¿Cuántos desaparecidos dejó la dictadura? La duda que alimenta la grieta
argentina
La organización Madres de Plaza de Mayo cifra
las víctimas de la Dictadura en no menos de 30.000 entre muertos y
desaparecidos. Fotografía: CEDOC
La división sobre
el tema seguirá vigente mientras Argentina no reconozca unida que lo que
sucedió fue una atrocidad de argentinos contra argentinos, sin importar si
fueron 6.000 o 30.000.
© Escrito el viernes 07/02/2020 por Darío Silva D'Andrea y
publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República
de los Argentinos.
La petición de
representantes de los organismos de Derechos Humanos al presidente Alberto Fernández para
replicar una ley francesa que pena el negacionismo histórico demostró este
jueves que el debate sobre el número de desaparecidos durante la última
dictadura militar sigue sin cerrarse. En las redes sociales los usuarios
ensancharon este jueves por la noche la “grieta” existente sobre el tema de los
secuestrados y asesinados en la dictadura con consignas antagonistas, no
exentas de burlas e ironías, como #NoFueron3000
y #Son30Mil: ¿pero cuál es la verdad?
La idea de
implementar una ley contra el negacionismo fue abrazada por el
presidente, que escuchó la propuesta al comienzo del periplo por Europa,
más precisamente en Francia, donde recibió en el Hotel Regina a una veintena de
argentinos que integran organismos de derechos humanos: la Asamblea de Ciudadanos Argentinos
Residentes en Francia (ACAF), el Colectivo
para la Memoria, H.I.J.O.S París y France Amérique Latine y Association des Amis est parents
de françois disparus en Argentine.
En ese encuentro,
los activistas le entregaron a Fernández la propuesta de replicar las normas francesas que penalizan el negacionismo del Holocausto,
pero con la dictadura militar argentina. “Dijo que lo iba a estudiar. Nos
comprometimos a entregarle un detalle pormenorizado de la ley antinegacionista
que rige aquí en Francia. Acá no se puede decir a viva voz, en público, nada
que implique la negación de crímenes contra la humanidad. Si andás por la calle
con una esvástica, te penan”, explicó María Laura Stirnemann, de H.I.J.O.S.
París.
"No está en
el número, está en el hecho"
Las dudas sobre
la cantidad exacta de personas desaparecidas nacieron el mismo primer día de
dictadura, en 1976, y fueron alimentadas por personas de todas las posiciones.
Los genocidas negaron varias veces en declaraciones públicas y entrevistas ser
los responsables de la desaparición de personas, y dijeron que aquellos podían
haber escapado por voluntad propia del país o asesinados por guerrilleros.
En 2003, el
exdictador Reynaldo Bignone, dijo a la periodista francesa Marie-Monique Robin
en el documental Escuadrones
de la Muerte. La Escuela Francesa que
“nuestro presidente [Néstor Kirchner] habla de 30.000, pero sólo fueron 8.000,
de los cuales 1500 bajo el gobierno de ellos [peronistas]”
En 2012, durante una entrevista que le concedió al
periodista Ceferino Reato, el exdictador Jorge Videla reconoció que "hubo
chicos sustraídos, pero no fue un plan". "Yo soy el primero en
reconocer que en ese período hubo chicos que fueros sustraídos, algunos con la
mejor intención de que iban a una casa desconocida. Es un delito, pero no
respondía a un plan sistemático. El gobierno no ordenó que se hiciera
eso", dijo desde el Penal de Campo de Mayo, donde cumplía condena a
prisión perpetua por crímenes de lesa
humanidad. "Sobre cuántos son, se podrá discutir, no está en
el número, está en el hecho", afirmó.
El represor,
líder del golpe del 24 de marzo de 1976 y gobernante de facto durante cinco
años, dijo en la entrevista que los
cuerpos de los asesinados fueron desaparecidos "para no provocar protestas
dentro y fuera del país" y que los empresarios
dijeron "'tendrían que haber matado a mil, a diez mil más'".
"No había
otra solución", dijo Videla; "estábamos de acuerdo en que era el
precio a pagar para ganar la guerra contra la subversión y necesitábamos que no
fuera evidente para que la sociedad no se diera cuenta. Había que eliminar a un
conjunto grande de personas que no podían ser llevadas a la justicia ni tampoco
fusiladas", dijo.
En la era de las
redes sociales, el tema se volvió una provocación fácil: las frases “no fueron
30.000” y “son 6.000” son muy frecuentes. El caso más emblemático de los
últimos años fue el del ex funcionario Darío Lopérfido, que
cuando era ministro de Cultura porteño opinó que “en Argentina no hubo 30.000
desaparecidos” sino que “se arregló ese número en una mesa
cerrada para conseguir subsidios”, lo que despertó una amarga polémica.
En respuesta, Estela de Carlotto, presidenta de la organización Abuelas
de Plaza de Mayo, dio una explicación muy convincente, pero
que no convenció a quienes, de un lado de la grieta, no quieren dar su brazo a
torcer: “Nosotros manejamos esa cifra de 30.000 porque los propios genocidas lo
llevaron a 45.000. Todavía estamos recibiendo denuncias de nietos que nacieron
en cautiverio porque hay personas que se están animando ahora a contar la
verdad. ¡Qué maldad empezar a manejar cifras! Que nos dé la lista de los que él
piensa que son, si la tiene”.
"Pusieron
ese número para poder apelar a la figura de genocidio"
El 20 de
septiembre 2019 se cumplieron 35 años desde que la Comisión para la Desaparición de
Personas (CONADEP) presentó el libro Nunca Más al presidente Raúl
Alfonsin.
En sus páginas,
el comúnmente denominado “Informe Sábato”, hacía un balance provisional de
8.960 desaparecidos forzosos durante la dictadura: “Si bien constan en los
archivos de la CONADEP denuncias acerca de aproximadamente 600 secuestros que
se habrían producido antes del golpe militar (...) es a partir de ese día que
son privadas ilegítimamente de su libertad decenas de miles de personas en todo
el país, 8.960 de las cuales continúan desaparecidas al día de la fecha”.
Se trataba de
casos bien documentados, aunque Amnistía Internacional estimó en los ‘80 que el
número de víctimas superaba las 15.000, mientras que las Madres de Plaza de
Mayo siempre hablaron de no menos de 30.000 entre muertos y desaparecidos.
Voz experimentada
en temas de derechos humanos y exintegrante de la Comisión, Graciela Fernández
Meijide dijo, después de la polémica despertada por Lopérfido, recordó en un reportaje
con el diario español ABC que en los gobiernos
kirchneristas se dio como oficial el número de 30.000 desaparecidos, pero que
la CONADEP solo pudo comprobar 7.954 casos.
“¡Cómo que no se
sabe! Claro que se sabe, son todos los publicados por la Conadep”, dijo
Fernández Meijide, que fue más allá: “Los exiliados en España habían formado la
Comisión Argentina de Derechos Humanos. Entonces, no existía la figura de
desaparición forzada”. Agregó que Eduardo Luis Duhalde, secretario de DDHH
durante el gobierno de Néstor Kirchner, le contó que “pusieron ese número para
poder apelar a la figura de genocidio y denunciar lo que estaba pasando”.
Según explicó la
exintegrante de la CONADEP, Duhalde decidió convertir la “ficción” en versión
oficial y colocó la cifra de 30.000 en un nuevo prólogo que escribió en 2006
para una nueva versión de “Nunca Más”, el libro que nombra a todas las víctimas
del régimen militar registradas por la CONADEP: “De estos desamparados, muchos
de ellos apenas adolescentes, de estos abandonados por el mundo hemos podido
constatar cerca de 9.000. Pero tenemos todas las razones para suponer una cifra
más alta, porque muchas familias vacilaron en denunciar los secuestros por
temor a represalias. Y aún vacilan, por temor a un resurgimiento de estas
fuerzas del mal”, escribió.
“Pasaron los
años, se acabó el miedo", responde Meijide:
¿Me van a decir que hay 20.000 familias que no han denunciado la desaparición
de un miembro?”