miércoles, 23 de enero de 2013

El copamiento de La Tablada, la última locura política... De Alguna Manera...

El copamiento de La Tablada, la última locura política...

Se cumple un nuevo aniversario del copamiento de La Tablada. Cedoc 

El 23 de enero de 1989 42 integrantes del MTP tomaron el Tercer Regimiento de Infantería Mecanizada General Belgrano. 39 muertos fue el saldo.

La mañana del 23 de enero de 1989 fue una de las más trágicas de la historia argentina. A la madrugada, 42 miembros del Movimiento Todos por la Patria (MTP) tomaron por asalto el Tercer Regimiento de Infantería Mecanizada General Belgrano, de la localidad de La Tablada, provincia de Buenos Aires.

Según declaró después su líder, Enrique Gorriarán Merlo, el objetivo era "evitar el levantamiento militar carapintada contra Raúl Alfonsín" que, según ellos, sucedería ese día. Todo salió al revés de lo planeado, tras 30 horas de enfrentamientos, durante las cuales se movilizaron 3.600 efectivos de la Policía y del Ejército. Hubo 39 muertos -de los cuales 28 eran civiles-, 60 heridos y 21 militantes del MTP presos.

El contexto político no era el ideal. Ya se habían producido tres alzamientos militares y el último se había desarrollado 50 días antes, el 3 de diciembre de 1988, con la sublevación de los "Albatros".

Los hechos. A las 6.30, a bordo de seis autos y un camión de Coca Cola, los miembros del MTP derribaron la entrada y abrieron fuego contra la guardia del cuartel. Gorriarán Merlo y parte de la cúpula del partido seguirían los acontecimientos desde afuera. Lo que se creía como un nuevo levantamiento carapintada, terminó en una toma guerrillera.

La respuesta militar duró 24 horas. A los militantes del MTP no les quedó otra alternativa que rendirse. Si bien ellos aseguraron que se venía un nuevo golpe militar, hay versiones que señalan que todo fue en realidad una operación de la SIDE para incentivar al grupo a llevar adelante el ataque. Otros aseguran que las Fuerzas Armadas ya estaban avisadas del intento.

Los atacantes fueron juzgados. En 2000, Gorriarán y el resto de los detenidos realizaron una huelga de hambre durante 46 días. El presidente Fernando de la Rúa decretó una reducción de las penas de los detenidos, con excepción del líder de la toma. Sin embargo en 2003, Duhalde decretó una amnistía para todos los presos de La Tablada, incluido Gorriarán Merlo, quien falleció en septiembre de 2006. Tenía 64 años, vivía en San Nicolás y fue uno de los protagonistas más violentos de la década del '70 y '80.

© Publicado el miércoles 23701/2013 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Las fotos

El país observó atónito como se desplegó el enfrentamiento. Cedoc 

Alfonsín observa el cadáver de una militante asesinada durante el copamiento. Cedoc 

En 24 horas se desató una violencia inusitada. Cedoc

Varios militantes salvaron sus vidas y fueron juzgados. Cedoc 

Para dar a entender que no había negociación posible, se desplegaron tanques. Cedoc

El 23 de enero de 1989 se tomó el regimiento. Cientos de personas se acercaron a ver el lamentable espectáculo de violencia. Cedoc 

El presidente Raúl Alfonsín debió lidiar con el copamiento. Se le sumaba a la amenaza carapintada. Cedoc

El regimiento estaba lleno de "colimbas" que salieron con lo puesto de sus cuarteles. Cedoc 

Hubo decenas de muertos y heridos. Cedoc 

El saldo de víctimas dejó en evidencia la violencia política de la época. Cedoc 

Parte de los militantes que luego fueron presos, del MTP. Cedoc 

Los militares atacaron sin piedad a quienes tomaron el regimiento. Cedoc

 Se cumple un nuevo aniversario del copamiento de La Tablada. Cedoc  


martes, 22 de enero de 2013

El dólar no es cultural… De Alguna Manera...


El dólar no es cultural…


Pese a la insistencia del gobierno en considerar al dólar como una “patología” cultural, quienes trabajan y ahorran siguen optando por dicha moneda como reserva de valor. Por supuesto que más allá de los ardides del kirchnerismo y aliados para tratar de confundirnos, lo cierto es que no debiera extrañarnos la huida que el argentino hace del peso. Lejos de deberse a una antipatía inexplicable propia de la cultura, nuestra historia da sobradas pruebas del “por qué” este país no da garantía en materia de estabilidad monetaria.

Desde el primero Perón a la fecha, el promedio inflacionario nacional ha sido de un 29% con una fuerte suba entre los períodos 1973-1988, que se disparó a un 150%. Ya en 1989, con un presidente totalmente desatendido de la economía se batió todos los records en la asignatura al escalar a un temerario 3200%.

Fue finalmente en el período que comprende la época del menemismo donde se logró paliar la pesadilla inflacionaria, sólo que se hizo contrayendo deuda e incrementando el gasto público al mismo tiempo. Grave error del que ya atestiguamos las consecuencias (semejanza: el menemismo nos sacó de una crisis hiperinflacionaria y nos sumió en otra que derivó en un caos social. Lo mismo hizo Kirchner en 2003, nos sacó, con ayuda de Duhalde de 2001-2002; veremos como termina).

Visto y considerando que Argentina ha naufragado por infinidad de vaivenes respecto a su moneda, demonizar al ciudadano argentino (que es precisamente es desde los mentados períodos que nace su amor por el dólar) por querer resguardar sus ahorros en un “papel” con mayores avales raya el ridículo.

Es claro que a los distintos gobiernos les ha importado más subsanar el impacto político que implican los desajustes económicos que atender a la propia economía. Lo que no terminan de comprender, es que la resolución de esta última viene aparejada con su imagen como gobernantes.

Más que enlodarse en ambiciosas pretensiones como fue el caso de la famosa “tablita” en su momento- impulsada por el ministro de entonces, José Alfredo Martínez de Hoz- y el “corralito cambiario” hoy, debieran recordar el postulado máximo del Banco Central de la República Argentina: “preservar el valor de la moneda” (Vale recordar que el cartel que contenía éste mensaje fue retirado).

Que hay inflación le consta a cada uno de los que habitamos esta tierra, lo triste es que las herramientas para combatirlas sean la mentira, la prepotencia y el ataque a quienes pretenden resguardar lo que han obtenido con el sudor de su frente. Lastimosamente ya no se discrepa en los métodos para, sino que unos han optado por desconocer el problema.

El indicador del gobierno se deslegitima por sí solo con cada enunciado mientras que los acólitos funcionarios del oficialismo se desprestigian cada vez que restan importancia a la desvalorización del peso. Es evidente que la postura no esta en vísperas de ser modificada; en absoluto. Mienten descaradamente y pareciera no importarles.

La percepción del ciudadano común, muy distante a la clase privilegiada que conforma el staff K, es diametralmente opuesta. Quien quiere hacer sus negocios lo hace a razón de lo que muestran los elevados precios. Claro que este dato no interesa a quienes hoy blanden las riendas del poder.

El gobierno, emisor de una moneda que cada día se debilita más gracias a una serie de factores que conforman su política económica, bajo el eufemismo de “lo patriótico” quiere convencer a toda una nación para que pierdan un 25% de su capacidad de compra anual.

Actualmente el mercado considera barato un tipo de cambio en el orden de los $ 6,20 por dólar mientras que el monopolio del dinero decide mantener un inexistente “cambio oficial” (a estas alturas sustituido por el “blue”), pesificar deuda en dólares, hostigar a los viajantes, exigir información a las agencias de turismo y, en síntesis, perseguir a todo aquel que cometa la intrepidez de “soñar en verde”.

Mientras el gobierno siga emitiendo a una tasa del 35% anual y en consecuencia repetir los mismos yerros que sus antecesores, bien podremos afirmar que el problema del dólar no es cultural, es de sentido común.

© Escrito por Federico Perazzo y publicado el sábado 13 de octubre de 2012 por http://www.perspectivaspoliticas.info

Hasta siempre, Guillermo Nimo… De Alguna Manera...


Hasta siempre, Guillermo Nimo…


Guillermo Nimo.

Se caracterizó por su alto perfil, tanto como árbitro como cuando incursionó en radio y televisión. Falleció ayer, a los 80 años.

Se fue un personaje típicamente porteño, de esos que dejan huella. Una figura entrañable del fútbol argentino, tanto por su personalidad como por las polémicas que generó dentro y afuera de la cancha. Nunca pasó inadvertido, con sus coloridas corbatas y una boquilla diferente para fumar cigarrillos. Afectado por problemas cardíacos, el ex árbitro Guillermo Nimo falleció en la madrugada de ayer en el Sanatorio Otamendi de Capital Federal, donde había sido intervenido quirúrgicamente. Se le había hecho una angioplastía, tras sufrir una descompensación en su casa. Tenía 80 años (había nacido el 22 de febrero de 1932) y más allá de su paso por el arbitraje, se lo recordará con la frase que patentó para cerrar sus críticos monólogos de fútbol: “Por lo menos así lo veo yo”.

Nimo fue arquero y llegó a jugar algunos partidos en la reserva de Huracán. Enseguida, descubrió su pasión por el arbitraje. Se inició en 1953 cuando tenía 23 años y fue uno de los mejores de su camada, siendo elegido habitualmente para dirigir los clásicos más importantes. Sin embargo, en 1968 quedó envuelto en una polémica que seguirá vigente. El 22 de diciembre, en la cancha de San Lorenzo, jugaban River y Vélez por el triangular que definía el Campeonato Nacional. Empataban 1-1 y River buscaba la victoria para ser campeón. Luis Gallo, lateral de Vélez, desvió con la mano en la línea del arco una pelota y Nimo no sancionó el evidente penal, por una infracción previa de Jorge Recio al arquero José Marín. Una semana después, tras ganarle 4-2 a Racing, Vélez se consagró campeón por primera vez en su historia. Su despedida del referato se dio el 15 de marzo de 1970, en el duelo que Lanús venció 4-3 por penales a Atlético Palmira de Mendoza por la Copa Argentina.

Luego, Nimo fue seducido por la televisión. Fue promotor de los primeros partidos de fútbol femenino en los que dirigía con un llamativo atuendo de color rosa. Su elevado perfil y estilo polémico lo llevaron a ser panelista varios años en programas como “Tribuna Caliente”, “Polémica en el Fútbol”, “Misión Fútbol” y “Botineras”. Tuvo uno propio programa en radio, “Nimo no perdona”. En la década del 90, cobró relevancia al participar en “La noche del domingo”, con Gerardo Sofovich, donde popularizó la “Perla Blanca” y la “Perla Negra” para destacar al mejor jugador de cada fecha y al de peor desempeño, respectivamente. Además, ofrecía inefables fijas de turf, asesorado por un amigo al que sólo identificaba como “El gran Pirincho”.

También incursionó en el cine, en las películas “Gran valor” (con Juan Carlos Calabró en 1980) y “Esa maldita costilla” (con Susana Giménez en 1999). Participó en el videoclip “La Guitarra” con Los Auténticos Decadentes en 1995. Y obviamente fue “El Nimo” en dos capítulos de “Alejo y Valentina”, una serie animada creada por software que emitió la cadena MTV.

Su última aparición pública fue el 18 de marzo de 2012, para comentar el empate 1-1 de San Lorenzo y Colón en el “El Show del Fútbol” por el Canal América. Sus restos serán cremados y a pedido suyo, sus cenizas serán esparcidas en el Hipódromo de Palermo.

© Publicado el domingo 13 de Enero de 2013 y por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



Panorama 2013... De Alguna Manera...


Economía y oposición…


Las perspectivas económicas para el año 2013 mejoran. Se espera un crecimiento económico del 4,5% y el FPV se prepara para sostener y ampliar en este año electoral clave los niveles de empleo y consumo, atributos que le permitieron arrasar electoralmente en 2011.

A diferencia de otros años con gobiernos neoliberales –por ejemplo a mediados de los años 90 y la “minicrisis del Tequila” cuando el desempleo local estalló pasando del 10,6% al 18,4% en un año–, durante el año 2012 de fuerte desaceleración económica producto del impacto de la “megacrisis” en la economía local y en la de nuestros principales socios comerciales, el país no perdió un solo puesto de trabajo manteniendo la tasa en 7,5% promedio interanual. La recaudación trepó 27% anual traccionada por el consumo doméstico, se pactaron salarios, actualizaron jubilaciones, pensiones y planes sociales por sobre el 25% promedio, sobre el nivel de inflación.

El contexto socioeconómico mejorado respecto a 2012, con consumo sostenido y desempleo perforando el 7%, anticipan al FPV una elección 2013 en unidad bajo la conducción de Cristina Kirchner, aún en distritos donde se especula habría tensiones como Buenos Aires y probablemente logre batir un nuevo récord, esta vez para elecciones intermedias.

Sucede que el impacto estrictamente electoral del sostenimiento del consumo y el empleo que se prevé ocurrirá en el año 2013, se observa en el gráfico que acompaña la columna analizando la composición del voto kirchnerista reciente y se distingue bajo la categoría de agregado volátil, muy sensible a la coyuntura socioeconómica que representa la mitad del electorado oficialista de octubre, a diferencia del núcleo duro que es relativamente inelástico y acompañó incluso en las circunstancias críticas del año 2009 –de 3% de caída del PBI, pérdida de empleo y crisis de la 125–, que dieron el piso del 30% obtenido entonces por el FPV.

Frente a este promisorio panorama oficialista, la pobreza de la oposición impresiona. Embarcada en estrategias de unidad a lo Pirro dictadas punto por punto por los editorialistas de los medios opositores, ya fracasada en el pasado, buscando la imaginaria “unidad de todos contra Cristina”, quien mucho abarca poco aprieta y la opo no para de dividirse día tras día.

Veamos algunos brochazos del proceso de atomización más de cerca:

El FAP dividido entre quienes quieren incorporar a la UCR a sus filas y quienes la rechazan por haber llevado al país a la crisis de 2001, al tiempo que otra parte, por caso Tumini y Donda, plantean alianzas ya no con la UCR, sino con el JP Morgan en la Coalición Cívica, encarnada en la figura de Prat Gay.

En la Coalición Cívica a su vez, Alfonso es resistido por Elisa Carrió, que prefiere esperar la apertura de las aguas del Mar Rojo e iniciar en soledad el pasaje de la esclavitud K a la libertad republicana.

El PRO de Mauricio Macri, no resuelve el irresoluble intríngulis de cómo enfrentar una elección sin candidatos de fuste en el ochenta por ciento del territorio nacional. Como estrategia de amortiguación de esta orfandad piensan en llenar de Migueles del Seles las listas bonaerenses, cordobesas, etc.

Esta estrategia es resistida por el primo intendente de Vicente López, que ya advirtió que no tolerará transformar aún más al PRO en una especie de Votando por un sueño.

La UCR tensionada por izquierda y derecha. Mientras la diputada (MC) Silvana Giudici se incorpora al Gobierno de la CABA dando encarnadura institucional al PRO radicalismo –sello de goma al que adhieren sin firmeza el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, el de Pergamino, Héctor “Cachi” Gutiérrez, el de Ramallo, Walter Santalla, el neuquino “Pechi” Quiroga, y miran con cariño Oscar Aguad, Ernesto Sanz–, Ricardo Alfonsín se acerca al FAP con parsimonia y ya señaló que la alianza con el PRO no es viable.

Finalmente Francisco De Narváez, sin anclaje real y sólo sostenido en sus glorias pasadas, muestra a todos el golazo que hizo en el año 2009 en tierras bonaerenses, recordando a viejos racinguistas, que frente a la malaria actual evocan al gol de Cárdenas en 1967 


En fin, que lo que se observa en el horizonte 2013, no parece diferir mucho del sistema de preferencias inaugurado en octubre de 2011: un oficialismo unido y de gran volumen electoral, contra una oposición aún más fragmentada que aquella que hace apenas 14 meses. ¿No es esto una pena, estimados lectores de PERFIL?

© Escrito por Artemio López, Director de Consultora Equis, el sábado 19/01/13 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.