"Trabi", el coche de la Alemania comunista, cumple 60 años…
Un Trabi en
las calles alemanas. Joya.
Cuando salió a la venta había que esperar hasta doce años para conseguir
uno.
© Publicado el lunes 06/11/2017 por el Diario Clarín
de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. (Fuente Agencia dpa.)
El
legendario minicoche Trabant, símbolo
de la Alemania comunista, cumple 60 años este martes reducido prácticamente a
una pieza de coleccionista para los nostálgicos y como una atracción turística
en ciudades como Berlín.
Había que esperar una
media de doce años de lista de espera para conseguir uno, pero después se usaba durante más de dos décadas. Era compacto y ligero y su
sencillez técnica iba de la mano de su durabilidad.
El vehículo,
símbolo de la Alemania comunista, cumple 60 años este martes. Agencia dpa
Los
ciudadanos de la extinta República Democrática Alemana (RDA) y su
"Trabi", fabricado en la ciudad sajona de Zwickau, forjaron desde el
primer momento una historia de amor para toda la vida.
Fotografía tomada el
11/11/1989 en Hamburgo, Alemania, a varios modelos del legendario minicoche
Trabant. Agencia dpa
Hacía mucho ruido, era muy contaminante, traqueteaba, pero con un poco de suerte llevaba eficazmente a
su propietario a su destino. Tan eficaz que hoy, 60 años después de que saliera
el primero al mercado (el modelo "P50"), aún hay más de 33.000 vehículos de este tipo en
las carreteras alemanas.
Fotografía
tomada el 04/02/1964 en Magdeburgo, Alemania, al legendario minicoche Trabant. Agencia dpa
Durante toda su vida, el Trabant,
cuyo nombre se eligió a través de una encuesta y que significa en alemán
satélite (como la palabra rusa Sputnik) y también acompañante, apenas cambió
algunos aspectos estéticos o técnicos. Sus dueños los cuidaban al máximo debido
a los largos tiempos de espera para poder comprar uno.
Un taller de
Trabant. Un auto que resiste el paso del tiempo. Agencia Reuters
Sin embargo, la caída del Muro de Berlín, en 1989, y la posterior
reunificación alemana supuso su final ante la llegada de los modernos
automóviles del oeste. Numerosos "Trabis" fueron
abandonados a su suerte.
En 1991 se fabricó el
último ejemplar, pero el "Trabi" nunca
abandonó el corazón de los ciudadanos de la Alemania comunista y hoy
goza de status de culto. Algunos vieron un filón turístico
y ahora es habitual ver circular a turistas en procesión en estos vehículos en
la capital alemana en lo que se conoce como "Trabi-Safari".
Los Trabants aparecen estacionados en la Platz der Voelkerfreundschaft en
Zwickau (Alemania), durante el encuentro internacional anual de estos
automóviles. Todos los años, participan entre 400 y 600
vehículos. Agencia EFE
El renacer del coche con un motor de dos tiempos, símbolo del socialismo y
de la economía comunista, también hizo florecer el negocio de las piezas de
repuesto para un coche del que hasta el año 1991 se fabricaron cerca de tres millones
de unidades.
Frank Hofmann, dueño de una empresa que se encarga de
comerciar on line este tipo de piezas que se producen en pequeñas series, es
consciente de la pasión que aún despierta este vehículo.
El artista húngaro Istvan ef Zambo pinta un Trabant. Agencia EFE
Cuando comenzó con su empresa en 2003 muchos le auguraron un rápido final,
recuerda. "Entonces éramos dos y tres cajas de cartón llenas de piezas en
el sótano". Hoy vende 1.500 artículos que van desde pequeños
tornillos hasta el motor completo del "Trabi", con
los que llena tres almacenes y da trabajo a ocho personas.
"El Trabant es lo opuesto a nuestro mundo mecanizado
de hoy en día", indica. Se necesitan pocos conocimientos
para reparar uno mismo este automóvil de culto, porque se
construyó de manera muy sencilla técnicamente, explica.
Una pared mítica en la Berlín
Oriental. El Trabant ya es un símbolo alemán. Agencia AFP
El interés por este tipo de automóvil va más allá de las fronteras
alemanas, confirma Hofmann. Los paquetes con partes del Trabant se envían a
Inglaterra, Bélgica, Hungría, Rusia, Australia y Estados Unidos.
Tan pronto como Hofmann gira la llave de su modelo P 601
el recuerdo de tiempos pasados vuelve a florecer. El
familiar martilleo y el denso humo de su tubo de escape sólo pueden ser de un
vehículo, de un "Trabi".
