domingo, 6 de septiembre de 2015

Huracán 1 vs. Independiente 1... @dealgunamanera...

Huracán empató frente a Independiente en la previa del clásico más porteño… 


Huracán empató uno a uno frente a Independiente por la vigésimo tercera fecha del Torneo de Primera División en condición de local.

En la primera etapa, los de Parque Patricios merecieron irse arriba en el resultado a pesar de las malas definiciones. Daniel Montenegro fue la carta más alta en el ataque quién tuvo dos ocasiones de gol, primero con los pies y luego con la cabeza obligando a Diego Rodríguez a aparecer y evitar la caída de su arco. Por el lado de Independiente, poco y nada para complicar a Marcos Díaz y no hacerlo pasar sobresaltos.

Las emociones llegaron al principio y al final de la segunda parte. Huracán se durmió, dejó venir a su rival y le permitió ponerse en ventaja en el marcador. Un pase en profundidad de Martín Benítez encontró a Juan Martín Lucero sólo picando por derecha y ante la apresurada salida del arquero Quemero, definió estableciendo así el uno a cero.

Como un baldazo de agua, la desventaja despertó al Globo que volvió al partido y propuso un mano a mano constante que pudo haber terminado en una mayor diferencia para los de Avellaneda como en el empate que se hizo esperar. En el segundo que se cumplía el tiempo reglamentario, Ramón Ábila le pifiaba a la pelota ante el cabezazo de Federico Vismara que llegó después de una serie de rebotes tras el córner enviado por Cristián Espinoza. Segundos después, en un segundo intento, el esférico terminó incrustado en la red enemiga tras el zapatazo de Wanchope.

Huracán: 1

Marcos Díaz; José San Román, Martín Nervo, Federico Mancinelli y Luciano Balbi; Patricio Toranzo, Federico Vismara, Mauro Bogado y Daniel Montenegro; Ramón Ábila y Cristian Espinoza. DT: Eduardo Domínguez.

Independiente: 1

Diego Rodríguez; Gustavo Toledo, Hernán Pellerano, Víctor Cuesta, Nicolás Tagliafico, José Trejo, Jorge Ortiz, Jesús Méndez, Martín Benítez, Lucas Albertengo y Juan Lucero. DT: Mauricio Pellegrino.

Cambios: Ezequiel Miralles por Bogado, David Distéfano por Patricio Toranzo e Iván Borghello por Luciano Balbi.

Goles: 47′ Lucero (I); 90′ Ábila (H).

Estadio: Tomás Adolfo Ducó

Árbitro: Diego Ceballos

© Escrito por Rodrigo da Silva el sábado 05/09/2015 y publicado por el Departamento de Prensa del Club Atlético Huracán de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



Los goles

Choreo del árbitro Diego Ceballos - Junio 2014

Choreo del árbitro Diego Ceballos

Choreo del árbitro Diego Ceballos

sábado, 5 de septiembre de 2015

Día de la Industria según CFK... @dealgunamanera...

Las perlitas de Cristina Kirchner en el acto por el Día de la Industria en Tecnópolis...

Cristina Kirchner, en medio de su extensa alucución. Foto: DyN

El discurso de casi dos horas de la Presidenta aumentó el apetito de los asistentes, que aguantaron entre murmullos comiendo pan mientras la mandataria exponía los logros de la gestión kirchnerista y les pedía apoyo.

La cena conmemorativa por el Día de la Industria organizada por el Gobierno en Tecnópolis tuvo un extenso discurso por parte de la presidenta, Cristina Kirchner, que habló durante casi dos horas sobre los logros de su gestión y la del fallecido presidente Néstor Kirchner.

La Presidenta, que presidió el encuentro al que asistieron dirigentes de entidades gremiales industriales de todo el país en el predio de Villa Martelli, confundió la fecha del Día de la Industria con el 2 de Abril, Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de las Malvinas, no una sino tres veces. Hasta preguntó una y otra vez sobre el paradero de sus anteojos, que tenía justo enfrente, en el atril. Fueron momentos de cierta dispersión de Cristina.

Entre bostezos y murmullos, los asistentes escucharon a la mandataria en su último discurso conmemorativo por el día de la industria mientras comían pan, luego de la espera de más de dos horas de muchos de ellos en las mesas.

Al comienzo, se proyectó un video sobre la evolución de la industria durante los últimos 12 años. Pero el video no fue suficiente: con 41 filminas de powerpoint, la Presidenta repasó los "índices notables" sobre la reactivación industrial, social y económica de sus mandatos, filminas que además compartió mediante su perfil de Facebook y en la red social Twitter.

"Esto no es pan y circo, es pan y powerpoint", bromeó el ejecutivo de una multinacional que asistió a la celebración.

© Escrito por Francisco Olivera el miércoles 02/09/2015 y publicado por el Diario La Nación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.





¡¡¡Catastrófico!!! (Para Bolivia, claro...): Argentina 7 vs. Bolivia 0... @dealgunamanera...

¡¡¡Catastrófico!!! (Para Bolivia, claro...)


Fue una noche para el olvido en Houston. Una improvisada selección boliviana no pudo ante su par de Argentina y cayó goleada por 7-0 en el estreno de Julio César Baldivieso como entrenador de la Verde.

Sin alma y sin fútbol, el equipo boliviano no fue rival ante una selección B de Argentina que tuvo a Lavezzy y Agüero como sus figuras estelares, dupla que se complementó con la aparición de Lionel Messi en la segunda parte para un 7-0 humillante.

Peor debut no pudo imaginar, Baldivieso y sus muchachos sufrieron en los 90 minutos de juego, la diferencia entre ambos combinados era notoria, la Albiceleste jugó ordenada, mientras que la Verde tuvo innumerables errores que por poco hicieron mayor la catástrofe.

Ni siquiera pasaron cinco minutos y Bolivia tenía el marcador en contra, un pase de Agüero a Lavezzi hizo que éste anote ante la floja marca de la defensa boliviana (5’).

Los errores siguieron y Pereyra hizo una buena pared con Agüero quien no perdonó para aumentar la cuenta a dos en el minuto 34. Bolivia pagaba cara sus faltas.

Pero lo peor llegó después, Veizaga se durmió en la marca y dejó que Agüero se lleve el balón, éste pasó a Lavezzi quien sólo tuvo que empujar la pelota ante la salida desesperada de Vaca que poco pudo hacer. 3-0 (41’).

Bolivia se limitó a atacar mediante tiros libres, Smedberg-Dalence fue la principal carta para buscar el descuento, en unas mandó centros que fueron despejados por la defensa argentina, y en otras sus remates fueron directos al arco de Romero quien no tuvo complicaciones.

Argentina siguió con hambre de goles, no se conformó con sólo tres. Lavezzi se fue por la derecha, aprovechó que Zenteno estaba mal ubicado y mandó un pase a Agüero quien marcó el 4-0 (59’).

Martino hizo ingresar a Messi, éste quiso cobrarse revancha de los bolivianos y de cabeza, tras ganarle en el salto a Raldes, marcó el quinto (67’), el primer gol de la Pulga a Bolivia en la historia. Pero la pulga no se quedó ahí, hizo el sexto tras pase de Agüero y ante la floja marca de Veizaga y Zenteno (75’).

Ángel Correa se encargó de anotar el séptimo gol a los 84’ con lo que cerró la humillación a una paupérrima Bolivia.

Argentina: 7

Sergio Romero, Gonzalo Rodríguez, Emanuel Más, Milton Casco, Ramiro Funes Mori, Nicolás Gaitán, (Lionel Messi, 64'), Roberto Pereyra, Erik Lamela (E. Banega, 77'), Matías Kranevitter, Sergio Agüero (Carlos Tevez, 80'), Ezequiel Lavezzi (A. Correa, 81'). DT: Sergio Martino

Goles: Agüero (34' y 59'), Lavezzi (6' y 41'), Messi (67' y 75') y Correa (84')

Bolivia: 0

Daniel Vaca, Miguel Hurtado, Ronald Raldes, Edward Zenteno, Rudy Cardozo (Abraham Cabrera, 46'), 15. Danny Bejarano (Damián Lizio, 46'), Wálter Veizaga, Martín Smedberg (18. R. Ramallo, 64'), Alejandro Meleán (A. Chumacero, 46'), Juan Carlos Arce. (R. Eguino, 46'), Marcelo Martins (G. Álvarez, 86'). DT: Julio Baldivieso

Goles: No hubo

Árbitro: Ricardo Salazar (EEUU)
Asistentes: Adam Garner y Peter Manikowski (EEUU)
Expulsados: No hubo
Público: 23 mil personas
Estadio BBVA Compass (Houston) 


© Escrito por Víctor Quispe Perca el sábado 05/09/2015 y publicado por el Diario La Prensa de La Paz, Bolivia.










Shakespeare en un año electoral… @dealgunamanera...

Ser o no ser…


En tiempos electorales, cuando se agita el gallinero, es inevitable que la realidad te haga volver a Shakespeare. Sin tablet, sin Google, sin luz eléctrica, sin Freud, a mano, papel y pluma, don William escribió los mejores versos que nos cantan lo que somos. Difíciles de silbar y de decir para quien no sea Alfredo Alcón, pero armónicos, bellos, iluminados, certeros, románticos, desgarrados, sabios y placenteros de leer y releer.

¡Vaya asociación libre!

Una mañana escuchando declaraciones de Aníbal Fernández, recordé el monólogo de Macbeth, el que dice cuando se entera que la cruel y desalmada Lady se suicidó, cansada de lavar guita en el reino, pero preocupada porque la mancha de sangre de los crímenes contra los pobres no salen y los muertos en Once, en inundaciones, desnutridos, siguen ahí, veinte años después de menemismo y kirchnerismo. Y lo vi a Shakespeare de movilero, preguntándole a Aníbal: “¿Usted es sólo una sombra pasajera/un pobre comediante que se agita/haciendo su papel sobre la escena/y no vuelve a salir...” Y escuché cuando Aníbal, contestaba: “No sé, yo duermo y encubro en un baúl”.

¡A la noche me pasó otra vez! Pasaba canales en la tele para no pensar y de pronto el que estaba sentado ahí, vestido como si fuera el cacique Félix Díaz de la comunidad Qom, era una versión de don William que le contestaba a un tal Brancatelli: “... Para ustedes entonces la vida es esto que hacen al fin, un cuento contado por un idiota, lleno de ruido y de furia, que no tiene ningún sentido”. Atrás sonaba en la guitarra la cordura de un tal Cordera y me escuché decir: ¡Debatime ésta, Brancatelli!


Esa madrugada cerré el gastadito ejemplar del Hamlet editado por Losada que lleva en la tapa la imagen de Alcón recitando, y me despedí del día con un suspiro: “Ser o no ser, hasta mañana”.

Cuando el alma se me estaba despegando del cuerpo, alcancé a oír al propio don William que susurraba: “Olvidate, man, el relato es falso y el resto es silencio” como para que descanse tranquilo. En cambio, logró sobresaltarme. Me incorporé como si hubiera comprendido algo que estaba ahí, que era evidente, pero se me esfumaba como un fantasma amigo, vestido con una sábana deshilachada: “¿Dormir o soñar?, decía el loco Hamlet desde la boca recortada en la tela, “¿ésa es la cuestión?” ¡No! Grité. ¡Ni dejarse dormir por éstos, ni soñar otra vez con el país de nunca jamás!


Por los ojos recortados en la sábana, la mirada de Hamlet sugería lo que callaba:

“¡Uy, este pibe está más loco que yo!”. Traté de explicarle: es un dilema falso, flaco, vos en el monólogo me decís que uno tiene que decidir entre aceptar que las cosas son así, que no van a cambiar o, –cuando ya no te la bancás y te duele demasiado– tratás de zafar de alguna manera de esta jodida realidad.

Es decir, te rajás del país, apostás al Quini, te volvés loco, esperás enganchar un buen laburo o te conseguís un subsidio, un plan, te das con algo y salís de caño.

Y no, no, viejo príncipe, tiene que haber otra. Vos mismo le dijiste a Horacio, acordate, “hay más cosas entre el cielo y la tierra que las que puede soñar tu filosofía”.

Me pareció que la sábana inclinó el copete para un costado como si me hiciera saber: “Bueno, también escribí algunas boludeces”. Por mi parte, insistí: no puede ser que pasen los años y le coman la vida a millones de personas con promesas que nunca se cumplen y le dejás el protagonismo de la historia siempre a los mismos, a los que viven del Estado y después te la cuentan como si hubieran hecho algo heroico, estamos perdidos.

La sábana se convulsionó, “¡palabras, palabras, todo palabras!”. Sí, le dije, ésa la cantaba Mina, “parole, parole, parole”. La entendí como una señal que la sábana quería darme y me fui durmiendo con la letra: “No cambias más, no cambias más, no cambias más... Te prometo que todo va a ser diferente... No cambias más, yo tengo pruebas... parole, parole, parole... Siempre me atormentarás con promesas...”

© Escrito por Carlos Ares el sábado 05/09/2015 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



viernes, 4 de septiembre de 2015

Aviones de combate Mirage: Fin de su ciclo operativo... @dealgunamanera...

Con 43 años de servicio, los míticos aviones Mirage se despiden del aire…

Considerados en una época como la "columna vertebral de la defensa aérea" del país. Foto: DyN

Cuentan con más de 131 mil horas de vuelo, participaron en la batalla durante la guerra de Malvinas, en 1982.

Los aviones de combate Mirage iniciaron el jueves una maniobra militar en la provincia de Santa Cruz, lo que será su última participación operativa, ya que a fin de año serán dados de baja luego de 43 años de servicio. Estas aeronaves realizaron más de 131 mil horas de vuelo y tuvieron participación en la batalla aérea durante la guerra de Malvinas, en 1982.

Considerados en una época como la "columna vertebral de la defensa aérea" del país, estos cazabombarderos e interceptores no serán reemplazados este año por alguna otra aeronave similar, a pesar de que estaba previsto en el presupuesto 2014 elaborado por el Gobierno.

La Fuerza Aérea informó que "en cumplimiento del plan anual de ejercitaciones", comenzó hoy el ejercicio "ARIETE", que se desarrollará hasta el viernes 11 de septiembre en la Base Aérea Militar de Río Gallegos, según informa la agencia Dyn.

"El último operativo de los aviones Mirage", destacó la aeronáutica militar a través de un comunicado en referencia a las ejercitaciones en el sur del país.

Se explicó que esta operación es "de vital importancia para adiestrar, alistar y mantener a las tripulaciones de los diversos sistemas intervinientes, en la concreción de maniobras aéreas bajo condiciones meteorológicas extremas y sobre terrenos que presentan particulares características, típicos de la zona austral".


Los Mirage, que tienen su base en la VI Brigada Aérea de Tandil, realizarán misiones de adiestramiento en tácticas de combate aire-aire y de navegaciones tácticas aire-suelo, agregó el parte de prensa. El ejercicio "ARIETE", adquiere un "cariz trascendente e histórico para la Fuerza Aérea, ya que significa la despedida operativa del sistema Mirage, tras prestar 43 años de servicio ininterrumpido en la Argentina", recalcó la institución castrense.

Historia.

La Fuerza Aérea Argentina adquirió estos aviones de combate en la década del 70' y en la última publicación del libro Blanco de la Defensa, elaborado y publicado durante la gestión de Nilda Garré en la cartera castrense, en la VI Base Aérea de Tandil, hay una dotación de 14 Mirage 5 y 11 Mirage III.

La mayoría de estas 25 aeronaves en los últimos años no estuvieron en condiciones de operar, por lo cual se decidió su desprogramación como sistema de arma.

Llegando alcanzar una velocidad máxima de 2.217 kilómetros por hora (Mach 2.1) a 12.200 metros de altura, estos Mirage no serán suplantados por alguna avión con similares características de combate para a defensa aérea nacional.

En el presupuesto 2014 que había elevado al Parlamento en septiembre de 2013 el entonces jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, se mencionaba en el folio 115 que "en el ámbito de la Fuerza Aérea se preveía la incorporación del Mirage 1, que reemplaza al sistema Mirage III, en proceso de desprogramación" Esos Mirage 1 pertenecían al Ejército del Aire de España de caza y ataque de tercera generación, diseñado y construido por la empresa francesa Dassault Aviation.

Sin embargo, no se concretó la adquisición de esos aviones y luego trascendió que había intereses por los aviones multipropósito israelí Kfir Block 60, el caza polivalente chino J-10 y el jet de combate Gripen de la empresa sueca Saab.

A pesar de todas estas posibilidades, por ahora no habrá naves que reemplacen la potencia de combate de los Mirage, y para no dejar inoperable la VI Brigada Aérea de Tandil, trasladarán allí algunos aviones Pampa, cuyo destino original es Mendoza. 


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© Publicado el jueves 03/09/2015 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


jueves, 3 de septiembre de 2015

Vuelos de la muerte: Las hormiguitas del capitán Hess… @dealgunamanera...

Las hormiguitas del capitán Hess…

El avión Ushuaia, usado para arrojar prisioneros al mar, exhibido en el museo de la base aeronaval Comandante Espora, en Bahía Blanca.

A cuatro años de concluida la investigación sobre el relato del capitán Emir Sisul Hess como piloto de los vuelos de la muerte, la justicia nunca lo citó a declarar. Una demora que muestra la escasa voluntad judicial en avanzar con esas causas.

Son centenares, tal vez miles. Miembros de las tres Fuerzas Armadas, de fuerzas de seguridad y también civiles. Los más jóvenes tienen poco más de cincuenta años. Los mayores rondan los noventa. Un puñado está en prisión. Algunos enloquecieron. Varios trabajan en aerolíneas, nacionales y extranjeras. 
La mayoría disfruta de hijos y nietos, va a misa y recorre las calles como cualquier vecino. Sólo ellos y sus íntimos conocen el secreto que los degrada: arrojaron a personas vivas, drogadas, indefensas, desnudas, desde aviones en vuelo hacia el vacío. Treinta años después, los vuelos de la muerte aún rinden frutos. Existen casos probados a partir del hallazgo, en costas bonaerenses y rioplatenses, de cadáveres de personas que pasaron por Campo de Mayo, ESMA y Olimpo. Existen miles de desaparecidos a los que se privó hasta de una tumba sin nombre. Existen confesiones públicas y privadas que coinciden en la rotación del personal para sellar el pacto de silencio. No existe, sin embargo, ninguna estrategia judicial para identificar a pilotos y tripulantes.

Si la clandestinidad, la destrucción de pruebas y el silencio impiden poder investigar a fondo cada eslabón del Estado terrorista, identificar a quienes participaron en los vuelos tiene un escollo adicional: no hubo testigos en los aviones. Un sondeo entre querellantes, antropólogos y magistrados sugiere sin embargo que el fin no es utópico. Entre las pruebas disponibles tiene un valor central la confesional, la admisión ante terceros. ¿Alguien pudo no haber relatado la experiencia límite de arrojar a una persona al mar? ¿Morirán los confesores en la complicidad del silencio?
Página/12 publicó ayer la historia de dos aviones Electra en exposición, relatos sobre vuelos de los propios represores y la confesión de un suboficial naval que admitió su participación ante compañeros de trabajo. A cuatro años de concluida la instrucción sobre el relato del capitán de corbeta Emir Sisul Hess como piloto de vuelos de la muerte, la justicia no lo citó a declarar.
“Tipos muy pesados”
Nacido en Bahía Blanca en 1949 y miembro de la promoción 102 del comando naval, Emir Sisul Hess integró en 1976 y 1977 la Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, con asiento natural en la base aeronaval Comandante Espora pero mencionada por el cabo Raúl Vilariño, que ya en 1984 denunció los vuelos, como una cobertura de represores de la ESMA.
Hess era aviador naval y paracaidista. Tenía el grado de teniente de corbeta. Sus jefes eran el capitán de corbeta Néstor Santiago Barrios y el teniente de navío Miguel Angel Robles. En 1978 pasó a la Escuadrilla Aeronaval de Propósitos Generales, bajo el mando del capitán de corbeta Enrique Carlos Isola y del teniente de navío Ernesto Proni Leston.
En 1984, citado a declarar por el contralmirante Horacio Mayorga en un sumario para desacreditar al cabo que describió la vida interna de la ESMA, dijo desconocer a Vilariño. Pasó a retiro en 1991 como capitán de corbeta, con 41 años, e incursionó en el rubro turístico como gerente del complejo Lago Espejo Resort S.A. en Villa La Angostura. En aquel paraíso y en pleno menemato, cuando la impunidad parecía irreversible, tuvo lugar su confesión, el primer relato de un piloto sobre los vuelos que llega a la justicia.
“Contaba en tono burlón cómo las personas pedían por favor y lloraban”, declaró José Luis Bernabei, que trabajaba en el complejo frente al lago. “Dijo que las arrojaban al Río de la Plata y que él era piloto. Nombró como compañero a (Ricardo Miguel) Cavallo. Decía que los vuelos salían de Palomar o Morón, que les ponían una bolsa en la cabeza, los subían a aviones y los trasladaban hasta que eran arrojados”, contó ante el juzgado de Juan José Galeano.
La base de Palomar es la misma que Rodolfo Walsh vinculó a los vuelos en su Carta Abierta a la Junta Militar. “Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto”, calculó en marzo de 1977. Detalló el hallazgo de cuerpos mutilados en costas uruguayas y acusó a las tres Fuerzas Armadas “de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera Brigada Aérea”. Identificó como jefe al brigadier Hipólito Mariani, condenado a 25 años de prisión por crímenes en Mansión Seré pero libre hasta que la Corte Suprema de Justicia confirme la sentencia, y apuntó que “usaron transportes Fokker F-27”.
El testimonio ante la Conadep de Arnoldo Bondar, empleado civil en Palomar, sugiere que no sólo los cautivos de la Armada despegaban desde la base de la Fuerza Aérea. “En reiteradas oportunidades vi llegar camiones de la policía de la provincia cargados de jóvenes de ambos sexos que eran embarcados en aviones a motor de dos hélices, generalmente de la Armada. Desconozco el destino. Esta operación se realizaba al costado de la pista principal y casi siempre llegaban antes algunos patrulleros para montar guardia alrededor del avión”, declaró.
Cuando Galeano comenzó a investigar a Hess descubrió que no sólo Bernabei había escuchado la confesión. Un empleado sacó el tema después de leer el Nunca Más y Hess reiteró el relato. “Hablaba con bronca y resentimiento. Tenía necesidad de hablar, era un tipo íntimamente trastornado”, recordó.
–¿No sentía lástima por esa gente? –le preguntaron.
–No, no sufrían. Los llevaban dopados y los tiraban al río –respondió Hess en tercera persona–. Eran tipos muy pesados. Esos boludos no sabían a dónde iban a parar: al Tigre, al Riachuelo o al río Paraná. Iban cayendo como hormiguitas.
En 2002, cuando trascendió en la prensa que la Cámara Federal porteña había ordenado investigar el caso, el almirante Horacio Zaratiegui afirmó en una carta de lectores de La Nación que en la Armada no existió nunca un oficial Hess. “No sé si existe pero no importa. Sería un capitán de corbeta retirado, aviador naval”, lo invocó con precisión el fallecido Florencio Varela en una conferencia ante militares. El abogado, que según el condenado general Santiago Riveros tardó seis años en comprender la lógica castrense, citó un escrito de Hess en el que renegaba por la impopularidad de su oficio. “Un militar se capacita para matar o morir, por supuesto que en salvaguarda de valores superiores. Perder de vista nuestra razón de ser nos puede convertir en cirujanos con aversión a la sangre”, lo citó Varela.
La causa por la confesión de Hess, que tiene 60 años, se inició en marzo de 2002. Se sentía perseguido por el juez Baltasar Garzón desde fines de la década del ‘90, cuando el español pidió las primeras detenciones. Su temor aumentó en 2004, cuando la policía comenzó a rondar su casa en El Atardecer 4491, barrio Las Colinas, a cuatro kilómetros de Bariloche. “Para la policía o la Justicia no estoy escondido. Lo que quiero evitar son periodistas y gente relacionada con los derechos humanos”, le explicó a un amigo en un llamado que interceptó la justicia.
En septiembre de 2005 el juez federal Julián Ercolini, que reemplazó a Galeano tras su renuncia, declinó la competencia y le envió la investigación a su par Sergio Torres, a cargo de la megacausa ESMA, donde ya existía la causa 3227/02 sobre los vuelos, una recopilación de listados y legajos de marinos sin procesar. Allí, en un despacho de Comodoro Py, descansa desde hace cuatro años.
© Escrito por Diego Martínez el lunes 07/09/2009 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.