sábado, 20 de septiembre de 2014

Los Hipócritas de la Cámpora... De Alguna Manera...


La Cámpora: del repudio a Bergoglio, a los obsequios a Francisco...

Larroque, junto al Papa Francisco. Foto: Télam

El "Cuervo" Larroque, diputado de la agrupación k, logró la foto con el Papa pero olvidó la silbatina con la que abuchearon su designación. 

Sin memoria pero ansioso por obtener la foto junto al Papa Francisco con el logo de La Cámpora, pareció mostrarse este sábado el diputado nacional Andrés "Cuervo" Larroque, quien regaló al Sumo Pontífice una remera partidaria con una leyenda que hacía referencia a una de las villas en donde años atrás el "padre Bergoglio" trabajaba junto a los más desprotegidos.

Sin embargo, recién varios meses después de la designación del cardenal Jorge Mario Bergoglio en marzo de 2013 como papa Francisco, los miembros de La Cámpora comenzaron a alabar su figura.

El archivo es claro al respecto, dado que en el acto de 2013 en Tecnópolis de Cristina, al frente de cientos de militantes de La Cámpora, la Presidenta anunció el nombramiento de "Francisco I" (sic), y la silbatina y el abucheo fue generalizado por parte de los jóvenes de la agrupación ultrakirchnerista. Es que desde 2003 hasta ese momento, los Kirchner mantuvieron una relación tensa y distante con el arzobispo porteño.

En el instante del repudio masivo durante el acto, la Jefa de Estado no los desautorizó. La estrategia cambiaría poco tiempo después y desde el Gobierno entendieron que Bergoglio era un enemigo diferente siendo arzobispo que siendo el jefe de la Iglesia Católica de todo el mundo. El mensaje distribuido por la propia Cristina a todo el partido fue claro, a partir de ahora, el Papa era un "amigo" del Gobierno y de "todos los argentinos".

De momento, este sábado Larroque le regaló la camiseta de La Cámpora y varios libros sobre la agrupación, "tanto de los que escriben bien y mal porque la historia hay que contarla completa", resaltó la primera mandataria en declaraciones a la prensa que realizó tras reunirse con el Sumo Pontífice.

Además, a tono de broma, citó los salamines que le llevó de obsequio otro diputado camporista Eduardo "Wado" de Pedro, oriundo de Mercedes.

© Publicado el Sábado 20/09/2014 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

Las fotos:







viernes, 19 de septiembre de 2014

Santamarina de Tandil 1 vs. Huracán 1... De Alguna Manera...


Intermitencia, mala fortuna y balanza…


Huracán empató esta tarde 1-1 frente a Santamarina de Tandil por la séptima fecha del Torneo B Nacional de Transición 2014 en condición de visitante en el estadio Municipal General San Martín.

Muy complicada es la divisional, es verdad. De todas maneras, no es un justificativo. Huracán es intermitente, irregular y por momentos, tímido a la hora de atacar y tibio para marcar y defender. Sin embargo, suma. Un partido más, de visitante y con complementos reiterativos en este principio de campeonato ajenos al fútbol en sí, que nuevamente influyeron en el resultado.

En el comienzo, Marcos Díaz apareció para mantener el cero en nuestro arco luego de un error de Rodrigo Erramuspe y otro posterior de Federico Mancinelli. A los 22 minutos, Gonzalo Martinez llegó hasta el fondo por izquierda, mandó un centro pasado que Patricio Toranzo le bajó a Cristian Espinoza y el “7” estrelló la pelota en el travesaño. En el rebote, Cristian Milla tampoco podría convertir en su definición por arriba del arco, generando así la primera jugada clara del partido.

33 minutos habían pasado y entre muchas imprecisiones y desorden en la última línea del conjunto quemero, los locales lograrían ponerse en ventaja. Tras el saque de meta, Leandro Benitez peleó la pelota y tras conseguirla, tocó suave por arriba de la defensa quemera para Martín Michel, quién apareció sólo en posición adelantada frente a Marcos Díaz y definió sin problemas. Sin embargo, siete minutos más tarde las cosas volverían a emparejarse. Toranzo desde un tiro libre frontal envió un centro a la cabeza de Erramuspe para enviar la pelota al ángulo y dejar sin efecto el vuelo de Daniel Bertoya.

Párrafo aparte para el estado del campo de juego que al igual que muchos en la categoría, están al nivel de un potrero. Además de un nuevo mal arbitraje que ha condicionado el andar del equipo y hasta el humor de los hinchas que se mal predisponen a ver los encuentros del globo.

Lo que siguió de la segunda parte, no modificó nada. Espinoza y su hambre, su deseo, sus insaciables ganas de jugar llevaron a los dirigidos por Kudelka a aspirar a algo más. Pero su constante ataque, quedó inerte ante una marea de jugadores aurinegros. Pasados los diecisiete minutos, sería el mismo joven de botines color fluo quién tendría una nueva oportunidad. Desde afuera del área, remató con su pierna izquierda y esta vez el palo le negó el gol. Milla, como en toda la tarde tampoco pudo en el rebote ante la salida de Bertoya.
 
En resumen, Huracán no se consolida pero el miércoles tendrá una nueva batalla en el Ducó cuando enfrente a Crucero del Norte. Nosotros los quemeros, tenemos que estar ahí.
 
Síntesis:

Ramón Santamarina 1 

Daniel Bertoya; Aldredo Gonzalez Bordón, Jossimar Mosquera, Emiliano Capella, Walter Ledesma; Federico Scoppa, Juan Gaspari, Martín Michel; Mariano Gónzalez; Leandro Benitez y Pablo Vilchez.

DT: Duilio Botella.

Huracán
1 


Marcos Díaz; Germán Mandarino, Federico Mancinelli,  y Carlos Arano; Lucas Villarruel y Federico Vismara; Patricio Toranzo; Cristian Espinoza, Gonzalo Martínez y Cristian Milla. 

DT: Frank Kudelka.

Goles en el primer tiempo: 33m. Michel (S); 40m. Erramuspe (H).

Cambios en el segundo tiempo: 0m. Rodrigo Erramuspe por Domínguez (H); 21m. Diego Bucci por Benitez (S); 29m. Lucas Favalli por Toranzo (H); 34m. Federico Azcarate por Ledesma; 35m. Gonzalo Marinelli por Díaz. (H); 46m. Federico Martorell por Azcarate (S).

Arbitro: Mauro Vigliano

EstadioMunicipal General San Martín.

© Escrito por Rodrigo Da Silva el Viernes 12/09/2014 y publicado por el Departamento de Prensa del Club Atlético Huracán. 

Las fotos:


La tabla:







domingo, 14 de septiembre de 2014

Los juguetes y el futuro... De Alguna Manera...


“Hoy, los juguetes tienen que ver con el futuro, aun cuando sea incierto”...


Julio Moreno. Médico y psicoanalista Ni soldaditos ni mecanos: los chicos aman las pantallas y la capacidad de transformarse en otros. No buscan entender un juego sino aprender usándolo, dice el entrevistado.

Varían los juegos, pero el rito de jugar nos acompaña siempre, como nos acompaña la infancia que reconfiguramos a lo largo de la adultez. Pero los juegos de los chicos de hoy parecen apuntar más al futuro que al pasado, y los adultos poco saben de ellos. Los juguetes de antaño despiertan melancolía. Y en las rupturas que provoca el consumo de lo nuevo, las experiencias -que vienen del pasado de los mayores- pierden valor. Ya poco saben los padres sobre los juguetes de sus hijos, como ya saben más los chicos que los maestros acerca de las aplicaciones de los dispositivos digitales. Julio Moreno, médico y psicoanalista, ha investigado esta zona en la que se bordea el pasado y el futuro, ya que jugando se enlaza la tradición y se imagina lo porvenir.

¿Es cierto que los juegos de los chicos derivan de ceremonias y ritos?
Es cierto, y como han afirmado reconocidos antropólogos, la mayoría de los juegos clásicos derivan de ritos antiguos, pero la creatividad de todos los juegos está ligada a la originalidad humana, particularmente la de los niños, pero también en todo un aspecto “infantil” de los adultos. Es propio del humano crear juegos y juguetes y poder divertirse con cosas serias.

¿El juego y los juguetes expresan la continuidad de la historia y de las experiencias?
Ritos y juegos expresan una continuidad histórica. Los juegos clásicos derivan de historias antiquísimas. Por ejemplo, el juego de la pelota pudo haber derivado de la evocación de luchas divinas por la posesión del sol; el de la perinola y el trompo, de prácticas adivinatorias; las rondas, de ritos matrimoniales; los juegos de cartas, de luchas bélicas por territorios y poder. El sonajero parece haber surgido de las maracas que usaban los hechiceros para ahuyentar malos espíritus. Pero el conocimiento de estos orígenes queda olvidado en sus detalles por los niños que juegan, aunque el objeto “juguete” transmite algo de aquel pasado. Hace unos 50 años jugábamos a los indios, los vaqueros o los piratas con armas o chiches relacionados con ellos. Ni siquiera jugábamos a imitar, por ejemplo, a personajes de la entonces reciente Segunda Guerra Mundial. Sólo jugábamos con personajes de un pasado lejano.

¿Y qué pasa hoy con los juguetes y los juegos? ¿Cambiaron?
Los juguetes preferidos de los niños de hoy no suelen aludir al pasado sino al futuro. Así como los juguetes de antes parecían diseñados por un historiador, muchos de los juguetes actuales parecen ideados por un futurólogo: naves que surcan el espacio a una velocidad mayor que la de la luz, o que burlan la teoría clásica del tiempo, succionadores de energías, poderosos rayos laser. Los personajes de las historias infantiles preferidas de los niños contemporáneos no suelen tampoco disfrazarse como lo hacían Batman y Superman hace unos 50 años -lo que implicaba una continuidad de lo humano del disfrazado-, sino que se transforman en otro, como el hoy popular Ben 10 o los robots Transformers. Más que evocar el pasado, en esos juegos, historias y juguetes se preanuncia un futuro, aun cuando sea incierto.

¿Los juegos de los chicos siguen expresando fascinación por el tiempo que se repite?
No. Más bien están preparados para lanzarse a lo incierto, o a lo que suponen que va a ser. Les gusta repetir, pero no el pasado histórico sino las historias que los fascinan más; no, por ejemplo, el juego de los piratas, aunque algunas sagas como la de El señor de los anillos o la de Harry Potter pongan en escena una mezcla de pasado, magia y futuro que les encanta a niños y adolescentes.

Los juguetes miniaturizaban un pasado lejano. ¿Por qué ya no lo hacen más?
Quizá ya no sirva tanto evocar un pasado ni transmitirlo para que perdure. Puede ser que importe más preparar a los chicos para un futuro que, aun cuando resulte incierto, está lleno de novedades que son veloz y eficazmente apropiadas por la creatividad y la imaginación infantil. Así, hoy hay juguetes que cumplen con las leyes de la física cuántica y lo digital, pudiendo clonarse, absorber energía y teletransportarse.

¿Qué funciones cumplen las pantallas y la interactividad en la educación?
Muchas y cada vez más, porque las pantallas y lo digital van ampliando y modificando nuestro mundo. Un niño, desde una cada vez más temprana edad, se fascina por las pantallas, sobre todo por las touch . Ya antes de un año de vida un niño suele interactuar con fervor con pantallas y crece en un ambiente en el cual está rodeado de ellas. Son extensiones que forman parte de la realidad en la que le toca vivir y, más aún, en la que le tocará vivir. A los pequeños les interesan más las imágenes de una pantalla de TV, de una tablet, de una computadora o de un celular que un chiche real. Si en el futuro casi todo será comandado por dispositivos informáticos, los niños están aprendiendo, conformando sus mentes para usarlos como nosotros usamos pinzas y lápices. En la escuela, con computadoras portátiles, los niños sobrepasan a los maestros que no son “nativos digitales”, sino “inmigrantes digitales” que pueden aprender, pero no llegar a navegar por lo digital como los nativos.

¿Cómo se venden los juguetes? ¿Se interpela a padres o a chicos? ¿Cambia la estrategia de venta de juguetes porque los adultos ya no los entienden?
Antes, hasta mediados del siglo pasado, la publicidad de los juguetes estaba dirigida a los padres, con la consigna de que los juegos eran buenos, en el sentido de didácticos y para la tarea de “formar bien” a los niños, como el Mecano, el Cerebro Mágico, el Pequeño Doctor. Hoy las publicidades de juguetes -y los mismos juguetes- ya no van dirigidos en primer lugar a los padres para que los compren: van directamente dirigidos a los niños, que son los únicos que los entienden. Hasta da la impresión de que publicidad y los mismos juguetes están confeccionados para que los adultos no los entiendan. A los pequeños les gusta manejar un código y un tipo de juego que sólo ellos y sus pares entienden. El extremo de esas tendencias son las consolas, como la Playstation o Xbox, que los adultos solemos no entender, al menos no como naturalmente -y con increíble habilidad- lo hacen los niños. Tanto es así que esas aplicaciones -como la mayoría de los dispositivos digitales- ni siquiera suelen tener manuales para que quien pretenda usarlos los entiendan. Nuestra generación de adultos creyó que necesitábamos entender para usar cualquier dispositivo, los niños de hoy aprenden usando. Hacen camino al andar.

A veces los chicos se aburren, aun con los mejores juguetes... ¿Nos tenemos que preocupar por eso?
Los chicos pueden aburrirse por muchas razones: porque no logran jugar solos, porque no tienen con quién hacerlo, porque están tristes por algo que les pasó, o porque se dan cuenta de que no logran crecer como ellos querrían, o como sienten que al entorno social y familiar le gustaría. El aburrimiento suele ser una muestra de que algo de la potencia creativa del niño ha colapsado. No encuentran ese plus que da el juego y su alegría porque algo los tiene ocupados o los preocupa. Pero el aburrimiento puede ser un saludable llamado de atención para procurar ayuda, como un anuncio temprano de que algo anda mal.

¿Cómo advertir que estamos frente a un “chico problema”?
Que un chico tenga problemas como temores, miedos, fobias o insomnio es natural y hasta, en una medida moderada y no crónica, sano. Más preocupante puede ser cuando el niño se sobreadapta a las exigencias familiares y sociales, o cuando tiene dificultades severas para conectarse con sus pares, para jugar solo o para interactuar con su entorno. Hay que valorar, sin embargo, el hecho de que un chico logre llamar la atención para que sus padres, la escuela o algún referente valorado se den cuenta de que algo le pasa y hagan algo para ayudarlo. Lo peor es que logre esconder sus pesares, que disimule o que “se haga” el grande o el superado. Los pequeños signos problemáticos son como fusibles que advierten que algo anda mal en tiempos en los que es posible mejorar las cosas, atender y corregir lo que los perturba. La dificultad del niño con su entorno social es señal de que hay algo problemático.

¿Para qué es importante el entramado familiar y la contención que brinda?
Es muy interesante el término “entramado familiar” que se usa ahora cuando antes se hablaba simplemente de “familia”. La familia, como institución, en estos tiempos está en “desorden”, tiene diferentes configuraciones y no es raro que eso complique la función clásica de contención o “encierro” que supo tener la familia clásica del 1900 para con los niños. La familia ya no suele ser la cuna que antes albergaba toda la crianza, y eso porque como institución la familia está en crisis. Y ahora, entonces, puede ser preferible que haya separaciones conyugales -o discusiones y reconfiguraciones o arreglos familiares- antes de que los niños vivan en una suerte de campo de una batalla que los toma como rehenes.

¿Por qué los chicos creen y no creen en los padres? ¿Qué suponen, en qué confían y en qué no los chicos?
Hay una paradoja que afirma que es posible decir “creo tal cosa” y, al mismo tiempo, “no sé si lo creo”. Parece absurdo, pero describe muy bien el estado doble de la mente con que los niños se relacionan con sus padres o con quienes los crían. Son dos enunciados contradictorios pero necesarios para que el niño curse bien su infancia. Los niños necesitan transitar ese doble discurso: primero creer lo que dicen los padres. Pero al mismo tiempo, y de a poco en su crianza, es necesario ir descreyendo eso que creyeron. Ir desconfiando de la absoluta verdad de esos dichos paternos. Viven, por así decir, en esa paradoja de creer pero no creer tanto. Si siguen creyendo sin diferenciarse estamos en problemas; si los invade una incerteza o desconfianza total relacionada con el no creer, surge otro tipo de problemas. Pero ambos extremos -creer sin siquiera cuestionar y no poder parar de cuestionarse- suelen generar inconvenientes en la capacidad de jugar de los niños. Lo ideal es que ambas ramas de la paradoja estén presentes y se hagan tope una a la otra.

© Escrito por Claudio Martyniuk el Domingo 14/04/2014 y publicado por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


Errónea estrategia del Gobierno Nacional... De Alguna Manera...

No sirve de nada…

Solo le pido... Cistina Fernández de Kirchner. Foto: Pablo Temes

Errónea estrategia K. El relato en torno a la ley de pago soberano. Viaje al Vaticano y reto a las automotrices.

La mayoría de los bonistas no va a aceptar la propuesta del cambio de sede para el cobro de sus acreencias”. Esta fue la frase con la que Axel Kicillof se sinceró frente a los legisladores de las distintas comisiones ante las que defendió las “bondades” del proyecto gubernamental aprobado por el Congreso y rápidamente promulgado por la Presidenta. A la luz de tamaña confesión, es poco más lo que se puede agregar. La medida no servirá de nada. La estrategia del Gobierno es ganar tiempo y llegar al 1° de enero de 2014 –momento en el que la RUFO habrá vencido– para iniciar una negociación con los holdouts en busca de un arreglo que ponga fin al litigio. En ese sentido, las últimas decisiones del juez Thomas Griesa vienen ayudando: no sólo no declaró a la Argentina en desacato sino que, además, el miércoles pasado rechazó el pedido del fondo NML para que el Citibank informara sobre cuentas en la Argentina.

La última reunión del sector automotor con la Presidenta efectivamente no fue un lecho de rosas. Participaron las principales empresas del sector, representantes de las concesionarias y gremialistas del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata). Fuentes que conocen al detalle los diálogos –picantes y en tono elevado– que tuvieron lugar en ese cónclave aseguran que el reto presidencial tuvo como destinatarios principales a los representantes de Fiat, Volkswagen y del sector gremial, que no estuvo representado por el secretario general, Ricardo Pignanelli, sino por su adjunto, Mario Manrique.

A los primeros, Cristina Fernández de Kirchner les recriminó en durísimos términos el hecho de haber enviado a todas las concesionarias Fiat un cuestionario preguntándoles qué opinaban del plan Pro.Cre.Auto. Según su criterio, ese formulario inducía a respuestas negativas respecto del plan lanzado por el Gobierno. No hubo derecho a réplica; la primera mandataria puso sobre la mesa una copia de dicha encuesta y la leyó en voz alta, llena de furia.

A los representantes de Volkswagen les echó en cara no haber endurecido su postura ante los reclamos de la central de Brasil referidos al atraso en el pago de importaciones y la amenaza de cortar el envío de productos desde allí a la Argentina. Como ya se dijo en esta columna, es cada vez mayor el número de empresarios que, a nivel mundial, no quieren tener otra Venezuela entre su cartera de clientes.

Con todo, la nota más fuerte llegó con la lista de reproches a la dirigencia del Smata. Manrique tuvo que soportar que la Presidenta le enrostrara la falta de acción del gremio ante los despidos y suspensiones dispuestos por las automotrices: “Ustedes no defendieron a los trabajadores ante las medidas tomadas por los empresarios y yo tuve que bancarme a toda la ‘zurda’ cortando rutas y calles”, gritó desencajada Fernández de Kirchner.

Sin dudas esto explica el show montado por un reducido grupo de gremialistas del sector en uno de los balcones de la Cámara de Diputados, insultando y protestando ante cada una de las intervenciones de los legisladores de la izquierda y del resto de la oposición durante la sesión en la que se aprobó la ley de cambio de sede de pago a los bonistas de la deuda.

En Economía, confirmaron todas estas versiones. El ala técnica de funcionarios que no responde directamente a los camporistas asegura que  la situación volverá a tensarse como consecuencia de la falta de dólares y de la inflación. La presión que sobre la divisa estadounidense ejerce el aumento de los precios licúa los efectos de las correcciones realizadas en el tipo de cambio. “El componente ideológico del así llamado ‘modelo’ continuará acentuando las intervenciones estatales en cada sector donde la urgencia lo requiera. El barco se mantendrá a flote con el monitoreo diario, pero las urgencias harán imposible pensar a mediano plazo y generar previsibilidad. Eso es algo que, a esta altura del mandato, en el Gobierno no le importa a casi nadie”, aseguran las voces técnicas del Ministerio de Economía.

A la luz de estas alternativas, el aumento de la conflictividad social es una de las circunstancias que pueblan el horizonte de la vida política argentina de aquí hasta el final del mandato de Fernández de Kirchner. Se sabe que la preocupación del Sumo Pontífice por esta situación es permanente. Todos los que con él han hablado le han escuchado –a modo de prédica– la misma frase: “Hay que cuidar a Cristina”. Esto es producto, además, de una relación de amistad personal que nació entre ellos luego de aquel primer encuentro que mantuvieron un día antes de la asunción formal de Francisco, el 18 de marzo de 2013. En ese marco, pues, debe analizarse su próximo encuentro con la Presidenta.

La anécdota que llevó a su concreción fue la siguiente.Dos o tres días después del accidente en el que fallecieron la esposa y los dos pequeños hijos del sobrino del Papa, Emanuel Horacio Bergoglio, un secretario de la Presidencia llamó a la periodista Alicia Barrios, a quien le manifestó que la jefa de Estado quería comunicarse con Francisco sin pasar por los canales formales del protocolo diplomático. Barrios, amiga desde los tiempos en que el entonces cardenal Jorge Bergoglio padecía con estoicismo los embates y el ninguneo a los que lo sometía el kirchnerismo, telefoneó al Vaticano y tuvo una respuesta inmediata. La comunicación entre el Santo Padre y la Presidenta quedó fijada para la tarde de ese mismo día. En esa conversación, Francisco –afectado por la imposibilidad de estar cerca de su familia en esa instancia trágica– le manifestó a la jefa de Estado que le gustaría verla durante el transcurso de algún viaje que la llevara cerca de Roma. Esa “cercanía” la dio Nueva York, en donde Fernández de Kirchner deberá participar de la apertura de las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Tras consultar su agenda, el Santo Padre fijó la fecha del encuentro –un almuerzo– para el próximo sábado al mediodía.

Los memoriosos recuerdan que, durante el cónclave que culminó con la elección del papa Benedicto XVI, Néstor Kirchner hizo todo lo posible para boicotear la postulación del entonces cardenal Bergoglio. “Si lo eligen papa, nos va a manejar el gobierno desde Roma”, repetía sin tapujos por esos días el ex presidente. La Argentina, una paradoja permanente.

Producción periodística: Guido Baistrocchi.

© Escrito por Nelson Castro el Sábado 13/09/2014 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.