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domingo, 8 de enero de 2023

Obsesiones… @dealgunamaneraok...

 Obsesiones…

Manotearla al córner. El “Dibu” Lorenzetti. Dibujo: Pablo Temes.

Alberto F sigue la agenda que quiere imponer Cristina.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 07/01/2023 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Las obsesiones de Cristina Fernández de Kirchner son las que hoy en día marcan la agenda del Gobierno. Así como en sus dos mandatos como presidenta, la hoy vicepresidenta tuvo en el centro de sus caprichos a los medios en general y a Clarín en particular, ese lugar es ocupado hoy por la Justicia. La condena contra CFK en la causa Vialidad y el fallo de la Corte Suprema ordenando la devolución a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de los fondos suprimidos en septiembre de 2020 –y otorgados a Axel Kicillof– fueron los disparadores de esta ofensiva alocada del Gobierno contra la Corte.

Lo lamentable, pero no sorprendente, es que el presidente Alberto Fernández se ha sumado a esa iniciativa disparatada y nociva para su propia administración. Es difícil entender el pensamiento del primer mandatario que sabe que, por más vueltas que le busque, el juicio político contra los cuatro ministros de la Corte no prosperará porque el oficialismo no cuenta en el Congreso con los votos suficientes para hacerlo avanzar.

Tampoco es fácil de comprender que, a pesar del desprecio que CFK le profesa en público y en privado, intente seguir complaciéndola a costa de someter su propia persona al ridículo. “Sabemos que no tenemos los votos pero intentaremos destruir la imagen pública de los integrantes de la Corte. Lo que pretendemos es ensuciarlos a más no poder”, señala una voz kirchnerista con brutal sinceridad.

Todo es historia. Nada de esto es nuevo en la historia del peronismo. Durante su primera presidencia, el general Juan Domingo Perón ordenó enjuiciar a todos los integrantes de la Corte por haber convalidado los golpes militares de 1930 y 1943. La sentencia, dictada el 30 de abril de 1947, determinó la remoción de todos los ministros del cuerpo, con excepción del Dr. Juan Repetto, que renunció previo al juicio. Lo curioso es que el mismo Perón había participado de esos dos golpes de Estado.

Se complica el ‘vamos viendo’

En 1990, el entonces presidente Carlos Menem decretó el aumento del número de miembros de la Corte de cinco a nueve, nombrando para los nuevos cargos a jueces adictos. El 14 de junio de 2003, el ex presidente Néstor Kirchner anunció la sustanciación del juicio político a cinco de los nueve miembros del máximo tribunal. Julio Nazareno, Guillermo López, Adolfo Vázquez, Eduardo Moliné O´Connor y Antonio Boggiano. Los tres primeros renunciaron y los dos restantes fueron finalmente destituidos.

En 2006, la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner propuso la reducción del número de integrantes del Consejo de la Magistratura, que pasó de tener 20 a 13 miembros. Ello significó un mayor peso en el cuerpo de los representantes políticos que, en virtud de la mayoría que tenía le dio al kirchnerismo un enorme poder para designar jueces afines y remover a quienes no lo eran.

En 2021 –quince años después de sancionada– esa reforma fue finalmente declarada inconstitucional por la Corte Suprema. En 2013, CFK impulsó la llamada “Democratización de la Justicia”, proyecto que fue aprobado por el Congreso y declarado inconstitucional por la Corte.

Y para completar este resumen de los intentos del kirchnerismo de anular la independencia judicial y obtener la suma del poder público, hay que recordar el desplazamiento del procurador general de Santa Cruz, Eduardo Sosa –hombre de gran valor y apego a la ley en tierra kirchnerista–, que había comenzado a investigar los actos de corrupción cometidos por Néstor Kirchner cuando se desempeñó como gobernador. Alberto Fernández había prometido oponerse a estas maniobras claramente anti republicanas del kirchnerismo. Hoy vemos que eso era mentira. Una más para su colección.

Sin sorpresas 

Pedidos e internas. Desde el oficialismo se esfuerzan por demostrar que el pedido de juicio político a la Corte será ordenado y con total apego a las normas. Fue un pedido directo de Alberto F, según confesó públicamente Germán Martínez, el jefe de bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados: “Nos pidió ser muy argumentativos, fundamentar todo, darle mucha seriedad institucional al proceso y tratar de que sea un espacio con muchos argumentos y pocas chicanas”.

Tampoco quieren ni pueden darle a la filtración ilegal de los chats que involucran al ministro de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, el lugar que les gustaría. Hay que cuidar las apariencias pero la intromisión de un poder sobre el otro, bien gracias.

Dentro de Juntos por el Cambio la defensa del ministro fue bastante tibia. Hay quienes creen dentro de la coalición opositora que el kirchnerismo continuará filtrando información a cuentagotas para perjudicarlos más cerca del desarrollo de la campaña.

Este ha sido un tema más para ahondar las diferencias que subyacen en el seno de la oposición. La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, criticó al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por no darle el respaldo suficiente a D’Alessandro y pidió que la justicia investigue si César Milani está detrás de la filtración ilegal de los chats que involucran al ministro. Parte de la UCR también puso reparos.

Asoma una campaña difícil, larga y con los ciudadanos en un triste segundo plano.



  

lunes, 2 de enero de 2023

Reculando en chancletas… @dealgunamanera...

 Reculando en chancletas…

El fallo de la Corte sobre la Coparticipación. Dibujo: Pablo Temes   

El desconocimiento del fallo de la Corte sobre la coparticipación desató un vendaval.

© Escrito por Nelson Castro el viernes 30/12/2022 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina. 

El presidente Alberto Fernández y profesor de derecho –como le gusta enfatizar– fue protagonista, una vez más, de llevar a la Argentina al abismo, empujado por una parte significativa del Frente de Todos contra Todos, más un grupo de 14 gobernadores peronistas.

El fallo de la Corte Suprema que ordenó la restitución del porcentaje de coparticipación que el gobierno nacional le quitó a la Ciudad de Buenos Aires en tiempos de pandemia, dinamitó los nervios de la vicepresidenta en funciones y sus laderos. 

La labilidad del Presidente no deja de sorprender, a pesar de que ya ha hecho historia por su incapacidad para resistir cualquier archivo. Esta vez arremetió con furia contra el máximo tribunal, aseguró en línea con la mayoría de los gobernadores peronistas que “el fallo es de imposible  cumplimiento” y llegó a decir más adelante: “La Corte no me puede decir que le pague a la ciudad”. Resultado: en menos de siete días tuvo que volver sobre sus pasos. El gobierno nacional, luego de tamaño circo que dejó al país en medio de un conflicto de poderes, pagará a la ciudad con bonos. El pequeño elenco de moderados invitó a pensar al profesor de derecho para que entienda que estaba incurriendo en un alzamiento contra otro poder del Estado. La secretaria Legal y Técnica de la Presidencia, Vilma Ibarra, fue una de las personas de confianza del Presidente que lo hicieron reflexionar. Pero hay otros motivos. La lluvia de denuncias penales fue torrencial, y el tembladeral en la economía era una amenaza de ejecución casi automática.

El procurador General porteño, Gabriel Astarloa, denunció el martes penalmente al presidente Alberto Fernández por el delito de desobediencia del fallo de la Corte. La Ciudad no fue la única. La presentación en tribunales se sumó a otras similares radicadas por legisladores de la oposición. El PRO, la Coalición Cívica de Elisa Carrió y otros legisladores de JxC, como Graciela Ocaña, avanzaron con diferentes denuncias penales que se diferenciaban solo por su dureza y alcance. Alberto Fernández, Juan Luis Manzur –jefe de Gabinete de Ministros–, Sergio Massa –ministro de Economía–, Raúl Rigo –secretario de Hacienda–, Wado de Pedro –ministro del Interior– y Silvina  Batakis –presidenta del Banco de la Nación– entre otros, por la presunta comisión de los delitos de sedición, incumplimiento de los deberes de funcionario público y desobediencia.  

Se complica el “vamos viendo” 

El ministro de Economía, Sergio Massa, además de ser uno de los primeros en intentar despegarse de la maniobra, lógicamente puso el grito en el cielo. “Sergio no puede creer que hayamos hecho todo lo posible para llegar a fin de año con relativa tranquilidad y ahora dinamiten todo con esta jugada infantil”, repetían en su entorno. De hecho, hay quienes afirman que fue suya la idea de pagar con bonos a la ciudad para salir del planteo de desobediencia que no hizo otra cosa que recalentar la economía por la falta de seguridad jurídica que implicaba la postura inicial. El mejor ejemplo fue la disparada del dólar, que alcanzó el récord de 356 pesos a mitad de la semana. 

Cuentan fuentes del Palacio de Hacienda que el secretario Raúl Rigo estaba furioso y muy preocupado. Lo mismo dejaron trascender desde el Banco Nación. Silvina Batakis había logrado olvidar por un momento su triste y fugaz paso por el Ministerio de Economía y ahora debía afrontar una serie de denuncias que la ponían contra las cuerdas. En un gobierno que se maneja con reacciones viscerales e impulsos repetitivos que no pasan por el tamiz del lóbulo frontal de sus principales funcionarios, todos están en peligro. 

El desacato hacia la Corte hubiera dejado a la Argentina al mismo nivel que Venezuela. Desde la Casa Blanca no tardaron en advertir la situación. En medio de los planes y el delicado equilibrio con el Fondo Monetario Internacional, esto no le convenía a nadie, y los representantes de los Estado Unidos en el país se lo hicieron saber a los funcionarios argentinos. Todo se volvería mucho más complicado. 

Del otro lado de la grieta, Horacio Rodríguez Larreta buscó capitalizar el papelón a su favor. Se endureció y se mostró renuente a aceptar el pago de la deuda por coparticipación en bonos y aprovechó para sumar a su gobierno y a su equipo presidencial nuevos y viejos nombres. El más destacado es el expresidente del Banco Central Martín Redrado.

Sin embargo, los desencuentros siguen a la orden del día en No tan Juntos por el Cambio. Es increíble que la coalición opositora con más chances de hacerse cargo de un próximo gobierno no logre refinar sus modales en la discusión pública y ponerse a tono con lo que pide la sociedad: ejecutividad, seriedad, pero, sobre todo, unidad, paz y concordia de cara a 2023. 



    

domingo, 27 de noviembre de 2022

Se complica el ‘vamos viendo’… @dealgunamaneraok...

 Se complica el ‘vamos viendo’… 


Preparando los cambios. Horacio Rodríguez Larreta. Dibujo: Pablo Temes

Mientras la política baila el minué de las candidaturas, los empresarios temen un diciembre difícil por la crisis.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 26/11/2022 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.


El plan “vv” (vamos viendo) de Sergio Massa va encontrando dificultades a cada paso que la Copa del Mundo no tapa. Fue lo que evidenció la escalada del dólar de los últimos días. Los mil millones de dólares que el Banco Central puso en la calle para intentar frenarla fueron en vano, reduciendo aún más sus lánguidas reservas. El jueves por la mañana nadie se animaba a soltar al blue. Las operaciones que se mueven en ese mercado clandestino estuvieron frenadas casi hasta el mediodía por falta de precio.

Un hombre que conoce ese mundillo lo describió así: “No es cierto que no hay precio. Siempre hay un número, el problema es que nadie tiene los huevos para ponerlo primero”. La confesión refleja el estado de ánimo de un mercado, muchas veces considerado marginal, pero influyente: nadie quiere perder por temor a una disparada. El dólar soja se iba a anunciar entre el lunes y el martes de la semana que viene. Pero claro, el ministro propone y el blue dispone. Por eso, el viernes –de apuro– Massa debió convocar a los representantes de las entidades agrarias para anunciarles el nuevo dólar soja, cuyo valor será de 233 pesos. En la primera ocasión, en septiembre pasado, se liquidaron 8 mil millones de dólares. Lo que se espera ahora es más modesto: 3 mil millones.

Larreta no oculta su enojo con Jorge Macri, quien teje alianzas con Patricia Bullrich.

La falta de dólares está golpeando de manera creciente a un extenso número de sectores productivos. Por las redes circulan videos en los cuales los propietarios de pequeñas y medianas empresas se quejan por la falta de dólares para importar insumos esenciales para la elaboración de sus productos. Lo mismo ocurre con quienes importan servicios digitales, la canilla se sigue cerrando para todos.  

En el discurso que Massa dio ante lo más granado del empresariado en el Consejo Interamericano de Comercio y Producción reconoció que, si no logra controlar la inflación, el Frente de Todos contra Todos habrá de perder las elecciones en 2023. Dijo también otras cosas que motivaron el aplauso de la nutrida concurrencia. Por lo bajo, fueron muchos los que hicieron saber que al ministro no le habían creído nada. “Ojo que si se baja Massa, viene Fernanda Vallejos”, era una frase que se hizo circular entre algunos de los presentes. Las malas lenguas aseguran –y reaseguran– que esa frase fue lanzada al ruedo desde el entorno del ministro. “Se non è vero, è ben trovato”.
 

La economía no es la única preocupación que perturba el atribulado espíritu de 
Cristina Fernández de Kirchner. Su delicadísima situación judicial la enfrenta a un futuro incierto. El próximo martes el Tribunal Federal Oral Nº2 escuchará las últimas palabras de los acusados para luego proceder a anunciar la fecha del veredicto. Quienes transitan por los pasillos de los tribunales de Comodoro Py al 2000, dan como opción más probable, la de un fallo condenatorio de la expresidenta en funciones. De serlo así, el impacto será enorme y con repercusión internacional. Eso es lo que la atormenta. Por su parte a Sergio Massa le preocupa la reacción que pueda montar la militancia en la calle. En un escenario de tensión social se pueden colar toda clase de reclamos. En el kirchnerismo duro no se van a quedar de brazos cruzados ante esa posibilidad y echarán mano a la estrategia de la supuesta persecución de su jefa. Vale recordar que en la Argentina no hay Ley de Ficha Limpia, motivo por el cual CFK aún condenada, puede presentarse a competir en las próximas elecciones aunque desde sus filas agiten la idea contraria. Una estrategia burda y de patas cortas para agigantar su figura de la mano del operativo clamor. 

Puertas adentro ella insiste en posicionar a Axel Kicillof, seguido de cerca por el ministro del Interior Wado de Pedro. Máximo Kirchner mira con desconfianza desde el paravalanchas, pero sabe que si no queda otra opción su madre será candidata. Hay quienes desde ambas coaliciones empujan la contienda con el ex presidente Mauricio Macri. Para ser justos, hay que decir que las dos figuras sienten el deseo casi enfermizo de enfrentarse cara a cara para dirimir su poder. 

Dentro de No Tan Juntos por el Cambio, las aguas vuelven a agitarse. Hay un cambio de formas y de estilo; sin amenazas y con buenos modales, pero la bronca existe. Para algunos el olor a traición es innegable. Es que 
Horacio Rodríguez Larreta ya no oculta su enojo con “el primo Jorge”, a quien no hace mucho tiempo nombró como ministro de Gobierno de la Ciudad. La relación comenzó a deteriorarse cuando Jorge Macri aceptó tejer alianzas con la presidenta del PRO Patricia Bullrich, rival directa de Larreta en la interna del equipo amarillo. Como se ve en todos lados se cuecen habas. 

La pregunta del círculo rojo, sin embargo, no pasa por la política y el minué de las candidaturas. Los empresarios tienen un temor creciente a que las reservas del BCRA no lleguen al mes de marzo. Con un dólar en alza, la inflación incontenible y el malhumor social en ascenso por la escalada de precios y la inseguridad, sólo resta prenderle una vela a Lionel Messi para pasar diciembre sin sobresaltos. Aún así, nadie olvida que el peronismo es experto en manejar la crisis en la calle.



 

domingo, 16 de octubre de 2022

Chicanas sin ideas… @dealgunamanera...

 Chicanas sin ideas… 


Silencio stampa” La voz de su amo. Dibujo: Pablo Temes 

Esa es la cruda descripción del discurso del Presidente ante los empresarios. 

El discurso que el Presidente dio cuando caía la tarde del viernes en Mar del Plata en el cierre del Coloquio de IDEA fue malo. No es novedad. Todos los discursos de Alberto Fernández son malos. Los tibios aplausos que le brindaron los empresarios que lo escucharon fueron el reflejo del clima de entusiasmo declinante que generó la alocución del jefe de Estado. Las caras mustias que se veían entre los que escuchaban lo decían todo. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 15/10/2022 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

El azoro era inocultable. La falta de autocrítica hacia la gestión de su gobierno, así como también los mensajes con aires de chicanas destinados tanto a Mauricio Macri, como a Cristina Fernández de Kirchner fueron tan evidentes como burdos. “No escuchamos ni una sola propuesta de acción gubernamental concreta para solucionar alguno de los graves problemas que acechan a nuestro país”–se quejó un empresario. Otros prefirieron apuntar al Frankenstein político que arrastra desde su génesis el Frente de Todos: “No hay certidumbre ni horizonte posible cuando el Gobierno es oficialismo y oposición al mismo tiempo”.  Su descripción es tan gráfica como cierta y la ausencia de un plan económico, que fue sustituido por un parche detrás del otro, tiene que ver con esta situación anómala. 

Es por eso que el destino haya querido que el discurso del Presidente fuera en el mismo día que se conoció el índice de inflación de septiembre, es una de esas coincidencias que hace más patética la situación. El 6,2% del Indec encierra cifras que no son las que realmente afectan a vastos sectores de la ciudadanía y, en especial, a los más pobres. Esto es así porque el rubro alimentos está claramente por arriba del número de septiembre. Esto está generándole un delicado problema a Sergio Massa, porque las proyecciones para el mes de octubre auguran una situación todavía peor. 

La inflación en alimentos ya se hizo sentir en la primera semana del mes y se proyecta una suba del rubro en torno al 7,3%, mientras que el IPC ascendería más cerca del 6,5%. Los que conocen la interna del Frente de Todos contra Todos señalan –sin dudarlo– que Axel Kicillof está “taladrando la cabeza” de CFK con un tema recurrente: el congelamiento de precios. Es una medida totalmente superada y anacrónica. Nunca dio resultados en el tiempo por la total ausencia de eficacia de esta metodología. No funcionó con el peronismo en su esplendor. Así que menos va a funcionar con un gobierno en decadencia permanente. 

Massa ya hizo saber su desacuerdo con esta iniciativa. Sin embargo, el gobernador de la provincia de Buenos Aires no se da por vencido. Por lo tanto, está dispuesto a insistir, insistir e insistir. 

Paradójicamente desde Juntos por el Cambio se jactan de su responsabilidad institucional como adversarios políticos, pero la realidad desnuda su impericia. No hay santos republicanos, hay hombres y mujeres incapaces de ocultar sus propias miserias. 

Por lo pronto, para dar idea de que algo se va hacer al respecto, AF decidió convocar para el próximo lunes, a los empresarios de las firmas alimenticias a una reunión. No es casualidad que ese día sea 17 de octubre. “Es que el Presidente algo tenía que hacer para no quedar sin agenda en medio de tanto acto que hará el peronismo dividido en distintos lugares” –se sinceró un histórico analista del PJ. 

Otro síntoma de la decadencia en la que está sumida el oficialismo está marcado por la desmedida y burda ceremonia de asunción de las tres ministras elegidas por el Presidente para tapar los agujeros de su gabinete. Ya no importan los nombres. No revisten ningún peso político, todo lo contrario. “Parece que se creyeron lo del cargo. La fiestita de las recién llegadas no tiene nada que ver con lo que vivimos adentro. Hay desgano, enojo y la convicción de que se termina una etapa. Estamos de salida”, reconoció un hombre de contacto frecuente con la Rosada. 

Una cosa es segura: en el Gobierno no miden lo que resta de mandato como una unidad temporal de más o menos, año y monedas. Lo dividen en tres postas a las que hay que arribar como sea. 

El primer hito es el Mundial de Qatar. El segundo es pasar diciembre sin sobresaltos, algo que solo el peronismo podría lograr, y el tercero es el receso de verano donde gran parte de la gente intenta olvidar sus penurias. 

El resto es la bandera de largada de la campaña electoral. Los movimientos internos, dentro de ambas coaliciones anticipan un período sombrío de polarización y ataques personales muy lejos de las ideas y propuestas para salvar un país, que está cada vez más cerca del abismo.



   

sábado, 3 de septiembre de 2022

El Odio (I)... @dealgunamaneraok...

 El odio (I) 


Captura de pantalla..

“El odio se incrementa con un odio recíproco y, en cambio, puede ser destruido por el amor (...). Quien quiere vengar las ofensas mediante un odio recíproco vive, sin duda, miserablemente”, escribió sabiamente Baruj (Benedicto) Spinoza en el siglo XVII. 

© Escrito por Jorge Fontevecchia el viernes 02/09/2022 y Publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de las/os Argentinas/os.



El odio integra las pasiones tristes de Spinoza: el miedo, la cólera, el resentimiento y la envidia. La alegría surge del amor porque “el amor es una alegría acompañada de la idea de una causa exterior”, y la tristeza surge del odio porque “el odio es una tristeza acompañada de la idea de una causa exterior”.

Perturbación de las pasiones: ciegas erupciones del afecto que impiden la razón


En su Tratado teológico-político, Baruch Spinoza escribió: “La servidumbre humana reside en la impotencia de moderar y reprimir las pasiones”.  

 

Para él la opinión que no necesita ni busca verificarse  era la primera fuente de las malas pasiones, entre las que se inscribe el odio, generalmente  basado en la ignorancia de los seres humanos sobre las creencias de los otros seres humanos.

Escribió también Spinoza: “El alma se esfuerza, cuanto puede, en imaginar las cosas que aumentan o favorecen la potencia de obrar del cuerpo” (Proposición XII). Y viceversa (Proposición XIII): “Cuando el alma imagina aquellas cosas que disminuyen o reprimen la potencia de obrar del cuerpo, se esfuerza cuanto puede por acordarse de otras cosas que excluyan la existencia de aquellas”.  

“Si imaginamos algo que odiamos afectado de tristeza, nos alegraremos. Y si lo imaginamos afectado de alegría nos entristeceremos (...) nos esforzamos por afirmar sobre una cosa que odiamos aquello que imaginamos que le afecta con tristeza (...) vemos que fácilmente sucede que la persona se estima a sí misma y estima a la cosa amada más de lo justo. Y, al contrario, estima menos de lo justo la cosa que odia”. 

Finalmente, si imaginamos que alguien nos odia sin haberle dado motivos, lo odiaremos. La Proposición XXXIV afirma: “En tanto están dominados por afecciones que son pasiones, pueden ser contrarios los unos a los otros”.

La doctrina de las pasiones de Spinoza arranca en su disquisición de la idea griega sobre que el ser humano era pasivo (esclavo) frente a sus pasiones. Ellas impedían el correcto funcionamiento de la razón. Esto último es percibido todos los días cuando personas inteligentes interpretan el mismo hecho de forma tan contradictoria. Nuestra famosa grieta es un túnel de viento perfecto para ver esas imperfecciones del pensamiento de manera agigantada.

Sobre las vallas que hizo colocar Horacio Rodríguez Larreta hace una semana se opina tanto que hubieran salvado a Cristina de su agresor manteniéndolo a distancia como que fueron la chispa que encendió provocando la llegada persistente de manifestantes apoyando a la vicepresidenta.

Pero la terapia de las pasiones que propone Spinoza no apela a extirpar las pasiones, como sí lo hizo el estoicismo, sino que propone encauzarlas racionalmente para aprovechar su fuerza. También en el siglo XVII Locke se preocupaba por los efectos nocivos de las pasiones encontradas y  publica su notable Carta sobre la tolerancia

Para el diccionario de Oxford, “El odio es un sentimiento intenso de repulsa hacia alguien o algo que provoca el deseo de rechazar o eliminar aquello que genera disgusto; es decir, sentimiento de profunda antipatía, disgusto, aversión, enemistad o repulsión hacia una persona, cosa, o fenómeno”. Para Cicerón, las pasiones eran una perturbación, como ciegas erupciones de afecto. Pero para la filósofa Martha Nussbaum, las pasiones “son un elemento cognitivo: encarnan maneras de interpretar el mundo”.

Es en la modernidad cuando las pasiones ya no son vistas como “la locura de la racionalidad” (Kant) y el propio Spinoza buscando el tránsito de las pasiones tristes a las pasiones alegres (el amor). Las pasiones hacen que las personas difieran entre sí mientras que es la razón la que permite que se pongan de acuerdo. 

Hume sostenía que el impulso nunca surge de la razón y, al revés, Hegel creía que la razón usa las pasiones para realizar sus fines. La naturaleza humana es sobre lo que reflexiona la filosofía pero llegamos aquí a la cuestión irreductible sobre medios y fines. ¿Somos los medios responsables del discurso del odio que promueve  una retroalimentación de la beligerancia pasando de las palabras a las acciones y de la violencia simbólica a la práctica? ¿Es el propio kirchnerismo el que engendró ese discurso violento del antikirchnerismo en forma de reacción a su acción discursivamente beligerante? 

¿Fernando Sabag Montiel es el autor material del intento de homicidio y los autores intelectuales son quienes promovieron el discurso de odio, o desquiciados hay en todas las sociedades y en todos los contextos como lo demuestran los atentados a jefes de Estado de la varios países desarrollados y al papa Juan Pablo II, quien estaba en las antípodas de promover desentendimiento?

Si algo positivo se puede rescatar del atentado a la vicepresidenta, será una reflexión sobre el odio, su naturaleza y su tratamiento. Sobre las pasiones y cómo la política tiene que ser la forma de encauzar las pasiones tristes en pasiones alegres, siguiendo los consejos de Spinoza, convirtiéndolas en una fuerza positiva para la sociedad.

La Academia Nacional de Periodismo en su comunicado de ayer, tras sostener que “repudia enérgicamente el atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y considera que delitos de esta naturaleza son un atentado directo al orden democrático”, lamentó que “con su discurso, el Presidente no hizo un aporte a la paz social que necesita el país en estos momentos, al acusar prematuramente a los medios y a la Justicia de ser instigadores de este lamentable atentado”.

Pasiones tristes: miedo, resentimiento, envidia y cólera, a ser contenidas por la política

Desde mi perspectiva, hace mal el Presidente en colocar en el mismo plano a la Justicia, que viene siendo más ponderada (causas como el dólar futuro o el pacto con Irán no prosperaron), con ciertos medios audiovisuales de un lado y otro de la grieta que sí merecen críticas por su altisonancia discursiva sin tener que esperar que avance la investigación sobre el móvil de Fernando Sabag Montiel porque la crítica trasciende este hecho, de la misma forma que la crítica a la altisonancia de los medios audiovisuales oficiales es igualmente pertinente.

El discurso del odio no es responsabilidad de un solo sector de la sociedad, radicalizados de ambas coaliciones siembran desde hace tiempo violencia simbólica. Ojalá la fuerza dramática que tiene el video en el que emerge un arma ante la frente de la vicepresidenta imprima en nuestras mentes inhibiciones perennes a los impulsos primitivos que todos los seres humanos llevamos dentro.