sábado, 7 de junio de 2014

De crucero en Ushuaia a barco fantasma... De Alguna Manera...



De crucero en Ushuaia a barco fantasma...


El crucero ruso Lyubov Orlova el cual durante varias temporadas amarraba en el Puerto de Ushuaia durante el verano para realizar cruceros a la Antártida, actualmente navega como un barco fantasma por el Océano Atlántico.

Recordemos que el Orlova hace un par de años había sufrido un incidente naval al chocar otro buque cuando intentaba amarrar en el puerto local.

El barco actualmente se encuentra a la deriva desde hace un mes sin pasajeros ni tripulación, en el norte del Atlántico, probablemente hacia las costas europeas, a falta de policía internacional capaz de intervenir en el caso. Temen que el navío libere líquidos tóxicos.

El navío, construido en 1976, zarpó de la isla canadiense de Terranova el 23 de enero arrastrado por un remolcador. Debía dirigirse a la República Dominicana, donde su propietario, un chatarrero, tenía la intención de desguazarlo. Pero el cable que lo unía al remolcador se rompió al día siguiente de la partida, y el "Lyubov Orlova" quedó a la deriva como un barco fantasma.

Las autoridades canadienses no parecen preocuparse mayormente por su suerte, e incluso reconocieron el lunes que no sabían dónde se encontraba.

El barco se encontró rápidamente en aguas internacionales, sin luces, según la asociación ecologista Robín de los Bosques, ni balizas de localización, según las autoridades canadienses.



El barco en ruinas "deriva en alta mar y se encuentra en una especie de vacío y de monstruosidad jurídica", denuncia en declaraciones Jacky Bonnemain, portavoz de la asociación ecologista. En el caso de un barco a la deriva con pasajeros a bordo, la Convención Internacional de Salvaguarda en el Mar podría aplicarse, pero nada está previsto en el caso de un barco vacío, agrega. El riesgo es un accidente "en una zona de intenso tráfico marítimo" y la contaminación.

Michel Quimbert, abogado francés especializado en derecho marítimo, estima que, a falta de una policía internacional, corresponde a los responsables de la deriva del barco (empresa de remolque, país de bandera, propietario o compañía de seguros) hacerse cargo de la situación. Pero "nadie" puede obligar a los responsables de la deriva a actuar para descartar el peligro para la navegación, "salvo su propio interés", ya que si se produce un accidente podrían ser demandados judicialmente.

Sin embargo "fuera de las aguas territoriales, es difícil" obligarlos a intervenir, explica el abogado. "No hay policía internacional ni fondos internacionales de intervención" que puedan ser movilizados, explica, recalcando empero que "no hay vacío jurídico" sino que "el vacío es el resultado del no respeto del derecho".

Sébastien Lootgieter, miembro de la Asociación Francesa de Derecho Marítimo, estima que el país de bandera del barco debe ser responsable en un caso como éste, pero el "Lyubov Orlova" tiene bandera de las islas Cook.

© Publicado por Crónicas Fueguinas el Sábado 02/02/2013 Crónicas Fueguinas

 

Anarquismo... De Alguna Manera...


Anarquismo...

A de anarquía, uno de los más famosos símbolos anarquistas.

El anarquismo es una filosofía política y social que llama a la oposición y abolición del Estado entendido como gobierno y, por extensión, de toda autoridad, jerarquía o control social que se imponga al individuo, por considerarlas indeseables, innecesarias y nocivas.

Sébastien Faure, filósofo anarquista francés, dijo:

«Cualquiera que niegue la autoridad y luche contra ella es un anarquista»

Bajo una formulación tan simple, pocas doctrinas o movimientos han manifestado una variedad tan grande de aproximaciones y acciones, que no siempre fueron bien entendidos por la opinión pública. Históricamente hablando, el anarquismo se centra en general en el individuo y en la crítica de su relación con la sociedad, su objetivo es el cambio social hacia una futura sociedad, en palabras de Pierre-Joseph Proudhon, «sin amo ni soberano».

No existe acuerdo académico en cuanto a una taxonomía de las corrientes anarquistas; algunos hacen una distinción entre dos líneas básicas de pensamiento, individualistas y socialistas; también es común señalar las cuatro corrientes más importantes, el
anarquismo individualista, mutualismo, anarquismo comunista y anarcosindicalismo, y según algunas fuentes, también el colectivismo.

Habiendo surgido diversos movimientos precursores desde la antigüedad, el punto de partida del debate doctrinal sobre un pensamiento anarquista moderno se remonta a finales del siglo XVIII, en la obra de William Godwin, aunque el anarquismo se desarrolla en el siglo XIX a través de distintas corrientes, dándose algunas de las experiencias libertarias más significativas a lo largo del siglo XX.

Tras el declive del anarquismo como movimiento social en la década de 1940, las ideas anarquistas han sido recuperadas y reelaboradas por estudiosos y pensadores, y han estado continuamente insertadas en multitud de doctrinas y movimientos contemporáneos, especialmente tras su emergencia en el contexto de ciertos movimientos estudiantiles y antiautoritarios de la década de 1960.

© Publicado por http://es.wikipedia.org/wiki/Anarquismo

Las fotos:


 






 

Skoda Felicia... De Alguna Manera...


Skoda Felicia, el cabrio del este europeo...

Creado en 1957, el Felicia combatió con éxito todos los prejuicios que existían contra el Este. Crédito: Petr Homolka / Skoda / dpa-tmn

La filial de Volkswagen encierra en este modelo antiguo la nostalgia de los autos fabricados tras la Cortina de Hierro.

A quienes se les menciona “Skoda”, lo primero que se les viene a la cabeza son modelos sedán baratos y prácticos. La filial de Volkswagen no es conocida por el deleite en la conducción. Existe un Octavia RS con 220 caballos en el que se consigue un poco de aire fresco al bajar la ventanilla. Pero no existe, por ejemplo, un cabrio, al menos entre los modelos nuevos.

Sin embargo, quien busca en Internet entre los autos usados y abre el filtro a los modelos antiguos, se encuentra con el Skoda Felicia. El nombre se usó en los años ’90 para designar un modelo pequeño, pero ya en los ’50 y ’60 existía el Felicia, un bonito cabrio nacido en el este de Europa que también llegó al oeste.

Creado en 1957, el modelo batió con éxito todos los prejuicios que existían contra el este. “¿Karmann Ghia, Borgward Isabella, Volkswagen Escarabajo Cabrio? También nosotros podemos hacer lo que hacen en el oeste”, se decían los desarrolladores de entonces. Ese era el mensaje subliminal que envíaba el modelo, que portaba ya la felicidad en el nombre.

Justo 40 años después del final de su producción, el auto permanece en el recuerdo. “Tiene una gran base de aficionados”, dice Jens Herkommer, que dirige en Alemania un taller especializado en viejos Skodas. “En el este el Felicia siempre fue apreciado porque no había muchos vehículos de ensueño como ése, pero el pequeño cabrio también fue ganando adeptos en el oeste”, afirma.

El propio Herkommer compró un modelo tras la reunificación, algo que antes sólo se conseguía “con buenos contactos o invirtiendo una fortuna”.

Con su diseño coqueto y su llamativa pintura atrae la atención en los rallies de autos de época, pese a competir con el Mercedes SL o el Porsche 911. Al menos hasta que arranca la carrera. Cuando el pelotón se pone en movimiento, se acaba el esplendor, ya que el motor de 1,2 litros comienza a petardear.

El motor de cuatro cilindros y cuatro tiempos apenas genera 55 caballos y tarda un buen tiempo hasta que alcanza los 80 km/h. A los 100 uno siente como si estuviera en un superbólido por la violencia del viento contra el parabrisas plano y por el ruido del propulsor bajo el capó.

No extraña, por tanto, que al principio se haga difícil mantener mucho tiempo pisado el pedal del acelerador y soportar una velocidad máxima de 130 km/h. También hay que prestar atención al cambio de marchas en forma de H: la primera es arriba a la derecha y la cuarta, abajo a la izquierda.

Pero el Felicia tiene otros atractivos: la falta de potencia la compensa con ligereza y gracilidad, ya que el vehículo de cuatro plazas sólo pesa 900 kilos.

No se requiere el estímulo de la velocidad para sucumbir al encanto del cabrio del este. Es mucho más bonito circular despacio deslizándose por el campo y disfrutando de un buen paisaje. Entonces es cuando se tiene la calma para apreciar los deliciosos detalles que introdujo Skoda: la palanca de cambio de marchas que imita la cerámica, por ejemplo; el cenicero o los bolsillos laterales de las puertas cosidos a mano.

El actual lema de la marca, “Simply Clever” (Sencillamente Inteligente), ya se deja ver en el auto de época: en lugar de un maletero con cerradura, los checos crearon una palanca en la puerta del conductor, un anticipo del cierre cetralizado. Mientras la puerta del piloto estaba cerrada, también lo estaba la tapa del maletero.

Una forma con encanto, una tecnología casi indestructible, unas características de manejo que no generan problemas, una cara fresca y la nostalgia de los tiempos del bloque del este: esos son los motivos por los que el Felicia es un modelo apreciado entre los amantes de los clásicos, según el experto Herkommer. “Pero que nadie se preocupe, el mercado es fantástico, aún quedan muchos ejemplares“, asegura.

Incluso los precios son relativamente asequibles, dice Herkommer, que tasa un ejemplar en buen estado sin reparaciones en 10.000 euros (13.750 dólares). Nadie debe preocuparse mucho de la técnica, ya que aunque el eje trasero y la transmisión por cardán puedan estar arruinados, se pueden cambiar sin problemas. “Por lo general el Felicia es indestructible y aún hay muchas piezas de repuesto”, finaliza el experto.

Link:   Skoda Auto

© Escrito por Thomas Geiger (dpa) el Lunes 26/05/2014 y publicado por la Revista Parabrisas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

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