"Desde el Jardín" y Guillermo Francos, el hombre que traduce y explica con calma chicha cada explosión de locura en el manicomio de Milei.
President Bobby: –En el jardín.
Chance Gardiner: –Sí. En el jardín. El crecimiento tiene sus estaciones.
Primero vienen la primavera y el verano, pero luego tenemos el otoño y el
invierno. Y luego volvemos a la primavera y el verano.
President Bobby: –primavera y verano. Luego el otoño y el invierno.
Chance Gardiner: –Sí.
Benjamín Rand: –Creo que lo que nuestro perspicaz joven amigo está
diciendo es que damos la bienvenida a las inevitables estaciones de la
naturaleza, pero nos molestan las estaciones de nuestra economía…
Chance Gardiner: – ¡Sí! ¡Habrá crecimiento en primavera!
Benjamin Rand: –¡Mmm…!
Chance Gardiner: –¡Mmm…!
President Bobby: –Mmm… Bueno, Sr. Gardner, debo admitir que es una de
las declaraciones más refrescantes y optimistas que he escuchado en muchísimo
tiempo.
(Benjamín Rand aplaude)
………………………………………………......................
El jardinero Chance (Peter Sellers) habla sobre lo suyo, pero Bobby, el
presidente de Estados Unidos (Jack Warden), y el magnate de los negocios Benjamín
Rand (Melvyn Douglas) escuchan otra cosa: lo ven como un estratega genial de la
alta política.
De la película ‘Desde el jardín (1979), basada en la novela "Being
there" de Jerry Kosinski (1971), dirigida por Hal Ashby.
……………………………………………………...............
Escribir seriamente sobre todo lo que sucede en el gobierno de Javier
Milei es una tarea insalubre.
He disfrutado la crítica irónica y feroz a Mauricio Macri durante sus
desastrosos cuatro años de gestión. Me costó ser duro con Alberto Fernández al
principio, debo admitir, pero la elocuencia de cada mala decisión suya me ayudó
a soltarme. Fue otra desgracia.
No es tan fácil pararse frente esta desconcertarte banda de freaks
desbordados y babeantes que mienten, yerran, hacen el ridículo, le pegan a los
viejos y rompen todo lo que aún quedaba de pie en la economía.
–Usted exagera Asch. Es injusto, además. Tampoco creo que los gobiernos
de Macri y Alberto hayan sido tan malos. Por suerte hoy el país tiene una
administración sana y valiente que lleva a cabo las reformas que el momento
histórico requiere.
Ya estoy harto que la gente de pronto se me aparezca al lado del
escritorio y me hable cuando escribo. Pensé que otra vez era Cole Sear, el
nenito que ve gente muerta, pero no. El que me hablaba con un tono sereno, muy
formal y con marcado acento british era un señor de traje negro y bombín.
– ¿Peter Sellers?
–No me saque de personaje Asch, se lo ruego. He venido a verlo como
Chance Gardiner, el protagonista de ‘Desde el jardín’, mi última película.
–Gran papel. Pero le juro que estoy más para ‘La Fiesta Inolvidable’.
Debe ser por la espantosa reivindicación de los años 90, la serie que mezcla a
Carlos Menem con Isidoro Cañones y la multiplicación geométrica de menemcitos
en el gobierno. Es demasiado.
–Toda gente encantadora, Asch.
–No me diga. ¿Se puede saber a qué vino? ¡No me diga que está asesorando
a alguien de este gobierno! Mmm… Ya lo tengo: ¡Guillermo Francos!
–Muy perspicaz.
–Era una fija. Ahora entiendo mejor su lógica para explicar cada
patinada de esta gente. ¿Qué pasa con las metáforas del jardín? ¿No le gustan a
Francos?
–Han cambiado las épocas, Asch. Por desgracia ya no queda espacio para
la metáfora. Franco es fan de la película, pero me pide consejos… ¿Cómo
decirle? Más adaptables a la época.
–Y, sí. Por eso, seguro, le hizo decir que cuando Milei dijo ‘¡Zurdos de
mierda, tiemblen porque los vamos a ir a buscar!” en realidad querían ir a
debatir ideas con todo entusiasmo.
– ¡Exacto! Veo que capta bien la idea.
– ¿No estará fumando cosas raras, usted?
–Yo cuido las plantas, no las fumo. Tampoco Francos, que es un hombre
muy correcto.
–Sí, claro. Que toma como una afrenta directa al gobierno nacional que
Llaryora les aumente a los jubilados en Córdoba.
– ¡Por supuesto! Porque lo hace con un dinero que la Nación tiene que
darle por un acuerdo judicial. Así es fácil, ¡qué vivo! Esta clase de
decisiones unilaterales generan malestar. Es injusto.
–Injusto es matar de hambre a los viejos. Y además, pegarles una vez por
semana. Además, ¡esa plata es de Córdoba! No se la daban como no les dan los
ATN a las demás provincias. No pagan nada y después salen a decir que tienen
equilibro fiscal. Mienten asquerosamente.
– ¡Ah no! Si me llama mentiroso yo también me voy. No se lo voy a
permitir.
–No sobreactúe, Sellers. Veo que Francos se fue del Senado con esa
excusa por consejo de Chance, su personaje.
–Gané muchos puntos con esa gestión. El pobre no daba más. Estaban
martirizando a un hombre conciliador, dialoguista.
–Equilibrado, claro. Debe ser de Libra. A propósito…
– ¡Basta del Caso Libra, por favor! El presidente pensó que era una gran
oportunidad para ayudar a las pymes argentinas y con la mejor buena voluntad
difundió esa linda iniciativa del muchachito rubio aquel…
–Hayden Davis. En Estados Unidos hacen cola para denunciarlo por la
estafa.
–Como se llame. Le repito: el gobierno no tiene ni tuvo ningún vínculo
con la criptomoneda $Libra. ¡Créame, por favor!
–No, ni loco. Lo hizo de onda, ¿no? Como Cúneo Libarona, que siendo
ministro de Justicia fue a visitarlo a Tim Ballard para proponerle una campaña
para lavar su imagen en Argentina. Un muchacho que pasó por la CIA, dice que
persigue pedófilos pero tiene más denuncias por acoso sexual que Dominique
Strauss-Khan. ¡Increíble!
–Mariano tiene buenos sentimientos, es de ayudar a la gente. Yo no puedo
reprocharle nada.
–Ahora Cúneo Libarona parece tener más problemas que Samanta, pero
intuyo que va a zafar. Alguna gente flota eternamente en los cargos, como
corchos de luxe.
–Buena chica Samanta.
–Como Victoria Villaroel.
–No me chicaneé, Asch. Es cierto: con Guillermo sabemos que tenemos un
problemita ahí. La relación de ella con el presidente Milei no pasa por su
mejor momento.
– ¿Le parece? Solo le dijo burra, bruta y traidora.
–Bueno, es política, Asch. Hay diferencias de pensamiento, tal vez. Pero
eso no pone en riesgo la institucionalidad. No hay ninguna crisis política
porque cada uno sigue en su función, sin problemas.
–No problem. Como Santiago Caputo, que no puede renunciar porque no
tiene ningún cargo formal. A los trolls con acné de ‘Las Fuerzas del Cielo’ los
dejaron afuera de todas las listas. El Gordo Dan estaba furioso.
–Otro muchacho encantador. Va a apoyar en la campaña. Yo le recomendé
una dieta a base de verduras. Es lo mío. Me gusta cuidar mi jardín, usted sabe.
–Y le gusta la televisión.
– ¡Oh sí! Qué bueno que me lo recuerde. Con Francos tenemos que arreglar
una nota contando que bien va todo. Todavía no sabemos si nos toca Majul, Joni,
Fantino o Trebucq. Vamos rotando. Si me disculpa, Asch, debo retirarme. ¡Un
gusto verlo!
Uf, por fin se fue. Infumable este Chance Gardiner, y encima como asesor
de Francos. ¡Qué tortura!
Espero que la próxima vez el gran Peter Sellers vuelva a visitarme como
el desopilante Hrundi V. Bakshi de ‘La fiesta inolvidable’, o el entrañable
inspector Clouseau de la saga de ‘La Pantera Rosa’.
Igual, peor es Milei.