Con otra marca y motor eléctrico, vuelve el Isetta, un clásico de los microautos de los años 50.
Una compañía suiza está terminando de homologar un micro auto eléctrico que replica el concepto del BMW Isetta, fabricado durante una década en Europa. Su característica principal era su única puerta en el frente y un precio muy económico.
© Escrito por Diego Zorrero el lunes 02/08/2021 y publicado por el Sitio de Noticias Infobae de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.
Si uno escucha hablar de un auto llamado Microlino, fonéticamente lo asocia con un auto italiano como el Topolino. Si en cambio uno se encuentra frente a este microauto, la asociación visual es con un BMW Isetta. Pero en verdad, el Microlino 2.0 es un auto suizo, con una clara reminiscencia de aquel de los años 50, al que se accedía por el frente, levantando la puerta única que incluía el parabrisas y el mismísimo volante.
El Isetta era un auto económico que BMW compró a Iso Rivolta en 1954. El auto se llamaba originalmente Iso Isetta, y al ser adquirido por la casa bávara, pasó a llamarse BMW Isetta. Tenía un motor de 250 cm3 y 12 CV que le permitían andar a unos 80 Km/h gracias a ser muy liviano, apenas 350 Kg.
Ante la crisis que vivía en los años 50
por la baja demanda de sus productos, BMW compró el Isetta Rivolta y lo
transformó en un éxito que vendió 160.000 unidades en 8 años.
En 1956 se lo mejoró levemente con un
motor 300 cm3 que le permitió
llegar a 85 Km/h y fue un éxito
arrollador, vendiendo más de 160.000
unidades hasta 1962, cuando se dejó de producir.
En Suiza,
la empresa Micro está por poner
a la venta un auto muy similar, llamado Microlino
2.0, aunque sus directivos dicen que no es una copia modernizada del Isetta, sino una evolución del concepto de Scooter carrozado. De cualquier modo, lo
importante es que con la excusa, una vez más, de un auto eléctrico de bajo
consumo para movimientos urbanos de hasta dos pasajeros, el Microlino, y su
parecido con el Isetta, parece tener una plataforma sólida sobre la cual crecer
rápidamente.
A diferencia del Isetta de los 50, el
Microlino deja fija la columna de dirección y solamente levanta la puerta del
frente para poder acceder al asiento único.
Al ser eléctrico y moderno, hay cosas que distinguen a este auto de
aquel de los años 50. La columna de
dirección está fijada al piso y no se levanta con la puerta delantera.
El interior todavía no está definido al 100%, pero tendrá un tablero digital en posición
convencional, detrás del volante, frente al conductor, una pantalla sobre lo que parece ser
una barra que reemplaza al tablero del acompañante, calefacción y
un equipo de sonido.
En cuanto a la carrocería, las
ventanillas son corredizas hacia atrás para abrirse y, tal como tenía
el BMW Isetta, el techo es plegable por una razón de
seguridad, que tanto cuenta hoy como entonces. Ante un impacto que imposibilite
abrir la puerta delantera, el modo de salir del auto es a través del techo. A
los costados de las ventanas, en posición elevada están las dos luces delanteras de tecnología Led, que
se refuerzan con una tira que atraviera el ancho tanto de trompa y cola, como
luces de posición. En la parte trasera, el Microlino tiene un baúl pequeño, pero en el que pueden
entrar dos valijas medianas.
Dos pasajeros pueden usar el Microlino
para trasladarse con comodidad por una ciudad, con un costo mínimo y facilidad
de maniobra y estacionamiento.
El motor eléctrico es de 15 Kw (algo así como 20 CV), que con dos personas
a bordo le permiten alcanzar los 50 Km/h. Con un solo pasajero, aseguran que
puede llegar a 90 Km/h. La carrocería pesa 450 kg y tiene suspensión independiente, lo que hace al Microlino, un auto maniobrable y seguro en
curvas. Por esa misma razón, por reducir peso y por el ancho de su plataforma, la dirección no es servoasistida sino directa, bien mecánica.
La suspensión trasera independiente y una
mayor trocha, hacen del Microlino 2.0, un auto fácil de manejar, aun a pesar de
tener dirección mecánica directa.
Micro especifica una autonomía de hasta 125 kilómetros para
el modelo con una batería de 8 kWh,
y de 200 kilómetros con la de 15 kWh.
Las baterías se cargan enchufándolo a la red doméstica en aproximadamente
cuatro horas. Y así como el micro auto de BMW fue
un éxito por su precio, algo cercano a los 1.800
euros de hoy, ya que eran marcos alemanes en aquellos años 50, el Microlino
saldrá a la venta en los próximos meses a 12.500
euros, un precio muy accesible comparado con los carca de 20.000 euros
que cuestan los autos eléctricos más económicos del mercado actual.
Esos precios actualmente tienen un subsidio de
muchos gobiernos, que constan de una bonificación
aproximada de unos 8.000 euros en
muchos países europeos, lo que permite que se pueda adquirir un Seat Mii Electric, un Renault Twingo, un Smart
fortwo o un Fiat 500e por 12.000 euros como mucho, pero una vez
homologado el Microlino 2.0, se
espera que también pueda entrar dentro de ese beneficio y por lo tanto pueda
adquirirse por algo así como 7.000
euros.