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miércoles, 14 de enero de 2015

Sudamericano Masculino Sub 20 - Uruguay 2015... De Alguna Manera...

Sudamericano Masculino Sub 20 - Uruguay 2015... De Alguna Manera...

Desde 1954 es el torneo que reúne a las jóvenes promesas del continente. Se juega cada dos años y clasifica a los cuatro primeros al Mundial de la categoría organizado por la FIFA. Cada dos ediciones entrega dos boletos a los Juegos Olímpicos.

El XXVII Campeonato Sudamericano “Juventud de América” se jugará en Uruguay desde el 14 de enero hasta el 7 de febrero del año 2015.

Grupo A (Colonia)

·         Argentina
·         Paraguay
·         Ecuador
·         Bolivia
·         Perú

Grupo B (Maldonado)

·         Brasil
·         Uruguay
·         Chile
·         Colombia
·         Venezuela

Fixture del torneo:



jueves, 9 de octubre de 2014

El Mercosur ya sacó patente... De Alguna Manera...


El Mercosur ya sacó patente...


Será la chapa patente obligatoria para todos los vehículos a partir de 2016. Contará con cuatro letras y tres números, la bandera y el nombre del país de origen y el logo del Mercosur. “Es una profundización en la integración”, dijo Timerman.


Las patentes de vehículos tendrán un modelo único y obligatorio en el Mercosur a partir de 2016. “Es un avance en la profundización de la integración regional”, señaló ayer el canciller Héctor Timerman al finalizar el acto en el que se formalizó el anuncio. Contará con cuatro letras y tres números, además de la bandera, el nombre del país de origen y el logo del Mercosur.

“El Mercosur sigue avanzando y profundizando la integración, que no es solamente económica, sino que también se trata de un mecanismo de integración política”, sostuvo Timerman al anunciar la nueva modalidad de patentamiento que comenzará con los autos y motos cero kilómetro. “Este sistema registral novedoso en el Mercosur también es importante porque se intentará frenar también el desarrollo del crimen organizado”, sostuvo el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak. En el acto también participaron el secretario de Justicia, Julián Alvarez; el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Carlos Bianco, y la subsecretaria de Comercio Exterior, Paula Español.

Las nuevas chapas patentes serán más anchas, tendrán fondo blanco y siete caracteres en negro, entre letras y números. Además llevarán el emblema del Mercosur, el nombre y la bandera del Estado de matriculación del vehículo, es decir Argentina, Brasil, Paraguay, Venezuela y Uruguay, además en la línea superior derecha tendrá el logo en azul del Mercosur. 

La decisión se adoptó en la reunión de coordinadores nacionales del Grupo Mercado Común del Mercosur que se realizó en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores. El nuevo sistema incluye la creación de uno de interconsulta regional con el fin de facilitar el intercambio y la información sobre datos del propietario, la identificación de la patente, la marca, el modelo y tipo de vehículo, así como la posibilidad de informar acerca de un robo o hurto.

© Publicado el Jueves 09/10/2014 por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


sábado, 30 de agosto de 2014

Kirchnerismo radicalizado… De Alguna Manera...


Kirchnerismo radicalizado…


El más entusiasmado por la extravagante aventura que Cristina ha emprendido es Axel Kicillof.

A juzgar por las encuestas de opinión, más del ochenta por ciento de la población quisiera que el país contara con un gobierno moderado encabezado por un centrista nato como Mauricio Macri, Sergio Massa, Daniel Scioli o Julio Cobos. Pero para Cristina tales detalles carecen de importancia. Es la jefa absoluta y le es dado hacer cuanto se le ocurra. Puesto que el orden político nacional es “verticalista”, a una presidenta peronista todo le está permitido. Aunque perdió el apoyo de la mayoría hace tiempo, cuenta con algo que, pensándolo bien, le es mucho más valioso que aquel 54 por ciento de los votos que obtuvo en octubre de 2011: el temor a que el país sufra una crisis institucional equiparable con la que, a fines de 2001, acompañó el colapso de la convertibilidad, cuando media docena de personajes se entretuvieron jugando sillas musicales con la presidencia de la República y millones de personas se vieron expulsadas de lo que para ellas había sido la normalidad.

La vieja consigna “yo o el caos” ha conservado su vigencia. Sin excepciones significantes, los líderes de las diversas agrupaciones políticas que se han improvisado últimamente quieren que Cristina termine su mandato a la hora prevista por el calendario institucional. Si bien a menudo se siente “un poco nerviosa”, la señora está más que dispuesta a aprovechar a pleno la libertad que le han concedido. Sin prestar atención a los gritos de alarma que están profiriendo empresarios asustados, sindicalistas desbordados por rivales que corean lemas izquierdistas y dirigentes no sólo opositores sino también, a su modo, los presuntamente leales, la presidentísima está librando una cruzada furiosa contra buena parte del resto del planeta.

¿Y por qué no? Además de caerle encima una y otra vez, el mundo, dominado como está por buitres inmundos, yanquis prepotentes, jueces foráneos que no le obedecen como corresponde y los nunca adecuadamente denostados neoliberales, la ha traicionado. En cuanto al país, desde hace mucho Cristina entiende que no está a la altura del relato heroico que le ha ofrecido.

El más entusiasmado por la extravagante aventura que Cristina ha emprendido es Axel Kicillof. Convencida de que el hombre que se niega a vestir corbata es “un genio”, Cristina le ha regalado un laboratorio espléndido, la Argentina, en que poner a prueba las teorías decimonónicas que tanto le gustan. En la Unión Soviética y China, el marxismo-keynesianismo o lo que fuera fracasó de manera realmente espectacular, pero Axel sabe que en el fondo los camaradas tenían razón. Al fin y al cabo, hasta el

Papa coincide en que el capitalismo liberal es un bodrio, de suerte que hay que reemplazarlo ya por una alternativa más humana, más inclusiva y menos exigente.

Cristina y los muchachos –algunos ya canosos– de La Cámpora aparte, pocos se sienten gratamente impresionados por las ideas de Axel. Antes bien, las toman por arbitrariedades típicas de un profesor un tanto chiflado cuyas teorías podrían sonar muy lindas cuando las expone en una aula llena de estudiantes contestatarios pero que, por desgracia, no tienen mucho que ver con lo que sucede fuera de los claustros académicos. Es lo que piensan virtualmente todos los empresarios, incluyendo a muchos que se habían acostumbrado a aplaudir como es debido los disparates presidenciales por entender que no les convendría figurar en la cada vez más extensa lista negra del oficialismo.

Con unanimidad sorprendente, los hombres de negocios creen que la resucitada Ley de Abastecimiento que tanto había contribuido a agravar las dificultades de la recordada etapa isabelina, no sólo les haga la vida imposible sino que provoque la muerte por estrangulación de la ya postrada economía nacional. Encontraron aún más intimidante, si cabe, la amenaza – producto de una “confusión”– de Cristina de tratar como terroristas a quienes siembren miedo cayendo en bancarrota.

Es verdad que el primer blanco de la ira presidencial ha sido una empresa de capitales yanquis, la imprenta Donnelley, pero no hay garantía alguna de que no acuse a otras de tener entre sus accionistas a personajes vinculados con los buitres. Sea como fuere, dadas las circunstancias en que se halla el país, ensañarse así con una empresa extranjera no ayudará a restaurar la confianza de los inversores. Por el contrario, al hacerlo Cristina se las arregló para cometer los presuntos delitos que, en un discurso enardecedor, atribuyó a la empresa gráfica de “atentar contra la economía” y generar “temor”, pero tal vez resulte imposible aplicarle a la Presidenta la ley antiterrorista.

El clima imperante en el país sería distinto si hubiera motivos para suponer que Kicillof haya fraguado un plan magistral que, instrumentado con eficacia por los funcionarios de la repartición que encabeza, serviría para que la maltrecha economía nacional reanudara el crecimiento luego de un intervalo recesivo ya bastante largo, pero, por desgracia, no hay ninguno. Fuera de los reductos kirchneristas, el consenso es que Cristina no entiende nada de economía salvo, quizás, las partes relacionadas con la hotelería, de ahí la proliferación de feriados y puentes, mientras que el superministro subordina los molestos datos concretos a las abstracciones que tanto le gustan. Es natural, pues, que los empresarios, asalariados y jubilados, es decir, casi todos, se sientan atrapados en un vehículo con las puertas bien cerradas que, conducido por principiantes, está a punto de precipitarse por un acantilado.

Antes de regresar los buitres al centro del escenario, parecía que Cristina y Axel querían hacer los deberes para que la fase final de su gestión transcurriera sin demasiados sobresaltos. Compraron la entrada a los mercados de capitales repartiendo miles de millones de dólares entre Repsol, los países del Club de París y las empresas que habían ganado juicios en el Ciadi, el tribunal del Banco Mundial. Pero la epopeya de la normalidad concluyó abruptamente no bien entró el país en un default “selectivo”. Al darse cuenta Cristina de que los holdouts le brindaban una oportunidad para recuperar una parte del capital político que había despilfarrado, optó por declarar la guerra no sólo contra ellos sino también contra la Justicia norteamericana, tan distinta ella de la argentina y, por las dudas, contra el gobierno de Barack Obama que, hasta ahora, se ha limitado a manifestar su extrañeza ante la actitud asumida por los amigos kirchneristas.

El pánico que algunos sienten puede entenderse. Aun cuando, para asombro de muchos, los bonistas prefirieran cobrar en Buenos Aires a esperar hasta las calendas griegas en Nueva York, la economía continuaría desintegrándose. Para combatir la inflación, Cristina y Axel confían en la maquinita. ¿La producción está bajando? Multarán a empresarios nada patrióticos que se nieguen a operar a pérdida. ¿Los pobres –aún quedan algunos– podrían participar de manifestaciones callejeras violentas? Para tranquilizarlos, el gobierno popular aumentará el gasto público y repartirá más subsidios. En cambio, no podrá hacer subir el precio de la soja; los granjeros norteamericanos se han sumado a la conspiración anti Cristina produciendo lo que, según algunos, será una “supercosecha”.

Desde el punto de vista de quienes sospechan que a veces los tan despreciados economistas “ortodoxos” podrían tener razón, el voluntarismo alocado del superministro está llevando el país hacia un desastre descomunal, uno comparable con los que, para perplejidad del resto del planeta, aquí son rutinarios, pero tal eventualidad no parece preocupar a quienes están al mando del maravilloso “modelo” que los kirchneristas han patentado.

Si estuviéramos en vísperas de las próximas elecciones presidenciales, el que el gobierno de Cristina haya decidido huir frenéticamente hacia adelante con la esperanza de alejarse de la bomba de tiempo que con tanta habilidad ha armado no resultaría tan extraño. Es lo que suelen hacer los populistas al acercarse la hora de irse y el país está habituado a que el modelo salvador de turno termine en llamas, razón por la que la moneda de referencia nacional por antonomasia es el dólar estadounidense.

Pero sucede que, conforme con las reglas, tendrán que pasar casi 500 días antes de producirse el cambio de gobierno que tantos anhelan. Mal que nos pese, se trata de tiempo más que suficiente para que una presidenta resuelta a desquitarse por vaya a saber cuántos agravios ponga de rodillas a la clase media, de tal modo enseñándole a portarse mejor, y depaupere aún más a los ya desesperadamente pobres para que recuerden con nostalgia los días en que la economía crecía a tasas chinas y había planes para todos y todas.

Felizmente para el Imperio, la Argentina no está en condiciones de ocasionarle muchos problemas. Los únicos países cuyos gobernantes pueden sentirse perturbados por las excentricidades de Cristina, Axel, el canciller Héctor Timerman y compañía son vecinos como Brasil, Paraguay y Uruguay, aunque ellos también han procurado distanciarse económica y anímicamente de lo que les parece un foco de infección peligroso. Lo mismo que la mayoría de los argentinos mismos, entienden que, hasta nuevo aviso, el país del modelo kirchnerista no será un socio confiable sino una fuente de problemas insólitos.

© Escrito por Jaime Nielson el Sábado 30/08/2014 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


domingo, 8 de diciembre de 2013

Pobreza e indigencia en América Latina... De Alguna Manera...


Se enlentece la reducción de la pobreza y la indigencia en América Latina...


Con datos proyectados al 2013, la pobreza estaría afectando a unos 164 millones de personas en la región, igual número que en 2012, consigna el estudio que aborda el fenómeno también desde una perspectiva multidimensional.

El número de latinoamericanos en situación de pobreza en 2013 asciende a unos 164 millones de personas (27,9 % de la población), de los cuales 68 millones se encuentran en la extrema pobreza o indigencia (11,5 % de los habitantes de la región), según proyecciones entregadas hoy por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

Si bien se registró una caída en las tasas de pobreza e indigencia en la región en 2012 (de 1,4 y 0,3 puntos porcentuales, respectivamente, con respecto a 2011), se ha frenado el ritmo con el que estas se han venido reduciendo desde hace una década, indica el estudio Panorama Social de América Latina 2013 presentado en Santiago de Chile.

En términos absolutos, la pobreza se mantiene estable en 2013 con respecto a 2012, cuando los pobres también sumaron 164 millones de personas, aunque bajó levemente (en 0,3 puntos) el porcentaje de la población que se encuentra en esta situación. En cambio, los indigentes, que en 2012 totalizaron 66 millones, subieron a 68 millones en 2013 (un aumento de 0,2 puntos porcentuales).

Estos resultados están estrechamente relacionados con el desempeño macroeconómico de la región, sostiene el documento. El aumento en la indigencia, específicamente, ha sido causado por el incremento del costo de los alimentos por encima de la inflación general.

"Desde 2002 la pobreza en América Latina ha caído 15,7 puntos porcentuales y la indigencia 8,0 puntos, pero las cifras recientes muestran una desaceleración. El único número aceptable de personas viviendo en la pobreza es cero, por lo que llamamos a los países a llevar cabo un cambio estructural en sus economías para crecer de forma sostenida con mayor igualdad", dijo la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena.

Seis de los 11 países con información disponible en 2012 registraron disminuciones en sus niveles de pobreza respecto a 2011. En Venezuela la tasa cayó 5,6 puntos porcentuales, de 29,5 % a 23,9 %, mientras en Ecuador pasó de 35,3 % a 32,2 %, en Brasil de 20,9 % a 18,6%, en Perú de 27,8 % a 25,8 %, en Argentina de 5,7 % a 4,3 % y en Colombia de 34,2 % a 32,9 % de los habitantes.

En Costa Rica, El Salvador, Uruguay y República Dominicana los valores se mantuvieron constantes en comparación con 2011, en tanto en México la pobreza aumentó levemente de 36,3% a 37,1%.

En esta versión del informe Panorama Social, la CEPAL aborda de forma exploratoria otros enfoques multidimensionales para evaluar la pobreza, que resultan complementarios a las mediciones convencionales basadas en los ingresos monetarios.

"Una medición multidimensional de la pobreza acotada a las necesidades básicas insatisfechas muestra que carencias tales como la falta de acceso al agua potable o a sistemas apropiados de saneamiento todavía afectan a un conjunto importante de personas en la región. Ello conduce a preguntarse si las políticas públicas destinadas a la superación de la pobreza están poniendo suficiente énfasis en el logro de estándares mínimos", plantea el informe, que también analiza la evolución de la pobreza infantil desde un enfoque de derechos (ver hoja informativa).

En esa misma línea, el estudio analiza tres dimensiones del bienestar -espacio, tiempo y convivencia-, soslayadas en las discusiones sobre el tema en América Latina. Se examinan problemas como la contaminación atmosférica y la alta tasa de homicidios, así como el uso del tiempo, entre otros aspectos.

En lo que respecta a la distribución del ingreso, si bien en 2012 se incrementó levemente el grado de concentración en algunos países, se confirma la tendencia a la baja que se registra hace un decenio. Pese a esto, la elevada desigualdad sigue caracterizando a la región en el contexto internacional.

En promedio, el quintil más pobre (20% de los hogares con menores ingresos) capta en promedio 5 % de los ingresos totales del país, con extremos que van desde menos de 4 % en Honduras, Paraguay y República Dominicana a 10 % en Uruguay. La participación del quintil más rico, en tanto, promedia 47 %, con un rango que va desde 35 % en Uruguay a 55 % en Brasil.

En materia de gasto público social, los datos de 2011 y los pocos disponibles de 2012 (mayormente presupuestos y no ejecuciones) insinúan una tendencia a la contracción relativa, que no significaría necesariamente una disminución absoluta de los recursos destinados a los sectores sociales, pero sí esfuerzos para moderar su expansión y a la vez consolidar las finanzas públicas.

El informe recuerda que el gasto social mostró un crecimiento acelerado en el segundo quinquenio de los años 2000 debido sobre todo a políticas aplicadas para contrapesar diversos choques externos.

Finalmente, la CEPAL constata que la afiliación a la salud y las pensiones de los asalariados ha crecido en la región (en distintas magnitudes y desde distintos puntos de partida), lo cual da cuenta de una dinámica positiva en el mercado laboral. No obstante, en algunos países continúa siendo muy baja y está relativamente estancada, y cuanto más baja es la afiliación promedio, más concentrada está por ingresos.


© Publicado el jueves 05/12/2013 por http://www.eclac.cl/argentina/default.asp