sábado, 29 de octubre de 2016

Huracán TV Programa #21… @dealgunamanera...

Programa #21 Huracán TV…


Huracán TV tiene su programa #21; con notas a las nuevas incorporaciones Nicolás Romat y Emiliano Garré, más deportes amateurs.

Huracán TV es el programa oficial del Club Atlético Huracán realizado por el Departamento de Prensa de la Institución. El mismo está dedicado a generar un nuevo vínculo entre el Club, por medio de sus protagonistas, actividades, personalidades e historias, con los socios y simpatizantes que a diario siguen las noticias vinculadas con el Club Atlético Huracán. Hoy podes ver el programa #21 de HuracánTV.


© Publicado el martes 16/08/2016 por el Departamento de Prensa del Club Atlético Huracán de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


Haciendo la Patria... Biblioteca Rodante... @dealgunamanera...

Una pareja de docentes recorre el país en una "biblioteca" rodante…

La docencia les permite financiar el viaje a través de talleres literarios. Foto: Facebook

Sol y Juan decidieron cambiar su vida y emprendieron un viaje a lo largo del país; para financiarlo, brindan talleres literarios en escuelas.

© Publicado por Juan y Sol el sábado 09/05/2015 y publicado en Destino Nómade de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Dejar todo. Comprar una casa rodante. Recorrer el país. O, como dicen ellos, "no se trata de dejar, sino de ir en busca de ese todo". Una oración para resumir un proyecto que les cambió la vida no parece justo. 

Ellos son Sol y Juan. Ella, maestra jardinera. Él, licenciado y profesor de Comunicación. Los dos, una pareja de 30 y 31 años que recorre la vida de la mano hace ya 10 años, pero que hace uno se desvió hacia otros horizontes: de Buenos Aires a todo el país. 

Nacieron y vivieron en el barrio porteño de Almagro, se conocieron en un boliche y así, mientras cada uno perseguía sus sueños, a la par iban construyendo una vida juntos que siguió en 5 años de convivencia y un planteo que giraba cada vez con más fuerza en la cabeza de ambos: "¿Y si vendemos todo, compramos una casa rodante y vamos a recorrer el país?". 

Claro que la respuesta no la encontraron de un momento a otro. De eso pasó un año y medio hasta que emprendieron la aventura que hoy los sigue teniendo como protagonistas.

Babelita, la casa rodante que los acompaña en la aventura. Foto: Facebook Destino Nómade

La planificación previa a su decisión constó de tiempo de ahorro, de pensar cómo harían para subsistir, de vender su auto y comprar una 4x4 para acarrear la casa rodante, de averiguar e informarse hasta el hartazgo para no dejar ningún detalle librado al azar.

- ¿Por qué decidieron cambiar su estilo de vida?, quiso saber La Nación.
"Si bien teníamos buenos trabajos, vivíamos en un departamento y teníamos todas las típicas comodidades que uno pretendería de una gran ciudad, nos dimos cuenta de que no era lo que estábamos buscando", cuenta Juan.

Salieron por un cambio. Destino Nómade es el concepto que engloba todo su viaje que empezó en mayo de 2015 en la Patagonia y hoy sigue en pie desde Chaco.

Juan y Sol paran en campings con la "biblioteca" rodante. Foto: Facebook

El viaje no sólo consiste en recorrer y conocer lugares, sino en interiorizarse con la cultura y las personas y encontraron una forma de hacerlo y, a su vez, subsistir: se les ocurrió que dar talleres de literatura y expresión iba a ser el modo más viable para armonizar todos sus intereses. "Babelita" es el nombre que le pusieron a su nuevo hogar en referencia al cuento de Borges, "La biblioteca de Babel", con el objetivo de "tender puentes literarios entre culturas distintas" a través de las clases que brindan a chicos y adolescentes en cada lugar al que van.

Para financiar el viaje, contactan de antemano a municipios y escuelas que los contratan para trabajar y, a través de las redes sociales, avisan cuál será el próximo destino para recibir cualquier tipo de ayuda, desde alojamiento hasta una charla. Utilizan las redes, además, para actualizar información sobre el viaje con crónicas, imágenes, videos y hasta información útil para aquellas personas que quieran seguir su camino.

"Hemos descubierto que hay un país por fuera de ciertas zonas de confort urbanas y uno se encuentra con que hay oportunidades de trabajo y hasta de mejor calidad de vida", dice Juan; Sol asiente a su lado.

Romper estereotipos

Los talleres les dieron la posibilidad de conversar con muchísima gente y de aprender de cada persona con la que se cruzaron. "En Buenos Aires uno idealiza mucho y llega a creer que, a excepción de los acentos del español, no hay grandes diferencias con otros ciudadanos. Pero al charlar uno ve que la idea del argentino modelo se rompe, en sentidos culturales, sociales, económicos y hasta geográficos. Comprobamos cómo la vida de las personas está sumamente amoldada por el clima y la zona, por ejemplo", relatan cuando se les consulta sobre las enseñanzas que fueron incorporando a lo largo del camino.


Dentro de las anécdotas más recordadas, cuentan que cuando volvieron a Buenos Aires hace 5 meses a visitar a sus familias y amigos no podían creer cómo habían podido vivir 30 años en una gran ciudad, inmersos en la vorágine de la rutina, el tránsito y los ruidos. "Pudimos romper con el individualismo que impone una ciudad y empezar a disfrutar un poco más de nuestro alrededor", destaca Juan.

La fecha de vuelta es incierta. Es justamente la adrenalina de no saber dónde amanecerán al día siguiente la que los motiva a seguir rodando subidos a Babelita, la de los libros, su fiel compañera en esta travesía.

¿Quienes somos?


¡Hola! Somos Sol y Juan, dos docentes que decidimos cambiar nuestra vida en Buenos Aires por un estilo de vida que nos hiciera sentir mejor.

En Mayo/2015 salimos a la ruta con nuestra casilla rodante y recorremos Argentina brindando talleres literarios. 

Estos encuentros no sólo nos permiten seguir viajando, sino además conocer cada lugar que visitamos de la mano de su gente, y en particular de los chicos.

¡Gracias por acompañarnos en esta aventura!




Huracán 1 vs. Rosario Central 1... @dealgunamanera...

Empate con Central en el Ducó


Huracán empató esta tarde frente a Rosario Central uno a uno en el estadio Tomás Adolfo Ducó por la octava fecha del Torneo de Primera División 2016.

© Escrito por Rodrigo da Silva el sábado 29/10/2016 y publicado por el Departamento de Prensa del Club Atlético Huracán. Fotos de Daniel Méndez.

Todo comenzó con el magnífico gol de Ignacio Pussetto a los seis minutos. El delantero del Globo dejó en el camino a cuatro defensores Canallas y cuando le cometían penal definió con mucha precisión mientras caía al césped.

Después de cuarenta y cinco minutos que fueron el síntoma de ese gol, el local se fue apagando poco a poco. Si bien logró dominar durante la primera etapa, en el segundo tiempo Central lo encontró desprevenido, igualó las acciones y emparejó el encuentro.

Para destacar el debut de Javier Iritier en primera división, joven que no sólo demostró estar a la altura sino que también promete dar muchas satisfacciones. Otro punto alto tal vez sin tanta consideración por algunos fue el de Carlos Araujo en la defensa y en una posición que no es natural.

Huracán 1

Marcos Díaz, Nicolás Romat, Martín Nervo, Federico Mancinelli, Carlos Araujo, Matías Fritzler, Mauro Bogado, Daniel Montenegro, Alejandro Romero Gamarra, Ignacio Pussetto, Jerónimo Barrales. DT: Ricardo Caruso Lombardi

Rosario Central 1

Sebastián Sosa; Paulo Ferrari, Marcos Torsiglieri, Esteban Burgos, Jonás Aguirre; Washington Camacho, Pedro Ojeda, Gustavo Colmán, Fabián Bordagaray; Germán Herrera y Teófilo Gutiérrez. DT: Eduardo Coudet.

Gol: 6′ Pusetto (H); 51' Colman (RC).

Cambios: Ingresaron Javier Iritier, Diego Mendoza y Julio Angulo por Montenegro, Barrales y Pusetto respectivamente.

Árbitro: Héctor Paletta. (Horrible)





El "Gerete", cruza de Gerente y de Sorete… @dealgunamanera...

El "Gerete", cruza de Gerente y de Sorete…


© Escrito el domingo 23/10/2016 por Alberto Levy (*) y publicado en Levy - Dinámica Empresarial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.


En mi vida profesional, empresarial y social he conocido en el mundo a grandes empresarios de todos los tamaños y devenires. De muchos de ellos me precio de ser amigo personal. Con muchos de ellos la amistad ha trascendido a sus familias a través de la mía. Con varios he trabajado como “co-pensor” o “thinking partner” o “soporte semi-externo” en los procesos de sus empresas de tener éxito en el logro de sus objetivos estratégicos y operacionales.

Desde empresas internacionales que todos conocemos, especialmente en casi toda América Latina, hasta StarUps y emprendimientos desde sus etapas iniciales de gestación hasta su consolidación o su desaparición o fusión o transformación en otra cosa.

Gracias a Dios no me puedo quejar por cómo me fue todos estos años desde que inauguré mi estudio profesional en 1981. Entonces, en este último tramo de mi vida (que espero que sea lo más largo posible) he tomado una decisión fundamental que ha logrado que no sólo se incremente mi desempeño profesional sino también la calidad de mi vida. Se basa en un solo principio: No trabajo para empresas que no respeto que son las de empresarios que no respeto porque no respetan a su gente. Estas empresas son las que generan “morgues de almas” en lugar de “bandas de hermanos”. Son empresas “chimpancé”. No para mí. Gracias.

Debo aclarar que mi postura ideológica se basa en la libertad, en la libre empresa y en el capitalismo consciente que intenta crear valor económico pero que también apunta a la creación de valor social, ambiental, público y emocional. Esta combinación es para mí “creación de Valor Sostenible y Sustentable”.

Pero en muchas de las empresas que admiro como modelos a imitar, estas empresas que privilegian “lo humano de lo humano”, más o menos escondido entre las tinieblas, entre las bambalinas o agazapados en los pasillos, más cercanos o más lejanos al Número 1, casi siempre bien disfrazados de buenas personas totalmente alineadas con el principio básico que ese Número 1 impone, “respeto irrestricto por la gente”, está el despreciable personaje del “gerete”, cruza de gerente y de sorete. (Y puede ser hombre o mujer, de cualquier edad, de cualquier parámetro socio demográfico).

Este personaje nefasto, repugnante, despreciable, pernicioso, cuanto más astuto peor, ya que mejor será su disfraz y su escondite, presenta una serie de disfuncionalidades y patologías que en esta nota voy a tratar de relatar.

En aquellas empresas que yo llamo “modelos a imitar”, el concepto de Visión ha sido realmente trabajado en serio y la gente no ha sido “informada” de cuál es esa Visión sino que ha participado en diseñarla. 

Como comunidad con un puerto de destino común, se han involucrado en formular esa Visión como una imagen del futuro y del presente que apela a la razón y a la emoción para proveer un sentido de dirección, de empuje, de ideales, de valores, de objetivos, de formas de ser y de formas de hacer que diferencian a esa comunidad humana de todas las demás. 

Esas empresas de primera saben que lo que lidera es la Visión. Que cada líder la personifica con su ejemplo. Bueno, nuestro personaje seguramente no ha participado, o ha fingido que cree en esto cuando en realidad va a contrapelo de sus entrañas, o le ha dado alergia el involucramiento masivo o, hasta inconscientemente, ya está agazapado en su escondite para sabotearla. Y esperando la oportunidad para traicionar a sus colaboradores, a sus pares y a sus jefes.

El mayor problema es que no puede ver que tiene este problema. Esto se llama autoengaño. Estar en la jaula. Estar en la caja.

Puede ver el mundo sólo desde sus mezquinos mapas mentales y resistir profundamente cualquier sugerencia de que la “realidad” no es la que él o ella ha inventado. No vive su vida como una persona entre personas. Vive su vida como una persona entre objetos. (Esto lo escribí por oposición a la maravillosa contribución del Arbinger Institute, “Liderazgo y Autoengaño”)

El gerete está dentro de su caja, de su jaula mental, construida de materiales refractarios de las virtudes humanas.

 Como está dentro de su caja no puede enfocar en los resultados porque estás enfocado sólo en él (Disculpen, voy a usar el masculino para simplificar).
 No es tan feliz cuando otros tienen éxito como cuando tiene éxito el mismo.
 Oculta información.
 Trata de controlar a los demás.
 Acapara recursos.
 Provoca que otros acaparen recursos para después culparlos.
 Los culpa.
 Justifica que los culpa porque tienen que “mejorar”.
 Los culpa de que por su culpa él no puede tener éxito.
 Satisfacción principal (consciente o inconsciente): Conflicto de todos contra todos.

Según Kolb (1984), el aprendizaje experiencial es un proceso de este tipo:

La experiencia concreta, como objeto de la observación reflexiva, da lugar a la elaboración de teorías. De éstas se extraen, a su vez, hipótesis respecto de su aplicación en situaciones futuras que operan como guías de la acción y abren paso a nuevas experiencias concretas. Así, en el pasaje de una fase a otra durante el proceso de aprendizaje se producen cuatro tipos de conocimientos. El gerete está incapacitado racional y emocionalmente para vivir este desarrollo cognitivo

• Experiencia concreta – observación reflexiva → conocimiento divergente. Supone la capacidad de percibir situaciones concretas desde perspectivas diferentes y de integrarlas en una estructura significativa (Gestalt) novedosa. El gerete no puede. Está enjaulado en su trampa mental.

• Observación reflexiva – conceptualización abstracta → conocimiento asimilativo. Implica asimilar observaciones inconexas, incorporarlas en una explicación integradora, crear modelos y razonar de manera inductiva. Resulta imprescindible para la elaboración de teorías, evaluar alternativas, fijar criterios, etcétera. El gerete no puede. Está enjaulado en su trampa mental. 

• Conceptualización abstracta – experimentación activa → conocimiento convergente. Producto característico del razonamiento deductivo, se centra en la aplicación de las teorías y el recorte de los problemas. El gerete no puede. Está enjaulado en su trampa mental.

• Experimentación activa – experiencia concreta → conocimiento acomodativo. Busca poner a prueba las teorías mediante su puesta en práctica. El gerete no puede. Está enjaulado en su trampa mental.

Ahora, por oposición al excelente modelo de Liderazgo Transformacional, (Bass y Avolio 1991) el gerete está racional y emocionalmente bloqueado en cuatro grandes competencias interpersonales:

1. No proyecta una motivación inspiradora; 

• No diseñan ni transmiten una Visión en la cual el futuro es mejor para todos. 
• No son creadores de significados.
• No mueven a la gente hacia el logro de la Visión y los objetivos a través del optimismo de que pueden ser alcanzados.
• No generan optimismo y confianza.
• No propician el deseo de avanzar en el desarrollo personal de cada uno de sus colaboradores.
• No focalizan en lo mejor de la gente como la armonía, la caridad y el trabajo noble.
• No están convencidos y lo demuestran sobre el bien que puede ser logrado para el equipo, el grupo, la organización y la sociedad.

2. No genera una influencia idealizada, que permite al líder inspirar orgullo, fe y respeto, causando identificación y emulación;

• No tienen magnetismo personal, ni capacidad de comunicación ni persuasión.
• No irradian confiabilidad y capacidad.
• No demuestran un claro sentido de misión, propósito y valores y se comportan de acuerdo con ellos.
• No tienen voluntad de hacer sacrificios personales para lograr los objetivos, misión, propósito y valores.
• No se ganan la confianza y el respeto de sus seguidores.
• No propician intenso apego personal de su equipo de trabajo.
• No obtienen esfuerzo extra de sus seguidores para lograr niveles óptimos de desempeño.

3. No provoca estimulación intelectual; 

• No provoca estimulación intelectual. 
• No inducen a mirar los problemas desde ángulos novedosos.
• No cuestionan los supuestos ni el statu quo.
• No estimulan la creatividad, la innovación, la autocrítica y la búsqueda de nuevas soluciones a viejos problemas.
• No fomentan la colaboración y el comportamiento positivo.
• No propician la integración grupal y la responsabilidad personal.
• No generan así la superación personal de sus seguidores.

4. No puede desarrollar una consideración individualizada;

• No tratan a sus seguidores como individuos con necesidades, habilidades y aspiraciones propias.
• No diagnostican las necesidades y capacidades de cada miembro de su equipo.
• No se convierten en mentores que aconsejan, entrenan, delegan y retroalimentan.
• No creen en las personas y se focalizan en celebrar sus fortalezas más que en corregir sus debilidades.
• No son flexibles y abiertos al aprendizaje de la experiencia.

Para R. Gal (1985) el compromiso es el concepto central en la motivación militar en contraste con el tradicional énfasis en la obediencia. El compromiso hasta el extremo de la muerte crea la “cláusula de responsabilidad ilimitada”. 

Para ese nivel de compromiso Gal sostiene que el liderazgo transformacional es imprescindible en tres niveles: la organización, la carrera y la moral.

Estas tres perspectivas deben estar fuertemente alineadas entre sí. Para aquellos que detentan posiciones de comando, el compromiso debe ser hacia su gente, su unidad y su tarea. El compromiso deriva del sentido internalizado del deber, de la responsabilidad y de la convicción. A diferencia de las órdenes, este no proviene de una fuente externa, como en el caso de la obediencia, sino que refleja la interacción entre creencias, valores y conciencias. Esto es impensable en el gerete.

El compromiso organizacional es con respecto a los objetivos, propósitos y normas de la organización. El gerete no lo tiene.

El compromiso de carrera tiene que ver con el éxito propio individual. El gerete lo desarrolla sólo dentro de su jaula de egoísmo.

El compromiso moral es con los valores básicos en los que uno cree y por los que uno está dispuesto a sacrificarse. El gerete no sabe qué son “valores básicos”, las virtudes trascendentes del ser humano.

Lamentablemente, el gerete no sabe que hay otra manera de vivir.

Bibiografía

The Arbinger Institute, (2001) “Leadership and Self-Deception”, Empresa Activa.

Bass, B.; Avolio, B. (1991). Assessing leadership across the full range. Miami Beach (FL): Society for Industrial and Organizational Psychology. 

Gal, R. (1985). “Commitment and obedience in the Military: An Israeli case study”. En Armed Forces and Society, 11, 553-564.

Kolb, D.A. (1984). Experiential learning. Experience as the source of learning and development. Englewood Cliffs (N.J.): Prentice Hall.

(*) Alberto Levy es Director General de Levy – Dinámica Empresarial, firma especializada en asesoramiento en el Planeamiento y Ejecución del proceso Estratégico-Operacional de empresas, clusters y ciudades.

Director de IAIATI – Alta Tecnología e Innovación, Israel. 

Es Doctor en Ciencias Económicas, UBA, Doctor en Psicología, UBA, Certified Project Management Professional, PMI, Profesor Emérito, UBA, Profesor Emérito, Foro Europeo, Navarra, España, Profesor Especial, MBA / UCA. 

Se ha especializado en Estrategia Empresarial en el Harvard Business School de la Universidad de Harvard y en el Graduate School of Management de la Universidad de California, y en Psicología Social Sistémica en el Mental Research Institute de Palo Alto, California. Es Master Consultant, GR Institute for Organizational Development, Israel.