Mostrando las entradas con la etiqueta Juntos por el Cambio. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Juntos por el Cambio. Mostrar todas las entradas

domingo, 16 de octubre de 2022

Chicanas sin ideas… @dealgunamanera...

 Chicanas sin ideas… 


Silencio stampa” La voz de su amo. Dibujo: Pablo Temes 

Esa es la cruda descripción del discurso del Presidente ante los empresarios. 

El discurso que el Presidente dio cuando caía la tarde del viernes en Mar del Plata en el cierre del Coloquio de IDEA fue malo. No es novedad. Todos los discursos de Alberto Fernández son malos. Los tibios aplausos que le brindaron los empresarios que lo escucharon fueron el reflejo del clima de entusiasmo declinante que generó la alocución del jefe de Estado. Las caras mustias que se veían entre los que escuchaban lo decían todo. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 15/10/2022 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

El azoro era inocultable. La falta de autocrítica hacia la gestión de su gobierno, así como también los mensajes con aires de chicanas destinados tanto a Mauricio Macri, como a Cristina Fernández de Kirchner fueron tan evidentes como burdos. “No escuchamos ni una sola propuesta de acción gubernamental concreta para solucionar alguno de los graves problemas que acechan a nuestro país”–se quejó un empresario. Otros prefirieron apuntar al Frankenstein político que arrastra desde su génesis el Frente de Todos: “No hay certidumbre ni horizonte posible cuando el Gobierno es oficialismo y oposición al mismo tiempo”.  Su descripción es tan gráfica como cierta y la ausencia de un plan económico, que fue sustituido por un parche detrás del otro, tiene que ver con esta situación anómala. 

Es por eso que el destino haya querido que el discurso del Presidente fuera en el mismo día que se conoció el índice de inflación de septiembre, es una de esas coincidencias que hace más patética la situación. El 6,2% del Indec encierra cifras que no son las que realmente afectan a vastos sectores de la ciudadanía y, en especial, a los más pobres. Esto es así porque el rubro alimentos está claramente por arriba del número de septiembre. Esto está generándole un delicado problema a Sergio Massa, porque las proyecciones para el mes de octubre auguran una situación todavía peor. 

La inflación en alimentos ya se hizo sentir en la primera semana del mes y se proyecta una suba del rubro en torno al 7,3%, mientras que el IPC ascendería más cerca del 6,5%. Los que conocen la interna del Frente de Todos contra Todos señalan –sin dudarlo– que Axel Kicillof está “taladrando la cabeza” de CFK con un tema recurrente: el congelamiento de precios. Es una medida totalmente superada y anacrónica. Nunca dio resultados en el tiempo por la total ausencia de eficacia de esta metodología. No funcionó con el peronismo en su esplendor. Así que menos va a funcionar con un gobierno en decadencia permanente. 

Massa ya hizo saber su desacuerdo con esta iniciativa. Sin embargo, el gobernador de la provincia de Buenos Aires no se da por vencido. Por lo tanto, está dispuesto a insistir, insistir e insistir. 

Paradójicamente desde Juntos por el Cambio se jactan de su responsabilidad institucional como adversarios políticos, pero la realidad desnuda su impericia. No hay santos republicanos, hay hombres y mujeres incapaces de ocultar sus propias miserias. 

Por lo pronto, para dar idea de que algo se va hacer al respecto, AF decidió convocar para el próximo lunes, a los empresarios de las firmas alimenticias a una reunión. No es casualidad que ese día sea 17 de octubre. “Es que el Presidente algo tenía que hacer para no quedar sin agenda en medio de tanto acto que hará el peronismo dividido en distintos lugares” –se sinceró un histórico analista del PJ. 

Otro síntoma de la decadencia en la que está sumida el oficialismo está marcado por la desmedida y burda ceremonia de asunción de las tres ministras elegidas por el Presidente para tapar los agujeros de su gabinete. Ya no importan los nombres. No revisten ningún peso político, todo lo contrario. “Parece que se creyeron lo del cargo. La fiestita de las recién llegadas no tiene nada que ver con lo que vivimos adentro. Hay desgano, enojo y la convicción de que se termina una etapa. Estamos de salida”, reconoció un hombre de contacto frecuente con la Rosada. 

Una cosa es segura: en el Gobierno no miden lo que resta de mandato como una unidad temporal de más o menos, año y monedas. Lo dividen en tres postas a las que hay que arribar como sea. 

El primer hito es el Mundial de Qatar. El segundo es pasar diciembre sin sobresaltos, algo que solo el peronismo podría lograr, y el tercero es el receso de verano donde gran parte de la gente intenta olvidar sus penurias. 

El resto es la bandera de largada de la campaña electoral. Los movimientos internos, dentro de ambas coaliciones anticipan un período sombrío de polarización y ataques personales muy lejos de las ideas y propuestas para salvar un país, que está cada vez más cerca del abismo.



   

lunes, 26 de septiembre de 2022

Realidad Disociada... @dealgunamaneraok...

 Realidad disociada…

Carlos Menem 2021. Dibujo: Pablo Temes.

Como Carlos Menem, Cristina impulsa ampliar la Corte Suprema. Una tradición del peronismo.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 24/09/2022 y publicado por el diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Lo más significativo del alegato de Cristina Fernández de Kirchner fue no solo la falta de refutación de índole jurídica a las acusaciones en su contra, sino que, además, aburrió. Fue una larga catarsis llena de consideraciones políticas, razonamientos rayanos con el disparate y mentiras. A la ex presidenta en funciones se la vio desenfocada y desangelada. Su oratoria ha perdido fuerza. Le falta el punch que supo tener en otros momentos. La causa principal de ello es la imposibilidad de rebatir el peso de las evidencias de las maniobras de fraude al Estado pergeñadas por su difunto esposo y continuadas por ella durante sus dos presidencias. 

Puede que sea difícil probar la existencia de una asociación ilícita. Pero, más allá de ello, de lo que no hay duda es que los negocios entre los Kirchner y Lázaro Báez constituyeron delito que dio pie a una defraudación al erario público. Todo es tan claro que, lo único que les quedó a la vicepresidenta y a su abogado, Carlos Beraldi, fue el ataque a los fiscales Diego Luciani y Sebastián Mola a quienes se los vinculó con el fallido atentado criminal del que fue víctima CFK. Como se ve, el pensamiento delirante de la ex  presidenta en funciones no tiene límites.

En su alegato, la vicepresidenta insistió con un concepto más propio de las monarquías absolutistas que de las democracias republicanas. Para ella, el hecho de haber sido elegida por medio del voto popular la hace intocable ante las investigaciones judiciales originadas por delitos cometidos en el ejercicio de la función. Es un pensamiento exactamente similar al de Donald Trump. Si este dislate tuviese viabilidad, la posibilidad de luchar contra la corrupción en los estamentos del poder quedaría aniquilada. Sería imposible. Por ello es que, para CFK y sus secuaces, la división de poderes es un drama; un problema sobre el cual hay que poner manos a la obra. De ahí el intento de ampliación del número de miembros de la Corte Suprema. Fue lo que hizo el ex presidente Carlos Menem no bien asumió el gobierno. 

La institucionalidad y el concepto de república siempre han sido un problema para el peronismo desde su fundación. “El remanido argumento de los discursos de odio, la idea de una falsa persecución política y judicial, la fantasía de que toda esa telaraña en su contra es porque no se le perdona el bien ejercido sobre las clases populares en sus doce años de gobierno, se caen de un plumazo con los resultados sobre la mesa. La gente está cada vez peor, parada en la vereda de enfrente de dirigentes políticos y sindicalistas millonarios”, –aseguró un diputado nacional del peronismo que no comparte esos argumentos.


Anidan en el fondo de las creencias erróneas y enfermizas de la vicepresidenta y sus acólitos las ideas de ingratitud e incomprensión, propias de los gobernantes que se creen todopoderosos y exigen para sí mismos un lugar de máxima grandeza en la historia. Algo bastante parecido a un culto personal disociado de la realidad. El odio y la persecución son los nuevos hilos conductores de un relato, que hace agua por todos lados, y que las principales voces del oficialismo repiten a coro en todos los medios de comunicación.

En la fase política del plan de subsistencia, el próximo paso será terminar con las PASO. Las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias fueron creadas por el kirchnerismo en el año 2009 con el argumento de lograr una mayor apertura de los partidos en la selección de candidatos, evitar los personalismos y las elecciones “a dedo” en el seno de cada agrupación. Apenas 13 años más tarde el oficialismo pugna por borrar con el codo lo que había escrito para perjudicar a la oposición, facilitar la contienda electoral a los gobernadores peronistas y encolumnar al partido, si fuera necesario, tras una única figura que evite la dispersión del voto. 

Cambiar las reglas de juego de manera antojadiza es otra característica diferencial que está en la génesis del kirchnerismo. “Si vamos a ser justos, también hay que decir que en la propia oposición hay posturas divididas, pero es cierto que no es lo más sano cambiar de cancha en la mitad del partido. Acabar con las PASO beneficia directamente al oficialismo que necesita un poder concentrado, sin desafíos o rupturas internas y, al mismo tiempo, le quita una herramienta de orden interno a JxC que hoy por hoy no está haciendo pie a la hora de definir candidaturas”, –aseguraron en el entorno de un gobernador del Norte argentino.

En la arena política dan por sentado que el proyecto de ampliación de la Corte Suprema no pasará la prueba en la Cámara baja. Pero nadie se anima a decir lo mismo respecto del destino de las elecciones internas.

Mientras los juegos perversos del poder se mantienen a la orden del día, millones de argentinos hacen malabares para llegar a fin de mes. La inflación es el problema central que se mantiene sin respuesta. En los próximos renglones del plan “vamos viendo” dos cartas asoman en el sin fin de manotazos de ahogado: el comienzo del Mundial y la aceitada máquina de imprimir billetes. Pan y circo para una sociedad cada vez más abrumada.



   

martes, 16 de agosto de 2022

Plan "Vamos viendo"... @dealgunamaneraok...

 Plan "Vamos viendo"

Elisa “Sanadora”. Dibujo: Pablo Temes. 

Tanto en el Frente de Todos como en Juntos por el Cambio reinan la improvisación y las pujas internas, frente a una situación muy crítica. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 13/08/2022 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de las/os Argentinas/os.

En el Gobierno, al menos eso dicen puertas afuera, hay quienes no ven grandes problemas en el horizonte de mediano plazo para la Argentina. Están convencidos de que el problema de las reservas del BCRA se solucionará casi como por arte de magia cuando –pasado el invierno– disminuyan las importaciones de energía y sus costos excesivos producto de la guerra en Europa. Septiembre sería el horizonte más cercano para el remanso. Un experto en eficiencia energética hace una observación al respecto: “El mayor consumo de electricidad es el que se produce en verano por el uso intensivo de los aires acondicionados y el 60% de la electricidad que se produce en el país proviene de quemar gas. Entonces, si bien entre la salida del invierno y la llegada del verano el consumo de gas disminuye, no es cierto que en los meses de verano su consumo sea inocuo”. 

También manipulan otros datos que presentan a su favor. Dicen que “la economía no para de crecer” y sostienen que la falta de trabajo es un invento de los medios de comunicación y repiten como un mantra que el desempleo cayó al 7% en el cuarto trimestre de 2021”. Sin embargo, los mismos funcionarios cercanos al Presidente no mencionan que 2 de cada 3 puestos creados en ese lapso fueron en negro. Prefieren sostener que el país se encamina exitosamente a una situación de “pleno empleo”. 

Aunque es difícil de creer, esa es la información que repiten una y otra vez algunos funcionarios pertenecientes al entorno presidencial. 

Pero todavía hay más. 

Aseguran que los salarios se acercan a niveles “que por primera vez en mucho tiempo pueden pelearle a la inflación” y que la recaudación impositiva es récord. Salvo este último punto que oprime a los contribuyentes, pulveriza a la clase media y les pone un freno a las pymes, el resto es humo. Sobre todo el aumento a los jubilados y su bono extraordinario, que se convirtió en la nada misma al ritmo de la inflación de julio, que fue del 7,4%.
 

Se acabaron las fichas

En ese mundo de fantasía en el que habitan muchos de los que hoy ocupan puestos en el Gobierno, hubo quienes salieron a festejar que el índice de precios al consumidor haya estado por debajo del 8%. ¡Un disparate total! Por lo pronto, desde sectores afines al Frente de Todos contra Todos ya se reconoce que la inflación de agosto será también muy alta. 

Dos episodios dan cuenta de cómo están las cosas puertas adentro. El primero es una alarma que no cesa para las aspiraciones de poder y credibilidad del superministro Sergio Massa. La designación de Gabriel Rubinstein como viceministro duró menos de 24 h. CFK lo vetó sin importar que su nombre ya hubiera trascendido a la prensa. La ex presidenta en funciones no toleró que los diarios sacaran a la luz las feroces críticas que el prestigioso economista les dedicó a ella y a su gobierno. Sergio Massa es abogado y necesita imperiosamente ocupar ese puesto con un economista sólido. Hasta ahora todos le dijeron que no. 

Algo similar está ocurriendo con los nombramientos en la AFIP que conduce el kirchnerista Carlos Castagneto

Fuentes del organismo aseguran que existe una parálisis preocupante y que la AFIP es un descontrol. Castagneto no ha podido designar gente de su confianza en dos lugares vitales para su funcionamiento. La Subdirección General de Coordinación Técnico- Institucional (que en la práctica es la que lleva la agenda de temas del día a día junto al administrador general) sigue vacía. Lo mismo ocurre con la Subdirección General de Asuntos Jurídicos (quien ocupe ese lugar será el virtual número 2 de Castagneto). Para muchos, el porqué de estas demoras es una incógnita pero, en lo que todos los conocedores de las entrañas del poder están de acuerdo es en que las demoras tienen que ver con las disputas internas que están condicionando las designaciones. 

Las internas dentro del Frente de Todos contra Todos representan el principal problema para Massa o cualquier otro que estuviese en su lugar. Una de ellas es la disputa que hay con el presidente del Banco Central, Miguel Pesce. A Pesce le queda poco tiempo en su poltrona. A fin de septiembre vence su mandato y ya se sabe que, salvo por Alberto Fernández, nadie en el oficialismo lo quiere. 

La reunión de Massa con la Mesa de Enlace tuvo mucho ruido y pocas nueces. En realidad, el ruido lo hizo la inexplicable decisión del ministro de hacerla en un lugar secreto. ¨En concreto, no dejó nada¨, dijo con todas las letras el presidente de la Federación Agraria Argentina, Carlos Achetoni. 

En este plan “Vamos viendo” lo fundamental es tirar los problemas para delante y llegar al Mundial con la menor cantidad de sobresaltos posibles. 

El ex intendente de Tigre apuesta fuerte a su viaje a los Estados Unidos, en donde sus contactos aseguran darle a su periplo el volumen político del que adoleció su predecesora, Silvina Batakis, que llegó a Washington siendo ministra para enterarse a su regreso de que había dejado de serlo.     

El Titanic sigue su rumbo 

Para las organizaciones sociales que no son afines al Gobierno la paciencia se terminó. El Polo Obrero acampó en Plaza de Mayo y Eduardo Belliboni le contestó al viceministro de Desarrollo Social que hay un “desmesurado” nivel de pobreza y que ya hubo “situaciones desmesuradas en este país en las que los gobiernos volaron por el aire”. Juan Grabois, que ya había arremetido muy fuerte con apelaciones a la violencia contra el gobierno de los Fernández, avisó por lo bajo que su límite ha llegado: “Si para septiembre las autoridades no pegan un volantazo e implementan medidas para los sectores populares, vamos a volver a la calle con todo”. 

Por si faltara poco en No tan Juntos por el Cambio, Elisa Carrió –fiel a su costumbre– prendió el ventilador. Fuentes de la coalición opositora aseguran que Mauricio Macri se enteró por televisión. En el mismo momento en que la líder de la Coalición Cívica se despachaba contra todos, el expresidente estaba en Happening cenando con dirigentes radicales de Evolución, acompañado de Fernando De Andreis y otros laderos. “No le gustó lo que escuchó. A ninguno de los presentes le gustó. Fundamentalmente por dos motivos: los ataques personales y el timing elegido. Parece que le hubiera tirado un salvavidas a Massa en el peor momento de su semana. El rechazo fue unánime”, aseguraron.

El viernes al mediodía nuevamente en el restaurante de Costanera el grupo se juntó para hacer control de daños. De Andreis actuó como vocero y dio por terminado el episodio: “Juntos por el Cambio no se rompe”, aseguró. Es cierto, tan cierto como que Horacio Rodríguez Larreta se retiró del lugar visiblemente molesto.




   

martes, 8 de marzo de 2022

Cuestión de forma y Fondo... @dealgunamaneraok...

Cuestión de forma y Fondo...

Imbancable, Mauricio Macri

La política local actúa como si nada tuvieran que ver con la realidad que padecen millones de argentinos.


© Escrito por Nelson Castro el sábado 05/03/2021 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.


En su discurso del 1º de marzo ante la Asamblea Legislativa el presidente Alberto Fernández evitó dar precisiones sobre el contenido del proyecto de ley, para avalar el acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional. Tampoco dio precisiones sobre la fecha de ingreso a Diputados para comenzar los trámites de comisiones para su tratamiento. Sabía que aún no contaba con los detalles técnicos finales y, mucho menos, con el aval del bloque del Frente de Todos Contra Todos.

Finalmente el proyecto ingresó el viernes pasado el mediodía luego de incluir una modificación muy precisa a pedido de la oposición. El primer artículo donde el Ejecutivo pide la aprobación de la refinanciación de la deuda –que tiene consenso más o menos general– contaba, además, con dos anexos que detallaban las medidas de política económica que el Gobierno se comprometió a tomar para garantizar el cumplimiento de las exigencias del Fondo Monetario. La oposición pidió separar esos anexos del artículo primero e incluirlos en otro. La razón de este cambio es puramente política: están de acuerdo en refinanciar la deuda para evitar el default, pero no quieren apoyar con su voto el plan de ajuste diseñado por el Gobierno que incluye tarifazos a los servicios de luz y gas, reducción del déficit y cambios en la política monetaria. 

“Todos sabemos que habrá ajuste, las palabras de Alberto no las creyó nadie, empezando por los legisladores de su propio espacio. Hasta que no tengamos los detalles no vamos a avalar este proyecto. Con los artículos de la ley por separado, podemos votar la refinanciación de la deuda plasmada en el punto uno y no dar nuestro apoyo a los anexos del artículo dos” –señaló un diputado de la oposición. En ese espacio en el que tampoco faltan las disidencias no están dispuestos a ser los verdugos de la sociedad cuando ni siquiera el oficialismo tiene los votos necesarios para aprobar el proyecto de ley que refrende el acuerdo.

La división interna en el Frente de Todos contra Todos está en pleno desarrollo. Los videos críticos del acuerdo que La Cámpora ha comenzado a hacer circular en los últimos días dan idea de la envergadura de esa disputa con aires de riña. Es una disputa de la que, en silencio, participa –e impulsa– Cristina Fernández de Kirchner. Hay que tener en cuenta que esto que se está viendo es el recrudecimiento de un entuerto que viene desde el comienzo mismo de la gestión de AF.

Uno de los blancos principales de críticas del kirchnerismo es el ministro de Economía, Martín Guzmán, a quien le objeta haber llegado a este acuerdo que implica validar esta deuda contraída durante la Presidencia de Mauricio Macri a la que califican de “ilegal”.

El relato oficialista sobre el acuerdo da idea de las dificultades que asoman en el horizonte. Uno de los puntos del acuerdo se refiere a la necesidad de reducir el déficit. Una de las consecuencias de esta medida será el tarifazo que incluye un aumento de 20% de la tarifa social. La segmentación anunciada será otro dolor de cabeza. Cada vez que se intentó hacerlo hubo problemas.

Se plantea un nivel de inflación imposible de alcanzar en el futuro inmediato porque, además, el tarifazo en sí es una fuente de inflación.   

Sergio Massa se apresuró a ceder para cumplir los deseos de sus rivales políticos a sabiendas de que la pelea en el recinto será voto a voto. Nadie tiene asegurado nada. “La televisión evitó mostrarlo, pero en el discurso de apertura de sesiones cuando el Presidente se refirió al acuerdo con el Fondo solo aplaudió la mitad del bloque del FdT. La otra mitad bajó la mirada y se encargó de transmitir su desagrado en línea con los deseos de Máximo y CFK”–recordó una fuente parlamentaria.

Los que han hablado con el hijo de la ex presidenta en funciones lo han escuchado criticar con extrema dureza el acuerdo.

En su pensamiento sigue vigente la idea de aumentar las retenciones a las exportaciones agropecuarias y de prorrogar el impuesto a la riqueza, medidas que fracasaron. Desde este punto de vista el diputado es coherente con lo que es el kirchnerismo.

Ni oposición ni oficialismo tienen los votos definidos. “La modificación del primer artículo de la ley es un artilugio para lavar culpas. Hay algunos diputados de JXC que están más apurados por votarle el proyecto al Gobierno que los propios oficialistas y la experiencia muestra que una vez votado el proyecto en general, el resto es fulbito para la tribuna.” –Se quejó una alta fuente del núcleo más duro. Así las cosas, ésta es la radiografía de Juntos por el Cambio: los halcones del PRO profundizan su rechazo al proyecto, los más moderados van por la abstención. Dentro de la UCR y la Coalición Cívica la opción sería votar a favor en la general y abstenerse en los artículos que sostienen las medidas para cumplir las metas del Fondo. Nadie quiere ser el padre del ajuste.

La interna de No tan Juntos por el Cambio recrudeció de manera significativa en la semana.

El episodio de levantarse e irse de las bancas durante el discurso del Presidente ante la Asamblea Legislativa generó enojos de alto voltaje. Uno de los enojados fue Mauricio Macri, cada vez más activo, quien estalló en reproches contra todos los que no abandonaron sus bancas.

Quedó reconfortado con el gesto del nuevo embajador de los Estados Unidos, Marc Stanley, quien lo fue a visitar a su casa de Acassuso. En el pensamiento de Macri sigue vigente la idea de competir por la Presidencia en 2023.    

Como habrá apreciado el lector, todo lo que emana de la política vernácula es pelea.

Actúan y hablan como si nada tuvieran que ver con la realidad que padecen millones de argentinos para quienes el diario vivir es una constante penuria.



domingo, 20 de junio de 2021

Modo electoral. Maquinaciones… @deaalgunamaneraok...

 Modo electoral. Maquinaciones…  


"Qué gripe de mierda", Mauricio Macri. Dibujo: Pablo Temes

Cristina entró en la campaña del FdT y en JxC crece la disputa por candidaturas. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 19/06/2021  y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.


Cristina Fernández de Kirchner está preocupada. Su obsesión por el triunfo electoral la obligó a poner la lupa en al menos tres aspectos: la inflación y la disparada de los precios antes de las elecciones; las restricciones y la falta de clases presenciales en PBA y el avance del plan de vacunación.  

La aparición de resultados adversos en sondeos del conurbano bonaerense encendió las alarmas. Al menos dos consultoras de confianza para el Frente de Todos le advirtieron que los números no iban bien en la Provincia. La ex presidenta en funciones se vio obligada a salir a la cancha para apuntalar a Alberto Fernández –cuyos derrapes tolera cada vez menos– pero por sobre todo para auxiliar a Axel Kicillof. “El clima social en el AMBA está enrarecido, con las vacunas y el discurso sanitarista no nos alcanza, la gente no llega a fin de mes y necesita plata en el bolsillo”, advirtió un hombre del oficialismo que recorre con frecuencia el Conurbano. 

CFK se mostró en público con el gobernador el lunes pasado y aprovechó para, una vez más, cargar contra el sistema de salud y la necesidad de reformarlo. “Hay que hacerlo más eficiente, no puede ser que terminemos subsidiando a las prepagas con cada afiliado que atendemos en el sistema público”, aseguran fuentes de la Provincia que se preocupan por negar cualquier intento de estatización. Lo que no dicen es que, en la actualidad, ya existen mecanismos para el recupero de lo invertido en la atención de pacientes que cuentan con cobertura de alguna de las otras dos patas del sistema: obras sociales y prepagas. Es necesaria una reforma integral del sistema de salud en la Argentina pero un tema de tamaño interés público no puede resolverse sobre la base de un plan de política partidaria como el proyecto de salud de La Cámpora, sino mediante el consenso con todos los sectores políticos.  

Pero los conocedores de la interna del Frente contra Todos aseguran que, en realidad, lo que la vicepresidenta buscó fue generar estrépito para sacar del centro de la escena los desaguisados verbales del Presidente, algo que la enfurece.   

Axel Kicillof, Daniel Gollan y Nicolás Kreplak tuvieron que ceder en su afán proteccionista de cuarentenas eternas ante la inminente campaña electoral y la irrupción de CFK. Los principios, el cuidado de la gente y las explicaciones técnicas ahora pueden esperar. Se trata de esa capacidad asombrosa del kirchnerismo de cambiar de posturas y principios como de disfraz. Ahora en el AMBA se puede decir que las escuelas están abiertas; aunque en algunos casos la presencialidad sea solo de una hora, lo que, en los hechos, complica aún más la vida a los padres que pierden más tiempo en llevar y buscar a sus hijos de lo que efectivamente estarán en las aulas. Para colmo de males el Gobierno propuso que los alumnos vuelvan a quedar eximidos de la repitencia. El Ministerio de Educación analiza crear una “unidad pedagógica” para los ciclos lectivos 2020, 2021 y 2022. Esto quiere decir que, como ocurrió el año pasado, todos los alumnos pasarían de grado o de año acrediten o no los respectivos conocimientos. La Ciudad ya advirtió que se opondrá. Y el gobierno nacional ya suspendió las Pruebas Aprender para que no quede constancia del desastre educativo que generaron. 

La irrupción de CFK apuró los tiempos de la campaña electoral. La perspectiva de un resultado desfavorable actuó a modo de catalizador para reverdecer una unidad ligada al espanto. La empresa para el oficialismo es difícil porque se trata de ganar con la suficiente amplitud que le permita alcanzar el quórum propio en la Cámara de Diputados. Un triunfo por escaso margen sería un fracaso porque alejaría al kirchnerismo de avanzar con la reforma judicial, elemento clave del plan de impunidad urdido por la vicepresidenta. 

Los cabildeos de Juntos por el Cambio.  

“Todo está encaminado dependiendo de la lente con que se mire las negociaciones”, grafica una fuente de JXC. Horacio Rodríguez Larreta, Mauricio Macri –cuyo derrape verbal acerca de la pandemia fue brutal e imperdonable– y Patricia Bullrich coinciden en una sola cosa: la necesidad de ampliar el espacio. El resto es todo materia de discusión.  

Es un secreto a voces que María Eugenia Vidal irá por la Ciudad cumpliendo con su deseo y con la planificación del jefe de Gobierno porteño. Si esto se confirma, hay que ver qué hará Patricia Bullrich encaminada a dirimir la cuestión en las PASO. “Patricia no va a ceder, está convencida de dar la pelea en la Ciudad”, manifiesta un protagonista de estas horas de negociaciones febriles. Algunos creen que, finalmente, la ex ministra de Seguridad pedirá, como moneda de cambio, lugares para su gente en la lista de candidatos a diputados.  

Sin embargo, donde el conflicto interno no encuentra solución hasta ahora es con los integrantes del espacio en la provincia de Buenos Aires, territorio clave en el que la oposición busca limar el poder electoral del kirchnerismo.

Jorge Macri, con el respaldo de algunos intendentes y del peronista Joaquín de la Torre, resiste la idea de ampliar el espacio y del desembarco de Diego Santilli en lo que considera “su territorio”. “Hay algo de derechos adquiridos y mucho de egoísmo. No quieren perder protagonismo ni ceder centímetros de competencia en unas posibles PASO ampliadas. Tienen reparos con José Luis Espert y con Ricardo López Murphy. En realidad están peleando con Horacio y su expansión territorial. Si esa disputa de poder tiene el aval de Mauricio es algo que no te puedo asegurar¨, señala otra voz de JxC. Existe como telón de fondo la lucha por el liderazgo total del espacio: Macri vs. Larreta, como lo reconoció con fastidio Elisa Carrió. 

La figura de Facundo Manes también molesta a los caciques amarillos de la Provincia. Es una nueva amenaza que llega desde el radicalismo con buena imagen pública, alto nivel de conocimiento y que, encabezando una lista, puede empujar a la UCR  provincial a una pelea más ambiciosa. “Hasta que no esté del todo cerrado no nos vamos a preocupar. Los salvadores externos a veces se caen por su propio ego”, sostienen desde esos ámbitos del PRO. 

Quienes priorizan sus egos por sobre la construcción de un espacio amplio que permita evitar que el kirchnerismo alcance en las próximas elecciones el control del Congreso deberían tener muy presente la certera frase del diputado Waldo Wolff: “Estamos a siete diputados de Venezuela”.

Producción periodística: Santiago Serra.