domingo, 17 de marzo de 2019

La decadencia de Venezuela se palpa en las calles a cada paso… @dealgunamanera...

La decadencia de Venezuela se palpa en las calles a cada paso…

La realidad de la gente. Castro entrevistó a ciudadanos de a pie, que enfrentan con dignidad una crisis que tiene costados dramáticos e insólitos. Fotografía: Cedoc Perfil / ap

Nelson Castro fue testigo en Caracas del drama humanitario que aqueja a los venezolanos. Apagón, agua contaminada, corrupción y un Estado policial.

La imagen desde la ventanilla del avión que se acerca al aeropuerto de Maiquetia es imponente. La geografía de Caracas es impresionante, la combinación de montañas fértiles y mar le da esa particularidad única de la espectacularidad. Ver desde allá las aguas de un azul-turquesa, ese mar bañando las playas y esa tierra potente, da la idea de un país poderoso y rico.

Todo esto se desvanece cuando el avión toca suelo en el aeropuerto de Maiquetia, se desvanece desde la imagen y también desde la percepción: la autopista deteriorada, poceada, hace el andar tortuoso hasta la plataforma de llegada, y la imagen desolada de los pocos aviones sobre ese inmenso aeropuerto da una idea clara de la decadencia por la cual está atravesando Venezuela. La puerta de entrada marca el contraste del aeropuerto con la majestuosa geografía de Caracas.

Entrar a Caracas no es fácil, salir de Caracas, tampoco. Entrar significa superar una barrera de sospechas: si se va por un día, por qué por tan poco; si se va por más días, por qué por tanto tiempo; si no se tiene impreso el pasaje de vuelta, la reserva del hotel, por qué no se la tiene.


En este contexto la idea que uno tiene es que es absolutamente vulnerable y que todo es impredecible, tal vez dependiente del humor con el cual el empleado o empleada de Migraciones está dispuesto a hacer cumplir la férrea estructura de control que se cierne contra todo aquel que llega a Caracas. Si se arriba con material para filmar, celulares, cámaras implican un escollo de una hora. Trasponer todos los controles del aeropuerto da una clara percepción de la situación de tensión, que se corrobora con la enorme cantidad de personal de la policía, de la guardia nacional, que se despliega sobre un aeropuerto prácticamente desierto.

Fui a Caracas con la idea de conocer y reflejar la realidad de la gente, por eso tomé la decisión de no entrevistar a ningún político, ni del gobierno ni de la oposición. La idea fue hablar con la gente y escucharla. Pensé que debíamos ir a buscar esa dura realidad en lugares marginales de Caracas, pero la sorpresa apareció al primer paso: a cuatro kilómetros del aeropuerto de Maiquetia, sobre la autopista que lleva hasta el centro de Caracas, nos encontramos con la gente tratando de recoger el agua de un caño, un caño que juntaba el agua que venía de las casas ubicadas sobre la ladera de una de las montañas –zona de favela–, por lo tanto, un agua absolutamente contaminada. La gente la utilizaba, allí había madres, padres, jóvenes, había niños.


Me impactó ver una bebé de tres meses sola en un cochecito, tapada, sobre un montículo, mientras su madre lavaba su ropita, con la que luego la arroparía, en agua contaminada. Esa agua contaminada también se utiliza para cocinar, algunos la beben; solo los que pueden consumen agua mineral. Con la maravillosa ajenidad que da la infancia, los niños se zambullen una y otra vez en ese pequeño estanque natural para refrescarse y vivir con aires de aventura esa realidad tan trágica. En ese contexto, una mujer nos relataba la angustia que vive por estos días, ya que su hijo está enfermo y no consiguen los antibióticos que necesitan para tratarlo, entonces se encomiendan a curanderas para mejorar la salud, lo que no puede lograr por los medicamentos que ni en hospitales ni en farmacias se consiguen.

En ese entramado aparecen las expresiones de la gente, que, con una dignidad increíble, enfrenta esa circunstancia indigna de supervivencia. Todos saben que lo importante es vivir el hoy, sin poder prever que es lo que va a deparar el mañana. Venezuela es un país rico, tiene petróleo, los llanos del Orinoco que son de una enorme fertilidad. Ese país rico ha estado castigado fundamentalmente por la corrupción.

La Venezuela democrática que surgió después de la brutal dictadura de Marcos Pérez Jiménez fue una Venezuela que lamentablemente no pudo acompañar ese ejercicio de la democracia con decencia y libertad.

Como consecuencia de esa indecencia durante los años de plenitud democrática, a la circunstancia institucional de la democracia no la acompañó el bienestar de la gente. Dos partidos se alternaron en el ejercicio del poder y ninguno de los dos se preocupó por mejorar esa situación.

Como consecuencia de esa desigualdad social surgió Hugo Chávez, quien fue producto de la corrupción política, de una falsa ilusión de mucha gente que creyó que en aquel golpista iba a encontrar la decencia que no había traído la política ortodoxa. La realidad demostró que se equivocaron, de una manera que hoy les pesa a muchos de aquella mayoría que lo votó, y tanto les pesa que los fuerza –a los que pueden– a salir del país.

A aquella Venezuela desigual le siguió más desigualdad de la mano de Chávez. A aquella Venezuela castigada por la pobreza le siguió una Venezuela igualmente castigada por la pobreza generada por Chávez. La corrupción ahora se disfraza de progresismo político, pero es tan nociva, tan brutal, tan evidente, tan palpable y tan cruel como lo era en aquellos años previos a este chavismo que tiene como objetivo –aún muerto Chávez– perpetuarse en el poder indefinidamente.


El apagón de estos días ha sido producto de la corrupción, de la falta de mantenimiento de la infraestructura. La decadencia de Venezuela se palpa en las calles a cada paso, se observa en los modelos de autos –no hay autos nuevos–, los concesionarios importantes no venden autos nuevos, ni de su propia marca. En grandes salones desolados se ven dos o tres autos usados a la venta. Los edificios, con sus frentes grises por el paso del tiempo, sin la pintura que le dé la frescura de la renovación, marcan esa decadencia.

En esa Venezuela de la decadencia, a nadie le sorprendió esta crisis energética, que seguramente no será la última, que no termina de resolverse y que Maduro busca culpar, atribuir a la cibertecnología del gobierno de Trump. Hecho que desmienten todos los científicos, los estudiosos, los técnicos importantes de Venezuela, que confirman que esta crisis –que no ha cesado– es producto de la falta de mantenimiento.

La falta de mantenimiento que lleva a esta crisis energética agravada por la falta de agua no ha hecho más que transformar este drama en una tragedia, porque producto de la falta de energía eléctrica murieron 21 pacientes en los hospitales de Venezuela por no poder ser asistidos –entre otras cosas– con los tratamientos de diálisis que les correspondían.

La Venezuela de hoy es una Venezuela del imponderable, en la cual las personas sienten afectada su dignidad a cada paso, no solamente porque no tienen luz ni agua, sino porque no pueden planificar; quien hoy quiere comer fideos tal vez deba optar por arroz, porque no hay fideos, y quien mañana quiera carne deba optar por polenta, porque mañana habrá polenta y no carne. La dignidad se ve afectada porque el trabajo formal hoy no asegura la supervivencia y es en la informalidad donde aquel que quiere tener acceso a los elementos mínimos para subsistir puede hacerlo.

La fachada de normalidad de Venezuela forma parte de esta mentira que castiga a tanta gente que hoy encuentra que la única esperanza puede ser tal vez el cambio de gobierno, sin darse cuenta de que nadie sabe cuándo vendrá el cambio y que por supuesto vendrá con muchas ilusiones, pero va a ser muy difícil la reconstrucción de esta Venezuela empobrecida, rica pero castigada por este mal que es el de la corrupción política al cual se agregan la precariedad y la intolerancia. La división social es profunda, la antinomia es clara y evidente y la pregunta es: ¿Cuánto demorará en solucionarse esto?


En esta Venezuela así constituida lo que fundamentalmente se observa a cada paso es la presencia de las fuerzas de seguridad, es un Estado policíaco, donde la libertad de expresión es difícil, donde el miedo existe, donde la impresión de ser vigilado es permanente. En esta Venezuela así constituida, trabajar de periodista es complejo, exige muchos cuidados y la libertad de expresión se transforma en muchos casos en un imposible. En este presente, la verdad es una de las tantas víctimas de este enfrentamiento político. Los medios de comunicación del régimen de Maduro dan idea de una épica que hoy no existe y dan idea de un país de felicidad y alegría que los rostros de tristeza y los testimonios de miles y miles de venezolanos desmienten a cada paso en cada barrio de Caracas.

La crisis en Venezuela tiene costados dramáticos e insólitos, y uno de ellos se conoció en horas de ayer. Los ladrones tienen problemas también para continuar con su tarea, los hay de varios tipos: porque no consiguen balas para sus armas y entonces muchos de ellos se han quedado sin su “herramienta de trabajo”; porque los que se dedicaban a los secuestros se encuentran con el problema de que las víctimas no tienen dinero para pagar y –obviamente– el secuestro se torna inútil. También sucede que en aquellos secuestros en los cuales se paga algo, lo que se paga tiene tan poco valor que resulta insignificante.

Por último, en muchos de los casos los saqueadores –otro de los delitos– cuando han llegado se han encontrado con que era tarde y ya no había nada. Por lo tanto los delincuentes perciben ahora que la única manera de subsistir es la de encontrar un trabajo honesto, es una de las paradojas increíbles de esta Venezuela dramática y trágica que por momentos tiene aires del Macondo de Gabriel García Márquez.




Brasil habilitó el ingreso de peras y manzanas argentinas… @dealgunamanera...

Brasil habilitó el ingreso de peras y manzanas argentinas…


El acuerdo incluye, además, agudizar los monitoreos y controles en la producción de ambas frutas en nuestro país durante la presente campaña.

© Publicado el domingo 17/03/2019 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Fuente: SENASA

Con la firma de su titular, Carlos Goulart, el Departamento de Sanidad Vegetal e Insumos Agrícolas de Brasil publicó este jueves, en el Boletín Oficial de ese país, la Resolución 2 que autoriza el reinicio de la importación de peras y manzanas desde la Argentina, informó e servicio sanitario de Argentina, SENASA.

La medida, estaba incluida en el acuerdo alcanzado a principios de este mes por el Organismo brasilero con  autoridades del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) – que viajaron por indicación del secretario de Gobierno de Agroindustria de la Nación, Luis Etchevehere – para levantar la suspensión de las exportaciones de peras y manzanas argentinas a ese destino dispuesta por el vecino país tras detectar larvas de carpocapsa en algunos cargamentos de esas frutas.

A propuesta de la Argentina, el acuerdo incluye, además, agudizar los monitoreos y controles en la producción de ambas frutas en nuestro país durante la presente campaña.

“Con la publicación en el Boletín Oficial de Brasil se cumple con lo acordado con las autoridades de ese país y ya estamos en condiciones de reiniciar el comercio de estas frutas argentinas con Brasil” indicó Etchevehere.

En tanto el presidente del Senasa, Ricardo Negri, quien encabezó la delegación argentina que viajó a Brasil a principios de este mes, opinó: “ahora nos toca a nosotros, todos los actores de la cadena de peras y manzanas, públicos y privados en que no haya más intercepciones de carpocapsa, y hagamos las cosas bien para mantener este mercado abierto que significan muchos puestos de trabajo en Río Negro, Neuquén y Mendoza”.




¿Sale CFK... Entra AK?... @dealgunamanera...

Kicillof, el sustituto…

Kicillof... ¿correo de la zarina? Axel Kicillof. Dibujo: Pablo Temes

Después de CFK, aparece como ireemplazable del kirchnerismo, pero pone incómodo a Máximo.

© Escrito por Daniel Bilotta el domingo 17/03/2019 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Eduardo Valdés hizo público algo que el kirchnerismo ya no podía mantener en secreto. Si es conveniente que Cristina Fernández de Kirchner sea candidata presidencial en octubre. Las circunstancias en las que confirmó ese debate podrían configurar un caso de traición en el círculo de incondicionales que rodea a la ex presidenta: lo hizo con ella en Cuba, donde su hija Florencia se trata de un linfedema. Y en apariencia, bajo un delicado estado emocional.

No deja de ser curioso que esa sea la razón invocada por el ex embajador en el Vaticano para hablar del asunto.

Tal vez  de manera injusta, se asocia  la actitud de Valdés con Alberto Fernández. Junto a Felipe Solá, los más convencidos de que “sin Cristina no se puede pero con ella sola no alcanza” para ganarle a Mauricio Macri. Traducido: la alianza con otros afines no mejora el caudal electoral. El ex jefe del Gabinete reclama una autocrítica “para ser mejores de lo que fuimos.” El éxito no acompaña por ahora la infatigable presencia que ocupa en el Instituto Patria.

Es probable que eso despierte viejos recelos en La Cámpora para endilgarle también el lanzamiento de Daniel Scioli. Su candidatura presidencial podría serle útil a Fernando Espinoza si deseara canalizar la disconformidad con un sector del kirchnerismo  que insiste en que suceda a Verónica Magario. Un destino sin encanto y muy por debajo de su expectativa que incluye, si fuese preciso, competir en una primaria por la candidatura a gobernador.  


No sería la primera vez  que combina esfuerzos con Scioli para  oponerse a la voluntad de Cristina, cuyo liderazgo electoral se asienta en el segundo y tercer cordón de ese distrito. En 2015,  Scioli amenazó con competir por fuera del Frente para la Victoria si no se lo consagraba candidato presidencial. Con Julián Domínguez y el respaldo del entonces gobernador forzó una PASO para desplazar a Aníbal Fernández y Martín Sabbatella: la fórmula oficial en la Provincia. Resultó un intento fallido.

Lo que tiene en común aquel episodio con los más recientes es el desafío a la autoridad de Cristina como síntoma de una incertidumbre electoral. Pero acicateada en este presente por otra inquietud indisimulable. La influencia de Axel Kicillof en el círculo más íntimo de la ex presidenta.

Dificultad. ¿Entorpecería el ex ministro de Economía la primaria  entre Solá y Agustín Rossi que imagina Fernández si ella declina su candidatura? 

Nadie lo sabe con certeza. Tampoco Kicillof, el único al que identifican con Cristina quienes aseguran que la elegirían. Es decir: a quien podrían votar en su lugar. Más que la sofisticación para la conjura que le atribuyen sus detractores, el ex jefe del Gabinete se destaca por una racionalidad de apariencia incompatible con la del kirchnerismo. Entre otras cosas, por aplicarla a la lectura de encuestas. Igual que a Solá, no le sorprendió la derrota de Ramón Rioseco en Neuquén.


También  la puso al servicio de aceptar antes que otros el lugar de Kicilloff con Cristina. Quizás por eso este verano apeló a un lenguaje alambicado para describirlo: “Un fenómeno de la política a tener en cuenta.” Tal vez refleje la perplejidad  por alguien de trayectoria en el universo académico que irrumpió de forma casi inesperada en la política: un viaje sin escalas de la línea gerencial en Aerolíneas al Ministerio de Economía.

Acaso en  tributo a Tontos pero no Tanto (TNT),  la agrupación fundada en la UBA con Mariano Recalde, su mentor en la empresa de bandera estatal. 

En  la misión cumplida para Cristina en el Palacio de Hacienda está la clave de su confianza. Exagerados,  algunos justifican traspiés en su gestión por la ocupación que le demandó cumplir con la principal misión encargada: intervenir todas las áreas de gobierno ligadas a Néstor Kirchner hasta su muerte.

Lo que incluyó tensiones con el Ministerio de Planificación Federal. Y, por supuesto, con Julio De Vido: el más poderoso de todo el  gabinete. Es posible que allí haya adquirido  la experiencia para encarar una más reciente pero no menos complicada. Otra vez, a pedido de Cristina. Recomponer lazos con Fernández, Rossi y Solá. El protagonismo de Axel llega a provocar alguna incomodidad familiar entre los Kirchner. Máximo suele referirse a él como “el candidato de mi vieja”.

Aunque la fiabilidad del kirchnerismo para efectuar proyecciones a partir de sondeos es dudosa, los estudios de campo le dan sentido a tanta susceptibilidad.


Después de la ex presidenta, Kicillof es el otro actor imprescindible para esa corriente. Es lo que habilita a contemplarlo en cualquier escenario electoral. El más probable hasta ahora, el de candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires. Empezando por Martín Insaurralde en Lomas de Zamora, los intendentes ya desistieron de oponérsele.

Relevo. ¿Podría sustituir a  la ex presidenta si no es candidata?  Dependería de otro factor. “Que Felipe se anime” a ir por la gobernación, desliza el entorno del ex ministro. Serviría además para comprobar si Espinoza lo acepta de candidato de consenso, como asegura. Si no lo hiciese, existe un plan para disputarle la intendencia en La Matanza que excluye a Magario: Cristina la quiere en el segundo término de la fórmula.

No es una posibilidad que entusiasme a los asesores de Solá. Tampoco compartir el binomio presidencial con Cristina satisface a Fernando “El Chino” Navarro, Víctor Santa María ni Nicolás Trotta. Como Fernández, preferirían un candidato surgido de las PASO.  Solá desconfía de algunos de ellos. ¿Será el jefe del Movimiento Evita, al que Cristina no recibe?

Mientras tanto, Kicillof desarrolla una agenda en territorio bonaerense con Teresa García y Carlos “Cuto” Moreno, los legisladores de Unidad Ciudadana delegados por Cristina para esa tarea. Facilitada donde los intendentes simpatizan con el ex funcionario. 

Algo más habitual en el interior que en el Gran Buenos Aires, a excepción de Jorge Ferraresi (Avellaneda) y Mario Secco (Ensenada).

En cualquier hipótesis, podría contrariar la voluntad del peronismo no K y de algunos consejeros de Cristina. Decretar la desaparición del cuerpo que los contuvo 12 años para resucitar en otro nuevo.

Axel podría ser un obstáculo fuera de ese cálculo si, finalmente, encarna al sustituto.




sábado, 16 de marzo de 2019

Nadadora unió a nado las Islas Malvinas… @dealgunamanera...

Nadadora unió a nado las Islas Malvinas…

Neuquina rindió homenaje a los combatientes de Malvinas y cruzó el Estrecho de San Carlos. 

Desafío Malvinas: neuquina cruzó el estrecho de San Carlos para honrar a ex combatientes. A pesar de la baja temperatura del agua, una joven neuquina nadó por el Estrecho de San Carlos y logró la proeza de unir Soledad y Gran Malvina.

© Publicado el viernes 15/03/2019 por el Diario Digital Critica del Sur de la Ciudad de Río Grande, Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.

A escasos días de cumplirse un nuevo aniversario por el comienzo de la gesta bélica entre Argentina y Gran Bretaña, la nadadora de aguas abiertas, Cristina Ganem, cruzó a nado las gélidas aguas del Estrecho de San Carlos y unió las islas Soledad y Gran Malvina.

En homenaje a quienes lucharon y cayeron en la guerra por la recuperación de estas islas argentinas usurpadas por el imperio británico, el miércoles pasado llevó a cabo la proeza. En medio del profundo silencio y con la firme convicción de recordar a los héroes, la nadadora de aguas abiertas inició el cruce a las 8.18, cuando la temperatura del mar era sólo de 11 grados y la costa se encontraba invadida por cachiyuyos, que son algas que alcanzan la superficie.

El desafío, llamado Malvinas, le demandó, exactamente, una hora y 46 minutos. Y tuvo que lidiar contra la fuerza de las aguas, que si bien en el sector más angosto del estrecho tiene una extensión lineal de 4.500 metros, ella tuvo que nadar 5.600 metros por el efecto de la corriente. 


Neuquina rindió homenaje a los combatientes de Malvinas y cruzó el Estrecho de San Carlos.

Tras la hazaña, la nadadora que contó con el respaldo del Instituto de Juegos de Azar de la provincia del Neuquén (IJAN), dijo lo siguiente: "Pude abrazar estas islas en honor a nuestros compatriotas que quedaron aquí y a los que hoy viven". "Quiero agradecer el apoyo que tuve del IJAN", sostuvo y concluyó: "Estoy feliz de representar a Neuquén".



miércoles, 13 de marzo de 2019

La Armada confirma que el A.R.A. San Juan (S-42) sufrió una implosión... @dealgunamanera...

 La Armada confirma que el A.R.A. San Juan (S-42) sufrió una implosión y se hundió más de 900 metros.

A.R.A. San Juan (S-42), que desapareció en el Atlántico Sur el 15 de noviembre de 2017 cuando se dirigía a su base naval en la ciudad balnearia de Mar del Plata, se halla en la actualidad "en un área de escombros de 70 por 75 metros" a una profundidad de 920 metros. Imagen: CEDOC

Frente a la Comisión Bicameral que investiga lo sucedido con el navío, el contralmirante David Burden y el excomandante Rafael Pietro dieron detalles de lo sucedido al submarino.

El contralmirante David Burden, director general de Material de la Armada argentina, afirmó este martes ante el Senado que el submarino A.R.A. San Juan (S-42) se hundió debido a una implosión que sufrió a 920 metros de profundidad. "Definitivamente hubo una implosión", aseguró Burden al brindar testimonio ante la Comisión Bicameral que investiga lo sucedido con el navío, de acuerdo a un comunicado del Senado.

A esa conclusión llegó el fabricante alemán de la embarcación siniestrada, Thyssen Nordseewerke, según le transmitió en una visita que realizó el contraalmirante el pasado 1 y 2 de diciembre a los talleres de la empresa, en la ciudad de Emden (noroeste), junto con el capitán de navío y submarinista Marcelo Flamini.

A.R.A. San Juan (S-42), que desapareció en el Atlántico Sur el 15 de noviembre de 2017 cuando se dirigía a su base naval en la ciudad balnearia de Mar del Plata, se halla en la actualidad "en un área de escombros de 70 por 75 metros" a una profundidad de 920 metros, de acuerdo con el informe de Burden. Al comenzar su última travesía desde Ushuaia, el submarino "estaba bien", hasta que el ingreso de agua de mar por el sistema de tuberías hasta las situadas en la proa del barco provocó "un cortocircuito con incendio de humo, sin llama", agregó el contralmirante.

Burden dijo que esa fue la conclusión a la que se llevó en los talleres de Thyssen Nordseewerke, fabricante del submarino A.R.A. San Juan (S-42), en la ciudad de Emden (Alemania), adonde viajó el 1 y 2 de diciembre pasado junto al submarinista capitán de navío Marcelo Flamini, para establecer la situación estructural del buque tras el hundimiento.

Burden dijo además que cuando inició la última travesía marina el submarino “estaba bien”, que siempre confió en las decisiones que adoptaban los comandantes de los buques y el jefe de la fuerza de submarinos, y aprovechó su contacto con los legisladores para mostrarles un gráfico en el que se veía claramente el sistema de tuberías por el que se cree que habría ingresado agua de mar hasta las baterías de proa provocando “un cortocircuito con incendio de humo, sin llama”.

Ante la comisión del Senado también se presentó contralmirante retirado Rafael Pietro, excomandante de la Flota de Mar al momento de la desaparición del A.R.A. San Juan (S-42), quien recordó que el 22 de noviembre de 2018 se comenzó a hablar de “una posible implosión” en el marco de una videoconferencia del entonces comandante de Alistamiento y Adiestramiento, contralmirante Luis López Mazzeo, “con el comandante del Comando Sur de Estados Unidos”, Kurt Tidd.

Durante las tareas de búsqueda del submarino, "jamás hubo una disidencia con el comando ruso, de Estados Unidos y británico respecto de qué se hacía" para hallarlo, afirmó Pietro en su presentación. La comisión bicameral, que se constituyó por el plazo de un año para investigar el siniestro que sufrió el buque, solicitó una prórroga de su vigencia hasta el próximo 31 de julio, petición que deberán validar las autoridades de ambas cámaras legislativas.

D.S.

(Fuente www.perfil.com). El periodismo profesional es costoso y por eso debemos defender nuestra propiedad intelectual. Robar nuestro contenido es un delito, para compartir nuestras notas por favor utilizar los botones de "share" o directamente comparta la URL. Por cualquier duda por favor escribir a: perfilcom@perfil.com

martes, 12 de marzo de 2019

Vivir en banda… @dealgunamanera...

Vivir en banda…

VERDE DESESPERANZA. Nicolás Dujovne. Dibujo: Pablo Temes

La franja fijada al tipo de cambio es la madre del temblor financiero. Aspiración y voto útil.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 10/03/2019 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

"No estamos preocupados por el dólar”. Fue una de las frases de la semana. La pronunció el ministro de la Producción, Dante Sica. Fue la misma frase que se dijo desde el Gobierno cuando ya arreciaba la corrida cambiaria de abril del año pasado, que fue el origen de la crisis económica de la cual no se termina de salir.

Curioso que un hombre de la experiencia de Sica no haya aprendido la lección de la historia que demuestra lo riesgoso que es para un gobierno tapar el sol con la palma de la mano y no entender, además, el afecto que el aumento del dólar tiene sobre los precios de los productos de consumo masivo.  

La tendencia que se percibe en los así llamados es a acompañar la apreciación del dólar, que  a fin de septiembre estuvo en $ 42, lejos de ese máximo que hoy sería $ 52, arriba de la banda. Igual, la Argentina exagera los movimientos de los países emergentes y de Latinoamérica.

Hay que tener en cuenta que tiene mucho impacto el desacople de las elecciones de los gobernadores y la no recuperación en las encuestas de Mauricio Macri. Faltaba explicitar políticamente un plan B para Cambiemos. No solo no hay un plan económico, no hay plan político alternativo a un Mauricio Macri que se desbarranca en los sondeos.

Medidas. Desde el BCRA anunciaron que reducirán el ritmo de aumento de la banda. Con esa medida vuelven a equivocarse lamentablemente. La raíz del problema es que el Fondo Monetario Internacional no tendría que haber autorizado una banda tan amplia y generar un margen de intervención donde la parte superior de la banda fuera más baja.

No tiene sentido tener una banda cambiaria donde el tope es $ 50, si cuando el dólar llega a $ 43 tiembla el Banco Central y la Casa de Gobierno. Fijar el límite en $ 50 es ridículamente alto.

No hay oferta de dólares para los dólares financieros que exceden la demanda de los dólares comerciales que tiene el mercado. El Gobierno se ilusiona con los dólares que proveerán el campo y el mismo FMI. Nada de esto parece tranquilizar a los mercados porque el riesgo país ha escalado esta semana hasta tocar los 800 puntos.

Si en el aspecto macroeconómico las cosas no andan bien, en el ámbito de la llamada economía real el panorama es igualmente malo. Es lo que evidencian las suspensiones en las empresas automotrices, que en 2017 fueron una de las estrellas de la tenue primavera de recuperación que ensoberbeció al oficialismo y, sobre todo, al PRO.

Cuando hay industria automotriz, el sector industrial va a donde va la industria automotriz, y esta última tiene una perspectiva muy mala para este año. Hay una drástica caída en unidades ensambladas y esto se refleja en la cantidad de chapa que encargan. “Estábamos en un millón de unidades por año, pero este año vamos a estar en 450 mil aproximadamente. La industria está trabajando con esas cantidades y ahí es que se empieza a suspender personal”, explica un consultor económico.

Efectos. Las consecuencias políticas que este desbarajuste de la economía está produciendo en el interior de Cambiemos son cada vez más difíciles de ocultar. Cambiemos cruje. El pretendido optimismo de Marcos Peña del que participa el Presidente es cada vez más difícil de verificar en la realidad. La calle hoy destila desencanto, frustración, enojo y angustia. Y estamos hablando de la calle que refleja el pensamiento y el sentir de muchos de los que votaron al actual gobierno. Esas voces afirman con rotundez dos cosas: no quieren el regreso al poder de Cristina Fernández de Kirchner pero tampoco quieren a Macri. Están ávidos de algo diferente. Y si la opción es Macri o CFK, lo votarán al Presidente pero con resignación. Macri ha acabado con sus esperanzas de un futuro mejor.

Hoy, el Gobierno enfrenta un test electoral con repercusión nacional: la elección a gobernador en la provincia de Neuquén. En una disputa muy pareja, se encendió una luz naranja en la mismísima Casa Rosada: la posibilidad cierta de que el candidato del kirchnerismo, Ramón Rioseco, gane. De hecho, los que conocen la intimidad de Balcarce 50 señalan que las encuestas que por allí circulan le dan una ventaja de 2 a 3 puntos. De confirmarse ese resultado sería un verdadero mandoble a la mandíbula del oficialismo.

Neuquén, con Vaca Muerta, ha sido el mascarón de proa del nuevo modelo productivo y de desarrollo al que ha apostado el Gobierno. Macri ha exhibido Vaca Muerta como emblema de su gestión. Una derrota allí a manos de Rioseco dejaría a esa provincia de capital importancia para el desarrollo energético del país en manos del kirchnerismo. Eso complicaría toda la estrategia de desarrollo energético ideada por el Gobierno. Además de esta circunstancia, Neuquén debería representar un alerta para Cambiemos: si en esa provincia donde se ha verificado un innegable florecimiento de la economía gana el candidato K, ¿qué futuro le aguardará en la mayoría de las otras en las que casi todo es penuria?

En estas últimas tensas horas, en forma subterránea se comenzó a trabajar la consigna del voto útil de Cambiemos, que significa que en vez de votar a su candidato, Horacio “Pechi” Quiroga, se lo haga por el actual gobernador, Omar Gutiérrez. Esto no es algo novedoso en la historia del PRO. Es lo que hizo en 2013 al votar por Sergio Massa y frenar así un triunfo del Frente para la Victoria, que le hubiera abierto la puerta al proyecto de reelección indefinida con el que soñaba CFK.

Juntos o revueltos. El acto del peronismo en el microestadio de Ferro demostró lo difícil que le será concretar la unidad por la que muchos desesperan. El “vamos a volver” es la expresión de un revanchismo que anida en el kirchnerismo duro y que no puede augurar otra cosa que el fracaso. Lo reconoció con todas las letras Felipe Solá, allí presente. Habrá que ver si la ex presidenta lo comprende.

Donde no hay división es en la protección política que, ante su complicadísima situación judicial, le sigue dando el peronismo. Es lo que se vio tras el fallo de la Corte Suprema de ordenar la prisión preventiva de CFK. Las evidencias en su contra son apabullantes: el testimonio más arrasador de todos los recolectados en las diferentes causas que enfrenta ha sido y es el de su ex contador Víctor Manzanares.

Pero eso poco parece importarles a quienes la protegen. He ahí, un augurio de impunidad.

Producción periodística: Lucía Di Carlo.