La historia del argentino que cuida el Cementerio de Darwin...
Sebastián Socodo, de
32 años, cuidador del Cementerio de Darwin. Foto: Gentileza Sebastián Socodo
Se llama Sebastián Socodo y tiene 32 años. Está casado con
una isleña y comprometido con su trabajo. Cómo es su vida en las islas.
No es la profesión más buscada del mundo y sin embargo un
argentino la eligió como forma de vida y en uno de los lugares más inesperados
del país: cuidador de cementerio en las islas Malvinas. Su nombre es Sebastián
Socodo y con sus 32 años ya lleva cinco en el cuidado de las tumbas y cruces.
Hace semanas, un proyecto impulsado desde 2008 por un grupo
de veteranos y la fundación No Me Olvides logró la mención y apoyo del
Ejecutivo. Cristina Fernández de Kirchner pidió a la Cruz Roja Internacional
que interceda para permitir identificar a los cuerpos de los soldados caídos en
las Islas Malvinas. Los restos se encuentran en el Cementerio de Darwin en la
isla Soledad del archipiélago, cuyo mantenimiento se encuentra a cargo de
Socodo.
En diálogo con Perfil.com, el guardián del camposanto
argentino comentó que fue a él a quien se le ocurrió ofrecerse como cuidador
ante la Comisión de Familiares de Caídos en las Islas Malvinas quien lo
contrató hace ya cinco años.
"Básicamente, se trata de un trabajo rutinario. Me
encargo del mantenimiento en general, observo el cuidado de las cruces blancas,
las pinto una vez al año, corto el cesped, entre otros detalles", afirma
Sebastián desde su casa en Puerto Argentino en donde vive junto a su familia
integrada por su esposa Phoebe (isleña), y sus hijos Nicole (argentina) y
Joshua (malvinense).
Aseguró además que no sufrió, en los casi 11 años que vive
en las islas, ningún tipo de hostigamiento o demanda. Respecto del trabajo,
dijo que "no alcanza con un solo sueldo". "Acá, en las islas,
trabajan todos, la mujer y el hombre a la par, sino no alcanza lo que se gana.
Es ficticio eso que en las islas somos todos ricos debido al PBI per cápita. Yo
necesito de tres trabajos para vivir", sostuvo.
Sebastián trabaja en paralelo en el mantenimiento del
aeródromo local y como una suerte de guía turístico baqueano. "El
cementerio es visitado por cientos de turistas. Será curioso, pero cruceros y
tours traen a miles de visitantes que no dudan en visitar nuestras 237
tumbas", añadió al tiempo que aclara que prefiere no tratar el tema del conflicto
directamente.
"Ser el cuidador del cementerio me permitió conocer un
poco más la historia de las islas y la guerra desde un punto de partida muy
fuerte. Naturalmente, conocía de qué se trataba, pero me conectó de una manera
especial", confesó a este medio desde el ventoso clima isleño.
Y concluyó: "Fue entre 2000 y 2001 cuando con mi mujer
pensábamos en algo distinto, un nuevo destino. Surgió la posibilidad de venir a
las islas Malvinas y no me arrepiento, mi familia está acá".
Sobre la intervención del Comité Internacional de la Cruz
Roja Internacional (CICR), organismo que ya se mostró "dispuesto" a
colaborar con la Argentina en la identificación de los cuerpos de soldados
argentinos y británicos, Socodo opinó: "Es una pregunta para los padres de
los fallecidos, no me corresponde opinar porque no tengo familiares enterrados
allí".
© Publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos AIres el jueves 14 de Junio de 2012.
Las fotos:
Sebastián camina entre las tumbas que tiene bajo su responsabilidad. Foto: AFP
Sebastián Socodo, de
32 años, cuidador del Cementerio de Darwin. Foto: Gentileza Sebastián Socodo
Hace casi 11 años que vive en las islas junto a su esposa Phoebe. Foto: AFP
La Cruz Roja Internacional ayudaría a identificar las tumbas NN del Cementerio de Darwin. Foto: AFP