La vida es un tablero de ajedrez en donde los cuadros blancos son los días y los cuadros negros son las noches... Nosotros, somos las piezas que vamos de aquí para allá para caer al final en el cuadro de la nada... De Alguna Manera... Una Alternativa…
Desde la recuperación de
la democracia, la Argentina vivió la mayor parte del tiempo bajo el azote de la inflación. Este mal que complica y
deteriora la vida de la gente se ha instalado a la manera de una enfermedad
crónica que desnuda los males del país. Males que tienen en la dirigencia
política una causa fundamental. Desde 1983 a la fecha se han sucedido en el
poder diferentes enfoques ideológicos.
El denominador común es que todos fracasaron.
Fracasó el Plan Austral. Fracasó el Plan Primavera que desembocó en la
hiperinflación que acabó con el gobierno de Raúl Alfonsín. La Convertibilidad
engendró una bomba de tiempo que le explotó al gobierno de Fernando de la Rúa
dando paso a la brutal crisis de 2001/2002.
La compleja matriz económica de la Argentina representa un desafío al que la
dirigencia vernácula no le ha encontrado la solución. El 7,7% de inflación de marzo es una muestra más de ello
que sorprendió incluso al propio gobierno que no esperaba semejante escalada.
Cuando se escucha la banalidad de los argumentos que esgrime el oficialismo
para explicar las causas de tamaño descalabro, se entiende perfectamente el
porqué de esta dramática realidad, que hace cada día más cuesta arriba la vida
de la ciudadanía.
En caso de ser gobierno, la oposición no tiene margen para repetir
errores.
A través de la inefable portavoz presidencial, Gabriela Cerruti se la atribuyó a la guerra en Ucrania y
a la sequía. Basta recordar que, a pesar del impacto mundial de esa guerra, la
inmensa mayoría de países tienen niveles bajísimos de inflación que, por otra
parte, han comenzado a descender. Lo mismo vale para la sequía.
Esta inflación que a lo largo de los últimos cuarenta años ha afectado a la
economía tiene una consecuencia palpable y dolorosa: el aumento de la pobreza.
La Argentina de hoy muestra niveles de pobreza y de miseria muy superiores a los que
tenía hace 40 años. Y lo notable es que la dirigencia no se hace cargo de ello.
Y el problema es que esto va socavando los parámetros de la vida en democracia.
No es lo mismo gobernar un país en el que la pobreza es mínima, a hacerlo en
otro en que los niveles de pobreza se acercan al 50% con un fuerte componente
estructural.
Estamos asistiendo al fiasco más estrepitoso que ha
experimentado el peronismo desde 1983 a la fecha. El humo de Sergio Massa se va
adelgazando a medida que la improvisación va haciendo sentir sus consecuencias.
Las medidas que va ensayando tienen cada vez menos efectos. El dólar soja 3, precios
justos, recompra de deuda, dispensas del Fondo Monetario Internacional, ayuda
del gobierno de los Estados Unidos, ayuda del mundo árabe, ayuda de China y un
largo etcétera han terminado en un chasco. Vale decir que nos vendió el cuento
del salvador utilizando las mismas recetas perimidas del pasado.
Nada da resultados. Y esto no debería sorprender a nadie. Un gobierno dividido
y lleno de contradicciones internas no puede generar sino incertidumbre y
desconfianza. Un gobierno con exponentes de la talla de Aníbal Fernández o el
secretario de Comercio Interior Matías Tombolini, no tiene posibilidades ni capacidad de
evitar el colapso. El primero, no tuvo mejor idea que apelar a la extorsión
para dar su veredicto en materia de inseguridad.
“Si gana Juntos por el Cambio, las calles estarán regadas de sangre y muertos”. ¿Y cómo están ahora? El segundo, al igual
que la portavoz, le echó la culpa de la inflación a la sequía y agregó a los
formadores de precios. Otra vez sopa, con funcionarios de una intrascendencia e
incapacidad alarmante.
Atención: esto debería también ser tenido muy en cuenta
por los líderes de No Tan Juntos por el Cambio, atrapados hoy en una pelea
anacrónica por candidaturas que, como consecuencia, los aleja de la agenda de
la sociedad. En el hoy de la oposición escasea la certidumbre y abunda la duda,
algo que, con todas las letras, expresó el mundo empresarial que se dio cita
para escuchar a Mauricio Macri el jueves pasado, durante el almuerzo
organizado por el Consejo Interamericano del Comercio y la Producción (CICyP).
Un hombre de negocios que prefirió mantener en reserva su nombre expresó su
desconcierto: “Salvo muy pocas excepciones, no veo las herramientas necesarias
para atacar los problemas que tienen al país contra las cuerdas. Hay discursos
políticos y decisión de los líderes opositores, pero cuando te juntás con
quienes suenan para desempeñar cargos en Economía, o el Banco Central, notás
que no pueden disimular el temor, la preocupación y hasta te diría, el espanto.
Yo los entiendo, pero eso no nos da ninguna seguridad”.
En caso de ser gobierno la oposición no tiene margen para
repetir errores. El diagnóstico inicial debe ser certero, realista y crudo.
Claro que para eso deben dejar atrás de una vez por todas las luchas de poder
interno. Aunque se cansen de repetir que son contrapuntos normales dentro de
una coalición, lo que ocurrió esta semana fue lisa y llanamente una brutal
pelea por el poder.
Horacio Rodríguez Larreta comprendió que no puede esperar
nada de Mauricio Macri y, de una vez por todas, decidió destetarse de su líder
político para sostener su alianza con una parte del radicalismo. Aún queda
mucho camino por recorrer y, si siguen viviendo de espaldas a la gente, nada
bueno podremos esperar de los encargados de sacarnos de este estancamiento.
El "Globo" pudo cortar la racha de cinco derrotas en fila en el
torneo pero no gana desde la cuarta fecha y se fue silbido por los hinchas en
el estadio Tomás Adolfo Ducó.
Argentinos Juniors rescató un punto de visitante con dos jugadores
menos pero se fue muy disconforme con el arbitraje de Rey Hilfer.
El "Globo" no levanta cabeza ya que lleva ocho fechas sin ganar con
tres empates y cinco derrotas y todavía no le encuentra la vuelta a la doble
competencia con la Copa Sudamericana.
El equipo de Diego Dabove se cayó desde que empezó a competir
internacionalmente ya que había sido el último en perder el invicto en el
torneo.
Aún con dos jugadores de más, Huracán no supo cómo generar peligro y dejó
nuevamente una mala imagen ante sus hinchas que despidieron al equipo con
silbidos e insultos.
En un flojo partido en general, Argentinos casi se pone en ventaja antes del
minuto de juego sin patear al arco ya que Fabricio Domínguez tiró un centro
desde la derecha, el chileno Guillermo Soto rechazó hacia al medio, la pelota
le pegó a Santiago Hezze y después al arquero Lucas Chaves, quien sin querer
salvó su valla del gol en contra.
La respuesta de Huracán fue inmediata porque a los cuatro minutos, Valentín
Burgoa exigió a Federico Lanzillotta con un buen zurdazo que el arquero sacó al
córner.
Después, el partido cayó en un pozo porque el "Bicho" tuvo la pelota
pero no supo a entrarle a la defensa local, que tuvo serias dificultades para
atacar.
Para la segunda parte, Gabriel Milito realizó tres cambios pero tuvo que
cambiar el plan rápidamente porque a los 6 minutos se quedó con uno menos por
la cuestionada expulsión de Mac Allister.
El defensor, hermano de Alexis, bajó a Guillermo Benítez cuando el lateral
encaraba hacia el arco y el árbitro Leandro Rey Hilfer lo resolvió con una
amarilla pero Jorge Baliño llamó desde el VAR en Ezeiza para advertir que
podría tratarse de una falta en ocasión manifiesta de gol.
Así fue que Rey Hilfer cambió su fallo y expulsó al defensor del
"Bicho".
A los 16 minutos, Huracán tuvo las dos mejores ocasionen con un
zurdazo de Soto y enseguida un cabezazo de Cóccaro que pegó en el palo.
La confusión no le permitió al "Globo" crear situaciones de gol y
hasta se salvó de perderlo con uno más por un cabezazo de Cabrera que encontró
bien ubicado a Chaves.
A los 39 minutos, el ingresado Verón cometió una falta en la mitad de cancha y
cuando el árbitro la cobró reaccionó tirando la pelota lejos y Rey Hilfer,
apresuradamente, le sacó la segunda amarilla.
Milito protestó airadamente el fallo y también se fue expulsado.
Pese a la ventaja numérica, el "Globo" quedó expuesto por sus
falencias ofensivas y chocó con la rocosa defensa visitante que sostuvo el
punto con firmeza.
Síntesis:
Huracán: 0
Lucas Chaves; Guillermo Soto, Fernando Tobio, Joaquín Novillo y
Guillermo Benítez; Santiago Hezze y Federico Fattori; Gabriel Gudiño, Valentín
Burgoa, Juan Gauto; y Matías Cóccaro. DT: Diego Dabove.
Argentinos Juniors:0
Federico Lanzillotta; Kevin Mac Allister, Marco Di Cesare y Lucas Villalba;
Javier Cabrera, Franco Moyano, Matías Vera y Rodrigo Cabral; Francisco González
Metilli y Gabriel Ávalos. DT: Gabriel Milito.
Cambios en el segundo tiempo, antes del
inicio, Federico Redondo por Vera (A), Santiago Montiel por Cabral (A) y Gastón
Verón por Domínguez (A); 9m. Luciano Sánchez por Ávalos (A); 16m. Jonás Acevedo
por Gudiño (H); 33m. Nicolás Cordero por Burgoa (H); 35m. Pablo Minissale por
Cabrera (A);
Amonestados: Cordero (H); M. Vera, Di Cesare (A)
Incidencias: en el segundo tiempo, 6m. expulsado Kevin Mac Allister (A); 39m.,
expulsado Gastón Verón (A)
Belgrano celebró un justo triunfo ante Huracán en la
vuelta a su estadio de Alberdi.
El volante Ulises Sánchez abrió el marcador a
los 33 minutos del primer tiempo, mientras que el lateral Lucas Diarte en el
complemento, a los 21 anotó el tanto definitive.
Belgrano de Córdoba obtuvo esta noche su segunda victoria consecutiva al
imponerse 2 a 0 ante Huracán, que sufrió su quinta derrota en fila en el
campeonato, en encuentro que fue válido por la undécima fecha de la Liga
Profesional de Fútbol (LPF) y significó la vuelta del conjunto cordobés a su
estadio de barrio Alberdi.
El volante Ulises Sánchez
abrió el marcador a los 33 minutos del primer tiempo, mientras que el lateral
Lucas Diarte en el complemento, a los 21 anotó el tanto definitivo.
Los 'celestes' venían de
vencer 3 a 0 a Unión, redondeando una semana muy positiva anotando en estos dos
partidos cinco de los 10 goles que acumula en el certamen, y alcanzaron los 18
puntos, lo que los mantiene en la zona alta de la tabla, compartiendo la cuarta
ubicación junto a Defensa y Justicia, Lanús, Racing y Rosario Central.
Es complicado el panorama para los de Parque Patricios, sufrieron su quinta
derrota en fila, acumulan seis juegos sin triunfos y con 12 puntos se mantienen
en la zona baja de la tabla sin poder levantar cabeza luego de un arranque de
temporada que había sido muy alentador.
Muy superior fue el local
en el primer tiempo, entonado tras la victoria del sábado ante Unión y con el
empuje de su gente que copó el remozado estadio de barrio Alberdi, y dispuso de
varias situaciones en la primera media hora de juego.
Las oportunidades en los
pies de Pablo Vegetti, Franco Jara o Bruno Zapelli no tuvieron mayor peligro
para el arco del 'globo', como sí la tuvo la chance que dispuso Matías García,
pero se topó con una gran respuesta del arquero visitante Nicolás Campisi que
le ahogó el grito de lo que hubiera sido la apertura del marcador.
Mientras, los de Diego
Dabove, que apostó a la rotación, seguían inmersos en las mismas dudas que
arrastran de las últimas fechas, sin lograr buenas conexiones entre sus
jugadores creativos pasó sin trascender esa primera mitad.
Hasta que a los 33 minutos
apareció por el medio Sánchez, encaró desde tres cuartos de cancha con pelota
dominada, aprovechó que los centrales visitantes se abrieron y antes de
ingresar al área remató con potencia por abajo para vencer a Campisi y gritar
el 1 a 0.
Lo tuvo para aumentar Jara
sobre el final de la primera mitad, pero Campisi evitó una nueva caída de su
valla.
Hubo solo un esbozo de
reacción del 'Globo' en el complemento, Juan Gauto y Juan Garro tomaron mayor
protagonismo en el afán de generar juego, pero no encontraron espacios ni
conexión con los delanteros para inquietar a la última línea local.
Mientras, Belgrano seguía
buscando y así fue que pudo aumentar cuando en un córner desde la derecha,
Sánchez la tiró pasada afuera del área y de volea la tomó el ingresado Diarte,
que con un zapatazo de zurda clavó la pelota junto al palo izquierdo de
Campisi, que nada pudo hacer para evitar el 2 a 0.
Diarte había ingresado
desde el inicio del segundo tiempo debido a la conmoción que sufrió el chileno
Alex Ibacache en los minutos finales de la etapa inicial.
Dabove movió el banco,
mandó a la cancha a Burgoa, Hezze, Benítez y Cócaro, pero ninguno tuvo
trascendencia, por lo que el local no pasó sobresaltos, se abroqueló en defensa
e intentó disputar el juego lejos de su arco.
El sábado Belgrano
visitará a Gimnasia en La Plata en la continuidad del certamen y Huracán ese
día buscará revertir su imagen cuando reciba a Argentinos Juniors en el Ducó.
Síntesis:
Belgrano: 2
Nahuel Losada; Juan Barinaga, Alejandro Rébola, Erik Godoy y Alex Ibacache;
Ulises Sánchez, Santiago Longo, Bruno Zapelli y Matías García; Franco Jara y
Pablo Vegetti. DT: Guillermo Farré.
Huracán: 0
Nicolás Campisi; Guillermo Soto, Gastón Sauro, Joaquín Novillo y César
Ibáñez; Juan Garro, Fernando Godoy, Federico Fattori y Juan Gauto; Nicolás
Cordero y Juan Manuel García. DT: Diego Dabove.
Gol en el primer tiempo: 33m. Sánchez (B).
Gol en el segundo tiempo: 21m. Diarte (B).
Cambios en el segundo tiempo: Al comenzar Lucas Diarte por Ibacache (B); 13m. Santiago Hezze por Godoy
(H), Valentín Burgoa por García (H) y Guillermo Benítez por Ibáñez (H); 23m.
Ariel Rojas por García (B); 32m. Matías Cócaro por Garro (H); 34m. Gabriel
Compagnucci por Zapelli (B) y Fabián Bordagaray por Jara (B) y 45m. Ibrahim
Hesar por Barinaga (B).
El experimentado delantero se destacó con sus
primeros goles en el "millonario" con el primero, de penal, a los 10
minutos del primer tiempo y luego amplió la ventaja a los 16 de la etapa
inicial, mientras que en el segundo tiempo, a los 14', Esequiel Barco, también
de penal, cerró la victoria del líder en Parque de los Patricios. Rondón
estuvo cerca del triplete pero Lucas Chaves le atajó el penal que luego fue
pateado por Barco por decisión del árbitro Facundo Tello tras invasión del
propio ex-Independiente. Después de ese penal advertido por el VAR, a cargo de Nicolás
Lamolina, Huracán se quedó con uno menos por la expulsión del defensor Patricio
Pizarro (10m. ST).
El venezolano, de 33 años, no marcaba un gol en un
club desde marzo de 2022 cuando jugaba en Everton, de Inglaterra, pero Martín
Demichelis le dio la confianza para ser titular y fue clave para el triunfo en
el estadio Tomás Adolfo Ducó.
River se recuperó de la derrota en
la altura de La Paz ante The Strongest (3-1) y con 24 puntos se mantiene como
líder del torneo 2023 de la Liga Profesional.
Además, el "millonario"
ganó su quinto partido seguido en el campeonato luego de la dolorosa caída ante
Arsenal y todos fueron con la valla invicta. Huracán, en cambio, no aprovechó el envión anímico del triunfo en el
debut en la Copa Sudamericana y extendió su mal presente en el medio local con
seis partidos sin ganar con cuatro derrotas en fila. El equipo de Martín Demichelis jugó un gran partido desde el
arranque y se sacó rápidamente de encima el peso del tropiezo en Bolivia. De
la mano de Ignacio "Nacho" Fernández, quien volvió a la titularidad
junto a Milton Casco y Leandro González Pirez, el conjunto de Núñez fue pura
eficacia y a los 15 minutos ya ganaba por 2-0. A los 9 minutos Rondón fue derribado por Patricio Pizarro, el
juvenil por el que apostó Diego Dabove desde el inicio, cuando estaba listo
para definir mano a mano tras un buen pase de Lucas Beltrán. Pese a la presencia del goleador en cancha, el propio venezolano se
hizo cargo de la ejecución y con calidad gritó su primer gol con la camiseta de
la Banda, a los 10 minutos. Apenas seis minutos después, nuevamente Rondón recibió una buena
asistencia de Esequiel Barco y con la jerarquía definió de zurda y la pelota
entró por el medio de las piernas del arquero Lucas Chaves. El dominio de River no cesó pese a los dos goles de ventaja y hasta
los 35 minutos estuvo más cerca del tercero que Huracán del descuento. El local
tuvo una leve reacción en los últimos minutos y en ese momento apareció el
campeón del Mundo Franco Armani para sacarle un fuerte remate del uruguayo
Matías Cóccaro que pudo haber sido el 1-2 justo antes del entretiempo. Demichelis aprovechó el buen rendimiento del equipo y para el
segundo tiempo salió a jugar sin Beltrán pensando en el partido del próximo
miércoles contra Gimnasia y Esgrima La Plata en el Monumental. Ya a los 3 minutos Barco estrelló un tiro libre en el palo y
demostró que River no se iba a conformar con los dos goles del inicio. A los 9 minutos, Pizarro, quien tuvo una tarde noche para el olvido,
tomó de la camiseta a Rondón en el área pero Tello no lo vio y Lamolina lo
llamó desde el VAR para revisar la jugada. El árbitro concedió el penal correctamente y expulsó al joven
defensor del "globo". Rondón tomó la pelota para su triplete pero Chaves le adivinó la
intención aunque el rebote fue aprovechado por Enzo Pérez que marcó el 3-0. Sin embargo, pese a la alegría del capitan, Tello hizo repetir el
penal por invasión de Barco y el propio mediocampista recibió la pelota de
Rondón que le cedió la ejecución. Con el 3-0 y Huracán con uno menos se terminó por adelantado el
trámite todavía con media hora por delante. Demichelis movió piezas, cuidó jugadores importantes y le dio
minutos a otros como Matías Suárez, mientras buscaba el cuarto y el público de
Huracán trataba, en vano, de levantar a su equipo desde las tribunas.
Después del paso en falso en la altura, River le sacó cuatro puntos
a San Lorenzo y cinco a Talleres, se aseguró terminar la próxima fecha
nuevamente como líder y afianza cada vez más la idea del nuevo ciclo de
Demichelis tras la salida de Marcelo Gallardo. Si algo le faltaba a la oscura presentación de Huracán fue el corte
de luz que tuvo el estadio a los 41 minutos del segundo tiempo que demoró otros
cinco el final del encuentro.
Síntesis: Huracán:0
Lucas Chaves; Guillermo Soto, Fernando Tobio, Patricio Pizarro y Guillermo
Benítez; Santiago Hezze, Federico Fattori, Gabriel Gudiño y Lucas Castro, Juan
Gauto y Matías Cóccaro. DT: Diego Dabove. River: 3
Franco Armani; Milton Casco, Leandro González Pirez, Paulo Díaz y
Enzo Díaz; Enzo Pérez y Rodrigo Aliendro; Esequiel Barco e Ignacio Fernández;
Lucas Beltrán y Salomón Rondón. DT: Martín Demichelis.
Goles en el primer tiempo: 10m.
Salomón Rondón, de penal (R) y 16m. Rondón (R)
Goles en el
segundo tiempo: 14m. Esequiel Barco, de penal (R)
Cambios en
el segundo tiempo: Al inicio, Agustín Palavecino por Beltrán (R); 15m. Gastón Sauro
por Castro (H), Santiago Luján por Gudiño (H) y Nicolás Cordero por Cóccaro
(H); 17m. Santiago Simón por Pérez (R) y Miguel Borja por Rondón (R); 28m.
Matías Suárez por Barco (R) y José Paradela por Aliendro (R).
Amonestados: Cóccaro y Gudiño (H). Rondón y Enzo Díaz (R).
Incidencia
en el segundo tiempo: 10m. expulsado Pizarro (H)