Suman 40 testimonios por acoso contra un directivo de Greenpeace…
Más de 40
exempleadas de Greenpeace denuncian a Director Ejecutivo de la organización
ambientalista por acoso. Fotografía: greenwire.greenpeace.org
Ex empleadas/os de la ONG acusan a un director Ejecutivo por "abusos
de poder, acoso laboral y sexual, discriminación de género, amenazas y
hostigamientos contra las mujeres". Qué dicen desde la organización.
© Escrito por Florencia De Sousa el miércoles 25/04/2018 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Mediante una carta pública, 42 exempleadas/os y voluntarios de Greenpeace de Argentina, Chile y Colombia, denunciaron al director Ejecutivo de la ONG ambientalista, Martín Prieto por cometer en forma directa o encubrir casos de abusos de poder, acoso laboral y sexual, discriminación de género, amenazas y hostigamientos contra las mujeres. Desde la organización sostienen que se investigan los hechos y que el ejecutivo se encuentra de "licencia laboral".
Mediante una carta pública, 42 exempleadas/os y voluntarios de Greenpeace de Argentina, Chile y Colombia, denunciaron al director Ejecutivo de la ONG ambientalista, Martín Prieto por cometer en forma directa o encubrir casos de abusos de poder, acoso laboral y sexual, discriminación de género, amenazas y hostigamientos contra las mujeres. Desde la organización sostienen que se investigan los hechos y que el ejecutivo se encuentra de "licencia laboral".
El
escrito surge a raíz de la campaña pública a favor de la igualdad de género y
los derechos de las mujeres que el pasado 8 de Marzo, Día Internacional de la
Mujer, realizó Greenpeace Andino (Argentina, Chile y Colombia).
Este hecho fue el disparador para que varias exempleadas de la organización
empezaran a contar por redes sociales sobre los padecimientos sufridos
bajo el mando de Prieto, quien hace 23 años dirige Greenpeace Argentina.
Tras
las denuncias, la ONG ambientalista inició una investigación, pero "no
convocó a ninguna de las personas que se manifestaron públicamente".
"Por tal motivo, se decidió hacer una carta formal, que se envió a
las Directoras Ejecutivas de Greenpeace Internacional, con el fin
de que se enteren de que hay muchas víctimas y testigos que están dispuestos a
dar testimonio", indica el texto.
Eugenia
Testa, directora de Greenpeace Argentina durante
una década (2004-2014), y una de las primeras personas que denunció acoso en la
organización, contó a Perfil que, después de haber sido
desvinculadas de la organización, junto a otras víctimas contrataron a un
abogado especialista en derecho laboral y él no cumplió en representarlas: “Los
primeros pasos los cumplimos, la mediación con Greenpeace, le firmamos el poder
ante el Ministerio de Trabajo, inició las demandas pero nunca las presentó y
durante el tiempo que la causa pasaba nos mintió al decir que la causa estaba
presentada. Nos enteramos a principios de este año que eso no fue así que las
causas no fue presentada, y que las dejó prescribir”, narró. Por tal motivo
“nosotros iniciamos una demanda administrativa del letrado ante el Colegio
de Abogados, el tribunal de disciplina”.
La
mujer relató que tras haber hecho pública su denuncia en redes sociales,
comenzaron a sumarse más casos: “Aparecieron voluntarios y excompañeras, muchas
que hacía mucho no veíamos. Algunas nos mandaron mails y otras se contactaron
por redes sociales o por teléfono. De los 42 casos hay víctimas directas y
casos que son testigos de ese hostigamiento, acoso laboral y en algunos acoso
sexual y no respeto de la legislación laboral de las mujeres. Además se
empezaron a contactar colegas de Chile, por eso en la carta todavía no están
cerradas las firmas, vamos a ir actualizando para tratar de que se hagan
públicos los casos de gente que se anima a hablar. Las 42 personas que
firman la carta están todos dispuestos a hablar bajo un régimen de
confidencialidad si se abre una investigación seria”.
"La
carta la presentamos ante los Directores Administrativos de Greenpeace en
Amsterdam y al Consejo Directivo también de Greenpeace internacional, que si
bien la oficina Argentina dijo que públicamente hay una investigación abierta. Las
42 personas que firmamos la carta estamos dispuestas a contar lo que vivimos y
de lo que somos testigos, pero aún no se han contactado con nosotros. Por
esto vamos a esperar a ver cómo se resuelve esa investigación, si nos parece
que es inadecuada y lo que se intenta es tapar la situación, recurriremos a la
Justicia", completó.
Las
abogadas Florencia Arietto y Alejandra Bellini,
representantes legales de varias de las víctimas, manifestaron “Tomamos las
causas de (Consuelo) Bilbao, (Eugenia) Testa, (Lorena) Pujó y otras,
porque consideramos que existe material para probar en la justicia las
denuncias que se hicieron públicas contra Martín Prieto. La organización sigue
protegiendo a Prieto, las respuestas son escasas y poco claras; no realizan una
investigación independiente, sino que se ocupan de desacreditar las denuncias.
¿Qué mujer se puede sentir segura en Greenpeace sí aquellas que cuestionan y
denuncian son despedidas y luego difamadas?”.
Respuesta
de Greenpeace.
Ante
la exposición del caso, desde Greenpeace emitieron un comunicado donde
sostienen que se inició una etapa de investigación interna sobre los hechos, y
que por ello Martín Prieto, el ejecutivo involucrado se encuentra de
"licencia laboral" con el fin de "consolidar el máximo de
transparencia e independencia".
“Desde
hace casi dos meses, cuando surgieron estos testimonios, seguimos con
preocupación esta situación y estamos asegurando los mecanismos para
que se lleven adelante todas las investigaciones que sean necesarias; somos una
organización transparente. Si de las investigaciones surgiera alguna necesidad
de reparación, se hará”, sostuvo Natalia Machain, Directora
Política de la organización, a cargo de la co-Dirección Ejecutiva
temporalmente.
Luego
detalla que "El 20 de marzo una ex empleada comunicó en Twitter que en
2006 había vivido situaciones incómodas y recibido referencias a su cuerpo por
parte de su director de área, quien trabajó en la oficina de Greenpeace
hasta el año 2008. Dado que Greenpeace no había sido informada de esta
situación, al momento de leer en Twitter el relato de la ex empleada, la
organización intentó contactarla en repetidas oportunidades y por diversos
canales, no habiendo tenido respuesta hasta el momento". Y completa:
"No hemos querido hacer públicas declaraciones respecto de estas
investigaciones para respetar la privacidad de las personas involucradas,
pero se están tergiversando las respuestas y creemos necesario actualizar la
situación".
En
diálogo con Perfil, Machain, aclaró la situación actual de Prieto,
quien está con licencia laboral: “Cuando aparece esta nueva carta con varias
firmas y haciendo un rejunte de hechos generales, nos pareció importante —y
siendo que se va a abrir una investigación para los hechos nuevos que se
refieren— para consolidar la transparencia con la que estamos
trabajando, que él se aparte temporariamente mientras esta investigación se
dé”.
En
ese contexto completó: “Tenemos un compromiso no sólo con las cuestiones de
género, sino con realizar las investigaciones en este caso que sean necesarias
porque no tenemos nada que ocultar”.
Consultada
sobre cómo repercute dentro de la organización ambientalista este hecho, la
directiva amplió: “Seguimos adelante con el mismo compromiso con la misión que
tenemos con la organización. Hoy el día la organización está trabajando en
campañas relativas a la deforestación ilegal, a la protección de glaciares, a
la incineración en la ciudad de Buenos Aires, a la protección de los océanos en
Chile y a la prohibición del asbesto en Colombia.
Estos
casos deben continuar porque es la misión por la cual nuestros socios y la
gente que nos apoya forma parte de la organización".