propia Cristina Fernández de Kirchner. Y esto es así no solo por aspectos políticos sino también comerciales, ya que una parte importante del Gobierno quería cerrar el abastecimiento de vacunas apostando todo a AstraZeneca de la mano de Hugo Sigman”,  señala una fuente calificada al tanto de las negociaciones de cada caso. 

En el correo electrónico que reveló Carlos Pagni en su impactante nota en el diario La Nación, Nicolini puso en copia del mensaje a la ministra Carla Vizzotti y a Mauricio Monsalvo, secretario de Gestión Administrativa del Ministerio de Salud, quien se reunía con los laboratorios para cerrar los contratos para la provisión de vacunas. Hay quienes ven en Monsalvo un aliado incondicional de Ginés González García, a quien dentro del Gobierno se lo considera como uno de los principales detractores de la incursión por Rusia e impulsor de las negociaciones con AstraZeneca. 

“¿En serio creyeron que eran amigos del gobierno ruso? ¿No sabían con quién estaban tratando?”, se preguntó con sarcasmo uno de los críticos internos de la movida, que concluyó abriendo el paraguas ante la convicción de que más temprano que tarde habrá devolución de gentilezas del lado más duro de la coalición. 

El Gobierno salió a hacer control de daños y culpó –una vez más– a los opositores en el Congreso, ya que el texto había circulado por la Comisión de Salud. Esta acusación carece de todo sustento porque es evidente que, entre los integrantes de la oposición, nadie se tomó la molestia de leerlo (sic). De haberlo hecho, ninguno se hubiera privado de hacer pública la carta. 

Internas y consecuencias 

El peronismo no deja de sorprender por la virulencia a la hora de dirimir sus conflictos mostrando a libro abierto lo peor de la política argentina que toma de rehén al ciudadano común. En medio de esta disputa, millones de personas esperan por su vacuna, incluyendo adultos mayores y niños. La muy buena noticia de la aprobación de la vacuna de Moderna para su uso en niños y adolescentes de 12 a 17 años no alcanza para mitigar el daño producido por el horrible manejo que el Gobierno ha hecho –y sigue haciendo– de las vacunas. 

Tribulaciones del armado. El cierre de las listas de candidatos ha expuesto –una vez más– el deterioro de la autoridad de Alberto Fernández reflejado en su actitud mendicante por asegurar algún lugar en las listas para alguno de los suyos. “Al fin y al cabo pedía cuatro lugares; no eran tantos. Y ni eso le querían dar”, se quejaba con fastidio un albertista en medio de las tribulaciones  que, en la tarde del viernes, generaba las idas y vueltas de la rosca política. Como se ve, la lapicera y la tinta son de CFK.     

Por el lado de Juntos, Horacio Rodríguez Larreta logró poner fin a su jugada de pizarrón en territorio bonaerense. En el acto de lanzamiento del jueves por la tarde en el Club Hípico de City Bell hubo distensión para las cámaras y una puesta histriónica de Elisa Carrió que por momentos buscó ganar el centro de la escena. 

Sin embargo, en el ambiente sobrevolaban los ecos del desgaste de las últimas semanas. “No se puede dejar contentos a todos. Los cierres siempre tienen un costado áspero. Lo importante es que llegamos hasta acá unidos y así vamos a seguir. Veremos cómo juegan los radicales”, dijeron con cierto disgusto los cercanos al jefe de Gobierno porteño. 

Recordaron mezquindades como la de Adolfo Rubinstein, que declaró esta misma semana a los medios que “la salud pública no había sido una prioridad del gobierno de Cambiemos”, algo que él mismo había negado cuando fue primero ministro y luego secretario de Salud Pública. “¿Fue una autocrítica?”, se preguntaron con sarcasmo y fastidio, y recordaron que al ex ministro de Salud “le gustaban más los viajes y las conferencias que la gestión”. 

Mientras tanto, Amado Boudou, un condenado en libertad condicional, pidió que se le levante la inhabilitación para ejercer cargos públicos; Daniel Gollan exigió que se le pidiera disculpas por la causa del Plan Qunitas, que tuvo críticas técnicas del INTI, y CFK exigió ser sobreseída en la causa por la firma del memorándum con Irán. 

El kirchnerismo va por la impunidad, para lo cual necesita lograr la suma del poder público. Ese es su objetivo en las próximas elecciones. No hay que olvidarlo. 

Producción periodística: Santiago Serra.