De Vido – Río Turbio: si hay algo turbio, están IECSA y
los Macri…
La empresa española ISOLUX
CORSÁN, involucrada en graves denuncias de corrupción en España y en los
negociados relacionados con Rio Turbio, es socia de IECSA, empresa que hasta
hace poco era propiedad de Ángelo Calcaterra Macri, primo del presidente Macri.
Durante el kirchnerismo y la gestión del ministro Julio De Vido, la UTE ISOLUX
CORSÁN IECSA fue adjudicataria de millonarios y polémicos contratos. Como el
frustrado Tren Bala, y la construcción de dos usinas termoeléctricas, que el
propio gobierno de Cambiemos terminó rescindiendo el año pasado, sin dar
mayores explicaciones. De tal manera las acusaciones contra De Vido por parte
del fiscal Stornelli, quien responde al operador macrista Daniel Angelici, dan
una vuelta en redondo señalando a los Macri y su entorno.
© Escrito por Lea Ross el
martes 11/07/2017 y publicado por https://stripteasedelpoder.com de la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Nuevamente, los ribetes entre la política y
la justicia, o la “judicialización de la política”, volvieron a aparecer
en los escenarios, en momentos en que cada vez se acercan más las fechas de las
elecciones. Esta vez: las denuncias y pedidos de desafueros contra el diputado
nacional Julio de Vido, por las irregularidades de una obra pública que estaba
bajo su órbita del Ministerio de Planificación de ese entonces.
Y nuevamente, aparecieron los oportunistas de la política
para sacarle su jugo y atraer la atención del electorado, mediante acciones
inútiles para el bien común. Emprendiendo una carrera de renuncias a sus
respectivos fueros, que realizaron distintos legisladores, entre ellos: Sergio
Massa, Margarita Stolbizer (ambos, encabezan el flamante frente 1PAIS),
Florencio Randazzo, el oficialista Nicolás Massot, etc.
Que no conducen a nada, porque los fueros no son
personales sino institucionales, y lo debe decidir las Cámaras que integran. Y
según el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez, la única forma
de renunciar a ellos es renunciando al cargo. Pero eso poco importa en una
Argentina donde reina la apariencia, el marketing, y la impostura.
Por su parte según Clarín De Vido le dijo a sus pares de
distintos colores en el Congreso: “esto forma parte de la campaña política del PRO para las elecciones …
Que el Gobierno siga jodiendo y yo voy a dar a conocer las cuentas
de Franco Macri con Ricardo Jaime y las de (Nicolás) Caputo con (José)
López”… El tercer contratista del Estado durante mi gestión fue la familia
Macri”.
Nuevamente queda expuesto así lo que este portal viene
publicando una y otra vez: el Gobierno kirchnerista y las empresas del grupo
Macri y relacionadas, compartiendo millonarios negocios de la obra pública. Y
encima, con se verá seguidamente, el mismo mediador de siempre: Ángelo
Calcaterra, el primo del actual presidente Mauricio Macri, y sus profundos
entendimientos con ISOLUX CORSAN, la empresa involucrada en los negociados en
Rio Turbio.
En esta ocasión, la polémica fue disparada
por las inversiones en la mina de carbón de Rio Turbio, y la obra sin terminar
de la central termoeléctrica del mismo nombre, un megaplan de la provincia de
Santa Cruz, ideado desde el año 2006 y que hasta el día de la fecha no ha
terminado y, muy probablemente, no cumpla con sus expectativas.
Considerada como la generadora de electricidad más
austral del mundo, se trata de un proyecto que consiste en la extracción de
entre 1,2 y 2 millones de toneladas de carbón en el yacimiento de la localidad
santacruceña de Río Turbio, para su correspondiente incineración y con ello
generar 240 megavatios de electricidad mediante dos turbinas aportadas por la
alemana Siemens (otra empresa involucrada en escándalos de corrupción) y
conectadas a un tendido eléctrico. Las obras se habían iniciado en 2008, con la
promesa que iban a tener un plazo de 42 meses. Una década después, el proyecto
todavía no está concluido.
La obra está a cargo de la empresa estatal Yacimiento
Carbonífero Río Turbio (YCRT) perteneciente a la cartera ministerial de Julio
de Vido. Durante esa gestión, fue denunciada por sobreprecios, irregularidades
de fondos, atrasos en las obras, escasez de avances en la construcción,
realización de obras inservibles, falta de sustentabilidad ambiental y
siniestros laborales. Hablando los grandes medios de costos que como para
impresioanr a sus audiencias, van desde los 2.600 a los 26 mil millones de
pesos.
La colateral de Rio Turbio con la UTN
La semana pasada, el fiscal federal Carlos Stornelli
pidió el procesamiento y la detención, previo quitarle los fueros del actual
diputado De Vido, por una denuncia (de las tantas sobre el caso) por el
supuesto desvío de 264 millones de pesos, que se canalizaron mediante
fundaciones intermediarias, a través de convenios con la Universidad
Tecnológica Nacional (UTN).
Básicamente, para supuestamente evitar las licitaciones
públicas, los fondos para las contrataciones no se transferían directamente a
YCRT, sino a filiales santacruceñas de la UTN en la provincia de Santa Cruz.
Luego, la universidad fraccionaba las compras con la intervención de una
fundación de propiedad de ella, quedándose con un 21% de comisión para solventar
los gastos administrativos, lo cual totalizaría el monto de 260 millones de
pesos, muy lejano de los 2.600 o 26 mil millones que habla la prensa.
El dinero se destinó para obras que son señaladas como
inservibles para una usina termoeléctrica. Como es el caso de la adecuación con
finalidades turísticas del denominado Ramal Ferro Industrial Eva Perón, que va
de Rio Turbio a Punta Loyola, pasando por Rio Gallegos. Por ende, la denuncia
apuntó a una maniobra para captar fondos públicos de manera ilegal.
Sin embargo, el juez Luis Rodríguez que era sindicado
como perteneciente a la escudería judicial de “Jaime” Stiusso, y que ahora
tendría serias diferencias con este, rechazó los pedidos del fiscal. Por
insuficiencia en las pruebas, ordenando que se amplíen, y por considerar
innecesaria las detenciones, que solo podrían hacerse ante peligro de fuga, o
de entorpecimiento de la investigación.
Isolux Corsán, la empresa a cargo de la Central de Río
Turbio, socia de Calcaterra
Dicha cuestión, se trata evidentemente de un petardo
electoral, acorde con el mecanismo judicial mediático que desde hace unos años
opera en Argentina. En lo que el fallecido Humberto Eco en su último libro,
dedicado a la mala prensa como pensado para Argentina (Número Cero) denomina
“la máquina del fango”.
Así los grandes medios, especialmente Clarín, en una
confusa información, mezclan ese asunto colateral menor, con la cuestión de la
construcción de la usina de Rio Turbio, a cargo de tres empresas españolas,
ISOLUX CORSAN, TECNA, y GHESA. Pero ocultando esas empresas son socias de
Ángelo Calcaterra, el primo del presidente Mauricio Macri. Y que encima,
trabajan juntos en otros negocios ligados a la generación termoeléctrica.
En el año 2008, la obra de la construcción de la Central
Termoeléctrica de Río Turbio fue adjudicada por licitación a la UTE conformada
por esas tres empresas españolas. En sus pliegos, el presupuesto oficial fue de
1.500 millones de pesos, equivalente a unos 400 millones de dólares de
entonces. Hoy, el proyecto recibió más de 1.500 millones de dólares y sin
acabar todavía.
Llamativamente, en el estudio de impacto ambiental de la
obra, figura el logo de IECSA en lugar de Ghesa. Lo cual es llamativo, ya que
hasta donde se sabe IECSA no forma parte de la UTE. Y más llamativo porque en
sus furibundas críticas, Clarín objeta hasta el estudio de impacto ambiental de
esa obra, diciendo que se hizo en terrenos inundables.
Para ese entonces, la constructora
dirigida por Franco y Mauricio Macri, estaba siendo transferida a su sobrino y
primo hermano respectivamente, Ángelo Calcaterra Macri. Y paralelamente, ISOLUX
e IECSA registraron su propia UTE (Unidad Transitoria de Empresas) en la
AFIP, bajo el nombre de “ISOLUX INGENIERIA S.A E IECSA S.A. – UTE”, con fecha
de contrato el 6 de agosto de 2008 y CUIT 30-71068183-6, creada para ir tras el
negocio de la construcción y explotación de usinas de generación
termoeléctrica, el mismo rubro que el del Río Turbio.
Pero según un archivo de febrero de 2008
del Cronista Comercial, dicha unión de ISOLUX e IECSA era aún más estrecha, ya
que se iba a conformar con una sociedad comercial bajo el nombre de Corpus
Energía. Precisamente, en el Boletín Oficial, un mes previo, se cita al nombre
de la empresa como la unión de estas dos empresas en donde figuran en el
directorio los respectivos directores. Por un lado, Ángelo Calcaterra, de
IECSA, y por el otro, Juan Carlos de Goycoechea, que era el director de la
filial latinoamericana de ISOLUX CORSÁN.
A su vez, ISOLUX CORSAN ARGENTINA S.A. figura
su fecha de registro el 16 de agosto de 2007 en la Inspección General de
Justicia. En el caso de Calcaterra, este recurrió al Grupo Empresarial Obras y
Desarrollo Social, conocida por sus siglas como ODS SA, que consistió en la
unión de empresarios locales y sus socios italianos, encabezados por Lorenzo
Ghella de GHELLA SA, su socia en el Soterramiento del tren Sarmiento. Teniendo
a IECSA como la empresa más grande el emporio. Su fecha de registro: el 18 de
julio de 2007, un mes antes que Isolux lo hiciera en Argentina.
También aparecen Ricardo Dinna y Javier Sánchez de
Caballero, cuyos nombres figuraron en los intercambios de email incautados a un
ordenador de ejecutivos de Odebrecht, sindicalizados de haber participado en el
pago de coimas.
El primer negocio frustrado de Isolux e
IECSA: el “tren bala”
Antes que IECSA e ISOLUX probaran suerte con el negocio
de la energía termoeléctrica, se habían presentado juntos para tratar de
obtener el megaproyecto del “Tren Bala” a Rosario y Córdoba. El criticado plan
del presidente Néstor Kirchner, equiparable al “transportador espacial” de
Carlos Menem para viajar a Japón en dos horas.
Este se aprobó el 19 de junio del 2007, mediante la
resolución 338/07, que llevó la firma del hoy preso Ricardo Jaime. Secretario
de Transporte en ese entonces, y sospechado de haber recibido coimas por parte
de Odebrecht por el Soterramiento del tren Sarmiento, la otra gran obra
ferroviaria investigada ahora por la justicia.
El tren bala tenía un presupuesto inicial de 3.500
millones de dólares, pero esta monto inusitadamente era su Valor Actual en
términos financieros. Que escondía que el verdadero monto a desembolsar era de
13 mil millones de dólares, según una denuncia penal del ex diputado Mario
Cafiero, que lo calificó como un “asalto a las arcas públicas”.
Jaime se lo pre-adjudicó al consorcio “Veloxia”,
integrado por la francesa ALSTOM, EMEPA; IECSA, e ISOLUX, la misma constructora
que competía con IECSA en la licitación por el Soterramiento del tren
Sarmiento. Vinculaciones que demuestran lo promiscuo que es la gran obra
pública argentina. Por ese entonces Mauricio Macri se había lanzado a la
jefatura de gobierno porteño, y estaba cediéndola IECSA a su primo Calcaterra
Macri.
Seguidamente para las elecciones presidenciales de 2007,
los hermanos Fabio y Ángelo Calcaterra fueron los principales aportantes de la
campaña de Cristina Fernández de Kirchner. Al asumir como presidenta, apenas
llegó a la Casa Rosada, el 16 de enero del 2008, en pleno receso veraniego, CFK
firmó el decreto 96/2008, adjudicándole al consorcio Veloxia la construcción
del Tren Bala.
El decreto llevaba también la rúbrica de De Vido,
ministro de Planificación; Alberto Fernández, actual dirigente del Frente
Renovador, y Martín Lousteau, por entonces ministro de Economía K, y hoy
integrante díscolo de Cambiemos. Una semana después de esta adjudicación, el 23
de enero de 2008, Cristina, Alberto Fernández, De Vido, y Lousteau firmaron el
decreto 151/08, adjudicándole al consorcio IECSA – Odebrecht – Comsa – Ghella,
las tres etapas de Soterramiento del Sarmiento.
Por falta de financiamiento, el contrato del Tren Bala
nunca se pudo ejecutar. Aunque sí recibió duras denuncias en su contra. Algunas
actualmente activas en la justicia. Una de ellas es la que lleva adelante el
juez Luis Rodríguez, el mismo que le rechazó al fiscal Stornelli la
detención a De Vido por el caso de Río Turbio UTN.
Los
negocios termoeléctricos de Isolux IECSA: de la obtención a la rescisión
En paralelo a que ISOLUX iniciaba en Santa Cruz la
Central de Río Turbio, la UTE ISOLUX IECSA ganó dos licitaciones muy
importantes para la construcción de usinas termoeléctricas. Se trata de la
construcción de las centrales Ensenada de Barragán y Brigadier López.
La Central Ensenada de Barragán se ubica en el polo
petroquímico de la localidad de Ensenada, provincia de Buenos Aires, sobre la
Ruta Provincial N° 11 y el canal del Gato, a aproximadamente diez kilómetros de
La Plata y 50 km de la CABA. Con una potencia instalada de 560 MW, fue
habilitada para operar comercialmente desde abril del 2012. La UTE ISOLUX IECSA
fue la única oferente en la licitación. Y, al igual que el proyecto de ISOLUX
en Río Turbio, propusieron a Siemens como proveedor de las turbinas.
Mientras que la Central Brigadier López se encuentra en
el parque industrial de la localidad de Sauce Viejo, sobre la Ruta Nacional N°
11, en la provincia de Santa Fe, a veinte kilómetros de la ciudad del mismo
nombre. Con una potencia instalada de 280 MW y está habilitada desde agosto del
2012.
Estas dos centrales, tanto la bonaerense como la
santafesina, bajo la supervisión estatal de ENARSA, en ese entonces también
bajo la órbita del ministerio de De Vido, al igual que el mega proyecto
santacruceño, no han terminado de construirse de manera completa.
En diciembre de 2016, el gobierno nacional de la mano de
Mauricio Macri, ordenó rescindir los contratos de las dos centrales con ISOLUX
e IECSA. La razón oficial fue que Calcaterra le exigía al Estado mayores fondos
para completar las obras. En particular, un reclamo de casi 9.000 millones de
pesos. De allí que ENARSA decidió quitarles los contratos.
Pero no hizo lo mismo el ministerio de Energía a cargo de
Juan José Aranguren, con el de ISOLUX CORSAN en Rio Turbio, con quien mantiene
herméticas negociaciones, igual que las tuvo con su socia IECSA. Y justo a las
pocas semanas después, en el comienzo del presente año, las dos empresas
quedaron envueltas en frondosos casos de corrupción, cada una por su lado.
Las
razones de la rescisión: Odebrecht y la corrupción en España
En el caso de IECSA, la empresa de Calcaterra quedó
comprometida con el escándalo del Lava Jato en Brasil, por dos hechos. Uno, por
las revelaciones judiciales y periodísticas respecto los fondos que recibió en
el 2013 Gustavo Arribas, actual presidente de la AFI (Agencia Federal de
Inteligencia) y amigo íntimo e inquilino del presidente Macri. Por parte de un
operador de Odebrecht, con sospechas de que se destinaron para el pago de
coimas para el avance del soterramiento del tren Sarmiento.
Y por otro lado, por el circuito de las coimas de dicha
obra, develadas por un informe de la Policía Judicial de Brasil, al mencionar a
directores del Grupo ODS, Javier Sánchez de Caballero, Ricardo Dina, y Lorenzo
Ghella, como participes de las reuniones secretas para acordar los pagos
clandestinos. Figurando los dos primeros como directores de la empresa Corpus
Energía, junto con De Goycoechea y Calcaterra.
Mientras que ISOLUX, en su tierra natal de
España, siguió entrando en más problemas con los escándalos de corrupción que
la salpican por todos lados. Esta vez, en el llamado “caso ADIF”, en el que se
sospecha que empresarios de ISOLUX CORSAN pagaron coimas a dirigentes de la
Convergencia Democrática de Catalunia, mediante la inflación de facturas. Para
la construcción de obras en la estación ferroviaria del tren rápido AVE en La
Sagrera, a cargo de la Administradora de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF)
empresa estatal a cargo del Ministerio de Fomento.
En febrero del actual año, Isolux quedó aún más
comprometida, debido a que aparecieron más coimas relacionadas con obras en
todo la región española. Como así también la filtración de escuchas grabadas
entre empleados de la compañía, donde se confirmaría los acuerdos para el pago
de ellas.
Archivo
de febrero de 2017 de El País, donde asegura que las coimas de Isolux Corsán fueron en toda España.
A su vez, ISOLUX está implicado en otro
mega-escándalo: el “caso Pujol”, en el que se sospecha que el CEO de la
empresa, Luis Delso, pagó 14 millones de euros al primogénito del ex presidente
catalán Jordi Pujol, como soborno para también beneficiarse en las licitaciones
de obra pública.
Por esta razón, desde mayo de 2016, ISOLUX CORSAN fue
intervenida por sus acreedores, lo cual significó la expulsión de Delso. Como
así también, la creación de una comisión de investigación interna para
verificar las pagos indebidos por los que está denunciada. Para finalmente
presentarse recientemente en concurso de acreedores, al estar imposibilitada de
hacer frente a sus deudas, por los graves affaires en los que quedó enredada.
Como consecuencia de eso en marzo de este año, mientras
Calcaterra llevaba adelante la venta de IECSA a Marcelo Mindlin, desde España
ISOLUX CORSÁN ordenó el despido de Juan Carlos de Goycoechea y varios de sus
socios de la filial argentina y latinoamericana. Sin dar precisiones,
explicaron que la decisión se debió que su despido se debió a la nueva política
de “prevención del delito penal”.
“Con el fin de evitar comportamientos irregulares, la compañía está
diseñando un modelo integral de Cumplimiento, empezando por el apartado de
prevención del delito penal. La política de Cumplimiento impulsada por el nuevo
Consejo de Administración tiene como principal referencia el Código Ético del
Grupo Isolux Corsán, cuya última revisión data del pasado mes de septiembre y
que será actualizado y ampliado en consonancia con el modelo integral de
Cumplimiento a medida que éste se desarrolle a lo largo de 2017.
En aplicación de esta nueva política se ha
producido recientemente el despido disciplinario de la cúpula directiva del
Grupo en Argentina, incluido el director regional, Juan Carlos de Goycoechea.
Todos los despidos realizados en este ámbito están respaldados por el resultado
de una investigación interna previa realizada por indicación del nuevo equipo
de gestión”.
En nuestro país, se sospecha que el caso Río Turbio fue
lo que impulsó el despido a la cúpula argentina y latinoamericana, encabezada
por De Goycoechea. Sin embargo, ISOLUX también ha tenido escándalos en otros
países vecinos. Una de ellas ocurrió en 2015 en la República de Chile, donde
las oficinas de ISOLUX CORSÁN fueron allanadas por sospechas de tráfico de
influencias y pago de coimas a autoridades de la Universidad de Santiago de
Chile (USACH) para recibir contratos de obras que se desarrollaron dentro del
campus universitario.
Escándalo que fue revelado por el Centro de Investigación
Periodística, a partir de la filtración de intercambios de emails entre De
Goycoechea y sus pares de España. La investigación judicial todavía está en
curso.
Stornelli, el operador de Angelici
En el 2011, el fiscal Carlos Stornelli se
afilió a la lista que encabezó el dirigente de fútbol Daniel “Tano” Angelici,
amigo y operador del presidente Macri. Lo realizó semanas después de haber
archivado una causa contra el actual presidente del Club Atlético Boca Junior
por el delito de amenaza y coacción contra el sindicato de trabajadores de
juegos de azar, negocio del cual también trabaja el “Tano”.
En diciembre de 2011, el portal La Política Online
publicó como primicia una fuerte imagen, de baja resolución, de un acto
organizado por la agrupación oficialista xeneize donde arriba del escenario, se
lo ve a Angelici (centro) levantándole el brazo desde su costado izquierdo al
mismísimo Stornelli.
Un ejemplo de cómo logra operar el amigo del presidente
dentro del ámbito judicial, que explica las penosas actuaciones de esta. Con un
festival de procesamientos y sobreseimientos, según de qué color sea la
camiseta del imputado. Como un referí enloquecido que trata de encantar a una
hinchada, y enojar a la otra. Lo cual no puede hacerse ostensiblemente sin que
a la corta o la larga, no tenga consecuencias.
Con lo cual, Stornelli solo tuvo que
seleccionar dentro de las causas del Río Turbio, una que no “enturbiara” al
socio de Calcaterra, con el fin de salpicar una vez más la imagen de Julio de
Vido. Blanco fácil a la hora de enchastrar al kirchnerismo con los casos de
corrupción, en este período de campañas electorales, donde el macrismo realiza
sonados esfuerzos por evitar una derrota con su principal competidor, el
kirchnerismo.
Tal como hizo con Aníbal Fernández durante la campaña
presidencial del 2015. Lo cual tratándose de la corrupción en la obra pública,
se ve sumamente complicado, dada la profunda tramazón desarrollada durante
décadas por el grupo Macri y sus integrantes con ella. Que explica su súbita
fortuna en pocas décadas, a la par que Argentina se hundía en la debacle y la
pobreza.