domingo, 7 de enero de 2024

Atropello y obstinación... @dealgunamanera...

Atropello y obstinación...

Cupulando. Dibujo: Pablo Temes.

El oficialismo debe asimilar que no todo vale más allá de la legitimidad que le dieron las urnas.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 06/01/2024 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


No ha pasado aún un mes desde que Javier Milei asumió la Presidencia. Habitualmente son los días que corresponden a la así llamada “Luna de Miel”, de la que suele gozar cualquier nuevo gobierno. Nada de esto aplica al presente de la Argentina. Dos son las razones para esta circunstancia: la primera, la profunda crisis económica por la que atraviesa el país; la segunda, las profundas medidas de shock emanadas del flamante gobierno.

La combinación de una y otra son caldo de cultivo, para una situación de conflictividad que sacude a la sociedad.

Desde el momento mismo en que las posibilidades de Milei de ganar las elecciones tuvieron visos de concreción, hubo una pregunta –una sola– que se instaló no sólo en los ámbitos de la política, sino también en la calle: ¿podrá plasmar en los hechos todos sus proyectos sin mayorías en el Congreso y sin ningún poder territorial?

Las respuestas comenzaron a aparecer esta semana cuando una Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo dio curso al amparo presentado por la CGT primero, y la CTA después, para suspender la vigencia del DNU en el ámbito del Derecho Laboral. A esta altura ya hay más de cuarenta amparos presentados ante la Justicia, para frenarlo en su totalidad.

Y respecto del proyecto de ley enviado al Congreso   –denominado “Bases para el Punto de Partida para la Libertad de los Argentinos”– nada permite suponer que los deseos del oficialismo de tenerlo aprobado a fines de enero, cuando termine el período de sesiones ordinarias se vean complacidos.

Las formas importan

Hay en los sectores duros del gobierno una disociación marcada entre los deseos y la realidad. Una política de shock, sin concesiones, sólo puede ser llevada adelante cuando un gobierno tiene la suma del poder público. Fue eso lo que pasó con Carlos Menem en los años 90. La mayoría amplia que tenía en ambas Cámaras del Congreso, entre los gobernadores y la influencia que tuvo en el Poder Judicial, posibilitaron que sus proyectos se concretaran. Esa suma del poder absoluto lo hizo posible. Recuérdese, como ejemplo, el famoso “Per Saltum” instrumentado por la Suprema Corte de Justicia de entonces, de mayoría menemista, que permitió destrabar la privatización de Aerolíneas Argentinas que había sido suspendida por el juez federal del fuero Contencioso Administrativo Oscar Garzón Funes, ante la presentación del exdiputado Moisés Fontenla, del Grupo de los Ocho.

Hoy la situación es otra: la Corte Suprema es claramente independiente del gobierno y, en caso de tomar la decisión de aplicar el recurso del “Per Saltum”, sería una sorpresa que su fallo lo favoreciera.

El panorama en el Poder Legislativo es bastante similar. El proyecto de “Ley de las Bases” ha ingresado ya en el Congreso, pero las comisiones que deben tratarlo no están aún conformadas, con lo cual, las chances de ser tratado y aprobado a fin de enero tiene, a esta hora, la categoría de la ilusión.

Nadie sabe a ciencia cierta cómo es que el Presidente apostó a esta especie de todo o nada con un proyecto que, por su complejidad, debe ser tratado y aprobado por numerosas comisiones antes de llegar al plenario. La lógica aconsejaba una fragmentación para que pudiera tener un trayecto más simple, que le hubiese hecho posible ir alcanzando sus objetivos paso a paso. Este es un razonamiento que comparten funcionarios importantes del gobierno que chocan contra la obstinación de un hombre que ha adquirido un sorpresivo poder: Federico Sturzenegger. Muchas de estas cosas, el expresidente del Banco Central durante la primera mitad de la presidencia de Mauricio Macri, las había trabajado para Patricia Bullrich. Sturzenegger se ha convertido en un halcón que da la sensación de estar viviendo un tiempo de revancha después de haber sido eyectado de sus funciones por Macri y reemplazado, casualmente, por el actual ministro de Economía, Luis Caputo. Tan envalentonado se lo ve que se enfrascó en una serie de declaraciones poco prudentes y desafiantes que motivaron que alguien dentro del gobierno le pidiera que redujera su exposición pública.

En el medio está la gente

Una muestra de la falta de contacto con la realidad del proyecto de ley es lo que pasó con la pesca. El proyecto, en su texto original, quitaba la obligatoriedad de que los buques descarguen sus productos en puertos argentinos, proponía la libre competencia entre empresas argentinas y extranjeras –lo cual generaría condiciones desiguales de operación– y quitaba la obligatoriedad de que el 75% del personal embarcado sea de nacionalidad argentina. Eso generó la reacción de todos los gobernadores de las provincias con costa sobre el litoral marítimo a los que se les sumó el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro. Debió intervenir pues el ministro del Interior, Guillermo Francos, que se reunió el mediodía del jueves con Montenegro y el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, para modificar esos puntos de controversia. Intentando disimular lo evidente, Francos señaló que “habrá temas que serán clarificados en la redacción del artículo de la ley” (sic).

Más allá de cualquier subsanación en los textos definitivos, el error de base radica en la lógica de creer que, con algo de voluntarismo y mucho de prepotencia, se alcanzarían los objetivos planteados. En resumen: falta experiencia política.

Entre los principales empresarios argentinos existe la “voluntad de colaborar”, pero persiste el temor por el tiempo que pueda demandar la tan ansiada “luz al final del túnel”. Vale la pena mencionar que en rubros como el alimenticio y el textil esos mismos empresarios están demostrando su falta de mesura y su codicia. También depende de ellos el sacrificio y la carga que pueda soportar la gente. Deben entender que la Argentina no tiene muchas más oportunidades de salir del pozo en el cual está estancada desde hace décadas.

En este contexto, la ingenuidad del gobierno llegó a tal punto, que volvió a sobrevolar la idea de convocar a una consulta popular para satisfacer sus necesidades. Los principales constitucionalistas coinciden en que el Presidente no puede convocar a consulta popular respecto del DNU, simplemente porque no se tratan allí temas de su competencia. El oficialismo debe asimilar que –más allá de la legitimidad que le dio el resultado electoral–, no puede valerse del atropello y la obstinación para conseguir resultados. Su suerte y la de todos los argentinos, dependerá en gran medida, del retorno al camino del diálogo y la construcción política.



   

sábado, 6 de enero de 2024

El fascismo libertario… @dealgunamaneraok...

El fascismo libertario… 

Entender las razones profundas que posibilitaron la irrupción de Javier Milei como opción de “salvación” de nuestra sociedad en crisis, es una tarea compleja pero imprescindible. Igualmente necesario es preguntarse cómo un personaje de esas características, que anunciaba tragedias, sufrimiento, y sobre todo, violencia, pudo llegar a ganar una elección presidencial. Finalmente hay que interrogarse acerca de los espacios en los que pudo insertarse el grupo de inadaptados que hoy ocupan la casa rosada y que abrevaron en los principios más estereotipados del racismo y la discriminación.

© Escrito por Carlos Alberto Rozanski el 06/01/2024 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Se trata de un nuevo y peligroso escenario político-social que intentan instalar en el corazón mismo de la comunidad. Es aquel en el cual los hoy gobernantes diferencian dos sectores muy marcados: “la gente de bien” (los libertarios) y “el resto”. 

Es bueno recordar que el grupo negacionista libertario comenzó su actividad pública hace poco más de dos años con apariciones esporádicas durante la pandemia. Desde la apología de la dictadura genocida, la negación de la existencia del virus covid 19 y la denostación de la vacuna hasta la quema de barbijos en alguna vereda, el grupo inició el camino hacia el actual discurso único de los “unos” y “los otros”. En esa primera etapa, los actos aparentaron desvinculación entre sí, asemejándose más a un producto del azar o la casualidad que a un plan organizado. 

Bolsas mortuorias en el frente de la Casa de Gobierno con nombre de personalidades y guillotinas en la Plaza de Mayo, eran noticias en algunos medios, las que, aún dispersas, comenzaban a impregnarse en la mente de los telespectadores. Se trataba aún de una primera etapa en la cual las agresiones aparecen fragmentadas simulando agotarse en cada acto. 

En esos momentos -2021-, irrumpió en esa escena el personaje de Javier Milei que terminaría canalizando esos impulsos aparentemente dispersos, hacia un verdadero movimiento político. En ese contexto el 1 de septiembre de 2022, se produjo el intento de magnicidio a Cristina Fernández de Kirchner. Así, las manifestaciones esporádicas y en apariencia desconectadas pasaron a la etapa siguiente de la secuencia, lo cual se materializó en un partido político (La Libertad Avanza) cuyo fundador luego ganaría las elecciones presidenciales en el Balotaje de 2023. 

Se trataba de un personaje extraño, de cabellos revueltos y labia agresiva que desde su particular desaliño personal anunciaba la superioridad “moral, productiva y estética” de su agrupación libertaria. A partir de allí, la demonización de un sector variado y creciente de la comunidad monopolizó la mayor parte de su discurso político. 

Una vez instalado en las redes sociales y mediáticas, Milei comenzó de ese modo una brutal agresión expresiva hacia objetivos específicos. Calificó de “imbécil” y de “representante del maligno en la tierra” al Papa Francisco y de “zurdos de mierda” a los militantes y dirigentes de la izquierda política de quienes dijo reiteradamente que había que destruir. Sin embargo, el objetivo central y obsesivo de Javier Milei fue el movimiento nacional justicialista. Comenzando por su figura más representativa, la primera etapa de estigmatización se centró en Cristina Fernández de Kirchner, en ese momento vicepresidenta de la nación y en el “Kirchnerismo” a quienes tanto Milei como sus socios atribuyeron la mayor parte de los males del universo. Ese espectro demonizante se fue ampliando al resto del partido político mayoritario en nuestro país y al mismo tiempo el que mayores conquistas sociales logró a través de leyes que ahora el presidente se propone derogar. 

Es útil recordar que el peronismo ha basado su doctrina y lucha política en el concepto de “justicia social”. La mejor síntesis de ese principio trascendente es la idea de equidad, solidaridad, bien común, igualdad de oportunidades, en suma, el respeto por la dignidad humana. 

En sentido opuesto y como parte de su estrategia destructiva, Milei ha definido reiteradamente la justicia social como una “aberración”. Con ese sustantivo, el presidente intenta demoler aquello que durante muchas décadas ha encabezado las luchas no sólo del peronismo, sino de toda la clase política progresista argentina. De hecho que la extensa lista de víctimas del genocidio de la última dictadura se ha nutrido de un colectivo políticamente heterogéneo en un abanico que va desde el radicalismo hasta la izquierda trotskista pasando, por supuesto, por el peronismo. 

Actualmente, a escasas semanas de haber asumido el nuevo presidente, estamos entrando en una tercera etapa de avance de la extrema derecha que excede la actividad específica partidaria. Milei está tratando de instalar los conceptos centrales de su discurso reaccionario y violento, en el corazón mismo de gestión comunitaria que es el propio Estado. Ese Estado que cínicamente demonizó en cada discurso, anunciando su desaparición al igual que la de la mayoría de las dependencias ministeriales desde las que en los gobiernos anteriores -exceptuando el de Macri-, se impulsaban las políticas de contención y ayuda social. Su real intención al respecto nunca fue la de extinción del Estado. El objetivo real de Javier Milei y de quienes están detrás, es el reemplazo de un Estado presente y solidario por uno prebendario y orientado a una entrega de recursos humanos y naturales como nunca se vio en la historia de nuestro país. 

Esta tercera etapa en marcha prevé un estado organizado en base a la exclusión absoluta del sector social que los libertarios consideren que no son “argentinos de bien”. 

Al respecto, con la claridad que lo caracteriza Rocco Carbone señaló que “…cuando se nos dice que se gobernará para “los argentinos de bien” se está trazando un límite que va a separar a millones de seres del reconocimiento de su condición humana. En ese gesto segregatorio yace un núcleo del pensamiento fascista”. Agrega sobre el poder que ganó las elecciones que “… Está animado por lógicas mafiosas y por un catalizador fascista”. (1) 

Esa vinculación estrecha que Carbone plantea entre la mafia -representada por Mauricio Macri- y el fascismo en la lógica de los discursos y actos de Javier Milei, resulta esencial para comprender el momento actual. 

Es bueno recordar también que Milei afirmó públicamente por televisión: “Entre el Estado y la Mafia me quedo con la Mafia. Porque la mafia tiene códigos, la mafia cumple” (SIC). (2) 

Y en esa disyuntiva planteada, Milei optó por la construcción de un Estado mafioso. Se convirtió así en el primer presidente electo en un país luego de afirmar su devoción por una organización criminal como es la mafia. 

Macri, a su vez, fue denunciado por citas textuales de “mi Lucha” de Adolfo Hitler. El ex presidente definió públicamente a los alemanes como “raza superior” (SIC). Como señala un reconocido autor, Mauricio Macri es el primer político en el mundo fuertemente sospechado de pertenecer de manera orgánica a una organización mafiosa (la ‘Ndrangheta calabresa) que llega a la presidencia de un país. (3) 

En el actual escenario, hay cuestiones que por su aparente extravagancia deben llamar nuestra atención y sobre todo la de nuestros dirigentes responsables de dar respuesta. Así, en el programa de la televisión chilena antes citado, Milei propuso privatizar las calles de nuestras ciudades para que quienes viven en cada cuadra puedan tener ingresos cobrando peaje. Igualmente, sus pintorescos diputados se han manifestado públicamente impulsando por ejemplo alambrar y privatizar los océanos o asegurando que los hombres que tuvieron relaciones sexuales con una mujer, deberían tener 15 dias de tiempo después de notificados del embarazo de sus parejas, para decidir si se harán cargo o no de las obligaciones parentales respecto del futuro hijo recien concebido. Por su parte, la actual canciller propuso la creación de un “mercado de órganos” (sic). 

Baste para completar la idea recordar que el presidente eligió como Procurador del Tesoro (abogado del país) a un ex Nazi que participó del ataque a una sinagoga. 

Como se sintetizó, la estrategia libertaria tanto para llegar al gobierno como para intentar sostenerse en él se erige sobre una sucesión de propuestas tan violentas como inverosímiles. La alianza mafioso-fascisita que describe Carbone es inédita en el país y eso explica algunas de las situaciones extrañas que se están viviendo. La magnitud del absurdo y lo bizarro de los personajes, permiten pensar que estamos ante la posibilidad de un saqueo sin precedentes con final abierto. 

El actual escenario representa un desafío tan grave como la alianza que lo nutre. En él, es muy difícil determinar si la Argentina está presidida por un perverso, un desequilibrado o simplemente un megalómano. Lo que sí es posible afirmar es que los riesgos a los que el personaje en cuestión está sometiendo a una nación de 47 millones de habitantes, son superlativos. 

La esperanza está hoy depositada en aquel sector de la política que supo luchar contra la dictadura genocida hasta recuperar la democracia. En aquellos jueces y fiscales decentes que no se doblegan ante la corrupción más reaccionaria de la corporación. En ese maravilloso pueblo que en las calles y sin vacilar, va a seguir poniendo el cuerpo para apoyar a sus dirigentes e impedir nuevos y brutales atropellos. 

(1) La Tecl@ Eñe, 30/11/2023. 
(2) Programa Vía Pública Santiago de Chile 18/12/2019. 
(3) “El lado oculto de la Famiglia Macri”. Edit. Ciccus. Jorge Beinstein, Daniel Cieza, 2019.



   

¡Estafa a la Vista! Megacaje versión 2024… @dealgunamaneraok...

¡Estafa a la Vista! Megacaje versión 2024…

¿Vieron que comentaban que la tasa de interés inicial de Caputo-Milei (133 y 100% con capitalización) era negativa frente a la inflación y yo decía que era muy positiva contra el dólar?

© Escrito por Carlos Maslatón el viernes 05/12/2023 y publicado en X (ex Twitter) en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Síntesis de sus efectos:

Pues bien, miren lo que ofrecen hoy estos estafadores financieros: un megacanje de bonos indexados contra inflación más interés. 

Todo esto mientras siguen emitiendo de a billones por mes por remuneración cuasifiscal para causar más y más inflación y aplanando el dólar para devengar más ganancia en moneda extranjera. 

Toda indexación es pro y no anti-inflación. 

Este programa financiero de Caputo y Milei está diseñado ex profeso para robar, el país está conducido por los peores criminales financieros de la historia. DNU y Ley Ómnibus son irrelevantes al lado de todo esto. Ha llegado el momento de que estos enjuagues financieros para explotar y empobrecer al pueblo no se puedan ejecutar. 

No sirve de nada la acción penal contra Caputo y Milei, hay que impedirles que sigan adelante. Y para libertarios mentalmente boleados con la farsa del cierre del BCRA y la dolarización: esto es exactamente todo lo contrario. 

Caputo y Milei lo que buscan es que haya más y más inflación, hacen negocio a su favor a costa de los verdaderos licuados que son los asalariados, los monotributistas, los autónomos.

Estamos ante el gobierno de la máxima corrupción.


   

jueves, 4 de enero de 2024

Cristina Kirchner critica a Alberto Fernández y ordena a sus legisladores para el primer test político de Javier Milei… @dealgunamaneraok...

Cristina Kirchner critica a Alberto Fernández y ordena a sus legisladores para el primer test político de Javier Milei…  

CFK. Fotografía: NA (Archivo)     

Cree que es urgente conformar la Bicameral para frenar el DNU del Presidente. Mensaje al resto del peronismo para reordenar. El "chiste" sobre el festejo de su ex aliado en España.

© Escrito por Ramón Indart el miércoles 03/06/2024 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.     


"Por lo pronto, no la vas a ver en un restaurante de lujo comiendo uvas". Esa fue la primera frase de un dirigente que habla todas las semanas con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Así dejó en claro la distancia que la separa de Alberto Fernández, que volvió a ser noticia en los últimos días por su festejo de año nuevo en España.

Lo concreto, más allá de la anécdota, es que Cristina entendió que no habrá tiempo para descanso político en el verano de 2024, por la idea del presidente Javier Milei de avanzar con todas sus reformas de manera inmediata. Aunque no se detenga en el poroteo del PJ, la ex vicepresidenta bajó línea para analizar el juego de pinzas entre el mega DNU y la Ley Ómnibus que propone el Poder Ejecutivo.

Javier Milei, en su mensaje de año nuevo, volvió a defender las reformas contenidas en su DNU y en la llamada Ley Ómnibus.

Mensajes de CFK al peronismo.

Cristina Kirchner "sigue pensando que hay que buscar una alianza de todos los sectores para frenar el atropello a la división de poderes. Pero tiene en claro también que el peronismo está en un nuevo proceso y hay que ver cómo decanta", afirman en su entorno. En el último tiempo, la expresidenta tomó de buena manera los dichos de su hijo Máximo, diputado de Unión por la Patria, quien apuntó contra Mauricio Macri.

CFK avisó, vía terceros, a gobernadores y al Frente Renovador que la horizontalidad que tanto se pregonó sin llevarlo a la práctica, esta vez podría ser algo más armado. Quizás porque ahora es consciente que su centralidad se apagó un poco tras el fallido experimento de su gobierno con Alberto Fernández.

Sobre la 
CGT, entendió la estrategia de no ir al paro general de entrada, sino hacer un paro parcial para marchar al Congreso. A pesar de no confiar en la central obrera, entiende que no hay muchas más alternativas de resistencia.

Como en la asunción de Milei, Cristina sigue marcando distancia con Alberto Fernández.
        

José Mayans, jefe del interbloque UxP en el Senado, fue el único que reveló que habló con Cristina después de la cadena nacional en la que Javier Milei explicó el decretazo. "Hablé con Cristina anoche, está muy preocupada por todo esto. En primer lugar, por la soberanía del país porque es todo lo inverso a la proclamación de lo que nosotros hicimos cuando proclamamos la independencia", remarcó el senador. 

Con respecto a la Cámara de Diputados, la expresidenta se encargó de estar al tanto de la conformación de comisiones, que quedaron ordenadas el martes a última hora, a través de Anabel Fernández Sagasti y Juliana Di Tulio. En la intimidad dejó en claro que la urgencia es armar la Bicameral para frenar el DNU en el Congreso. "Está convencida que el Parlamento lo frena", dicen cerca de ella. El Senado ya eligió a los legisladores que estarán a cargo de 7 comisiones clave para analizar las reformas.


Críticas a Alberto y nuevos canales de comunicación.

"Pensar que Alberto se asustó por Vicentin", lanzó otro de los laderos de la ex vicepresidenta cuando Perfil consultó por las reformas y la lectura de Cristina Kirchner. Su último acto público tras dejar su cargo en diciembre de 2023, fue durante la asunción de Axel Kicillof al frente de la provincia de Buenos Aires por segunda vez el pasado 11/12.

¿Esperaba Cristina un arranque así de Milei? Si bien no dejó trascender mayores opiniones sobre los primeros días del libertario, puso todo su énfasis en comenzar a ser oposición en las sombras. "La derrota nos vuelve al llano de la discusión, nadie puede decir quien habla y quien no, sería estúpido pensar algo así", se sinceró uno de los operadores peronistas del Senado.

La ex vicepresidenta abrió dos nuevas vías de comunicación esta semana a través de las aplicaciones más reconocidas de mensajería en la actualidad: WhatsApp y Telegram. "Abrimos nuevos y únicos canales de Telegram y WhatsApp para estar en contacto", informó la expresidenta a través de su perfil oficial en la red social X (ex Twitter). Y dejó los enlaces a ambos canales de difusión para que sus seguidores puedan unirse y, eventualmente, estar al tanto de sus actividades.



   

miércoles, 3 de enero de 2024

Menos democracia no es más libertad… @dealgunamaneraok...

Menos democracia no es más libertad…

Megaproyecto. El ministro del Interior, Guillermo Francos, entrega al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, la propuesta del Gobierno.

La supuesta búsqueda de «la libertad de los argentinos», como define el proyecto de Ley «Ómnibus» enviado por el presidente Javier Milei al Congreso, es presentada como justificación para promover un drástico giro, de carácter claramente regresivo. Lo que se busca, en realidad, es un cambio estructural profundo en el actual funcionamiento de la sociedad en diversos ámbitos, sin que la mayor parte de las medidas propuestas signifiquen mejoras en las condiciones de vida de los sectores populares. Todo lo contrario.     

© Escrito por Carlos Heller el domingo 31/12/2023 y publicado por la Revista Acción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Tanto la iniciativa, como el decreto de necesidad y urgencia (DNU) presentado la semana anterior, alientan modificaciones de extrema gravedad, dado que suponen el recorte de las libertades públicas y apuntan a acabar con todo atisbo de un proyecto de desarrollo nacional, inclusivo y soberano.

Por más que se diga perseguir la «modernización del Estado», «la reducción de la burocracia» o «el reordenamiento de la economía y el fin de intervenciones en los mercados», lo cierto es que se despliega una batería que pone en serio riesgo el mismo funcionamiento de las instituciones democráticas.

Resulta difícil aceptar que existe una situación de emergencia tal que haga urgente retroceder hacia un tipo de capitalismo que supone borrar de un plumazo toda una serie de derechos esenciales, hasta arribar a una situación como la que regía en el mundo y en el país hace más de un siglo, previamente al paradigma de los Estados de bienestar.

Entre el conjunto de disposiciones impulsadas, que incluso van mucho más allá de la plataforma sostenida durante la campaña electoral, acaso lo más riesgoso es la idea de delegar amplias facultades legislativas en el Poder Ejecutivo. Lo cual, como se propone hasta el 31 de diciembre de 2025 con posibilidad de extensión por dos años, prefigura la virtual eliminación de uno de los poderes del Estado.

Así lo entendimos legisladores y gobernadores de Unión por la Patria, en una declaración de rechazo al DNU 70/2023 «porque claramente avasalla atribuciones del Congreso y vulnera la división de poderes y el funcionamiento de la República». A la vez, advertimos, la ley ómnibus «ratifica la pretensión del presidente de contar con poderes y facultades extraordinarias, que son absolutamente inconstitucionales».

Quienes tenemos presente los períodos dictatoriales de mediados y fines del siglo pasado sabemos que la ausencia del Poder Legislativo es tan grave como lo es asimismo la limitación al derecho de reunirse y a manifestarse. O el establecimiento de sanciones para los organizadores de protestas que obstaculicen el espacio público.

Podemos preguntarnos, además, qué libertad es la que se promueve mediante la supresión o el desfinanciamiento de áreas culturales como el Fondo Nacional de las Artes, el Instituto del Teatro o el Instituto del Cine. Tampoco se entiende el presunto beneficio de enajenar áreas de patrimonio público, mediante la privatización de empresas emblemáticas del desarrollo nacional, como el Banco de la Nación, YPF, Aerolíneas Argentinas o las integrantes del Sistema de Medios Públicos.

El impacto social del DNU y del proyecto de ley es también contundente. Véase, por ejemplo, la propuesta de suspender la fórmula de ajuste de haberes de los jubilados, para sustituirla mediante aumentos por decreto, la extensión del periodo de prueba de los trabajadores y trabajadoras de 3 a 8 meses, el recorte de indemnizaciones, la ampliación de la jornada laboral hasta 12 horas sin pago de horas extras y la eliminación de las multas por trabajo no registrado.

Esas y muchas otras modificaciones generan gran inquietud en la población. Al punto que gran cantidad de organizaciones políticas, sindicales, sociales y culturales iniciaron un proceso de movilización en busca de proteger sus derechos amenazados.

Las manifestaciones espontáneas de los últimos días serán continuadas por el paro nacional convocado para el próximo 24 de enero por la CGT y las CTA, una instancia que preanuncia la puesta en marcha de tradicionales formas de resistencia contra un modelo antidemocrático en lo social, lo político y lo económico. 

Megaproyecto. El ministro del Interior, Guillermo Francos, entrega al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, la propuesta del Gobierno.



   

1833- 3 de Enero - 2024. Reafirmación de los Derechos Soberanos de Nuestras Islas Malvinas... @dealgunamaneraok...

Argentina reafirmó la soberanía sobre Malvinas...


El Gobierno nacional reafirmó este miércoles el reclamo argentino por la soberanía de las Malvinas y recordó la usurpación de esos territorios por parte del Reino Unido el 3 de enero de 1833, al resaltar que todas las administraciones que tuvo el país desde entonces “han reafirmado los legítimos e imprescriptibles derechos” sobre las islas del Atlántico Sur.

© Escrito por Emilse Cechi el miércoles 03/01/2024 y publicado por el Diario El Sureño de la Ciudad de Río Grande, Provincia de la Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. 

En un comunicado difundido por Cancillería se manifiesta además la disposición de Argentina a “reanudar las negociaciones bilaterales” en busca de una “solución a esta disputa de soberanía”, de acuerdo las numerosas resoluciones que Naciones Unidas (ONU) formuló en ese sentido.

“El 3 de enero de 1833, el Reino Unido ocupó por la fuerza las Islas Malvinas, territorio sobre el que desde los primeros momentos como nación independiente la Argentina había ejercido sus derechos de soberanía, atento a su carácter de heredera de las posesiones de España en América del Sur”, señala el texto del Palacio San Martín.

En ese plano, se indica que la “acción del Gobierno británico constituyó un acto de fuerza en tiempos de paz, contrario al derecho internacional y nunca consentido” por las autoridades argentinas, que “de inmediato presentaron sus protestas”.

“Desde entonces, todos los gobiernos argentinos han reafirmado sus legítimos e imprescriptibles derechos soberanos sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”, se remarca en el documento.

La Cancillería recordó que la Asamblea de la ONU “ha caracterizado la cuestión de las Islas Malvinas como una situación colonial especial”.

En simultáneo, se apunta que la Constitución Nacional “establece que la recuperación del ejercicio efectivo de nuestra soberanía sobre dichos territorios, conforme el derecho internacional y respetando el modo de vida de sus habitantes, constituye un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino”.

La Cancillería recuerda además que la Asamblea de la ONU “ha caracterizado la cuestión de las Islas Malvinas como una situación colonial especial y particular que involucra una disputa de soberanía entre la Argentina y el Reino Unido que debe ser resuelta por los gobiernos de ambos países mediante negociaciones bilaterales, teniendo en cuenta los intereses de los habitantes de las Islas”.

“Asimismo -recalca-, ha instado a las partes a abstenerse de desarrollar actos unilaterales en el área en disputa”.

“El 3 de enero de 1833, el Reino Unido ocupó por la fuerza las Islas Malvinas, territorio sobre el que desde los primeros momentos como nación independiente la Argentina había ejercido sus derechos de soberanía, atento a su carácter de heredera de las posesiones de España en América del Sur”

Comunicado de la Cancillería.

Además, pone de relieve que “numerosos foros internacionales y regionales se han pronunciado a favor de los derechos de soberanía argentinos y de la reanudación de las negociaciones bilaterales, tales como el Comité Especial de Descolonización de la Asamblea General de las Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos (OEA), el Grupo de los 77 y China, el Mercosur; la Cumbre Iberoamericana; la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac); la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur (Zpcas), entre otras” instancias internacionales.

Por eso, afirma que el Gobierno argentino “manifiesta una vez más su disposición a reanudar las negociaciones bilaterales que permitan encontrar una solución a esta disputa de soberanía, de acuerdo a lo dispuesto por las resoluciones pertinentes de la Asamblea General”.

“En este marco, el Gobierno argentino desea mantener una relación madura con el Reino Unido, que contemple un diálogo sustantivo y constructivo sobre todos los temas de interés común con miras a generar un clima de confianza propicio para la reanudación de las negociaciones”, destaca el comunicado.

También plantea que “convencida de que el único camino posible para la recuperación del ejercicio de sus derechos es el de la vía diplomática, la Argentina reitera asimismo su interés en la misión de buenos oficios encomendada por la Asamblea General al secretario general de las Naciones Unidas con el objeto de ayudar a las partes a reanudar las negociaciones con el fin de encontrar lo más pronto posible una solución pacífica a la disputa de soberanía sobre la cuestión de las Islas Malvinas”.

“El Gobierno y el pueblo argentino reafirman una vez más, a 191 años de la ilegítima ocupación de las Islas Malvinas, sus legítimos e imprescriptibles derechos de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”, concluye el comunicado oficial.

En 1965 la ONU dictó la resolución 2065 por la cual reconoció que hay una “disputa de soberanía” entre Argentina y el Reino Unido, que debe ser negociada en forma bilateral.

Un año después ambos países iniciaron negociaciones en ese marco, pero en 1982 -luego de la guerra de Malvinas- los británicos congelaron las negociaciones y se niegan de forma sistemática a cumplir las resoluciones de la ONU para entablar nuevas conversaciones sobre el tema.