Operación Sheffield, el día que cambió la
historia...
Un 4 de mayo de 1982, hace 33 años, ocurría un hecho que
cambiaría para siempre la historia de la guerra en el mar, un hecho que por su
implicancia la Aviación Naval lo tomaría como "su" día, el Día de la
Aviación Naval Argentina: el ataque y posterior hundimiento del destructor HMS
“Sheffield” por aviones de la Armada Argentina y su brazo armado en el aire, su
Aviación Naval.
Iniciadas las hostilidades, en un vuelo ordenado por el
Comando de la Aviación Naval Argentina (COAN) para realizar una exploración
antisuperficie que posibilitara el arribo de 3 aviones C-130 Hércules de la
Fuerza Aérea Argentina a Puerto Argentino, el 4 de mayo a la madrugada despegó
desde la Base Aeronaval Río Grande el Lockheed SP-2H Neptune 2-P-112 de la
Escuadrilla Aeronaval de Exploración.
Se había trazado una derrota que circundaba las islas con
despegue y aterrizaje en Río Grande y durante la misma se efectuaría búsqueda
permanente con medidas pasivas e intermitentes con radar.
Cancelados los vuelos de los Hércules por ataque aéreo
inglés a la pista de Puerto Argentino, el Neptune fue instruido para proseguir
al Sur – Este.
A las 7.10 horas se obtuvo un contacto radar en latitud
53º 04’ Sur, longitud 58º 01’ Oeste. Se apagó el radar y proveniente de ese sector
se detectó una señal de radar de alarma temprana de un destructor Clase 42.
Comunicadas estas detecciones al COAN y después de evaluar la situación, se
ordenó alistar una sección de aviones Super Etendard (SUE) en configuración
antisuperficie, armados con un misil Exocet cada uno.
En Río Grande, el comandante de la Segunda Escuadrilla
Aeronaval de Caza y Ataque, Capitán de Corbeta Jorge Colombo, ordenó preparar
dos SUE. El 3-A-202 y 3-A-203 cuyos pilotos para la misión del día eran el
Capitán de Corbeta Augusto Bedacarratz y el Teniente de Fragata Armando Mayora.
Mientras tanto, el Neptune mantenía el contacto con otra
localización a las 8.14 horas en latitud 52º 47’ Sur, longitud 59º 37’ Oeste; a
las 8.43 obtuvo 3 contactos radar en latitud 52º 47’ Sur, longitud 57º 40’
Oeste y a las 9.25 el radar quedó sin servicio originando una ardua labor para
solucionar el problema.
Los dos SUE, con los datos transmitidos por el Neptune a
las 8.43 despegaron de Río Grande a las 9.44 con un perfil de vuelo alto hasta
reunirse con el KC-130 reabastecedor (TC-70 indicativo “Rata” al mando del
Vicecomodoro Pessana, con la cobertura de una sección de aviones Dagger) y
luego descender al aproximarse al área de contacto manteniendo estricto
silencio de radio y radar para evitar ser detectados.
A las 10.30 el Neptune con la falla de radar parcialmente
solucionada obtuvo dos contactos en latitud 52º 33’ Sur, longitud 57º 40’ 5”
Oeste evaluándolos como dos buques medianos y uno grande.
Ya en enlace con los SUE, a las 10.35 les pasó la
información. Los blancos se encontraban a 115 millas náuticas de los aviones,
que en ese momento volaban rasantes en un área de chubascos con 1000 metros de
visibilidad y 150 metros de plafond.
Los dos SUE continuaron su aproximación en vuelo rasante
y a la distancia planificada, se elevaron a 300 metros, encendieron el radar y
volvieron a descender.
A las 11.04 lanzaron simultáneamente sus dos misiles
Exocet. En sus pantallas radar habían tenido los blancos, y efectuando el
procedimiento practicado tantas veces antes, habían llegado a lanzar sin ser
detectados por el blanco, en óptimas condiciones y a una distancia que
aseguraba el impacto. No habían registrado ningún tipo de interferencia electrónica,
lo que indicaba una sorpresa total.
Luego del lanzamiento invirtieron su rumbo y a la máxima
velocidad y siempre en vuelo rasante, se alejaron. Aterrizaron sin novedad en
Río Grande a las 12.10, el Neptune lo había hecho a las 12.04.
En apenas 12 segundos, uno de los misiles penetró por la
banda de estribor hasta las entrañas del buque y explotó.
El destructor HMS “Sheffield”, una de las unidades más
modernas de la Royal Navy y orgullo de la OTAN, había sido herido de muerte.
Seis días después, cuando era remolcado en un intento por alejarlo del teatro
de operaciones, se hundió en las frías aguas del Atlántico Sur.
Aunque por las características del ataque no se pudieron
comprobar los daños ocasionados en el momento, fue la propia BBC quien
confirmaría desde Londres que en el curso de sus tareas dentro de la Zona de
Exclusión Total en torno a las Islas Malvinas, el destructor Clase 42 HMS
“Sheffield” había sido atacado y alcanzado por un misil argentino.
El ataque y posterior hundimiento del “Sheffield”
causaron un tremendo shock a la flota británica, que acababa de perder su
primera nave en 40 años, diseñada específicamente para la defensa antiaérea,
precisamente a causa de un ataque aéreo.
Fue una operación eficiente, ejecutada en forma
totalmente profesional por profesionales adecuadamente entrenados. El binomio
avión explorador-avión de ataque demostraba así su contundencia, implicando un
medio totalmente nuevo en la guerra en el mar.
El martes 4 de mayo de 1982 a las 11.04, luchando por una
causa noble, en un rincón perdido del Atlántico Sur, la Aviación Naval
Argentina abría a los ojos del mundo un nuevo capítulo en la doctrina de las
operaciones aeronavales, se convertía en pionera de nuevas técnicas, nunca
antes utilizada por país alguno, llevada adelante por una pequeña unidad de 4
aviones con eficientes pilotos y personal subalterno altamente capacitado y
motivado.
Fruto de un trabajo notable por lo arduo y minucioso,
producto del ingenio desplegado por oficiales, suboficiales, conscriptos y
personal civil, casi sin ayuda externa, en sólo 30 días permitió concretar el
primer ataque de aviones con misiles antibuque a unidades de superficie
enemigas.
Por tal motivo, a partir de ese magno acontecimiento se
celebra el 4 de mayo el Día de la Aviación Naval Argentina; y el binomio SUE –
Exocet ganó el apodo de ser “El terror del Atlántico Sur”.
Por esta operación los pilotos de los SUE recibieron la
medalla “Honor Al Valor En Combate”.
Los aviones y tripulaciones que intervinieron en esta
operación fueron:
Aviación Naval Argentina
Segunda Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque:
3-A-202: Capitán de Corbeta Augusto Bedacarratz
3-A-203: Teniente de Fragata Armando Mayora
Escuadrilla Aeronaval de Exploración
Sumado a las dotaciones de la Escuadrilla Aeronaval de
Exploración y Segunda Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque que en tierra con
su anónimo trabajo permitieron que los aviones y sus tripulantes cumplieran con
total éxito la misión ordenada.
Esta operación aérea, planificada y ejecutada por la
Aviación Naval contó con el siguiente apoyo de la Fuerza Aérea Argentina:
Lear Jet LR-35, indicativo "Dardo”. Tripulación: 1er
Teniente Eduardo Blanco, Teniente Luis Herrera y Cabo Principal Dardo Rocha;
despegó de Río Grande a las 9.40 y arribó a la 1.00.
Hércules KC-130 (TC-70), indicativo "Rata",
tripulación: Vicecomodoro Enrique Pessana, 1er Teniente Gerardo Vaccaro, Mayor
Eduardo Gómez, Suboficial Auxiliar Oscar Ardizzoni, Suboficial Auxiliar Mario
Amengual, Suboficial Auxiliar Manuel Lombino, Cabo Principal Mario Cemino y
Cabo Principal Luis Martínez. Esperó en 50º 30' S / y 65º 30' O a nivel FL 100
y reabasteció, en su vuelo de ida, a los dos Super Etendard. Despegó de Río
Gallegos a las 8.45 y arribó a Río Grande a las 13.45.
Dos M-5 Dagger, indicativo "Pollo", misión:
cobertura del Hércules KC-130 y los dos Super Etendard SUE; armamento: dos
cañones y misiles Shaffrir. Tripulación: Capitán Amílcar Cimatti (C-437) y
Capitán Higinio Robles (C-414). Despegaron de Río Grande a las 10.20 y
arribaron a las 13.
El Lockheed SP-2H "Neptune" 2-P-112 permanece
en custodia del Museo de la Aviación Naval Argentina luego de su restauración,
la que dio origen al mismo y el Dassault Super Etendard 3-A-202 en custodia de
la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque.
Fuentes consultadas
Archivo del Museo de la Aviación Naval Argentina
Exocet – Suplemento Nº 10 de la revista Siete Días –
Emilio Villarino – 1983
© Escrito por el Suboficial Principal Aeronáutico Lorenzo Borri del Museo de la Aviación Naval Argentina el 05/05/2015 y publicado el periódico Gaceta Marinera de la Base Naval Puerto Belgrano, Provincia de Buenos Aires.