Triunfo clave
ante Unión en el Ducó…
Huracán venció esta noche a Unión de Santa Fé
por uno a cero en el estadio Tomás Adolfo Ducó por la vigésimo octava fecha del
Campeonato de Primera División.
© Publicado el sábado 17/06/2017 por el Departamento de
Prensa del Club Atlético Huracán de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sólo ciento ochenta minutos nos separan del
final del campeonato. Ese final agónico y emocionante pero que trae mucho
sufrimiento, al igual que el epílogo del encuentro de hoy.
Esos últimos sesenta segundos parecieron durar
los ciento ochenta minutos que le restan jugar al Globo no sólo por la lentitud y el dramatismo que adquirian con golpe
de la aguja en el reloj sino también por la adrenalina con la que se vivieron.
Los brazos en alto de Juan Manuel Pompei generaron el desahogo.
Ese que teníamos
atado en la garganta desde Bahía, ese que se agudizó con la victoria previa de
Temperley -quedó sin efecto- y ese que parecía ahorcarnos con el cabezazo de
Rodrigo Erramuspe que pasaba apenas al lado del palo en la jugada final.
Un análisis técnico y táctico del partido no
tendría lugar entre tantos sentimientos. Huracán no jugó su mejor partido pero
si logró algo que a veces se hace esquivo a pesar de los merecimientos: ganó.
Desde el golazo de Alejandro Romero Gamarra
hasta las atajadas de Marcos Díaz, los de Parque Patricios consumaron un
triunfo clave, necesario y vital de cara a los próximos choques decisivos.
Huracán 1
Marcos Díaz; Carlos Araujo, Martín Nervo,
Federico Mancinelli, Lucas Villalba; Alejandro Romero Gamarra, Mauro Bogado,
Matías Fritzler, Ignacio Pussetto; Norberto Briasco y Diego Mendoza. DT: Juan
Manuel Asconzábal.
Unión 0
Matías Fidel Castro; Brian Blasi, Rodrigo
Erramuspe, Leonardo Sánchez, Nahuel Zárate; Diego Villar, Nelson Acevedo,
Santiago Magallán, Guido Vadalá; Lucas Gamba y Franco Soldano. DT: Pablo
Marini.
Gol en el primer tiempo: 29m Romero Gamarra
(H).
Cambio en el primer tiempo: 42m Mauro Cejas por
Vadalá (U).
Cambios en el segundo tiempo: Al inicio, Mauro
Pittón por Sánchez (U); 12m Lucio Compagnucci por Bogado (H); 20m Daniel
Montenegro por Mendoza (H); 34m Federico Anselmo por Magallán (U) y 42m Mariano
González por Montenegro (H).
Estadio: Tomás Adolfo Ducó.
Árbitro: Juan Pablo Pompei.
Fotos: Daniel Mendez y Maximiliano Day
Hay momentos en lo que no importa nada. La opinión del
hincha Huracán 1 vs. Unión 0.
Hay momentos en lo que no importa nada. Solo
interesa el instante que se está viviendo y donde no se encuentran diferencias
entre los seres humanos, pendientes de lo que se está sintiendo.
© Escrito por Carlos Biondi el viernes 16/06/2017 y publicado por Patria Quemera de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Huracán no tenía opción, era ganar o irse al Nacional
B. Y estuvo a punto de irse. Pero tenía que ganar y ganó. No
puedo hablar de futbol donde las sensaciones cubrían a todo el estadio.
No se puede juzgar futbolísticamente a un equipo, salvo a Marcos Díaz, donde
reconozco no haber visto nada. Por momentos no veía nada…
El primer tiempo el pequeño recuerdo que tengo son los
primeros minutos de Huracán yendo con todo al frente hasta que medio que se
emparejó. Los nervios nos taparon a todos. Hasta que el Kaku metió
el zapatazo. Grito grande, pero contenido, faltaba un montón.
Y vaya que faltaba, todo el segundo tiempo! Nervios,
desesperación, que se gritaba, que no, que se podía respirar a veces y otras
no. Este segmento de 50 minutos no voy a poder olvidarlo fácilmente,
quedará en mi memoria. Vi caras deformadas mostrando un estado de no sé
cómo definirlo. Gente gritaba desaforadamente aun cuando la pelota estaba
fuera del campo. Otros duros, sin movimientos en instancias cumbre cuando
Unión parecía que nos embocaba. Admito que en la última jugada del
partido me vi jugando el Nacional.
La gente de Huracán es tan apasionada porque la vida de
Huracán es así.
Creo que con esta victoria solo resta un punto más y
listo. Pero esta victoria valió 10, 12 puntos. Valió una
categoría. Los huevos (no hay otra forma de expresarlo, perdón) que
pusieron nuestros jugadores, cuando los nervios no los dejaban mover los pies,
fueron descomunales. Todos los que alguna vez jugamos un partido de futbol
donde se jugaba algo muy muy importante, sabemos que la pelota pesa 20 kilos,
que los botines no van para el lado donde uno les ordena, donde la
desesperación se apodera de todo, donde lo único que sirve es ganar. Pero
la figura de Marcos Díaz emerge del despelote y se convierte en héroe, como
tantas otras veces. Partido para el recuerdo.
Ahora vamos a Lanús y terminamos en el Duco con
Belgrano de Córdoba. Los jugadores siguen siendo el Barcelona y los
dirigentes Putin, o Trump, o el que se les ocurra. Después veremos.
Pero de este partido no me voy a poder olvidar las cosas que sentimos los
Quemeros.
¡Abrazo Quemero!
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