El reino del revés II…
CELAC canto. Alberto Fernández. Dibujo: Pablo Temes.
Falta de planificación,
impericia, negligencia, cosas que condicionan la realidad de Argentina.
© Escrito por Nelson Castro el sábado 21/01/2023 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires República Argentina.
Como si la Argentina
no tuviera suficientes frentes internos de conflicto –inflación galopante,
dólar libre que sigue subiendo, escasas reservas en el Banco Central, un
Congreso de la Nación paralizado y dividido por el intento de Juicio Político a
los miembros de la Corte Suprema, más un año electoral que promete numerosos
conflictos político partidarios– el martes nuestro país será la sede de la
cumbre de la Comunidad
de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac) la organización creada por Hugo Chávez y Luiz
Inácio Lula da Silva en 2010.
Alberto
Fernández prestó
conformidad como anfitrión, para el regreso a los escenarios internacionales
del dictador venezolano Nicolás
Maduro quien venía
limitando sus movimientos entre naciones amigas como Nicaragua y el régimen
cubano. Su presencia aún no ha sido confirmada, pero el Presidente ve allí una
nueva oportunidad para enviar señales al kirchnerismo duro que, haga lo que
haga, lo desprecia. La portavoz presidencial Gabriela Cerruti ya confirmó la
reunión con el dictador cubano Díaz Canel el miércoles en la Casa Rosada, un
día después de la cumbre. Vale recordar que Díaz Canel fue el primer presidente
al que Alberto Fernández recibió el día posterior a su asunción, el 11 de
diciembre de 2019.
El brasileño Luiz
Inácio Lula da Silva, el colombiano Gustavo Petro y el chileno Gabriel
Boric ya aseguraron su
presencia. Para Fernández es imprescindible la foto con “su amigo” Lula para
demostrar un supuesto aval a su candidatura presidencial que tanto irrita al
kirchnerismo. No faltarán los gestos importados, los abrazos y la confianza
excesiva a la que nos tiene acostumbrados el Presidente.
La oposición aprovechará el río revuelto para disimular sus propias
desavenencias internas. No tan Juntos por el Cambio mantiene conflictos
latentes que ponen en riesgo la unidad en Mendoza, Neuquén, Río Negro y Chubut.
El caso más resonante se da en la provincia de Río Negro donde es casi un hecho
que la UCR compartirá alianza electoral con La Cámpora. El
partido oficialista Juntos Somos Río Negro y el frente “Nos Une Río Negro”, que
cobija a buena parte del kirchnerismo, acordaron una alianza de cara a las
elecciones que se realizarán el próximo 16 de abril para gobernador,
legisladores provinciales e intendentes. El oficialismo de esa provincia ya
ultimó detalles del acuerdo con una parte importante del radicalismo, que se
prepara para abandonar Juntos por el Cambio y compartir frente con La Cámpora.
Increíble, pero real. Todavía hay dirigentes que no entienden la gravedad de la
crisis social e institucional que atraviesa la Argentina.
El martes –día previo
al anuncio– algunos de los bonos registraron un volumen récord de operaciones,
entre ellos el GD30, uno de los más utilizados para la compra de dólares
financieros. El mercado no fue indiferente ante estos movimientos y la
oposición señaló la posibilidad de que allegados al Gobierno aprovecharan el
conocimiento de información privilegiada para beneficiarse de la suba de los
bonos.
Massa ordenó que se investiguen posibles “maniobras
especulativas” en las operaciones con bonos antes del anuncio e instruyó a la
CNV para que indague sobre la existencia de “posibles beneficiarios”. La
oposición permanece indiferente y con cierta razón: “Pusieron al lobo a cuidar
las ovejas y nosotros nos tenemos que creer los resultados de una investigación
llevada adelante por el propio Gobierno que pudo haber filtrado la información”
–se quejó un diputado nacional. Más allá del incidente hay algunas preguntas de
sentido común que no encuentran respuesta. La primera pregunta es obvia. En
momentos en donde las importaciones se restringen por falta de dólares, desde
productos terminados hasta insumos médicos ¿era necesaria esta operación de
recompra?
En segundo lugar, el
déficit fiscal sigue siendo un problema más allá de su reducción. El Gobierno
adujo que se espera una mayor disposición de reservas por las menores compras
de GNL en el invierno, pero la sequía podría pulverizar esta “ventaja”. Desde
el agro estiman que la pérdida de ingresos podría llegar a ser mayor a los 15
mil millones de dólares.
¿Falta de
planificación, impericia o negligencia? Todo puede pasar en esta Argentina del
reino del revés.