Nuevo porno: se inspira en el sexo real y más
mujeres lo miran…
Más
mujeres consumen porno por Internet. (Juan José Traverso)
Tendencia. Los hombres superdotados y las rubias
voluptuosas ya fueron. Ahora las películas se miran por Web, muestran cuerpos
normales y situaciones eróticas que puede vivir cualquiera.
Estás en los ‘90, fuiste al videoclub, estás mirando una
película porno a escondidas y lo que ves es algo que no se parece en nada a tu
vida sexual: hombres aceitados, hiperdotados y con erecciones majestuosas y
rubias con siliconas enormes, depilación absoluta y uñas postizas. Ahora estás
en 2015, estás viendo un video porno en Internet y te das cuenta de que aquel
porno tradicional cambió: ves mujeres sin cirugías y hombres con penes
estándar, ves cuerpos reales y ves, sobre todo, a mujeres que no sólo dan sino
que también piden lo que les excita y tienen orgasmos en cámara. De todo eso se
trata, en definitiva, el nuevo porno mundial.
“El rol de la mujer en el porno tradicional era de
objeto: una muñeca siliconada que tenía la función de satisfacer. La mujer era
un recipiente del placer del hombre: ésto es, el hombre eyaculaba encima de
ella pero el orgasmo de la mujer no existía. Lo que empezó a pasar es que
muchas mujeres que querían ver porno no se sentían representadas ni con ésto
ni, por ejemplo, con los planos médicos”, explica Gino Gingolani, docente de la
UBA e investigador de las nuevas representaciones digitales en la pornografía.
Los planos médicos, se entiende, son los también llamados “ginecológicos”.
Así, hace unos años, la cineasta sueca Erika Lust recogió
esa incomodidad, creó lo que llamó “Porno para mujeres” y se convirtió en gurú
del cambio. Tanto que acaba de dar una charla TED en Viena bajo ese lema:
#ChangePorn” (cambiar el porno). “En mis películas, tanto hombre como mujer son
protagonistas, interactúan naturalmente, experimentando y divirtiéndose. Se
trata de gente real en situaciones reales”, contó a Clarín.
Pero al principio este tipo de porno “rosa” fue
cuestionado. “Es que eso de que las mujeres quieren que las acaricien y les
cuenten un cuento antes de tener sexo no dejaba de ser otro estereotipo. Se
pasaba de la puta a la novia”, dice Gingolani. Y lo que pasa con “Las 50
sombras de Grey” es un ejemplo: un porno light, donde el hombre ni siquiera se
desnuda.
Pero lo de Lust evolucionó y en su trilogía “Confessions”, filmó las
fantasías eróticas reales que la gente le fue enviando. Hay, por ejemplo,
una chica en un taller literario que escribe sobre un surfista saliendo del mar
y concreta su fantasía teniendo sexo con él en la terraza de un hotel. Hay una
pareja teniendo sexo al aire libre –ella abrazada a un árbol–, hay dos en el
cine que no pueden más y terminan teniendo sexo en la butaca.
Es que, como el
sexo en la vida real, el nuevo porno incluye cuerpos reales y situaciones
posibles: tetas con alguna estría, penes que arrancan tímidos, depilaciones
normales, sexo con preservativo. Para ver sus películas hay que pagar unos $50
y descargarlas de su web.
Lo que sigue en la era de cambios es el llamado
“Postporno”, una forma de rebelión contra los estereotipos sexuales: un porno
en el que se incluyen cuerpos que no estaban siendo representados, como de
mujeres “chatas”, hombres muy flacos o lesbianas menos femeninas.
Además,
“frente al imaginario de lo que es el porno tradicional, el postporno incluye
más lo afectivo y los vínculos y no sólo la genitalidad. Sin embargo, creo que
levantar la bandera política acogota el placer”, opina César Jones, director de
culto de cine porno nacional. El, a su manera, está explorando un camino: en
“Visiones de un erotómano” (también se compra por Internet) “hay una mezcla
entre el relato típico de Youporn (la potencia de la desnudez, lo breve)
mezclada con personajes con cierto espesor psicológico y una trama cultivada”.
Dicho todo ésto, tenemos ya todos –los solos, los
acompañados– material para un domingo diferente.
© Publicado el domingo
01/03/2015 por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario