domingo, 8 de diciembre de 2013

Pobreza e indigencia en América Latina... De Alguna Manera...


Se enlentece la reducción de la pobreza y la indigencia en América Latina...


Con datos proyectados al 2013, la pobreza estaría afectando a unos 164 millones de personas en la región, igual número que en 2012, consigna el estudio que aborda el fenómeno también desde una perspectiva multidimensional.

El número de latinoamericanos en situación de pobreza en 2013 asciende a unos 164 millones de personas (27,9 % de la población), de los cuales 68 millones se encuentran en la extrema pobreza o indigencia (11,5 % de los habitantes de la región), según proyecciones entregadas hoy por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

Si bien se registró una caída en las tasas de pobreza e indigencia en la región en 2012 (de 1,4 y 0,3 puntos porcentuales, respectivamente, con respecto a 2011), se ha frenado el ritmo con el que estas se han venido reduciendo desde hace una década, indica el estudio Panorama Social de América Latina 2013 presentado en Santiago de Chile.

En términos absolutos, la pobreza se mantiene estable en 2013 con respecto a 2012, cuando los pobres también sumaron 164 millones de personas, aunque bajó levemente (en 0,3 puntos) el porcentaje de la población que se encuentra en esta situación. En cambio, los indigentes, que en 2012 totalizaron 66 millones, subieron a 68 millones en 2013 (un aumento de 0,2 puntos porcentuales).

Estos resultados están estrechamente relacionados con el desempeño macroeconómico de la región, sostiene el documento. El aumento en la indigencia, específicamente, ha sido causado por el incremento del costo de los alimentos por encima de la inflación general.

"Desde 2002 la pobreza en América Latina ha caído 15,7 puntos porcentuales y la indigencia 8,0 puntos, pero las cifras recientes muestran una desaceleración. El único número aceptable de personas viviendo en la pobreza es cero, por lo que llamamos a los países a llevar cabo un cambio estructural en sus economías para crecer de forma sostenida con mayor igualdad", dijo la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.

Seis de los 11 países con información disponible en 2012 registraron disminuciones en sus niveles de pobreza respecto a 2011. En Venezuela la tasa cayó 5,6 puntos porcentuales, de 29,5 % a 23,9 %, mientras en Ecuador pasó de 35,3 % a 32,2 %, en Brasil de 20,9 % a 18,6%, en Perú de 27,8 % a 25,8 %, en Argentina de 5,7 % a 4,3 % y en Colombia de 34,2 % a 32,9 % de los habitantes.

En Costa Rica, El Salvador, Uruguay y República Dominicana los valores se mantuvieron constantes en comparación con 2011, en tanto en México la pobreza aumentó levemente de 36,3% a 37,1%.

En esta versión del informe Panorama Social, la CEPAL aborda de forma exploratoria otros enfoques multidimensionales para evaluar la pobreza, que resultan complementarios a las mediciones convencionales basadas en los ingresos monetarios.

"Una medición multidimensional de la pobreza acotada a las necesidades básicas insatisfechas muestra que carencias tales como la falta de acceso al agua potable o a sistemas apropiados de saneamiento todavía afectan a un conjunto importante de personas en la región. Ello conduce a preguntarse si las políticas públicas destinadas a la superación de la pobreza están poniendo suficiente énfasis en el logro de estándares mínimos", plantea el informe, que también analiza la evolución de la pobreza infantil desde un enfoque de derechos (ver hoja informativa).

En esa misma línea, el estudio analiza tres dimensiones del bienestar -espacio, tiempo y convivencia-, soslayadas en las discusiones sobre el tema en América Latina. Se examinan problemas como la contaminación atmosférica y la alta tasa de homicidios, así como el uso del tiempo, entre otros aspectos.

En lo que respecta a la distribución del ingreso, si bien en 2012 se incrementó levemente el grado de concentración en algunos países, se confirma la tendencia a la baja que se registra hace un decenio. Pese a esto, la elevada desigualdad sigue caracterizando a la región en el contexto internacional.

En promedio, el quintil más pobre (20% de los hogares con menores ingresos) capta en promedio 5 % de los ingresos totales del país, con extremos que van desde menos de 4 % en Honduras, Paraguay y República Dominicana a 10 % en Uruguay. La participación del quintil más rico, en tanto, promedia 47 %, con un rango que va desde 35 % en Uruguay a 55 % en Brasil.

En materia de gasto público social, los datos de 2011 y los pocos disponibles de 2012 (mayormente presupuestos y no ejecuciones) insinúan una tendencia a la contracción relativa, que no significaría necesariamente una disminución absoluta de los recursos destinados a los sectores sociales, pero sí esfuerzos para moderar su expansión y a la vez consolidar las finanzas públicas.

El informe recuerda que el gasto social mostró un crecimiento acelerado en el segundo quinquenio de los años 2000 debido sobre todo a políticas aplicadas para contrapesar diversos choques externos.

Finalmente, la CEPAL constata que la afiliación a la salud y las pensiones de los asalariados ha crecido en la región (en distintas magnitudes y desde distintos puntos de partida), lo cual da cuenta de una dinámica positiva en el mercado laboral. No obstante, en algunos países continúa siendo muy baja y está relativamente estancada, y cuanto más baja es la afiliación promedio, más concentrada está por ingresos.


© Publicado el jueves 05/12/2013 por http://www.eclac.cl/argentina/default.asp

 

sábado, 7 de diciembre de 2013

Nicolás y Miguel Winazki, La Dueña… De Alguna Manera…

Nicolás y Miguel Winazki, La Dueña…

La Dueña, libro de Nicolás y Miguel Winazki. Editorial Márgen Izquierdo.
 
Recién salido a la venta en las librerías de todo el país, el libro La Dueña es la historia secreta de cómo una niña con un padre ausente se transformó en la Presidenta más rica, más poderosa y más confrontativa de la Argentina. Pero es, también, una investigación reveladora que muestra con qué armas Cristina Fernández intentó trascender a su compañero, con el objeto de mantenerse en el poder y evitar el ocaso político o la futura visita a los tribunales.

En La Dueña, Nicolás Wiñazki investiga, denuncia e interpela y su padre Miguel observa, reflexiona, desnuda a la mujer más allá del luto.

“La Dueña es una de las denuncias más completas sobre los escándalos que salpican a Ella y a un grupo de empresarios y funcionarios que la rodean”, según su propia contratapa.

La Dueña explica, con lujo de detalles, la resurrección política y personal de Cristina, desde la madrugada en que Néstor Kirchner murió hasta el momento en que decidió ir "por todo" sin límites ni controles.

En diálogo con Christian Sanz por MDZ Radio, Nicolás Wiñazki aseguró: “Cristina es la dueña del peronismo, la dueña del gobierno, la que reformó el poder judicial, que trató de reformar los medios”.

A la hora de hablar del caso Ciccone, el periodista asegura que “no solo involucra a Boudou sino también a Cristina. Es una cosa simbiótica. En el libro mostramos cómo la negociación de la gente de Boudou con los Ciccone fue avalada por Néstor Kirchner en la Quinta de Olivos y una vez que murió, todo el apoyo que tenía Boudou fue avalado por Cristina”.

El autor asegura que Néstor y Cristina tenían una relación muy particular: “Durante un vuelo de Santa Cruz a Buenos Aires cuando Néstor era gobernador y Cristina legisladora de la provincia, Kirchner lee en la pavada de Crónica que Cristina había ido a un evento con un collar carísimo, que costaba varios miles de dólares. Enfurece, enrolla el diario y le pega en la cabeza varias veces mientras le dice: ‘Te dije que no uses esa mierda’”, cuenta.

Luego, Wiñazki recomendó especialmente un capítulo en el que refleja los dichos de Pedro Robledo, el militante del PRO que fue atacado a fines de marzo de este año por ser gay. “Lo que le contó Cristina y cómo se lo contó jamás lo vi antes. Le habla tres horas en la Casa Rosada mientras se votaba la reforma judicial”.

El periodista cuenta que Robledo describió la siguiente escena: “(Guillermo) Moreno tirado en un sillón al lado del despacho presidencial descalzo mirando futbol junto a Zannini, dándole órdenes a Cristina a los gritos”.

Más adelante, contó cómo el militante del PRO la increpó a Cristina porque le encanta vestirse con marcas extranjeras. “Tenés el mismo cinturón Chanel de ayer”, le dijo. Y la presidenta le habría respondido: “No, este es el Ferragamo”.

La jefa de Estado le habría dicho a Robledo: “Yo soy cipaya con todo lo que tiene que ver con la ropa y las series de TV. Me gusta todo lo de afuera”.

Y finaliza Wiñazki: “Le va dando explicaciones políticas que yo no escuché que le diera a nadie. Incluso explica por qué no aparece Máximo Kirchner públicamente”.

© Publicado el sábado 07/12/2013 por Tribuna de Periodistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

(PISA) Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos... De Alguna Manera...


PISA en español...

Orejas de burro nos van a crecer...

El Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE (PISA, por sus siglas en inglés), tiene por objeto evaluar hasta qué punto los alumnos cercanos al final de la educación obligatoria han adquirido algunos de los conocimientos y habilidades necesarios para la participación plena en la sociedad del saber. PISA saca a relucir aquellos países que han alcanzado un buen rendimiento y, al mismo tiempo, un reparto equitativo de oportunidades de aprendizaje, ayudando así a establecer metas ambiciosas para otros países. PISA en español...

Las pruebas de PISA son aplicadas cada tres años. Examinan el rendimiento de alumnos de 15 años en áreas temáticas clave y estudian igualmente una gama amplia de resultados educativos, entre los que se encuentran: la motivación de los alumnos por aprender, la concepción que éstos tienen sobre sí mismos y sus estrategias de aprendizaje. Cada una de las tres evaluaciones pasadas de PISA se centró en un área temática concreta: la lectura (en 2000), las matemáticas (en 2003) y las ciencias (en 2006); siendo la resolución de problemas un área temática especial en PISA 2003. El programa está llevando a cabo una segunda fase de evaluaciones en el 2009 (lectura), 2012 (matemáticas) y 2015 (ciencias).

La participación en PISA ha sido extensa. Hasta la fecha, participan todos los países miembros, así como varios países asociados. Los estudiantes son seleccionados a partir de una muestra aleatoria de escuelas públicas y privadas. Son elegidos en función de su edad (entre 15 años y tres meses y 16 años y dos meses al principio de la evaluación) y no del grado escolar en el que se encuentran.  Más de un millón de alumnos han sido evaluados hasta ahora. Además de las pruebas en papel y lápiz que miden la competencia en lectura, matemáticas y ciencias, los estudiantes han llenado cuestionarios sobre ellos mismos, mientras que sus directores lo han hecho sobre sus escuelas.

Una vez completada la primera fase de nueve años, PISA continuará el seguimiento del rendimiento de los alumnos en tres áreas temáticas principales, pero también buscará profundizar su introspección sobre las evaluaciones venideras. Hará esto mediante el desarrollo de mejores formas de seguimiento del progreso de los alumnos, haciendo posibles comparaciones más precisas entre el rendimiento y la instrucción, y haciendo uso de evaluaciones informatizadas.  Estas innovaciones serán exploradas inicialmente como componentes suplementarios y opcionales de PISA, pero que serán integradas al núcleo del programa en aquellos casos en que se considere apropiado.

Para ver las publicaciones disponibles de PISA en español, haga click aquí.

Para visitar el centro de la OCDE en México para América Latina, haga click aquí.


PISA in Focus:












© Fuente: PISA en español

 

Prueba PISA: es la hora de comprender lo que nos pasa.


Cuadro comparativo Argentina - Brasil. Fuente: OCDE

Análisis de los datos y una reflexión en torno a los malos resultados de los alumnos argentinos en comprensión de textos.

Revisando las numerosas cifras que entrega el informe PISA 2012 no deja de llamar la atención un dato que obliga a la reflexión. Si bien en matemática estamos estancados en los últimos 12 años (desde que se toma esta prueba), y en ciencias mejoramos un poco, la comprensión lectora de los pibes de 15 años descendió significativamente.

No sólo eso. Entre los países que están por debajo del promedio de la OCDE, Argentina es el único que cayó, y mucho, en los índices de lectura desde el año 2000. Los demás países de la región –todos menos nosotros– mejoraron. Se puede inferir que algo hicieron por revertir los malos resultados.

Las cifras duelen. Hoy el 53,5% de los alumnos argentinos (más de la mitad) está por debajo de lo que los especialistas de la OCDE identifican como el “nivel 2”: no pueden reconocer la idea principal de un texto, ni realizar inferencias sencillas, ni hacer comparación o contrastes. En criollo: no entienden lo que leen. En 2000 este grupo era del 43,9%. Descendimos 10 por ciento.

Y hay datos más alarmantes aún, siempre en lectura. El 8,1% de los chicos argentinos están por debajo del nivel “1B”, lo que implica que no alcanzan los niveles mínimos en comprensión lectora. O en otras palabras, no tienen la mínima noción del significado del texto con el que se enfrentan. En la ciudad de Buenos Aires el resultado da aún peor: el 9,3% de los chicos porteños –casi uno de cada diez alumnos– está por debajo de 1B.

Seamos claros. Los ejercicios de lectura no presentaban mayores dificultades para un pibe de 15 años. Eran piezas de textos y diversas preguntas que apuntaban a reconocer el grado de comprensión y, a partir de ahí, la competencia con que el alumno se puede desempeñar en la vida cotidiana. OCDE hace especial énfasis en las capacidades y habilidades de los jóvenes para integrarse en el mercado laboral.

Los alumnos debían, por ejemplo, distinguir un hecho de una opinión, o diferenciar los géneros de ficción de los textos que se refieren a la realidad, así como interpretar los propósitos de diferentes tipos de mensajes. También te nían que ser capaces de comparar diferentes puntos de vista sobre un mismo tema.

Nuestro 53,5% por debajo del nivel 2 nos aleja cada vez más del promedio OCDE (cerca del 18%). Y abre preocupantes interrogantes acerca del futuro de la generación que hoy asiste a la escuela media. Todo esto, con una inversión en educación equivalente al 6,5% del PBI: el mayor de la región.

Por supuesto que no hay soluciones mágicas ni rápidas. Nadie sensato puede pretender alcanzar los niveles de Shanghai, de Singapur o de Corea en el corto plazo. Pero pareciera que, tras una década de vernos involucrados en debates apasionados, cargados de datos “reales” que en realidad son ficción y opiniones disfrazadas de hechos, los argentinos –y especialmente los más jóvenes– elegimos “no comprender” lo que nos está pasando.

© Escrito por Ricardo Braginski el jueves 05/12/2013 y publicado por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.