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viernes, 8 de diciembre de 2017

Memorándum con Irán… @dealgunamanera...

El día en que Pepe Eliaschev reveló el acuerdo con Irán...

El día en que Pepe Eliaschev reveló en Perfil el acuerdo con Irán

© Publicado el jueves 07/12/2017 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

EConferencia de prensa de la Senadora CFK, luego del pedido del Juez Bonadío.

Uno de los momentos cumbre de la carrera del periodista fue denunciar el pacto secreto con la administración de Ahmadineyad.

La obra de un periodista se puede medir en cantidad de crónicas, libros y demás artículos, pero la calidad y el impacto en la política y en la sociedad que estos generan dejan una marca invalorable en la defensa de la libertad de expresión y de prensa. Este es el caso de Pepe Eliaschev y una de sus primicias más recordadas: el acuerdo secreto entre el Gobierno argentino e Irán por la investigación sobre la AMIA.

Eliaschev explicó entonces que la Administración de Cristina Fernández de Kirchner y la Cancillería encabezan para Héctor Timermancon quien mantuvo un enfrentamiento a raíz de esto, estaba dispuesto a "olvidar" los atentados a cambio de mejorar sus relaciones económicas con una agenda bilateral comercial que implicaba millones de dólares.

Tiempo después, Perfil también revelaría que el comercio con Irán "aumentó casi 20 veces con Cristina".

El día en que Pepe Eliaschev reveló en Perfil el acuerdo con Irán

A pesar de todas las denuncias, el Gobierno primero negó el acuerdo, aunque luego comenzó a blanquear lo que se terminó denominando como el "Memorándum de Entendimiento" el cual fue muy criticado por varias entidades judías del país.

A pesar de todas las denuncias, el Gobierno primero negó el acuerdo, aunque luego comenzó a blanquear lo que se terminó denominando como el "Memorándum de Entendimiento" el cual fue muy criticado por varias entidades judías del país.

La introducción de la nota firmada por Eliaschev en 2011 fue lapidaria: "El gobierno de la presidenta Cristina Kirchner estaría dispuesto a suspender de hecho la investigación de los dos ataques terroristas que sufrió este país en 1992 y 1994, en los que fueron destruidas las sedes de la Embajada de Israel y de la AMIA en Buenos Aires, según revela un documento hasta ahora secreto, recientemente entregado por el ministro de Relaciones Exteriores de la República Islámica de Irán, Alí Akbar Salehi, al presidente Majmud Ajmadineyad".

"El canciller iraní le asegura en su informe al presidente Ajmadineyad que 'la Argentina ya no está más interesada en resolver aquellos dos atentados, pero que en cambio prefiere mejorar sus relaciones económicas con Irán'", continuaba.

Y aseguraba: "El informe secreto, al que ha accedido Perfil porque ha comenzado a ser analizado en las cancillerías de varios países, fue redactado luego de la reunión que el canciller argentino, Héctor Timerman, mantuvo con su contraparte de Siria, Walid al-Mohalem, y con el propio presidente Bashar al-Assad el 23 y 24 de enero último en la ciudad siria de Alepo".


El artículo concluía con el recordatorio de la visita del dictador sirio Bashar Al Assad, la tranquilidad del gobierno iraní por la demora en las investigaciones y repasaba por último las instancias del caso en la Argentina.



(Fuente: www.perfil.com). El periodismo profesional es costoso y por eso debemos defender nuestra propiedad intelectual. Robar nuestro contenido es un delito, para compartir nuestras notas por favor utilizar los botones de "share" o directamente comparta la URL. Por cualquier duda por favor escribir a: perfilcom@perfil.com 

domingo, 10 de septiembre de 2017

Judicializados… @dealgunamanera...

Judicializados…

¿Donde está Eugenio Burzaco? Dibujo: Pablo Temes

Desde los desmanejos K a Maldonado, los tribunales serán gravitantes en la política.


© Escrito por Nelson Castro el domingo 10/09/2017 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Unidad Ciudadana y, Cristina Kirchner en particular, deberán sostener su campaña de cara a los comicios de octubre, en medio de las turbulencias judiciales que la complican y le recuerdan su pasado desprolijo a cada paso que da. El fiscal Gerardo Pollicita pidió indagar a la ex presidenta, al ex canciller Héctor Timerman, a Luis D’Elía y otros personajes, por el supuesto encubrimiento a los acusados iraníes de volar la AMIA. De acuerdo con la investigación que llevó adelante el fallecido fiscal Alberto Nisman, la moneda de cambio –bajo pretexto de avanzar en el esclarecimiento del hecho– fue restablecer relaciones comerciales con ese país. En tribunales dan por seguro que el juez Claudio Bonadio citará a la ex presidenta a prestar declaración indagatoria antes de los comicios del 22 de octubre.  

Ese camino también lo recorrerán Amado Boudou (cuyo juicio por el caso Ciccone comenzará el 3 de octubre) y Julio De Vido (en el juicio por la tragedia de Once que tiene fecha el 27 de septiembre). En el caso de los ex funcionarios y escoltas de CFK, la corrupción y el mal desempeño pesan sobre sus espaldas. Pero en el caso AMIA, Bonadio puede elevar la acusación de encubrimiento a la de traición a la Patria.

En este marco las arenas de campaña no llegan cargadas de optimismo para Unidad Ciudadana como ocurrió en las PASO. CFK retomó las recorridas proselitistas esta semana en su propio terreno, donde más cómoda se siente. “Hay que hacer crecer la mística, la mayoría de la Provincia es kirchnerista y eso se tiene que volver a notar” –aseguró un militante que estuvo en un acto de Avellaneda–.

Allí, en compañía del intendente Jorge Ferraresi, recibió algo de lo que más le gusta: proclamas de los devotos, banderas de bienvenida, clamores por la vuelta y toda la puesta en escena kirchnerista. 

“Ella no come vidrio, aceptó las nuevas directivas para una campaña sobria y sin grandes alocuciones, pero una parte suya no se termina de convencer y necesita de esto. ¿Acaso a uno no le gusta sentir el afecto de los que lo rodean?” –se preguntó la misma fuente–.

Por el escenario levemente adverso, según marcan los sondeos, se programó para la ex presidenta una mayor exposición con recorridas, en su mayoría por territorio amigo. Sus estrategas saben que es difícil superar su techo, pero apuestan a convencer a los indecisos de aquellos bastiones que siempre fueron suyos. Hay que sacarle todo el jugo a los propios, aseguran. Por eso las presiones sobre los acólitos de Florencio Randazzo se han redoblado por estos días. No hacía falta esperar a las denuncias del candidato de Cumplir para conocer el tenor de los ofrecimientos y las presiones que desde el kirchnerismo se despliegan para cooptarlos.   

Casa Rosada. 

Para el Gobierno el frente judicial se mantiene ajeno a casos de corrupción resonantes, pero se encuentra en vilo por el grave hecho que representa la desaparición de Santiago Maldonado. Una fuente de Cambiemos asegura que: “Por lógica y por sentido común sabemos que es antipático hacer pronósticos electorales vinculados al tema, pero creemos que al votante de nuestro espacio –que quiere saber la verdad igual que nosotros–, no le mueve el amperímetro la politización que se está haciendo del caso”.

La voluntad de Mauricio Macri es respaldar a Patricia Bullrich todo lo que se pueda. Esto implica reconocer el imperio de los hechos. La ministra cometió errores en la forma de manejar y de comunicar el caso. La idea del Presidente es insistir en la necesidad de presentar todas las acciones que el Gobierno lleve adelante sobre el caso como producto de un trabajo en equipo.

El Gobierno en general y Macri en particular carecieron de reflejos políticos para apreciar la verdadera significación y dimensión del hecho. El Presidente debería haber hablado antes y, así como se hizo en el caso Gómez Centurión, a los cuarenta gendarmes involucrados, separarlos preventivamente de la fuerza para alejar cualquier sospecha de obstrucción a la investigación judicial. 

Dicho sea de paso y por lo que se conoce hasta aquí, la investigación también deja dudas que el juez federal Guido Otranto, o alguno de los fiscales intervinientes, tendría que aclarar. Entre esas dudas, hay una que ya tiene respuesta. Es la referida a la falta de autorización por parte del magistrado para realizar un rastrillaje en el terreno situado al otro lado del río Chubut. Esa prueba, que se intentó efectuar el 5 de agosto pasado, no se pudo realizar debido a la presencia en esa área de gente armada, circunstancia que al juez le generó temor.

En el Sur. 

“Qué habría pasado si alguien hubiera abierto fuego sobre algún miembro de la Gendarmería y alguno de ellos hubiese respondido?”, era la pregunta que se hacían en el entorno del juez.

La actitud de Otranto luce prudente, pero falta de carácter, la situación así planteada es inquietante. ¿Significa esto reconocer que hay partes del territorio de nuestro país en donde no rigen ni las autoridades legítimas ni las leyes aprobadas por el Congreso de la Nación? 

Un reconocido Fiscal de la Nación publicó en su cuenta de Facebook una crítica al desarrollo de las actuaciones que tiene sentido: “¿Hasta cuándo hay que soportar designaciones de gente comprometida con intereses que no sienten el rol de fiscal y la vocación de servicio? Si la justicia federal no puede resolver casos como el de Nisman o aclarar que pasó con Santiago Maldonado creo que es mejor que Gils Carbo renuncie”.

En medio de todo y  como consecuencia de esto, los ciudadanos que habitan esas tierras –muchos de ellos mapuches que no comparten para nada la violencia con la que actúa el RAM, al que se oponen–quedan totalmente desprotegidos. ¿Es esto aceptable? Si esta lógica anacrónica y con aires tribales se impusiera, la Argentina dejaría de ser una nación.


martes, 7 de marzo de 2017

El Clan Kirchner… @dealgunamanera...

El Clan Kirchner…

Florencia, Máximo y Cristina. Principales imputados en la causa Los Sauces

En menos de veinte y cuatro horas, Florencia, Máximo y Cristina desfilaron por Comodoro Py para prestar declaración indagatoria en la causa Los Sauces. Fue un hecho inédito en la historia de la Argentina: jamás una expresidente y sus hijos concurrieron a los tribunales para enfrentar una acusación penal vinculada al cobro de coimas, lavado de dinero, abuso de poder y asociación ilícita. Ahora, Claudio Bonadio debe precisar la situación legal de CFK y sus hijos. 

© Escrito por Román Lejtman el martes 07/03/2017 y publicado http://leviathan.com.ar  por de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Asunción Presidencial: Recorrido desde Congreso a Casa de Gobierno

Y por las evidencias que constan en la causa, Florencia, Máximo y Cristina harán historia de nuevo: serán procesados y nuevamente embargados. Nunca ocurrió un hecho similar en la historia del poder y la corrupción desde el Imperio Romano hasta nuestros días.

La hipótesis judicial es fácil de describir. CFK entregaba obra pública y otros beneficios del Estado a empresarios de su entorno –Lázaro Báez y Cristóbal López–, y a cambio recibía una coima por los servicios prestados que se lavaba a través del alquiler de sus propiedades en Capital Federal y Santa Cruz. La causa investigada por Bonadio y el fiscal Carlos Rívolo tiene tanta evidencia que irá sin escalas a juicio oral.

López y Báez aseguraron que cumplieron con la ley cuando alquilaron los inmuebles de la familia Kirchner. Pero los asientos contables, los balances, los recibos y las copias de los cientos de cheques firmados a favor de Cristina y sus hijos son contundentes e irrebatibles.

Por eso, la expresidente, Florencia y Máximo optaron por una defensa política cuando ejercieron su derecho a defensa frente a Bonadio y Rívolo. Siempre es más fácil escribir un relato que probar la inocencia ante cientos de fojas que aseguran lo contrario.

Florencia, Máximo y Cristina. Principales imputados en la causa Los Sauces.


domingo, 5 de febrero de 2017

Desacuerdos y reproches… @dealgunamanera...

Desacuerdos y reproches…

PARI-TARIA, Jorge Triaca. Dibujo: Pablo Temes

La ruptura entre sindicalistas y oficialismo tiene una cadena de responsabilidades. Extraño triunfalismo.

El 23 de noviembre pasado el Gobierno, la Unión Industrial Argentina, algunas cámaras empresariales, y algunos sindicatos hablaron de un pacto por medio del cual se comprometían a no despedir personal hasta el 1° de marzo. Además, lanzaron el Diálogo-Acuerdo por la Producción y el Trabajo. Sin embargo, algo falló y, en consecuencia, la CGT se retiró abruptamente de esa entente a mediados de esta semana.

“No se cumplió el ‘pacto anti despidos’ y el costo siempre queda del lado del movimiento obrero. No fue un portazo inesperado; ya la semana pasada en el asado convocado por Barrionuevo en Mar del Plata se habló de endurecer posiciones con el Gobierno. El ánimo cambió desde el proyecto de reforma laboral hasta la salida por decreto de las modificaciones en el tema ART. Los despidos en verano fueron el detonante”, señala un dirigente de peso en la actual conducción cegetista. Según los números que se manejan en ese ámbito, la industria lidera ese triste ranking con más de 4.500 despedidos, seguido por el sector de servicios y un goteo permanente en otras áreas.

El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, dijo el jueves en una entrevista radial que “se ha perdido la confianza con algunos sectores empresarios que tienen que dar respuesta porque había un acuerdo político de cuidar el nivel de empleo”. Entre los hombres de negocios algunos prefieren mirar para el costado mientras que otros entrecruzan reproches mutuos. Hay quienes dicen que los dichos del ministro fueron un tiro por elevación destinado a los industriales; otros, en cambio, creen que los señalados son los sectores de cadenas alimentarias. A pesar de la proclamada lucha contra la inflación de la que habla el Gobierno, alimentos, artículos de higiene personal y productos de primera necesidad no dejan de aumentar.

“Los gremios prefieren cargar las tintas contra las empresas, pero saben que el verdadero enojo es con los acuerdos vacíos que genera el Gobierno” –asegura un industrial de larga experiencia en estas lides–. En un crudo análisis la misma fuente hizo hincapié en las divisiones dentro del movimiento obrero: “De la boca para afuera la CGT en general y ‘los gordos’ del sindicalismo vociferan que este gobierno les dio mucho más de lo que lograron con el kirchnerismo, mientras que el moyanismo y algunos sectores de la CTA sostienen que este gobierno se cae solo”. En este contexto la presión de las bases en los gremios industriales por los últimos despidos determinó la salida de la CGT del acuerdo con los empresarios y el Gobierno.

En 2016 –siguiendo los datos del Indec– desaparecieron 5 mil pymes y se perdieron 120 mil empleos formales. En este marco, algunos industriales remarcaron la necesidad de haber debido convocar un Consejo Económico y Social (de carácter permanente) y no sentar las partes en una mesa para la foto. Un empresario lo describió con dureza: “El Gobierno quema los instrumentos de diálogo, los malgasta. El Diálogo por la Producción y el Trabajo fue una especie de pantomima que sólo sirvió para la foto. No había propuestas de fondo”.

En la misma línea un influyente hombre del interior se preguntó: “¿Qué está pasando con el timing del Gobierno para instrumentar medidas?”. Hacía referencia a que la UIA había hablado con Nicolás Dujovne sobre una serie de medidas orientadas a bajar la presión tributaria –lo que podría traducirse en baja de precios y más producción–, pero el viernes, en una entrevista en el programa de Jorge Lanata, el ministro declaró que el año electoral no sería un buen momento para hacerlo. “¿Cuándo, entonces?”, insistió la fuente.

Los empresarios aseguran además que hay capacidad ociosa; la industria está operando al 65%. La suba de tarifas de electricidad es comprensible, pero si a cambio del aumento de costos no se da ningún beneficio, la producción no aumentará. Los analistas ven un primer trimestre “planchado”. Con el repunte del campo y sectores de la construcción no va a alcanzar para torcer el rumbo de la economía y generar verdadero crecimiento.

En vista de esta realidad, resulta poco entendible el clima de cierta euforia que, comenzando por el Presidente, se vive en la cúpula del Gobierno. Se habla allí de una recuperación de la economía que, más allá de lo observable en sectores puntuales como el automotor, no se condice con lo que refleja mayoritariamente la calle. En el oficialismo están convencidos de que ganarán la elección legislativa de octubre venidero. Con esa misma convicción se habla de la elección presidencial de 2019: “Estaremos ocho años en el poder”, se escucha decir en los despachos de la Casa Rosada.

De los avatares de una economía que no termina de arrancar intenta valerse Cristina Fernández de Kirchner para darle a su comprometida situación judicial un cariz de persecución política. “Buscan tapar el desastre económico”, escribió en la catarata tuitera del viernes pasado. En verdad, ante el peso de las evidencias que dejan al descubierto la matriz de corrupción imperante durante el kirchnerato, ésa es la única alternativa con la que cuenta como defensa. No hay estrategia judicial para parar el avance de las causas ante las pruebas que las sustentan. El agregado de esta semana, en relación con la declaración indagatoria a la que la ha citado el juez Claudio Bonadio, está dado por la inclusión de los dos hijos de la ex presidenta, Máximo y Florencia.

CFK habrá de ser candidata a senadora nacional por la provincia de Buenos Aires. Las encuestas –al día de hoy– le dan bien. Es la única posibilidad que tiene de atemperar la adversidad que le augura en los ámbitos tribunalicios. Esa candidatura, además, es la única chance que tiene el kirchnerismo de no difuminarse en las procelosas aguas de la interna justicialista.

El caso Odebrecht será otra complicación para la ex presidenta y sus funcionarios del área de obras públicas. También lo será para algunos funcionarios de este gobierno. Hasta ahora el único salpicado por el escándalo de las coimas es el titular de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), Gustavo Arribas. Sus explicaciones ante la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos y Actividades de Inteligencia fueron poco satisfactorias. Los papeles que exhibió –incluyendo una escritura– aportaron escasa claridad. Se habla, además, de dos propiedades de su pertenencia que no aparecen en su declaración de impuestos. Con todo, lo más complicado para Arribas es la denuncia que en su contra interpuso Elisa Carrió.

El episodio de la utilización del helicóptero presidencial para trasladar a la esposa de Macri, Juliana Awada, y a su hija Antonia, de Punta del Este a Buenos Aires, merece un párrafo de reproche. Los Kirchner fueron intensamente criticados por la utilización de las aeronaves de la flota presidencial en menesteres similares. Entre las promesas de campaña del actual gobierno, estaba la de suprimir esa conducta. Parece que el Presidente lo ha olvidado.

Producción periodística: Santiago Serra.



sábado, 1 de octubre de 2016

Stolbizer le apuntó a Sanfelice y lo acusó de testaferro K… @dealgunamanera...

Stolbizer le apuntó a Sanfelice y lo acusó de testaferro K…

Aporte. Stolbizer sumó más datos sobre Sanfelice a la causa Los Sauces.

La diputada aseguró que el empresario es titular de varias sociedades “con el único objetivo de facturar millones a Lázaro Báez y Cristobal López”.

© Escrito por Carlos Claá el jueves 29/09/2016 y publicado por la Revista Noticias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Con un escrito, presentado en la mañana del jueves 29 en el juzgado de Claudio Bonadio y como parte de la causa conocida como “Los Sauces”, la diputada nacional Margarita Stolbizer aportó más datos referidos a Osvaldo “el Bochi” Sanfelice, a quien acusó de testaferro de la familia Kirchner.

“Tanto él como su familia no registran impuestos activos ni actividades económicas. Y fundamentalmente no pueden acreditar su solvencia económica”, escribió junto a su abogada Silvina Martínez en la presentación judicial a la que accedió Noticias.

Según la diputada, Sanfelice es titular de diferentes empresas “cuyo objetivo primordial es hacer negocios y facturar millones de pesos a los empresarios Lázaro Báez y Cristobal López”. En el texto describe cada una de las sociedades y sus vinculaciones con los empresarios K. En Agosto S.A., por ejemplo, cuya actividad declarada es el alquiler de maquinaria, su cliente es Cristobal López. En Negocios inmobiliarios S.A., que comparte con Máximo Kirchner, el 80% de los cheques que recibió entre 2014 y 2016 provienen de Austral Construcciones, la sociedad de Lázaro Báez. Las otras empresas de Sanfelice son BMC S.R.L. e Idea S.A.

Las maniobras fraudulentas y la insolvencia financiera se extendería también a su familia. Su esposa, Marta Alcira Leiva, socia en algunas de sus empresas, no registra impuestos activos en AFIP.

Mientras tanto, siguiendo el camino de los D’Elía, sus hijas también fueron empleadas públicas. María Marta Sanfelice, de 29 años, trabajó en AFIP y María Laura Sanfelice, de 27 años, se desempeñó en el Ministerio de Justicia. A pesar de eso, según explica la denuncia de Stolbizer, “sin contar con la capacidad tributaria, resultan titulares de varias unidades funcionales en importantes inmuebles de la ciudad de Buenos Aires”.


domingo, 21 de agosto de 2016

Las causas con las que Stolbizer quiere meter presa a Cristina…@dealgunamanera...

Las causas con las que Stolbizer quiere meter presa a Cristina…


Cuáles son las investigaciones que más complican a la ex presidenta. De los hoteles de El Calafate a la asociación ilícita.

© Escrito por Carlos Claá el sábado 20/08/2016 y publicado por la Revista Noticias de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Cristina Kirchner la eligió de contrincante. A principio de julio de este año le dedicó una catarata de tuits y luego la demandó por “daños y perjuicios”, aunque no era la primera vez que respondía así ante una denuncia judicial.

“No puede ser casualidad”, le señala Margarita Stolbizer a Noticias. Cuando en el 2014 la diputada la denunció por lavado de dinero en la causa relacionada a los hoteles K que se conoce como “Hotesur” y que lleva adelante el juez Julián Ercolini, la respuesta del kirchnerismo fue contrademandar a Stolbizer por enriquecimiento ilícito. Cuando este año denunció el enriquecimiento ilícito de la ex mandataria en la otra causa hotelera “Los Sauces”, que cayó en el juzgado de Claudio Bonadio, CFK también respondió con dos demandas: tráfico ilegal de información de AFIP y daños y perjuicios.

“Es ridículo”, califica la diputada a la primera denuncia que recibió del kirchnerismo. En su declaración jurada apenas tiene un departamento en Morón (que funciona como estudio jurídico de su marido), su casa familiar de Castelar (en la que vive desde 1991), una camioneta Volkswagen Tiguan del 2011 (que cuesta alrededor de $ 450.000) y un Renault Megane de 1999. “Me acusaban de que no había declarado una cadenita de oro que me había regalado mi marido y que encima tiempo después me robaron, y un anillo de oro de compromiso de mi mamá. Por supuesto que fue desestimada”, completa.

La segunda saga de denuncias trajo consigo la mediación del 8 de agosto, en la que finalmente no se cruzó con Cristina Kirchner, no hubo acuerdo y por la que pronto, según el abogado de la ex presidenta, Gregorio Dalbón, se iniciará el juicio. Lo que sí hubo fueron agresiones. Los militantes kirchneristas que se habían juntado en la puerta del estudio jurídico donde se realizó la conciliación obligatoria se amontonaron alrededor del vehículo de la custodia que la transportaba junto a su abogada, Silvina Martínez, a los insultos y golpes.

“Cristina explotó ante una situación que la dejó en evidencia. Ella nunca había sido denunciada tan directamente como hicimos nosotros con estas dos causas”, argumenta Stolbizer. Y agrega: “La obligamos a tener que explicar la procedencia de las sumas millonarias de dólares. Se le derrumbó el relato”.

Son dos de las causas judiciales que más complican a la expresidenta. En “Hotesur”, el juez Ercolini investiga presuntas irregularidades societarias que configurarían un lavado de dinero entre los hoteles de la familia Kirchner y empresas de Lázaro Báez, por el alquiler de habitaciones que nunca se usaron. Por ahora Cristina está imputada, junto a su hijo y el empresario de la construcción, entre otros. En “Los Sauces”, causa iniciada en marzo, el juez Bonadio imputó a la ex jefa de Estado por un presunto enriquecimiento ilícito a raíz del alquiler de los inmuebles de esa sociedad, cuyo titular era su hijo Máximo, a los empresarios Báez y Cristobal López.

Desde el entorno de Stolbizer no dudan sobre si habrá condena o no. Confían tanto en el sustento de sus causas que lo único que estudian con atención es qué sanción tendrá la ex presidenta. Como en ambos casos las penas de prisión que podrían corresponderle a la ex funcionaria son relativamente bajas (el máximo estipulado por el Código Penal es de seis años para el enriquecimiento ilícito), Stolbizer teme que Cristina pueda conseguir una condena excarcelable, es decir, de menos de tres años.

Pero en su entorno resaltan un detalle: “Esos delitos comprenden además inhabilitación para ejercer cargos públicos. Si la Justicia comprueba la corrupción y la condena, sería importante que no vuelva a la función pública”, comentan allegados a la diputada denunciante.

El panorama se vuelve más oscuro para CFK con el pedido de indagatoria del fiscal Pollicita, solicitado el martes 16 de agosto al juez Ercolini, por fraude en la obra pública a favor de Báez. Por primera vez podría acusarse a Cristina de haber sido la jefa de una asociación ilícita y la pena podría ser de hasta 10 años de prisión.


domingo, 17 de julio de 2016

Cuentas que no cierran… @dealgunamanera...

Cuentas que no cierran…

Algo ha fallado para que, de la inflación anual del 25% pronosticada por el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, se pase a una que va a estar cercana al 40%. Foto: Cedoc

Los millones de la hija de Cristina en el banco y el ajuste del gas indignan, aunque son muy diferentes.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 17/07/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Una imagen vale, muchas veces, más que mil palabras. El hijo mayor de Lázaro Báez –Martín– y compañía contando dólares en La Rosadita y la valija con millones de dólares del ex secretario de Obras Públicas, José Francisco López, en el convento de las hermanas –que, ahora se sabe, no son monjas– penitentes y orantes de Nuestra Señora de Fátima en General Rodríguez son prueba de la validez de la remanida frase. A ese universo acaba de incorporarse la foto mostrando los más de 4.600.000 dólares encontrados en las cajas de seguridad que Florencia Kirchner posee en la casa central del Banco Galicia –embargados por disposición del juez federal Julián Ercolini– a los que deben sumarse US$ 1.032.144 y $ 53.280,24 depositados en otras dos cuentas bancarias de su propiedad. El embargo había sido solicitado por el fiscal Gerardo Pollicita en el marco de la causa Hotesur, que tiene –y tendrá– a maltraer a la familia Kirchner. El fiscal sospecha que, al depositar ese dinero de dudoso origen en las cajas de seguridad de su hija, la ex presidenta intentó evitar las medidas restrictivas dispuestas sobre su patrimonio por el juez federal Claudio Bonadio.

En su dictamen hay una pieza clave: se habla en ese escrito de una “matriz de corrupción” montada por la familia Kirchner y empresarios allegados como Lázaro Báez y Cristóbal López. Y señala que “el detalle de movimientos de las cuentas en dólares registradas por las nombradas en el Banco Galicia revelan cómo entre los días 3 y 4 de marzo se extraen en efectivo un total de US$ 4.664.000 y los mismos son depositados por la propia Florencia en las cajas de seguridad a su nombre con una intención que no habría sido otra que la de evitar que sean cautelados”.

En tanto, Margarita Stolbizer, sometida a una fuerte ofensiva legal por parte de la ex presidenta que tiene aires de actos de amedrentamiento, aseguró que no hay animosidad en su accionar ya que desde fines del año pasado había “denunciado las diferencias e inconsistencias de los depósitos a plazo fijo de la ex mandataria”. Una de sus investigaciones en las que basa estas afirmaciones sostiene que en el año 2011 CFK declaró ante la Oficina Anticorrupción que, luego de la liquidación de la sociedad conyugal por el fallecimiento de Néstor Kirchner, recibió la suma de $ 31.637.916 (incluyendo propiedades, empresas y dinero en efectivo y en cuentas/plazos fijos). En 2012, declaró $ 19.481.783. En 2013, declaró $ 22.467.693 en plazos fijos. En 2014, $31.035.620. En el año 2015, $ 39.878.273. Y al día de hoy en las cajas de seguridad de su hija Florencia hay en dólares más que el equivalente al total de la herencia recibida en 2011, tomando en cuenta la parte que le correspondería en su condición de hija. Para la diputada por el Gen Margarita Stolbizer, las cuentas no cierran. Más allá de lo que determine la Justicia, estas imágenes de millones de dólares acumulados en bolsas, valijas y cajas de seguridad han terminado de demoler la épica del “relato K”.

El otro hecho resonante de la semana fue el cacerolazo en protesta por los aumentos tarifarios. En rigor de verdad, el resultado parecería algo así como la crónica de una reacción anunciada. Producto del relativismo moral que la atraviesa, fue curioso observar las posturas de buena parte de la dirigencia política vernácula. Así, pues, se vio fogonear la protesta a kirchneristas furiosos que hasta el 10 de diciembre pasado lapidaban a los que salían a la calle a batir cacerolas y otros utensilios de cocina con el descalificativo de “golpistas” y/o “destituyentes”. En el otro extremo hubo en el Gobierno quienes, habiendo participado de esas manifestaciones, se empeñaron en minimizar lo ocurrido el jueves pasado.

Más allá de los reproches contra el ministro de Energía, Juan José Aranguren, la decisión acerca de la forma en que se llevaría a cabo el aumento de las tarifas de los servicios públicos –esto es, el mayor o menor gradualismo a aplicar– costó muchas discusiones internas y más de un momento de tensión entre el Presidente y varios integrantes de su gabinete. Ante los hechos consumados, nuevas voces han comenzado a aparecer para revelar su verdadera trama. “Venimos discutiendo esto desde marzo. Es cierto que las primeras propuestas del ministro eran más gradualistas, pero muchos nos venimos a enterar de eso ahora, cuando cedió a la presión y terminó pasando al otro extremo con aumentos siderales”. El que habla es un hombre que conoce bien las internas en el gabinete y sostiene que “ahora parece que todos avisaron pero nadie tuvo el peso suficiente para encarrilar la situación. Ni siquiera los discursos moderados de Rogelio Frigerio que puertas afuera tuvo que salir a poner la cara para salvar la ropa”.

¿Cómo es posible que nadie advirtiera el shock que producirían semejantes aumentos? Quizás la respuesta la encontremos en la siguiente confesión de una persona muy cercana al entorno ministerial: en los últimos días al menos dos ministros –uno del riñón macrista que acompañó al Presidente cuando era jefe de Gobierno porteño, y otro que no proviene de su entorno más cercano– le pidieron que le diera una solución definitiva al tema tarifario luego de expresar sus críticas hacia el ministro Aranguren. Según relata la fuente, la respuesta de Mauricio Macri fue tajante: “Dejen de operar contra sus compañeros. Aranguren soy yo”. En estos términos era imposible que la postura gradualista se impusiera por sobre la política de shock.

En este marco, las novedades y estimaciones económicas no ayudan. Los analistas y las consultoras nacionales e internacionales sostienen que este año la inflación llegará al 38%, la recesión será del 1% con un repunte cercano al 4% para el año próximo. Con estas estimaciones quien no la pasó bien fue el titular del INDEC, Jorge Todesca. La inflación para el mes de junio arrojó un 3,1% que, si bien fue bastante menor a la de mayo, resultó mayor a la esperada por el Gobierno. Hubo toda clase de “sugerencias” y presiones para que el número se “acomode” por debajo del 3%. “Un 2,9 hubiera sido del agrado del Presidente, pero la realidad marcó otra cosa”, admitieron fuentes que estaban al tanto de esos pedidos. Ha habido en el Gobierno una subestimación de la profundidad de la crisis económica generada por la bomba de tiempo que dejó la administración de Cristina Fernández de Kirchner. Tal subestimación ha dejado en evidencia la falta de un plan económico articulado. Algo ha fallado para que, de la inflación anual del 25% pronosticada por el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, se pase a una que va a estar cercana al 40%. “Gobernar no es más que prever”, es una célebre frase de José Martí que el presidente Macri debería tener en cuenta.  

Producción periodística: Santiago Serra

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