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domingo, 5 de enero de 2025

La llama de la Memoria sigue viva en la ex ESMA... @dealgunamanera...

La llama de la Memoria sigue viva en la ex ESMA... 


El Conti fue inaugurado en 2008 y el gobierno de Javier Milei decidió cerrarlo el 2 de enero de 2025. Fotografía: Enrique García Medina

Emotivo festival contra los despidos y el cierre del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti. Miles de personas se acercaron al predio para repudiar el vaciamiento de la Secretaría de Derechos Humanos y el retroceso de sus políticas. Referentes políticos y de la cultura enviaron su adhesión. El mensaje de Cristina Fernández de Kirchner. El Conti fue inaugurado en 2008 y el gobierno de Javier Milei decidió cerrarlo el 2 de enero de 2025. 

© Escrito por Laura Gómez el domingo 05/01/2025 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

"Todo este proceder inhumano que está realizando este gobierno ya se está visibilizando. Yo quisiera tener un mano a mano con Villarruel, Milei y compañía para preguntarles cara a cara si ellos están de acuerdo con sus amigos genocidas de haber tirado vivos al río a tantos de nuestros hijos desde ese avión que recuperamos, a nuestras madres, a las monjas francesas y a tantos otros. Yo les preguntaría si están de acuerdo con sus amigos genocidas de haberse apropiado de los bebés. Todas, Abuelas y Madres, hemos recuperado 138 nietos", afirmó Taty Almeida desde el escenario montado en las puertas del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, en el predio de la ex ESMA. Fue el final del masivo y emotivo festival que se celebró en contra de los despidos recientes, el cierre temporal del espacio y el vaciamiento del área, tanto en la Secretaría de Derechos Humanos como en el Ministerio de Justicia de la Nación. Taty lanzó esa declaración al hueso en uno de los momentos más conmovedores de la noche, frente a miles de personas que sostenían en sus manos velas encendidas. "Hoy estamos acá con estas velas para seguir iluminando el camino que vamos a continuar", remarcó entre aplausos efusivos. "Una memoria que arde" fue el lema de la convocatoria.  

La referente de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora aseguró que "la lucha continúa" y pidió que nadie "baje los brazos" porque, como siempre enseñaron Madres y Abuelas, "la única lucha que se pierde es la que se abandona". El público presente coreó el final de sus frases y, casi como una invocación, su voz resonó en el predio para reafirmar una vez más: "30 mil detenidos desaparecidos. Presentes. Ahora y siempre. ¡No nos han vencido!". Se escucharon varias respuestas a modo de cánticos por parte de los asistentes (la más repetida fue "El Conti no se cierra"). Todos y todas aplaudieron la declaración de Almeida y chiflaron a las autoridades del gobierno mileísta que desde el inicio de su mandato buscó desmantelar las políticas de memoria y los numerosos espacios de memoria que existen en el país. 

Video: 

La de Taty no fue la única voz que se escuchó en la tarde del sábado. También pasaron por el escenario numerosos artistas y referentes de la cultura, se leyeron adhesiones y se compartió un audio de Cristina Fernández de Kirchner, en el que recordó aquel 24 de marzo de 2004 cuando acompañó a Néstor en el acto de recuperación de la ex ESMA. "Supe y sentí que en ese momento estábamos ante un doloroso pero necesario ejercicio de la memoria, de la verdad y de la justicia. En ese lugar funcionó durante la dictadura cívico-militar de 1976 un verdadero campo de concentración. Cuando años más tarde visité en Münich el primer campo de concentración del nazismo, tuve la misma y exacta percepción, pero también la información que daba cuenta de que ese primer centro de exterminio estaba destinado solo a los opositores políticos en una primera instancia: a socialistas y comunistas. Más tarde fueron los gitanos y los homosexuales. Es un buen aprendizaje para los que miran hacia otro lado cuando el sufrimiento es ajeno porque no les toca, porque piensan que de esa manera se salvan o, peor aún, porque se solazan cuando otro sufre más que ellos en un clima de época caracterizado por la falta de empatía y, en unos pocos casos, por el exceso de crueldad", señaló la expresidenta. 

“Una memoria que arde. El Conti en guardia” fue el lema con el que se difundió la convocatoria y también las frases que estaban escritas en los carteles dispuestos en el ingreso para recibir al público. El encuentro fue impulsado por el colectivo de trabajadores y se llevó a cabo en las puertas del espacio que permanece cerrado desde el jueves por decisión del secretario de Derechos Humanos de la Nación, Alberto Baños. "Nosotros venimos denunciando el desmantelamiento de la Secretaría de Derechos Humanos y de todo el Ministerio de Justicia”, apunta el delegado de ATE en la secretaria, Octavio Rampoldi. “Desde marzo venimos sufriendo despidos, somos perseguidos y estigmatizados. El cierre del Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti, al que esta gestión le cambió el nombre quitándole la palabra memoria, no es más que otro capítulo en esta avanzada de Alberto Baños y Mariano Cúneo Libarona. Todos los meses tuvimos despidos: en esta última etapa fueron despedidos 252 compañeros. Hacia fines de 2023, en la Secretaría éramos un poco más de mil trabajadores y hoy quedamos 800: de esos 800 hoy ya hay 252 despedidos y otros 300 tienen serio peligro de perder sus puestos de trabajo porque no tienen asegurada su continuidad laboral con la renovación de contrato", comunicó a este diario. 

Una reapropiación sensible del lugar fue lo que se vivió a lo largo de la jornada: contra el negacionismo, memoria; contra el ajuste, solidaridad; contra la deshumanización, empatía. Bajo el mismo espíritu que guió al Conti desde su inauguración en 2008, el sábado hubo alegría, fiesta, reunión y compromiso en un contexto de angustia, tensión e incertidumbre para los trabajadores que el último día del año, a las 14, recibieron este mensaje de WhatsApp: “El secretario de Derechos Humanos hace saber a todo el personal del Centro Cultural Haroldo Conti que se procede al cierre del mismo a partir del 2 de enero de 2025. Ello a efectos de velar por una adecuada reestructuración interna, rearmado de equipos de trabajo y análisis de la programación del año entrante”. 

Desde temprano hubo grupos de familias y amigos paseando entre los puestos de la feria popular montada en el predio o conversando sobre el pasto con sus mates. Algunos asistentes charlaron con Página/12. Fiorella y Anabella, dos jóvenes amigas que compartían una mateada, contaron: "Estamos acá apoyando las conquistas de los derechos adquiridos, la lucha que se llevó a cabo todos estos años. Apoyamos el reconocimiento de la memoria. No es casual que estén cerrando un espacio relacionado al arte, la memoria y la cultura con todo lo que eso significa. Están atacando un espacio dedicado a los derechos humanos y, como el arte tiene esa gran capacidad de mantener vivos todos los hechos, es muy importante reivindicarlo, apoyar que el espacio se reabra y que se recuperen los puestos de trabajo. Hoy sentimos que tenemos que estar en estos lugares". 

La tarde empezó a ritmo de candombe. Por una de las calles principales entró en escena el Colectivo Danza Afro: mujeres de todas las edades vestidas de rojo avanzaron bailando y, detrás de ellas, la cuerda de tambores con los personajes típicos del carnaval. Poco después, uno de los integrantes de ATE dio inicio al festival y a lo largo de toda la tarde desfilaron por el escenario varios artistas: el primero fue Juan Carlos "Tata" Cedrón. También hubo lecturas de poesía y canciones que expresaron la diversidad en materia de géneros musicales. Un momento conmovedor fue la apertura con el Himno Nacional ejecutado por la Orquesta Andina del Suteba de Lomas y también la interpretación de "Como la cigarra", de María Elena Walsh, que fue coreada por todos y acompañada por pañuelos blancos sostenidos en alto con el lema "Nunca Más". 

Lila y Mariel son madre e hija y están leyendo uno de los carteles informativos de la ex ESMA. Cuando se les pregunta por qué decidieron asistir al festival, la madre dice: "Participo de todos los actos de memoria que puedo. Creo que hay que expresarse en este momento. Fui parte de esa época entonces me reconozco en los compañeros y compañeras desaparecidos. Tenemos una integrante en la familia y por eso tratamos de mantener viva la memoria. Más allá de todo eso, no hay palabras para definir lo que estamos viviendo acá con mi hija. Es necesario que haya más sitios como estos y es clave mantener la memoria viva a través de acciones concretas como estas". Lila habla del traspaso generacional, remarca la necesidad de buscar formas para resignificar eso desde el presente e interpelar a las nuevas generaciones porque quizás lo ven como algo lejano que no les pertenece. 

"La dictadura cumplió una función, tuvo como objetivo instalar un modelo económico y para eso tuvo que cambiar las mentalidades, hacer desaparecer a gran parte de una generación", señala. En relación al Conti, su hija Mariel agrega: "En este lugar se han cruzado artistas de muchas generaciones, de muchas trayectorias y de muchos países. En ese sentido, es una forma amplia de hacer memoria, de no limitarla a un hecho puntual sino valorizar la potencia de lo poético para abrir sentidos, la potencia de la ficción para repensar nuestro propio pasado y formas posibles para el futuro, acá en Argentina pero también en otras sociedades. Para eso es clave el rol del arte y la cultura, pero también un espacio que los aloje como el Conti". 

El secretario general de la CTA, Hugo Yasky, caminaba desde temprano por el predio. Cuando se le consulta sobre la coyuntura actual en materia de derechos humanos, responde: "Este gobierno está decidido a arrancar de raíz eso que se construyó a partir de los juicios del Nunca Más: una conciencia política que condena el genocidio, que reivindica 'Memoria, Verdad y Justicia' como una bandera democrática y que defiende la idea de que no puede haber democracia sin respeto a los derechos humanos". Yasky remarcó la "situación de emergencia" que se vive a raíz de una ultraderecha avalada por "un tejido de corporaciones empresarias poderosas que le dan sustento y están detrás de este tipo de políticas". 

También señaló la intención de "llevar la desertificación de la memoria del pueblo argentino a un punto extremo" y por eso mencionó la importancia de asistir a estas convocatorias. "No se trata solamente de un conflicto por despidos estatales; estamos ante una política que quiere volver a convertir todo esto en un espacio desertificado y el pueblo no lo va a permitir. Yo estoy convencido y por eso vine". 

Revalorizar el trabajo estatal también fue uno de los ejes que se mencionaron durante las intervenciones artísticas y políticas. I Acevedo, poeta, leyó un fragmento del prólogo de Roberto Arlt a Los Lanzallamas y aludió a la idea de "trabajo estatal sedante", muy común en los años 30, ya que "en esa época Arlt trabajaba para un Estado que estaba al servicio de los intereses oligárquicos". "Eso cambió con el peronismo. Defendemos determinado trabajo estatal porque los derechos humanos no son un símbolo abstracto", subrayó. 

Lihué está sentado en el cordón de la vereda con una de sus hijas mientras la otra pasea por el predio: "Estamos acá porque es importante tener memoria, recordar –dice–. Vengo con mis hijas porque es importante que sepan. Si lo dejamos de decir, se pierde y es como si nunca hubiese existido. La ex ESMA es muy grande y si te perdés puede ser muy oscura, puede que te agarre miedo, sobre todo de noche. Pero en el Conti siempre hay colores, exposiciones, voces hablantes, gente que escribió, que vivió y dejó su marca. Es fiesta, es vida. Cada vez que traigo a mis hijas les digo que esto es del pueblo. Ya no es lo que era ni es de los militares; es nuestro".


domingo, 16 de octubre de 2016

Iglesia, gobierno y CGT… @dealgunamanera...

Iglesia, gobierno y CGT…


El Papa y Macri quedaron más satisfechos que los gremialistas. El paro general sigue en estado latente.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 16/10/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El Gobierno logró esta semana una victoria política importante al congelar el paro con que la Confederación General del Trabajo lo había amenazado en su reunión del 23 de septiembre pasado. Esto produjo heridas al interior de las estructuras gremiales.

No hay riesgo de fractura: la CGT no se va a partir, aunque tampoco habrá síntesis total en una conducción que, por falta de consenso sobre una figura común, terminó siendo tripartita. Ese es el pensamiento que reina en la central obrera –en todas sus vertientes–, en la que coinciden además las otras figuras del espectro sindical, como la CTA.

Para el ala más dura, representada entre otros por Pablo Moyano y Sergio Palazzo, de diálogo fluido con la Central de Trabajadores Argentinos, fue un error haber dejado librados al manejo de los privados algunos aspectos importantes de interés para los trabajadores. El otro punto que causó malestar entre los arriba citados fue que los triunviros salieron a festejar la postergación de un paro soslayando el resto de las voces que no son afines a la Rosada.

Esto encierra un problema que podría desencadenarse en el muy corto plazo: el mes de diciembre. “El Gobierno cantó victoria antes de tiempo, la democracia no se construye con el ‘sí, Presidente’”, remarcan desde el seno del ala más dura.

Todo esto decantará en una reunión que tendrá lugar el próximo martes a la tarde entre Pablo Moyano, Sergio Palazzo, Hugo Yasky y Pablo Micheli. Allí se decidirá la realización de una medida de fuerza que podría terminar en un paro más cerca de fin de año. Lo que se acordó es insuficiente y no desactiva las protestas de cara a diciembre, poniendo en riesgo un fin de año que podría terminar agitado. En esto coinciden, además, integrantes de Barrios de Pie y de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP).

Del otro lado, el Coloquio de IDEA ofreció una versión casi festiva de la realidad argentina. Es cierto que ha habido avances de forma y de fondo en el diálogo con los empresarios. Pero también es verdad que habrá que esperar al menos hasta “el primer trimestre de 2017 para que se activen algunas de las inversiones prometidas, y hasta el segundo semestre para que el efecto derrame llegue a la población y se sienta la mejoría. Esto, claro está, si no se producen sobresaltos”, aclara un empresario del interior cercano a la Unión Industrial Argentina.

En este marco, la fiesta que se vivió hasta altas horas de la noche del jueves en los pisos superiores del Sheraton con Natalia Oreiro como invitada interpretando temas de Gilda pareció un grotesco. Los números del Indec hablan de la monumental tarea que el presente y el futuro deparan al poder político y al poder económico, si es que el objetivo de combatir la pobreza se va a encarar con seriedad.

Rol eclesiástico. Hay que señalar un actor muy importante en todo este proceso: la Iglesia. Entre los diversos temas que forman parte de la agenda del episcopado argentino está su contribución concreta al sostenimiento de la paz social y de la gobernabilidad. Así como estos asuntos fueron una prioridad durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, también lo son ahora. Ningún obispo quiere que se repita la traumática experiencia de un gobierno democrático eyectado por la ventana. Y en esto, mucho tiene que ver el Papa. Cuando el paso del tiempo deje lugar a la historia, se terminará de conocer la trastienda de las reuniones de Francisco con CFK, lo que permitirá tener la verdadera dimensión de la preocupación del santo padre por los avatares políticos y emocionales que enmarcaron las conductas y las decisiones de la ex presidenta.

El balance del encuentro de Mauricio Macri con el sumo pontífice produjo, en estas primeras horas, un estado de euforia entre los integrantes del Gobierno. Es verdad, el Presidente se llevó lo que vino a buscar: un clima de familiaridad y respeto que lanzó al olvido aquel tenso primer encuentro del 26 de febrero pasado. 

Como ocurre en estos casos, son los gestos y los detalles los que definen su real significado político. Buena parte del fiasco que se llevó el jefe de Estado en la reunión antes citada tuvo que ver con no haber prestado debida atención a esos aspectos. Veamos, pues, algunos de los detalles anecdóticos del encuentro que confirman el buen clima reinante a lo largo de los casi sesenta minutos que duró. Para los observadores que estuvieron allí y que conocen los códigos del Vaticano, lo más destacado fue la frase pronunciada por Macri en la conferencia de prensa, en la que dijo: “Vengo a consultar a Francisco porque para mí es un líder moral”.

Por parte de la Santa Sede hubo muchísimo esmero en asegurar el carácter privado de la reunión. Es que el Papa quería que fuera un encuentro en total tranquilidad. De ahí que ningún periodista de la Santa Sede se haya podido acreditar. No entró nadie.

“Es el comienzo de una nueva relación, sin intermediarios”, dijo alguien de diálogo directo con Francisco.

Otro dato de “color” significativo fue el regalo que, entre otras cosas, Macri le llevó al sumo pontífice: un resumen del Plan Belgrano con el detalle de lo que podría ser el resurgimiento del ferrocarril en la Argentina. Trascendió que Bergoglio estaba feliz, ya que se conocía todos los pueblos que el Presidente le mencionaba. “Parecían dos ingenieros”,  cuenta la citada fuente.

A Macri se lo vio tranquilo y bien dispuesto. El Papa quedó contento. Fue una conversación que sobrevoló los temas más calientes de la difícil realidad argentina –la pobreza, el narcotráfico, la corrupción, la inseguridad– en un clima de serenidad y concordia.

La foto oficial, en la que están Francisco, Macri, Juliana Awada, Antonia–la hija de ambos–, Agustina, la hija del primer matrimonio del Presidente, y Valentina –hija del primer matrimonio de Awada–, conlleva también un mensaje de reconocimiento hacia las familias ensambladas, tema de intensa discusión en el sínodo de familia que el año pasado se celebró en Roma.

Macri vuelve a la Argentina eufórico por los buenos resultados de una reunión clave para disipar los nubarrones que enturbiaron su relación con el Papa. Regresa también con un compromiso sobre sus espaldas: cumplir con sus promesas de campaña. Ese es su gran desafío.

Producción periodística: Santiago Serra.


lunes, 26 de septiembre de 2016

A fuego lento… @dealgunamanera...

A fuego lento…

Allá vamos. Mauricio Macri. Dibujo: Pablo Temes.

La posible huelga se cocina casi al mismo ritmo que la reactivación.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 25/09/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La semana terminó con una novedad previsible: la amenaza de paro general anunciada por la Confederación General del Trabajo. Esta amenaza seguirá latente por al menos una semana más. En la reunión del conjunto de gremios de la CGT ocurrió lo que ya se preveía: se dio a conocer la medida de fuerza y, a la vez, se dejó abierta la negociación con el Gobierno con la posibilidad de huelga como elemento de presión. 

El abanico de temas en discusión tiene algunos pilares centrales: liberar del pago de Ganancias el medio aguinaldo o, en su defecto, pactar un bono de fin de año para compensar la inflación; participar en el proyecto oficial para reformar el impuesto a las ganancias, y trabajar en una reforma de las ART para la mejoría en la prevención y cobertura de accidentes laborales. Por su parte, la CTA, que ha venido realizando demostraciones de fuerza en las últimas convocatorias, mantiene el diálogo con los cegetistas y pide por la incorporación a esta lista de demandas un aumento de emergencia para los jubilados y la reapertura de paritarias (ítem en el que coinciden los gremios de la CGT más combativos).

A pesar de la presión que vienen sufriendo por parte de la mayoría de los gremios que lideran, el triunvirato conducido por Juan Carlos SchmidCarlos Acuña y Héctor Daer no está convencido de romper el diálogo con el Gobierno. El ala más dura está representada por Pablo Moyano de camioneros, Sergio Palazzo de bancarios y los gremios docentes. Fuentes cercanas a estos últimos, que tienen diálogo fluido con la CTA, señalan que “la pelota está del lado de Macri; si no hay señales contundentes de una corrección en el rumbo, el paro se va a hacer. Será en los primeros días de la segunda quincena de octubre”.

La normalización de las estadísticas le jugó al Gobierno una mala pasada. Luego de tres años, el Indec volvió a publicar el valor de la canasta básica. Según esos índices, una familia tipo necesitó $ 5.175 por mes para cubrir alimentos y no caer en la indigencia. Si se incluye lo mínimo indispensable para comprar vestimenta y hacer frente a los gastos del transporte, la educación y la salud, la cifra asciende a $ 12.500. Este último es el número en el que se basan las centrales obreras para sostener sus reclamos. Según coinciden tanto en la CGT como en la CTA, si se toman en cuenta el trabajo formal e informal o precarizado, el 60% gana menos de los $ 12 mil necesarios para llevar adelante una vida con visos de dignidad.

La semana que viene podría producirse un encuentro entre ambas agrupaciones de trabajadores para unificar posturas. ¿Cuál es el principal problema para que esto se concrete? En la CGT no terminan de digerir la figura de Hugo Yasky por su cercanía con lo más rancio del Frente para la Victoria. “La semana pasada estuvo con Cristina haciendo alarde, como si esto fuera una virtud. No queremos volver al pasado, la gente no nos perdonaría un vínculo de ese calibre. Que Micheli (por Pablo) se las arregle para venir solo”, marcaron la cancha varios líderes sindicales. En la CGT no quieren saber nada con el kirchnerismo, al menos en una situación en la que se define la primera medida de fuerza bajo la nueva conducción.

Guiño. En el Gobierno tomaron como una invitación al diálogo la dilación en definir los pormenores del paro. La reunión que el próximo jueves tendrán los triunviratos de la CGT con los ministros de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, y de Trabajo, Jorge Triaca, será crucial. “Podemos comunicar la intención y los avances en el proyecto para bajar Ganancias, pero no podemos asegurar lo que no tenemos. Si quieren hacer un paro general deberán lidiar con los costos de una medida dura e impopular”, sostienen desde el Gobierno. Respecto de la presencia en la reunión de Mauricio Macri, en Cambiemos sostienen que “si bien la idea es no exponer al Presidente, sabemos que es la carta fuerte. Esperaremos hasta último momento para ver cómo evoluciona el tema en la semana”.

Está claro que la evolución de la economía complica al Gobierno. “El Estado no tiene que quedarse con el fruto de tu trabajo. En mi gobierno, los trabajadores no van a pagar impuesto a las ganancias”, decía Macri en uno de los spots propagandísticos durante la campaña electoral. El proyecto del Presupuesto que se está discutiendo en el Congreso demuestra que la promesa habrá de quedar incumplida. Lo mismo sucederá con el campo respecto del compromiso de reducir las retenciones a las exportaciones de la soja a un ritmo de 5% anual.

Hay datos indiciarios de recuperación en sectores clave: los despachos de bolsas de cemento han comenzado a aumentar, y lo mismo está ocurriendo con la chapa. De todos modos, esa recuperación es aún muy lenta y no alcanza para compensar los efectos negativos de la catastrófica caída que la actividad económica experimentó durante el primer semestre del año.

Más allá de los elogios que recibió de parte del presidente Barack Obama y de los representantes de la comunidad internacional de negocios, el paso de Macri por Nueva York le permitió palpar una realidad indiscutible: la concreción de las promesas de futuras inversiones marcha lenta. La incógnita fundamental que expusieron los hombres de negocios que asistieron a las presentaciones del Presidente estuvieron referidas a la perdurabilidad de los cambios producidos por su gobierno. De ahí que el resultado de la elección legislativa del año que viene sea vital para la toma de decisiones de muchos de ellos.

Donde las cosas no le salieron nada bien al Presidente fue en el asunto Malvinas. Macri dio un garrafal paso en falso con su desafortunada e inexacta declaración acerca de una aceptación de conversar sobre el tema por parte de la flamante primera ministra británica Theresa May. El jefe de Estado cometió el mismo error de todos su predecesores al no comprender la necesidad de encarar el tema bajo la concepción de asunto de Estado, lo que exige acuerdos con todas las fuerzas políticas. En la compleja trama de idas y vueltas de las que se nutre la disputa por las Malvinas entre nuestro país y Gran Bretaña, el nuevo volantazo de la política exterior argentina, implementada sin esos consensos, no puede augurar otra cosa que un resultado cantado: el fracaso.

Producción periodística: Santiago Serra.



domingo, 4 de septiembre de 2016

No jugar al distraído… @dealgunamanera...

No jugar al distraído…

La voz del pueblo. Foto: Pablo Temes

Macri debe tomar nota del reclamo social, y la oposición, del rechazo a los K. Duelo de egos.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 04/09/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La marcha federal fue contundente por la convocatoria y por la variedad en la composición de los concurrentes. “Una cosa es hacer los cálculos previos, otra muy distinta es ver a todo ese movimiento político y social en la calle. Porque como en toda marcha existieron operadores políticos y fogoneros, pero no se puede negar la legitimidad de la convocatoria”, dijo entre sorprendida y realista una fuente del gobierno nacional.

Eran las 6 de la tarde y un funcionario del gobierno de María Eugenia Vidal comentó en la misma línea: “Recién pasé por el centro, estaba colmado, no se puede mirar para otro lado, hay que tomar nota de esto”.

Así fue. Por la noche el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, convocó a los organizadores Hugo Yasky y Pablo Micheli a un encuentro la semana que viene. Hay dos elementos a tener en cuenta que hablan por sí mismos: en primer lugar, Micheli y Yasky habían elevado su voz a principios de año cuando el Gobierno los dejó afuera de la cumbre sindical. El titular de la CTA autónoma había dicho que “Macri tuvo una actitud poco democrática, ya que no se puede circunscribir el diálogo a un grupo reducido”. Días más tarde lo comparó con el kirchnerismo por haber adoptado esa actitud y dijo sentirse “ninguneado”. Por otra parte, es de público conocimiento que Micheli ha venido repitiendo hasta el cansancio la necesidad de una convocatoria a un gran acuerdo económico y social para consensuar políticas que permitan aliviar la situación de los trabajadores. La realidad está a la vista: lo incomprensible es que hayan tenido que pasar nueve meses para una reacción que, una vez más, vino del ala más política del Gobierno. Alfonso Prat-Gay admitió que “no hacer un pacto social implica menos actividad y más inflación” por lo que el ministro Triaca se prepara para recibir a los organizadores de la protesta.

La “marcha de la resistencia” mostró en el palco a figuras del kirchnerismo, algunas decididamente impresentables. Verlas aplaudir al secretario general de la Central de Trabajadores Autónomos (CTA), Pablo Micheli, a quien Cristina Fernández de Kirchner nunca recibió, fue una manifestación más de la contradicción K y de las mentiras que atraviesa su relato.   

Este es el segundo episodio en el cual el Gobierno se muestra sorprendido ante los hechos. El otro fue el fallo de la Corte Suprema por el aumento de la tarifa del gas. Eso habla de la existencia de un microclima en las alturas del poder del cual el Presidente debe salir.

Ególatras. 

El duelo de egos es otra de las conductas que varios funcionarios nacionales deben moderar. “Son dos soberbios”, reconoció una empinada figura del oficialismo. Prat-Gay envió un mensaje directo a Federico Sturzenegger al declarar en una entrevista radial con Luis Novaresio que la inflación ya no era un problema. El titular del Banco Central recogió el guante y respondió al día siguiente que una baja significativa en un mes no era síntoma de un logro persistente o de batalla ganada, lo cual obligó al ministro de Hacienda a rectificarse. En el fondo de esta disputa de vanidades está nada menos que la difícil tarea entre la reducción de las tasas de interés y la reactivación de la economía.

El círculo rojo también expresó sus críticas hacia el Gobierno. Lo hizo en el acto de celebración del Día de la Industria. Hay reclamos que son justos aun cuando es curioso observar cómo algunos que durante los años del kirchnerato guardaron silencio ante las tropelías de ese gobierno alzan hoy sus voces con renovado brío. 

En el Gobierno saben que no pueden darse el lujo de fallar, pero por momentos parecería que no comprenden del todo que el naufragio en la gestión dejaría al país al borde de la vuelta al populismo.

Por su parte, el kirchnerismo duro –cada vez más raleado– continúa activo. Más allá de las declaraciones explosivas de sus componentes más rancios, son varias las fuentes de sectores intermedios vinculados a los barrios que advierten movimientos destinados a generar descontento y agitación con la mira puesta en el fin de año. Desde el gobierno nacional  destacan la buena sintonía con las agrupaciones sociales que, en otro momento político, lideraban la calle. El grupo de “ministros de desarrollo humano” (Trabajo, Desarrollo Social y sectores de la cartera de Interior) se reúnen periódicamente para trabajar en el tema. Fuentes del Ministerio del Interior aseguran que hacia fin de año se volverá a conformar una mesa que sumará a este grupo a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y a la gobernadora María Eugenia Vidal, con la mira puesta en el Conurbano.

Desde el peronismo, prefieren no darle crédito a las versiones desestabilizadoras. “No hay margen para un escenario disruptivo. Nadie quiere agarrar esta papa caliente y la gente no perdonaría la más mínima desprolijidad en esta etapa de la vida democrática”, dijo una fuente de contacto permanente con líderes territoriales.

Desde el grupo Esmeralda –integrado por intendentes peronistas, muchos  de pasado kirchnerista pero con un perfil más dialoguista– aseguran que “el kirchnerismo duro está cercado y no tiene margen de acción”. La Matanza sigue siendo el refugio de los díscolos. “Fernando Espinoza y Verónica Magario van a terminar aislados. Hasta Ferraresi (intendente de Avellaneda) ha empezado a comprender que el kirchnerismo extremo ya no es negocio para nadie”, sostienen los allegados a distintos jefes comunales. Quienes abonan la teoría de la apuesta por un escenario caótico sostienen que “la primera línea de ex funcionarios del kirchnerismo –incluida la ex presidenta– saben que está en juego su libertad dado el avance en las causas por corrupción en los tribunales de Comodoro Py.

Si el gobierno macrista llega al 2017 mejor consolidado, el destino de CFK será la cárcel. Por el contrario, un escenario de tensión social con riesgo institucional les permitiría ganar tiempo”. En su lucha por la supervivencia política que le asegure la libertad, Cristina Fernández de Kirchner está cada vez más sola.

Producción periodística: Santiago Serra.


domingo, 22 de mayo de 2016

Cuestión de tiempo… @dealgunamanera...

Cuestión de tiempo… 
Veto cantado. Mauricio Macri. Dibujo: Pablo Temes

La inflación se desacelera pero la inversión fuerte llegaría con demoras. Veto, gremios y oposición.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 22/05/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La pregunta del millón es una: ¿cuánto tiempo más se demorarán en comenzar la reactivación económica y el ingreso de capitales destinados a la inversión?

Un prestigioso economista con vínculos en todo el espectro de la política –que conoce el pensamiento del Gobierno– reconoce que ya hay una leve baja en la inflación sustancial, que es aquella que mide prácticamente todo a excepción de los servicios públicos. 

¿Por qué no se nota aún en las góndolas? 

Porque los precios han quedado establecidos en torno a un dólar de $ 16. En el Gobierno hay dudas, pero algunos creen que sería un buen momento para dejar ir la moneda norteamericana en torno a los $ 15,50 sin riesgo de que se produzca un nuevo impacto en los precios, ya que un alza en el valor de los productos repercutiría negativamente en el volumen de venta. Un dólar algo más elevado podría ser un buen atractivo para los inversores y la consecuente puesta en marcha de la rueda productiva.

Coinciden –en voz baja– economistas y funcionarios del Gobierno con otros especialistas de distinto color político en que los capitales ya están ingresando pero a paso más lento del esperado. No hay un aluvión; los grandes capitales difícilmente lleguen antes de 2017.

Por eso, una primera solución es el nuevo blanqueo que el Gobierno enviará para su tratamiento al Congreso. Entre los antecedentes más cercanos resuena la triste experiencia que dejó Guillermo Moreno, cuya iniciativa, que más que un blanqueo parecía una invitación al lavado de dinero mal habido, logró captar sólo US$ 2.500 millones. 

A aquel gobierno nadie le creía. El actual equipo económico se ilusiona con repatriar una cifra cercana a los US$ 50 mil millones. En el Gobierno cuentan los días, urgidos por la necesidad de alcanzar los primeros resultados. Los especialistas coinciden en que, entre agosto y septiembre, podrían aparecer los primeros signos de reactivación, que tendrá una parada intermedia entre fines de mayo y comienzos de julio, cuando aparezca la plata de las paritarias sumada a la del aguinaldo.

El veto presidencial a la ley antidespidos se vivió como un triunfo dentro del PRO. Varios de sus rivales políticos admitieron que Mauricio Macri pudo completar la jugada con éxito. A pesar de ser una herramienta siempre controversial, el veto es una atribución constitucional que puede utilizar el Presidente.

La historia reciente muestra que los ex presidentes democráticos no dudaron en usar esa facultad según el siguiente ranking: Carlos Menem en 195 oportunidades; Raúl Alfonsín en 49; Fernando de la Rúa en 46; Eduardo Duhalde en 37; Néstor Kirchner en 36 y Cristina Fernández en 18. Para el kirchnerismo, el episodio significó otra derrota política: el video en el que se ve y escucha a CFK criticar el proyecto de ley antidespidos que quisieron presentarle en 2010 fue demoledor al exponer, una vez más, sus contradicciones y las de sus acólitos.  

Mauricio Macri debutó con un veto cantado que dejó algunos heridos en el camino. Hay dos versiones sobre los posibles daños colaterales en la relación con sus aliados y rivales políticos. La primera, más visceral y algo infantil, sostiene que se les ha dado una cachetada a Sergio Massa y a parte del PJ. “Hace sólo cinco meses que estamos en el Gobierno y ya ponen palos en la rueda”, les reprochan desde el oficialismo. Quienes reparan en este enfoque subrayan que  la grieta que se abrió con el líder del Frente Renovador es porque “está bastante agrandado, queriendo agarrar todo el protagonismo y llevando agua para su molino”.

Una parte importante del PRO quisiera no tener que depender del ex intendente de Tigre para los acuerdos parlamentarios, cosa absolutamente improbable. A Massa se le critican algunas de sus conductas por considerarlas pedantes. Algo de eso hay, aun cuando, si de soberbia se trata, el macrismo también tiene lo suyo.

La segunda versión es más realista y descriptiva del presente político: “Es todo pour la galerie, a Massa no le importa nada y a Macri tampoco, ambos van a seguir avanzando. En cuanto al PJ Renovador o más joven, tiene bien aprendidos los vicios de sus caciques;  van a salir a negociar todo minuto a minuto”, reflexionó una fuente de trato frecuente con los dos sectores.

Roces.

La dureza del momento ahonda las internas dentro del Gobierno. La falta de cintura política en muchos de sus funcionarios hace las cosas más difíciles. Lo que está pasando con las tarifas del gas es un ejemplo. Quien más padece esto es el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que debe salir a corregir algunos de estos desaguisados.

En lo que va de esta corta gestión, Frigerio ha ganado estatura y se ha transformado en un interlocutor muy valorado por los gobernadores de todos los signos políticos.   

En el PRO comprendieron una lección básica: conviene siempre construir poder territorial, empezando desde abajo. Por eso el interés del oficialismo en la elección de la Federación Argentina de Municipios (FAM).

A mitad de semana, Frigerio y el subsecretario de Asuntos Municipales de esa cartera, Lucas Delfino, se reunieron con más de sesenta intendentes de diferente color político con la idea de devolverle a la FAM su espíritu federal y, de paso, hacer buenas migas con los jefes comunales para  picar con ventaja sobre Julio Pereyra –su actual titular– y otros barones del Conurbano.

Como contrapartida, toma cuerpo una movida de Florencio Randazzo, que, junto con Guido Lorenzino (ex legislador provincial por el FpV), trabaja en las sombras para construir su propia liga de intendentes. La semilla de un proyecto que va mucho más allá del ámbito estrictamente municipal.

El gremialismo no atraviesa su mejor momento. El común de la gente no quiere ni escuchar hablar de ellos. Antonio Caló no logra despegarse de su rol en épocas del kirchnerismo; el clan Moyano sigue trabajando para sí mismo, generando el rechazo de la mayoría; Andrés Rodríguez, secretario general de UPCN, ya salió a gritar a los cuatro vientos que no está pensando en una medida de protesta; Juan Carlos Schmid no habla de paros pero estudia el panorama, y Pablo Micheli junto a Hugo Yasky, hasta hace poco rivales irreconciliables desde la fractura de la CTA, gritan juntos amenazando con movilizaciones y conflictividad. En medio de estas aguas revueltas, Macri ha tomado la decisión de avanzar.

Producción periodística: Santiago Serra.