martes, 2 de julio de 2013

Chevron, Chevron... ¡¡¡Que Grande Sos!!!... De Alguna Manera...


“El fallo de la Corte a favor de Chevron es funesto para los pueblos de América Latina”…

Indígenas ecuatorianos acusan a la petrolera por desastre ambiental. El gobierno impulsó que se retire un embargo multimillonario.

 “Escuchamos a Cristina acusar a los jueces de que siempre toman decisiones para favorecer a las corporaciones… Parece un poco contradictorio el discurso, ¿no?”. Julio Prieto es abogado y vive en Ecuador, pero en poco menos de una semana, el lapso que pasó entre Buenos Aires y Neuquén, parece haber comprendido uno de los temas centrales planteados por el gobierno nacional durante los últimos meses: el rol de la Justicia y su relación con el poder político y económico del país. Sin embargo, su opinión no es la de alguien lejano a la cuestión. Prieto es uno de los abogados de los 30 mil pobladores originarios de la Amazonia ecuatoriana que fueron perjudicados, en la década del ’90, por la contaminación con petróleo que provocó la empresa petrolera Texaco, luego adquirida por Chevron, en ríos y reservas de agua subterráneas.

“Los campesinos extraen el agua de pozo con olor a combustible, o cavan un metro y sacan la mano con petróleo. Así están viviendo”, relató Prieto a Plazademayo.com.

En 2011, luego de casi 20 años de litigio, dos instancias judiciales en Ecuador condenaron a la compañía petrolera a pagar a las víctimas 19 mil millones de dólares en concepto de resarcimiento, y para garantizar la efectividad del fallo embargó sus activos en todo el mundo. A pesar de este pesado antecedente, que aparecía como una sentencia definitiva para la concreción de futuros negocios, Chevron, por medio de su representación en el país, selló en poco tiempo un acuerdo con YPF un acuerdo inicial de inversión por 1.500 millones de dólares para explorar en forma conjunta el yacimiento de hidrocarburos no convencional neuquino Vaca Muerta, o “Vaca Viva”, según el último pedido realizado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

El convenio fue firmado por el CEO de YPF, Miguel Galuccio, y su par de Chevron para América Latina y África, Ali Moshiri. Según la compañía nacional, “Vaca Muerta” produciría unos 7.000 barriles de petróleo por día. El acuerdo entre las empresas, sin embargo, fue posible gracias a la rapidez de dos resoluciones legales que favorecieron claramente a los intereses de Chevron y le permitió operar en el país pese al embargo internacional emitido desde Ecuador. Primero fue la procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, referente de la agrupación oficialista “Justicia legítima”, quien aseguró que la medida judicial, en caso de aplicarse en el país, podía “producir agravios de carácter irreparable a (los) intereses esenciales de la Nación vinculados con la política energética y el desarrollo económico. Así el caso involucra una cuestión de gravedad institucional”, consideró la jefa de los fiscales.

Tras la aseveración, pidió a la Corte Suprema de Justicia, por medio de un recurso extraordinario, que suspendiera la aplicación del embargo. En pocos días, el máximo tribunal que preside Ricardo Lorenzetti avaló la petición y dejó sin efecto el fallo dictado en Ecuador al opinar que Chevron Argentina, subsidiaria de la compañía estadounidense, no había tenido derecho a defensa y que el dictamen, de ese modo, “afectaba los principios que integran el orden público internacional argentino”. La determinación fue firmada por todos los jueces de la Corte aunque Carlos Fayt se expresó en disidencia parcial y votó por rechazar el recurso de la procuradora. En seguida, la Presidenta, llamándolo “el casi centenario miembro de la Corte, que pertenece al histórico y también centenario Partido Socialista”, recordó por Twitter que el magistrado, de 95 años, superó en dos décadas el plazo legal para que un juez se mantenga en funciones.

“Entendemos que el acuerdo con Chevron tiene la apariencia de un buen negocio para la economía argentina, pero el fallo de la Corte Suprema viene provocado por razones políticas y es un precedente funesto para los pueblos latinos, que no van a poder demandar nunca ni a Chevron ni a otra multinacional porque todas operan bajo estos sistemas corporativos basados en múltiples niveles de subsidiarias. Es imposible enjuiciar a todas, por eso está garantizada la impunidad de cualquier multinacional que haga extractivismo”, señaló Prieto. El abogado ecuatoriano, además, expresó su sospecha acerca de los verdaderos intereses de Chevron en “Vaca Muerta”, un yacimiento que, a su criterio, “no le interesó a nadie más”. “Qué casualidad que a Chevron le resulta atractivo invertir en Argentina recién después que le confirmaron el embargo. Por eso dijo ‘si me lo levantan, invierto’. Yo desconfío de cómo el Estado argentino hará cumplir esa promesa”, sostuvo.

Prieto llegó al país para participar de un encuentro organizado en la ciudad de Neuquén por el Observatorio de Derechos Humanos para los Pueblos Indígenas (ODHPI). No lo hizo solo, sino que estuvo acompañado por su compatriota Luis Yanza, líder de las poblaciones originarias que fueron damnificadas en Ecuador por la contaminación petrolera. Yanza, como Prieto, también duda del vínculo entre YPF y Chevron. “Creo que después de que consiguió el objetivo de evitar el embargo, Chevron va a ir disminuyendo el interés en el yacimiento y finalmente no hará ninguna inversión”, indicó. Yanza es uno de los fundadores del Frente de Defensa de la Amazonia, y en 2008 fue reconocido con el Premio Goldman, uno de los galardones más importantes del mundo para luchadores por el medioambiente. En 2012, la distinción fue para Sofía Gatica, integrante de la agrupación Madres de Ituzaingó, que denunció los efectos contaminantes de los agrotóxicos arrojados desde avionetas en los campos de soja cercanos al Barrio Ituzaingó Anexo, en Córdoba.

En Neuquén, Yanza y Prieto explicaron su experiencia a los pobladores originarios de la Patagonia, especialmente los habitantes de zonas cercanas a Vaca Muerta. “Les contamos cómo fue que Chevron llegó a la Amazaonia, la saqueó, la destruyo y luego nos abandonó. Aquí en Argentina quién dice que la cosa va a ser diferente, si ya la Corte Suprema les entregó impunidad. Nosotros decimos que no sólo están en juego los derechos de los 30 mil ecuatorianos que fuimos afectados, sino que han entrado en riesgo los derechos de los argentinos. Esperamos – dijo Yanza- que los jueces recapaciten”.

© Escrito por Gabriel Tuñez el lunes 01/07/2013 y publicado por Plazademayo.com de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Mentime y llamame Marta... De Alguna Manera...


La locura no tiene fin…


El Gobierno sigue usando los fondos de organismos previsionales para financiarse.

Conforme surge del Boletín Oficial, la Secretaría de Hacienda conjuntamente con la Secretaría de Finanzas, emitieron en septiembre 2012 y mayo 2013 respectivamente, dos nuevas Letras del Tesoro por $1.200 millones.

Los Títulos se emitieron contra el Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional de la ANSes y el Instituto de Ayuda Financiera para el Pago de Retiros y Pensiones Militares.

En el primer caso, el monto fue de $900 millones, con pago trimestral de intereses a la tasa promedio abonada por los bancos privados en concepto de depósitos superiores al millón de pesos, a los que se suman 200 puntos básicos, convirtiéndola en algo más del 17%. En el segundo, se trató de $300 millones a igual interés pero a los que se agregan 100 puntos básicos menos que para el anterior.

La medida tiene lugar en el marco de la política llevada adelante por la administración  nacional de no recurrir a los mercados voluntarios de deuda.


© Escrito por Nidia Osimani el martes 02/07/2013 y publicado por Tribuna de Periodistas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


domingo, 30 de junio de 2013

¡¡¡Que difícil se me hace...!!! De Alguna Manera...


Bajo el influjo de las buenas ondas…

Los precandidatos de Juntos, de campaña en las calles porteñas. Elisa Carrió y Pino Solanas, precandidatos de la Coalición Sur. Imagen: DyN

Las cuatro listas del espacio que se enfrentarán en las primarias tienen la idea de apuntar sus críticas al kirchnerismo y el macrismo y evitar la confrontación interna. Al margen de las intenciones, no descartan que en algún momento haya cruces.

A diferencia del resto de los espacios políticos porteños, las cuatro listas que integran el frente UNEN tienen el desafío de combinar la disputa interna de cara a las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la disputa hacia afuera contra otras fuerzas potentes como el kirchnerismo y el macrismo. En una campaña que recién arranca, cada una de las listas comenzó a explotar su propio perfil, en una competencia que, aseguran, no será agresiva entre ellos. La Coalición Sur, de Elisa Carrió y Fernando “Pino” Solanas, se planta con una bandera anticorrupción y un discurso fuertemente anti-K; Juntos, de Alfonso Prat Gay, Victoria Donda y Ricardo Gil Lavedra, destaca la continuidad y el futuro de su proyecto político hacia 2015, mientras que desde Sumá+, Rodolfo Terragno y Martín Lousteau quieren enfocarse en “mirar al futuro y presentar propuestas”. En cuarto lugar, Leandro Illia y César Webe proponen una lista radical “pura” que rescate el “perfil progresista” del partido.

Más allá de la dinámica de lo impensado que se juega en cada elección, los distintos espacios que conforman UNEN coincidieron en apuntar sus balas contra el kirchnerismo en vez de enfocarse en una fuerte disputa interna. “Es difícil que nos podamos salir del discurso general, que en el caso de la Ciudad tiene que como adversario principal a Cristina Kirchner y como adversario secundario a Macri. Esa es la esencia de lo que hemos armado”, asegura el referente de Libres del Sur, Humberto Tumini, uno de los cerebros de la lista Juntos, que postula al diputado de la Coalición Cívica Alfonso Prat Gay, como senador y al radical Ricardo Gil Lavedra como primer diputado.

“Nosotros vamos a destacar las virtudes de nuestro proyecto en vez de descalificar a nuestros competidores. Sin dudas, no va a ser una campaña agresiva. Y vamos a hacer mucho hincapié en que lo nuestro tiene futuro, que somos un espacio más homogéneo, que tenemos los candidatos jóvenes y que si ganamos vamos a disputar la ciudad en 2015”, completa Tumini, en contraposición con las declaraciones de Solanas, que había afirmado que el frente UNEN “es una alianza táctica que no seguirá más allá de octubre”. Armado en octubre pasado, Juntos presentará sus candidatos este martes en el Paseo La Plaza, donde también podrá verse a dirigentes como la diputada Victoria Donda y el ex legislador Sergio Abrevaya. 

La idea de esta lista es “estrechar el vínculo” del espacio de la ciudad con un proyecto nacional que apunte a las presidenciales, algo que contemplan como una ventaja frente a sus adversarios internos.

Los tres espacios comenzaron ayer sus recorridas por los barrios con caminatas y diálogo con los vecinos. “Nuestro encuentro es muy bien recibido en toda la ciudad, desde distintos sectores agradecen nuestra unión por que con Lilita somos dos referentes de la lucha contra la corrupción”, aseguró ayer Solanas.

Desde el comité de campaña, contaron a Página/12 que no van a confrontar con los otros candidatos de UNEN, sino que trabajarán como si se tratara de las elecciones generales de octubre. “El eje central de la campaña va a ser en primer lugar enfrentar al kirchnerismo, luchar contra la corrupción, por la ética pública, y señalar que Pino y Lilita son los que mejor pueden representar y un límite al Gobierno”, relata Maximiliano Ferraro, titular de la CC porteña. El PRO no será el blanco principal de Coalición Sur, sino que buscarán disputarle al macrismo el rol de opositor al gobierno nacional. “Tanto Pino como Lilita son mejores garantías que Macri para enfrentar al kirchnerismo”, insisten desde Coalición Sur. Reflejando esa idea, ayer Carrió pidió que los tres senadores por la Capital “sean de la oposición”. “Pino y Fernanda Reyes son los mejores para ganarle a Daniel Filmus”, concluyó Carrió, que aspira a renovar su banca en Diputados.

Coalición Sur presentará sus candidatos este miércoles en el Palacio San Miguel, donde estarán otros dirigentes como Alcira Argumedo (Proyecto Sur), Fernando Sánchez (CC), Roy Cortina (Partido Socialista) y el titular de la Fundación La Alameda, Gustavo Vera, cercano al papa Francisco y que será primer candidato a legislador porteño.

Tratando de exprimir al máximo los tiempos de lo que denominan una campaña corta, los candidatos de Sumá+ se repartieron ayer en distintos puntos de la ciudad para abarcar más territorio. “Es un binomio muy fuerte con una sinergia positiva que suma muy bien”, se entusiasman en el comité de campaña de Terragno y Lousteau, a quienes definen como una propuesta “complementaria, homogénea y sin contradicciones”. Además, aspiran a plantarse como una alternativa con candidatos jóvenes y nuevos en la lista de diputados, que detrás de Lousteau lleva a los radicales Adrián Ramos, economista, y Carla Carrizo, politóloga. Sumá+ ya presentó formalmente sus candidatos la semana pasada y en los próximos días prevé realizar actividades conjuntas.

Hasta ahora en un clima de relativa armonía, fuentes de distintos espacios no descartaban que pueda subir de tono más adelante. “Con Carrió nunca se sabe cuándo te va a tirar una patada a la cintura”, decía, mitad en broma mitad en serio, uno de los armadores de una de las listas.

Estos tres espacios cuentan con posibilidades de llegar al piso del 22 por ciento, mientras que detrás corre la lista de Leandro Illia, hijo del ex presidente radical. De consolidarse ese escenario, la lista de diputados quedaría conformada de manera intercalada por los primeros de cada espacio. Es decir que de cara a octubre, UNEN podría llevar como candidatos a Carrió, Gil Lavedra y Lousteau. En cambio, la categoría de senadores será para el que más votos tenga Solanas/Fernanda Reyes, Prat Gay/Victoria Donda o Terragno/Mabel Bianco.

© Escrito por Sebastian Abrevaya el domingo 31/07/2013 y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.



Rayuela: La novela que revolucionó la forma de leer cumple 50 años… De Alguna Manera...


“Rayuela”: La novela que revolucionó la forma de leer cumple 50 años…

Cortázar. Con un gato y una cámara de fotos, en París hacia fines de los 60. La década en la que escribió Rayuela.

La publicó Julio Cortázar en 1963, cuando estaba exiliado en París. Es una obra literaria clave del “boom” latinoamericano. Se tradujo a más de 30 lenguas.


Para que una novela se convierta en un clásico se requiere, ante todo, un comienzo definitivo, inolvidable, y Rayuela lo tiene: “¿Encontraría a la Maga?”. Pero como si fuera poco, el libro que acaba de cumplir 50 años se puede empezar y terminar de distintos modos. Basta abrir el libro para encontrar el emblemático “Tablero de dirección”, que advierte que “a su manera, este libro es muchos libros, pero sobre todo es dos libros”. Compuesta por 155 capítulos, el tablero propone dos formas de leer: como estamos acostumbrados, de principio a fin del libro, o saltando de una parte a la otra, siguiendo un orden discontinuo y prefijado por el autor.

Rayuela salió el 28 de junio de 1963, mientras los Beatles sacaban su primer disco y el mundo inauguraba oficialmente los años sesenta. Julio Cortázar no era ajeno a los aires de su época, pero su historia como escritor ya tenía varias batallas encima. Además de los poemas y las obras de teatro con seudónimo (Julio Denis), que Cortázar publicó bien de joven, fue Jorge L. Borges quien editó por primera vez el relato “Casa Tomada” en la revista Los anales de Buenos Aires, en 1946. 

En los 50 lanzó tres libros de cuentos fundamentales, que son evidencia suficiente de su genio: Bestiario, Final de juego y Las armas secretas. En 1951, espantado del peronismo, se mudó a Francia y ahí vivió hasta su muerte, en 1984 -así, el año que viene se cumplen 30 años de su muerte y un siglo de su nacimiento. París fue una influencia central en su literatura, y él luego ayudaría a agigantar el mito de esa ciudad contemplada desde América Latina. En una época de grandes cambios y centralidad para la región, que encarnaba en los 60 la esperanza de una nueva izquierda, la literatura de Cortázar estuvo entre las que lideró el “boom”, esa apuesta editorial de la que salieron obras como Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez ,y La ciudad y los perros, de Mario Vargas Llosa, y La muerte de Artemio Cruz, de Carlos Fuentes. El boom puso a la literatura latinoamericana en un lugar en el que nunca había estado, a la vista de todos. En el corazón de esa generación estuvo Rayuela, porque fue uno de los primeros y más arriesgados. Decenas de escritores han reconocido el efecto liberador de su lectura. En ese sentido, fue un libro fundante.

Es posible que esa cualidad anticipatoria haya contribuido para que la novela se convirtiera, con los años, en un manual de iniciación literaria. Para que este efecto funcione, la novela tiene que apelar a la identificación entre el lector y los personajes. Cuando sale Rayuela, la juventud, tal como la concebimos hoy, es un fenómeno cultural de invención reciente... El tiempo lo premió con la fidelidad de los jóvenes, que siguen siendo sus lectores más devotos. “Cuando lo terminé pensé que había escrito un libro de un hombre de mi edad para lectores de mi edad, y la gran maravilla es que encontró sus lectores en los jóvenes”, diría unos años después el escritor.

Pero no todo fue sencillo de entrada para Rayuela. En Argentina, un país con un campo literario tan activo e inclemente, donde hasta los escritores más geniales son discutidos, no esquivó esa coyuntura, y algunos de sus libros, sobre todo el Libro de Manuel, fueron idolatrados y destrozados. La novelista Sylvia Iparraguirre -próxima al grupo de la revista El escarabajo de oro, dirigida por Abelardo Castillo-, recordó: “Sigo pensando, más allá de mis objeciones personales, que es una muy respetable novela, una novela clave en la literatura argentina. También pienso que hay momentos que hoy resultan insoportables: cuando se reúnen a escuchar jazz en la casa de la Maga, cómo hablan y hablan y esos personajes, que son todos muy parecidos; el tono sensiblero de la carta al bebé Rocamadour. Esa es la vulnerabilidad de Cortázar: una retórica sobre la que pasó el tiempo. Hubo además una moda Rayuela, desastrosa para el propio Cortázar”.

En estos días de homenajes y semblanzas, el escritor y editor Damián Tabarovsky disparó: “Para mí, y para muchos de mi generación, Rayuela nació ya cursi, remanida, llena de recursos demagógicos, y, casi me animaría a decir, sociológica: encarna -igual que Sabato en otro extremo- el gusto de una clase media argentina que se imaginaba en ascenso social y suponía que, vía Cortázar y otros como él, accedía a la alta cultura, a la divulgación de la vanguardia francesa, al último grito de la moda de la novela moderna”.

Una de las posibilidades más seductoras que ofrece Rayuela es la de tratar de desentrañar cómo fue armando el propio autor ese prodigio de ensamblado y la técnica narrativa. En una entrevista, Cortázar precisó: “Sólo cuando tuve todos los papeles de Rayuela encima de una mesa, toda esa enorme cantidad de capítulos y fragmentos, sentí la necesidad de ponerle un orden relativo. Pero ese orden no estuvo nunca en mí antes o durante la ejecución de Rayuela. Escribía largos pasajes sin tener la menor idea de dónde se iban a ubicar y a qué respondían en el fondo”. Uno de los documentos más reveladores de ese proceso de escritura es el Cuaderno de bitácora, un cuaderno de 164 páginas que el autor le regaló a la lingüista Ana María Barrenechea, editado por Sudamericana y cuyos originales están en la Biblioteca Nacional. El crítico literario Juan José Mendoza lo describe así: “Aparecen frases sueltas del tipo: “París, enorme metáfora”. Se leen párrafos que, ampliados, aparecerán luego entre los capítulos definitivos. 

El diario también posee papeles intercalados. Dibujos, citas. Menciones al escritor Marcel Schwob y al pintor Paul Klee. Se leen cosas como “El tipo es más macho que la puta que lo parió”. A propósito de la Maga escribe: “Sentirse plus, sentirse gato, sentirse aire”.” La primera edición de la novela, por lo demás, agotó en un año la tirada precavida de cuatro mil ejemplares. El editor de aquella edición fue Paco Porrúa, además de su amigo, uno de sus mejores lectores. En un puñado de cartas (siempre fue un activo corresponsal; han sido editados cinco tomos de correspondencia personal), Cortázar le fue anticipando a su editor que estaba trabajando en un libro fuera de lo común: “El resultado será una especie de almanaque, no encuentro mejor palabra. Una narración hecha desde múltiples ángulos, con un lenguaje a veces tan brutal que a mí mismo me rechaza la relectura y dudo de que me atreva a mostrarlo a alguien, y otras veces tan puro, tan poco literario”. La rayuela es un juego de chicos, una especie de talismán que nos proyecta al paraíso lúdico de la infancia. 

Su título no es sólo una referencia a la complejidad formal de la estructura (esa posibilidad de ir para un lado o para el otro), sino también una clara alusión a lo lúdico y lo juvenil, dos pilares de lo que conocemos por cortazariano . A medida que pasó el tiempo, el libro nunca dejó de reimprimirse, y hoy es un sostenido long seller que vende 30 mil ejemplares por año en español. Traducido a más de veinte lenguas, es una máquina narrativa que no para. ¿Cómo lo leerán los japoneses? ¿Qué encontrarán ahí los checos o los rusos? No lo sabemos pero estamos seguros de que, como ninguna otra novela argentina, trascendió los límites de la literatura nacional. El escritor en lengua castellana más influyente de las últimas décadas, el chileno Roberto Bolaño, destacó que Cortázar fue su mayor inspiración para varios de sus libros, sobre todo en Los detectives salvajes, la novela que ahora leen muchos jóvenes.

El efecto Cortázar se multiplica.

© Escrito por Mauro Libertella el sábado 30/06/2013 y publicado por el Diario Clarín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.