Gustavo
Alfaro: el hombre que no supo callar…
Gustavo
Alfaro, en sus días de Huracán. (Marcelo Carroll)
El
entrenador prometió continuidad y proyectos en Huracán. Ofreció su palabra y
firmó un contrato. No cumplió. Decidió irse a Boca.
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Escrito por Waldemar Iglesias el viernes 21/12/2018 y publicado por el Diario
Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En la
última conferencia de prensa de la pasada Superliga, tras el 3-3 frente a Boca, Gustavo Alfaro ofreció un puñado de palabras que tenían como inequívoco
destinatario a Ariel Holan, el técnico de Independiente, quien durante la
semana previa a la fecha final les había abierto las puertas a las suspicacias.
Expresó
el entonces entrenador de Huracán: "Uno tiene que ser prudente con sus
declaraciones. Hemingway dijo que el hombre necesita dos años para aprender a
hablar y 60 para aprender a callar. A veces hay que aprender a callarse
la boca".
En días más recientes, en La
Quemita que ya no será su hábitat frecuente, en una entrevista con Clarín, analizó en detalle al fútbol argentino. Se quejó de que en la AFA
y en algunos clubes no hay proyectos ni se respetan los contratos; que
desde sus tiempos en Atlético de Rafaela él había aprendido a honrar la palabra
empeñada; y sentenciaba que eso no era moneda corriente en este tiempo y en
este fútbol. También dijo entonces que en Huracán había encontrado
su "lugar en el mundo".
En su más cercana aparición
pública, el jueves 14/12, tras el 0-0 de Huracán ante Argentinos que dejó a su
equipo en el cuarto lugar de la Superliga, le preguntaron respecto del interés
de Boca por contratarlo. Respondió: "No me moviliza para nada. Me
genera orgullo por un lado y me reafirma las convicciones por el otro. Pero ahí
termina".
No terminó. Alfaro,
cuyo contrato con Huracán finalizaba el último día del próximo junio, será el
entrenador de Boca a partir del 3 de enero. Fin para el proyecto que venía
liderando en el Globo de Newbery. Fin de la palabra empeñada.
Alfaro, valioso
profesional, tiene todo el derecho de cambiar de club, de irse
al lugar que más le guste en su condición de trabajador del fútbol. Pero
corresponde aclararlo: a partir de ahora, sus enunciados y sus críticas a
dirigentes y a pares quedarán deslegitimados por los hechos que
lo desmienten.
O, quizá, dentro de cuatro
años, cuando cumpla los 60, Alfaro le dará la razón a la frase de Ernest
Hemingway. Y aprenderá a callar...
Comunicado Oficial de la Comisión Directiva sobre el alejamiento de Gustavo
Julio Alfaro.
Fueron 72 horas muy intensas, con un
final que no esperábamos ni deseábamos.
Fue muy importante para Huracán el
proceso y los resultados de la etapa de Gustavo Alfaro como DT.
Esta Comisión Directiva está muy
satisfecha con ello, pero también está muy desilusionada con el desenlace.
A veces pareciera que los que están
siempre obligados a respetar los contratos son solo los clubes…
No es la primera vez en la que nos
vamos a sobreponer a circunstancias adversas, ojalá sea la última.
Nobleza obliga admitir que en estos
momentos los socios están comprometidos, los hinchas están comprometidos, los
jugadores están comprometidos y los trabajadores del club están comprometidos tanto
como nosotros en seguir creciendo, y este entrenador tuvo mucho que ver con
esto. Pero se cerró un ciclo y ahora se abre otro.
En los próximos días definiremos
sobre el nuevo técnico, sobre la nueva pretemporada y sobre los nuevos
refuerzos; para afrontar nuevos desafíos.
Gracias a los socios por seguir
confiando.
© Comisión
Directiva del Club Atlético Huracán 22/12/2018
Nos dejó cuartos en la Superliga.
Nos dejó en la fase de grupos de la
Copa Libertadores.
Nos dejó un promedio que tranquiliza.
Nos dejó un plantel con notables
jugadores.
Nos dejó un estilo de conducción de
equipos de trabajo.
Nos dejó su modo de entender este
juego.
Nos dejó palabras que fueron
comprendidas, compartidas y comprometidas.
Nos
dejó.
© Fernando Moroni 22/12/2018