jueves, 16 de junio de 2016

1955 - 16 de Junio - 2016... A 61 Años del Bombardeo a Plaza de Mayo... ©dealgunamanera...

60 años del ignominioso bombardeo a Plaza de Mayo…


El bombardeo del 16 de junio de 1955 a Plaza de Mayo, antesala del golpe que derrocó al presidente Juan Domingo Perón en septiembre del mismo año, y del cual se cumplen 60 años, exhibió el mismo código genético que la dictadura terrorista de Estado que usurpó el poder entre 1976 y 1983.

© Publicado el 16/06/2015 por http://www.conclusion.com.ar

Aviones de Armada y Fuerza Aérea lanzaron 14 toneladas de bombas, equivalentes a la mitad del explosivo con el que aviones alemanes e italianos destruyeron la ciudad vasca de Guernica en 1937.

La masacre de Plaza de Mayo dejó 308 muertos, la mayoría civiles, según estableció una investigación del Archivo Nacional de la Memoria (ANM) divulgada en 2009 por el entonces secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde.

Sólo 12 de los fallecidos (4 por ciento del total) estaban adentro de la Casa de Gobierno, donde impactaron 29 bombas, de las cuales estallaron seis.

“El resto de las bombas, proyectiles y fusiles semiautomáticos FN de fabricación belga que los infantes de Marina estrenaron ese día, estuvieron dirigidos a la población”, según el informe con las principales conclusiones de la investigación del ANM.

En “connivencia con sectores políticos y eclesiásticos, las Fuerzas Armadas descargaron sus bombas y ametralladoras contra la población civil como forma de implantar el terror y el escarmiento, para lograr la toma del poder”, puntualizó.

El régimen genocida surgido del golpe del 24 de marzo de 1976 heredó -y llevó al paroxismo- estas características, pero también a varios participantes del bombardeo de junio del 55, entre ellos a Emilio Massera, Oscar Montes y Guillermo Suárez Mason.

Las dictaduras implantadas en 1955 y en 1976 compartieron también similares matrices cívico-militares.

Por otra parte, la impunidad de los responsables de la masacre de junio de 1955 contrasta con los fusilamientos de 1956 en José León Suárez y otros lugares, en represalia por el intento de levantamiento que encabezó el general Juan José Valle contra el régimen de la autodesignada “Revolución Libertadora”.

“Los militares de junio de 1956, a diferencia de otros que se sublevaron antes y después, fueron fusilados porque pretendieron hablar en nombre del pueblo: más específicamente, del peronismo y la clase trabajadora. Las torturas y asesinatos que precedieron y sucedieron a la masacre de 1956 son episodios característicos, inevitables y no anecdóticos de la lucha de clases en la Argentina”, escribió en 1969 Rodolfo Walsh.

En el prólogo a la reedición de ese año de su libro “Operación Masacre”, Walsh alertó, premonitorio: “Que (la oligarquía) esté temporalmente inclinada al asesinato es una connotación importante, que deberá tenerse en cuenta cada vez que se encare la lucha contra ella. No para duplicar sus hazañas sino para no dejarse conmover por las sagradas ideas, los sagrados principios y, en general, las bellas almas de los verdugos”.



 


miércoles, 15 de junio de 2016

Copa América Centenario 2016. Argentina 3 vs. Bolivia 0... @dealgunamanera...

Copa América Centenario: sin transpirar, Argentina goleó a Bolivia y ganó su grupo.


La selección ganó este martes por 3 a 0 con goles de Lamela, Lavezzi y Cuesta. El sábado desde las 20 enfrentará a Venezuela por un lugar en semifinales.

© Escrito por Guillermo Puente el miércoles 15/06/2016 y publicado por el Diario La Voz de Interior de la Provincia de Córdoba.

Con tantos de Erik Lamela, Ezequiel Lavezzi y Víctor Cuesta, el seleccionado argentino de fútbol goleó esta martes al de Bolivia 3-0 y el sábado próximo se medirá ante Venezuela, en Boston, por los cuartos de final de la Copa América Centenario que se desarrolla en los Estados Unidos.

A un solo gol de distancia para igualar el récord de Gabriel Batistuta como máximo artillero en el historia del seleccionado de la AFA, Lionel Messi tendrá que seguir esperando para alcanzar esa satisfacción personal, pero lógicamente, incluido el crack rosarino, todo el plantel que conduce Gerardo Martino persigue el máximo objetivo colectivo y no quiere regresar sin el título.

Ante los bolivianos, Lamela de tiro libre; Lavezzi, al capitalizar un rebote, y Cuesta, al valerse de un anticipo ofensivo, le permitieron a los albicelestes imponerse ya en el parcial 3-0.

Eso ocurrió a pesar de que el Tata Martino reservó a casi la totalidad de los titulares, a tal punto que Messi esperó su turno durante los 45 minutos iniciales en el banco de los suplentes.

Síntesis

Argentina: 3

Sergio Romero; Facundo Roncaglia, Nicolás Otamendi, Víctor Cuesta, Ramiro Funes Mori; Ever Banega, Matías Kranevitter; Ezequiel Lavezzi, Sergio Agüero, Erik Lamela; Gonzalo Higuaín. Director técnico: Gerardo Martino.

Bolivia: 0 

Carlos Lampe; Mario Saavedra, Edwin Zenteno, Nelson Cabrera, Alejandro Meleán, Luis Alberto Gutiérrez; Jhasmani Campos, Juan Carlos Arce, Pedro Azogue, Martín Smedberg; Yasmani Duk. Director técnico: Julio César Baldivieso.

Goles: en el primer tiempo, 13m Lamela (A); 15m Lavezzi (A); 32m Cuesta (A).

Cambios: en el primer tiempo, 23m Diego Bejarano por Duk (B). Segundo tiempo: desde la reanudación, Lionel Messi por Higuain y Lucas Biglia por Banega (A) y Christian Machado por Arce (B); 29m Jonathan Maidana por Otamendi (A); 40m Carmelo Algañaraz por Smedberg (B).

Arbitro: Víctor Carrillo (Perú).

Estadio: Century Link Field (Seattle).








martes, 14 de junio de 2016

Irma Roy. Q.E.P.D. @dealgunamanera...

Falleció Irma Roy…



La actriz y ex diputada justicialista Irma Carolina Guglielmo, más conocida como Irma Roy, murió a los 84 años en un sanatorio del barrio porteño de Recoleta, donde se encontraba internada desde hace 10 días a causa de un accidente doméstico.

© Publicado el martes 14/06/2016 por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Osvaldo Papaleo, quien fue pareja de la artista y padre de su única hija, la actriz Carolina Papaleo, confirmó el fallecimiento de quien entre 1948 y 1989 participó en 13 filmes del cine argentino.

Roy inició su carrera artística en los años '40 luego de egresar del Conservatorio Nacional de Arte Escénico. En 1950, realizó su primera aparición cinematográfica con Los Cinco Grandes del Buen Humor en "Cinco grandes y una chica", de Augusto César Vatteone.

Después, participó en 11 películas más, entre éstas "Al compás de tu mentira" (1950), de Héctor Canziani; "El hermoso Brummel" (1951), con Delfy de Ortega; "Caídos en el infierno" (1954), de Luis César Amadori; "Mi marido y mi novio", con Héctor Calcaño; y "Requiebro" (1955), producida por Artistas Argentinos Asociados (AAA).

A fines de los '60, fue convocada por el empresario Alejandro Romay para protagonizar un dramático romance en "Simplemente María", telenovela que fue un éxito, la consagró y le dio popularidad. Participó en televisión también en ciclos como "El cielo es para todos" (1962), con guiones de Nené Cascallar; "El día nació viejo" (1964), "El amor tiene razón" (1965), al lado de Beatriz Día Quiroga; y "Alta comedia" (1965).

En televisión, también encabezó "El teatro de Irma Roy" (1983), "Alguien como vos" (1984-86) y "Vínculos (1987)". En 1989, realizó su última aparición cinematográfica en "DNI: La otra historia", de Luis Brunati.

Por su militancia justicialista, fue perseguida por la última dictadura militar al igual que su por entonces pareja, Osvaldo Papaleo, padre su única hija, la actriz Carolina Papaleo. Con su familia, se vio obligada a exiliarse hasta 1983, cuando se reinstauró la democracia en el país con la presidencia del radical Raúl Alfonsín.

Como diputada nacional, representó desde el 1º de diciembre de 2001 hasta el 10 de diciembre de 2005 a la Capital Federal por el Partido Justicialista (PJ). Roy fue una de las impulsoras de la ley de Cupo Femenino.



De dónde provienen las palabras “boludo” y “pelotudo”… @dealgunamanera…

De dónde provienen las palabras “Boludo” y “Pelotudo”… 


En las Guerras de la Independencia, nuestros gauchos peleaban contra un ejército de lo que en aquella época era el Primer Mundo. Una maquinaria de guerra con disciplina de las mejores academias militares, armas de fuego, artillería, corazas, caballería, el mejor acero toledano, etc.

© Publicado por http://buenavibra.es de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Nuestros gauchos (los montoneros), de calzoncillo cribado y botas de potro con los dedos al aire, sólo tenían para oponerles pelotas, piedras grandes con un surco por donde ataban un tiento, bolas -las boleadoras- y facones, que algunos amarraban a una caña tacuara y hacían una lanza precaria. Pocos tenían armas de fuego: algún trabuco naranjero o arma larga desactualizada.


¿Cuál era la técnica para oponerse a semejante maquinaria bélica como la que traían los realistas?

Nuestros gauchos formaban en tres filas: La primera era la de los Pelotudos, que portaban las pelotas de piedra grande amarradas con un tiento. La segunda era la de los Lanceros, facón y tacuara, y la tercera la integraban los Boludos con sus boleadoras o bolas.


Cuando los españoles cargaban con su caballería, los pelotudos, haciendo gala de una admirable valentía, los esperaban a pie firme y les pegaban a los caballos en el pecho, que de esta manera rodaban y desmontaban al jinete y provocaban la caída de los que venían atrás. Los lanceros aprovechaban esta circunstancia y pinchaban a los caídos.

Entonces, los Boludos, que no eran tan Boludos porque venían atrás, los rematan en el piso.


Allá por la década del ’90 (1890) un Diputado de la Nación aludiendo a lo que hoy llamaríamos “perejiles”, dijo que no había que ser Pelotudo en referencia a que no había que ir al frente y hacerse matar.

Fue algo así como decir “no hay que ser estúpido”. Esta fue la segunda acepción que se le dio al término: 1º aguerrido 2º estúpido o similar. Con el tiempo se sumó a esta última clasificación la palabra boludo y el imaginario popular lo fue incorporando como al que los genitales grandes le impedían moverse con facilidad.


Luego se transformó en un insulto grave, de tal manera que íbamos a las manos si alguien nos lo decía.  Y nos fuimos olvidando del verdadero origen de la palabra.


En las dos últimas décadas, reemplazando a otros modismos del dialecto cotidiano argentino, (como el ¿“viste”? o “a ver”…), los jóvenes intercalan cada dos o tres palabras un Boludo, a veces por nada, a veces por respuesta, a veces en vez de decir “querido”, es decir que es un término de uso múltiple que no tiene el sentido original y que en realidad, no sabemos por qué lo decimos.

Gian Franco Pagliaro. Balada del Boludo


  

Héroe de Malvinas y talento argentino… @dealgunamanera…

El héroe de Malvinas que hizo un túnel récord quiere volver al país…

Leonardo Rondi, responsable del proyecto dirección y construcción del Túnel del San Gotardo en Suiza. Foto: Luciano Thieberger.

Leonardo Rondi peleó en Monte Longdon. Se recibió de ingeniero en La Plata e hizo toda su carrera en Europa. La de Leonardo Rondi es una historia de superación. Nacido en Dolores, provincia de Buenos Aires, es ingeniero, tiene 55 años y tres hijas. Hasta aquí nada extraordinario. Pero basta googlear su nombre para encontrar artículos con títulos como “Leonardo Rondi, un orgullo”, “El héroe de Malvinas que dirige el proyecto de Agua Negra”, o “Un argentino, responsable de la construcción del túnel récord”.

© Escrito por Cayetana Mercé el martes 14/06/2016 y publicado por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.  

Rondi, como buen ingeniero, es un hombre de perfil bajo, y por ahí un poco tímido. Se suelta y toma confianza cuando empieza a hablar de sus pasiones: la Argentina y la ingeniería. Y ahora está en un momento en que ve la posibilidad de unirlas y comenzar una nueva etapa de su vida, después de haber terminado el túnel ferroviario de San Gotardo en Suiza, el más largo del mundo (ver San Gotardo...) 


Viajó desde Europa para representar a Lombardi –la empresa suiza donde trabaja desde hace más de 17 años– en la serie de charlas del encuentro EcoSuiza. También vino para continuar las gestiones de los proyectos que Lombardi tiene en el país: el Túnel de Agua Negra –que unirá San Juan con Chile– y la Autopista Ribereña en la Ciudad. Ansioso por que todo esto se concrete, Rondi piensa que es su oportunidad para aportar al país todo lo que aprendió desde que se fue, cuando terminó de cursar Ingeniería.



De chico jugaba en el corralón que tenía su padre. Entre bolsas de cemento, cal y arena, se fue familiarizando con el mundo de la construcción. Pero él quería estudiar, aspiraba a más. Empezó en la Universidad de la Plata y cuando comenzaba el servicio militar en el Regimiento 7 de Infantería Mecanizada, estalló la Guerra de las Malvinas. Tenía 19 años y se convirtió en héroe. 

Estuvo en Monte Longdon, la batalla más sangrienta. Cuesta hacerlo hablar del tema: “Podés buscar en Internet, hay muchas notas que hablan de mi participación”, cuenta. Nicolás Kasanzew, en su libro “Los chicos de la guerra”, relata cómo Rondi, con un fusil FAL, peleó cuerpo a cuerpo solo contra los ingleses y volvió con un trofeo de guerra: una boina color marrón que perteneció a un piloto enemigo. Por estas acciones fue galardonado con la medalla La Nación Argentina al Valor en Combate.


Volvió a Dolores herido, estuvo internado y la pasó muy mal. Su familia se convirtió en su principal contención y los cariñosos cuidados de su madre lo ayudaron a retomar casi inmediatamente los estudios. Empezó tercer año de Ingeniería, además de idiomas. Estudiaba día y noche hasta que logró recibirse. “Decidí seguir en Europa porque quería perfeccionarme, pero también porque necesitaba concretar algún proyecto. Corrían los 90, las obras estaban paradas, y yo no me quería detener otra vez”, explica en referencia a Malvinas.

En Europa obtuvo las dos becas a las que se presentó. Primero se fue a Italia y luego a Alemania, donde se especializó en tunelería. Postergó su objetivo de volver a la Argentina por trabajar en las obras del Aeropuerto de Frankfurt. 

“¿Algún fracaso, ingeniero?”, es la pregunta que parece hacer falta frente a semejante trayectoria. “Por supuesto –contesta–. Cuando terminé la beca en Alemania, confiado, salí a buscar trabajo en constructoras alemanas y en ninguna me tomaban. Preferían a los alemanes, más que a un argentino casi sin experiencia. Ahí me di cuenta de que el problema era tratar de insertarme en una empresa local. Busqué trabajo en consultoras internacionales, donde ser extranjero y saber idiomas fuera una ventaja”.


Estaba terminando en Frankfurt cuando, sorpresivamente, le llegó un llamado del dueño de Lombardi: quería sumarlo a San Gotardo, el proyecto que estaba por comenzar. Otra vez se alejaba la posibilidad del regreso al país. Terminaron siendo 17 años de obra, porque se fueron agregando trabajos y porque los suizos, aclara Rondi, querían que no sólo fuera un túnel ferroviario récord por su extensión y profundidad sino también “el mejor del mundo”. Durante esos 17 años estuvo a cargo de muchas áreas y quedó casi como su cara visible.


Pero San Gotardo ya se terminó, ¿Y ahora qué? “Tengo la sensación que está empezando un nuevo capítulo en mi vida. Y quiero que sea en la Argentina. Quiero volver a mi país, estar con mi familia, con mi hermana, traer a mis hijas... Lamentablemente, mi mamá falleció el año pasado y por eso también siento que no puedo dejar pasar el tiempo. En este país hay mucho por hacer en materia de tunelería. 

Son proyectos largos, complicados, necesitan un contexto favorable y con reglas claras para poder concretarlos. Y se puede si los argentinos nos unimos en pos de cumplir objetivos que beneficien a mucha gente como este tipo de obras. En Lombardi hay proyectos en otros países donde podría insertarme, pero yo elegí el mío. Creo que llegó el momento de volver”.