La vida es un tablero de ajedrez en donde los cuadros blancos son los días y los cuadros negros son las noches... Nosotros, somos las piezas que vamos de aquí para allá para caer al final en el cuadro de la nada... De Alguna Manera... Una Alternativa…
Huracán igualó con Barracas y no pudo trepar a la cima…
Matter puso en ventaja al Guapo en el cierre del primer tiempo, y lo empató
Merolla para el Globo, sobre la media hora del complemento, en el partido que
se disputó en el Tomás A. Ducó por la 19º fecha.
Huracán volvió a dejar pasar la chance de ser puntero del torneo 2022 de la
Liga Profesional tras empatar 1 a 1 con Barracas Central, de local, en el marco
de la 19º fecha.
El “Guapo” se puso en ventaja en el estadio Tomás Adolfo Ducó a
los 45 minutos del primer tiempo por el gol de Facundo Mater, pero el local
llegó al empate mediante Lucas Merolla a los 29 de la segunda etapa.
Huracán ahora tiene 33 puntos, alcanzó a Gimnasia y Esgrima La Plata en el
segundo escalón y quedó a uno del líder Atlético Tucumán, ambos con sus
partidos por delante.
Al igual que en la fecha pasada cuando igualó con Tigre en
Victoria, el equipo de Diego Dabove dejó pasar la oportunidad de quedar en la
cima, al menos transitoriamente.
El “Globo” remontó el marcador y rescató el invicto de ocho
partidos sin perder con la misma cantidad de triunfos y empates.
Barracas llegó a los 24 puntos y lleva seis sin ganar de
visitante, con dos empates y tres derrotas.
En la previa, la fiesta estaba preparada para Huracán con un
buen marco de público pese al día y el horario incómodo y fuegos artificiales
para la salida del equipo.
Pero Barracas se la hizo difícil al dueño de casa y le complicó
el partido desde el inicio.
El equipo de Rodolfo De Paoli cerró todos los caminos y Huracán
nunca encontró la forma de generar peligro en el área rival.
Con Franco Cristaldo bien marcado y algo impreciso, el “Globo”
careció de sorpresa y por lo general las jugadas por las bandas con Benjamín
Garré y Rodrigo Cabral terminaron en las cabezas de los centrales visitantes y
lejos del uruguayo Matías Cóccaro.
El primer tiempo tenía fijado el 0-0 pero ya en el tiempo de
adición Ismael Quílez dio un pase atrás que Lucas Merolla no pudo controlar y
Facundo Mater aprovechó el rebote para entrar al área y definir de gran manera
ante la salida de Lucas Chaves.
El gol fue un acierto de De Paoli que subió a Mater, habitual
lateral derecho, al mediocampo, y un golpe para Huracán y Dabove, quien había
apostado por la titularidad de Quílez en lugar del chileno Guillermo Soto.
La ventaja, no obstante, fue demasiado premio para el “Guapo”,
ya que poco había hecho en ataque para abrir el marcador.
En el segundo tiempo Huracán salió a buscar el empate pero
nuevamente falló en la generación de jugadas.
A los 22 minutos el juvenil Enzo Luna tuvo un remate pero le
salió muy al medio y encontró bien ubicado a Cristian Arce.
De tanto insistir, el empate llegó por la vía aérea desde un
tiro de esquina de la derecha ejecutado por Franco Cristaldo que encontró la
cabeza del capitán Lucas Merolla.
De alguna forma, el "10" del “Globo” tiene que
aparecer y en esta ocasión fue como asistidor del "lungo" zaguero.
El empate no cambió el plan de Barracas, que siguió con la
postura de intentar llevarse algo de su visita al estadio que supo ser su casa
en el inicio de su regreso a la primera división.
Huracán intentó hasta el final, pero casi sin piernas y sin
variantes. De hecho, Dabove solo realizó dos cambios (en rigor, De Paoli hizo
solamente uno) y solo uno de ataque, lo que demuestra el corto plantel que
administra.
En la próxima fecha, Huracán visitará a Boca en La Bombonera y
allí deberá rendir un nuevo examen para demostrar si está para pelear el título
hasta el final.
Malestar
en Huracán por el arbitraje de Echavarría.
El defensor y capitán, Lucas Merolla, expresó su bronca con el
arbitraje de Pablo Echavarría, quien pasó por alto un penal.
"Es
penal fue claro. La vimos en el vestuario y es una mano cobrable. En el momento
no nos dimos cuenta pero para algo está el VAR y se pasó por alto",
manifestó Merolla, quien también tuvo un entredicho con
Echavarría apenas terminó el partido disputado en el estadio Tomás Adolfo Ducó.
"Yo siempre voy a la barrera y lo primero que te dicen (los
árbitros) es que no podes levantar la mano y acá se ve claro que la extiende y
la saca del cuerpo", agregó el defensor.
El capitán del "Globo" también puntualizó en el
supuesto favoritismo de los árbitros con Barracas Central.
"Con Barracas pasa mucho, porque ellos tienen algo con el
presidente de la AFA. En jugadas puntuales, como el penal, se pasa por
alto", remarcó el autor del gol del empate local. "El penal fue claro
y queda en evidencia", completó.
Huracán quedó transitoriamente como escolta a un punto de
Atlético Tucumán, que jugará mañana, y en la próxima fecha visitará a Boca
Juniors, otro de los animadores del torneo.
Síntesis:
Huracán:
1
Lucas Chaves; Ismael Quílez, Fernando Tobio, Lucas Merolla y Lucas Carrizo;
Santiago Hezze y Federico Fattori; Benjamín Garré, Franco Cristaldo, Rodrigo
Cabral; y Matías Cóccaro. DT: Diego Dabove.
Barracas
Central: 1
Cristian
Arce; Maximiliano Rodríguez, Nicolás Ferreyra, Gonzalo Paz y Juan Díaz; Facundo
Mater, Carlos Arce, Iván Tapia y Fernando Valenzuela; Bruno Sepúlveda y Neri
Bandiera. DT: Rodolfo De Paoli.
Gol en el primer tiempo: 45m.
Facundo Mater (BC).
Gol en el segundo tiempo, 29m.
Lucas Merolla (H).
Cambios: en el segundo tiempo, 10m. Enzo Luna por Hezze (H);
22m. Guillermo Benítez por Carrizo (H) y 30m. Dylan Glaby por Bandiera (BC).
Amonestados: Carrizo, Benítez y Merolla (H). M. Rodríguez, Paz y Valenzuela
(BC).
La Argentina es el reino del parche del día a día. El corto plazo es la
única vara con la que se miden los actos de gobierno.
La calma cambiaria no
durará mucho. Un industrial lo describió a la perfección: “La liquidación del dólar soja –que
otorga un tipo de cambio de 200 pesos por dólar– es pan para hoy y hambre para
mañana. ¿Qué pasará a partir del 1° de octubre, cuando haya caducado esta
maniobra?”, se preguntó la fuente con tono de incertidumbre. Enseguida agregó
que el sistema, además de ser selectivo, es injusto ya que otros sectores de la
economía necesitan su dólar diferenciado.
En el Banco Central (BCRA) sigue
la cola de empresarios que van a solicitar ampliar el cupo de importaciones
para poder producir. La respuesta es la misma para todos: “Salvo para salud y
otros indispensables, no hay plata”; es parte del plan “vamos viendo”.
Tanta es la
incoherencia, que el último viernes el mismísimo BCRA emitió un llamativo
comunicado en el que expresaba su crítica hacia esta devaluación selectiva con
la que no está de acuerdo no solo el presidente de la entidad, Miguel Pesce,
sino también Axel Kicillof. El
gobernador de la provincia de Buenos Aires no comparte para nada esta decisión
del equipo económico.
La gira del ministro Sergio Massa, abundante en
fotos y gacetillas con las que su equipo de comunicación fatiga las casillas de
correo de las redacciones de diarios y estaciones de radio y televisión desde
las primeras horas de la mañana hasta bien entrada la noche, es la muestra de
la disociación que se vive al interior del gobierno del Frente de Todos contra
Todos. Varios de los que conversaron con el ministro coincidieron en sus
conclusiones: “Tiene un discurso que acá cae bien. El problema es que cuando se
le hacen preguntas concretas sobre el cepo, la brecha cambiaria, la
repatriación de utilidades y el discurso del Gobierno, comienza a hacer agua”,
señalan esos interlocutores.
El problema político que
enfrenta Massa se llama Cristina Fernández de Kirchner.
Ella y el kirchnerismo duro representan la antítesis de lo que el ministro
expone. A eso se le agrega la postura del kirchnerismo por Cuba, Nicaragua y
Venezuela. Este doble discurso es nocivo para la gestión del ministro.
En el Fondo Monetario
Internacional hay voluntad de ayudarlo. Eso es lo que le prometieron los funcionarios
del gobierno de Joe Biden que son clave en el directorio de la entidad. Sobre
lo que pasó en estos meses habrá una mirada piadosa. El asunto será el futuro.
Y ahí aparecerá otra vez la problemática interna del Gobierno.
Mientras tanto, aquí, los discursos
oficialistas que siguieron luego del atentado sufrido por la expresidenta en
funciones no hicieron más que echar leña al fuego. Alberto Fernández sigue
culpando a la oposición y a los periodistas independientes. Victoria Donda
revivió la idea de lanzar una ley contra los discursos de odio. ¿Quién
determinaría qué críticas son aceptables o bien intencionadas? Un plan sin pies
ni cabeza que tuvo que ser desmentido –a medias– por la portavoz Gabriela
Cerruti, que atinó a decir que la legislación existe y que “lo que hay que
hacer es cumplir con la legislación vigente y poner en debate de qué estamos
hablando cuando hablamos de discursos de odio”. Más polémica para embarrar la
cancha en un país que ya no tolera más giros ideológicos.
Desde la oposición
contraatacan: “Al Gobierno lo único que le interesa es silenciar voces,
victimizarse, borrar del mapa la Justicia independiente y poner la democracia
contra las cuerdas”.
El mejor ejemplo fueron
las palabras del senador por Formosa, José Mayans –un
“digno” exponente de lo que es el régimen de Gildo Insfrán–, que dijo muy
suelto de cuerpo que para alcanzar la paz social hay que frenar el juicio por
la causa Vialidad. Más claro, agua. La extorsión está en marcha.
“La jefa es el centro de
todo, y así debe ser. Nosotros no comulgamos con ningún ajuste, la ineptitud
del Presidente tensó la cuerda al máximo, ahora lo único que importa es
protegerla, pero de verdad”, señalaron desde el Patria.
Por eso careció de toda
credibilidad la convocatoria de último momento que el Gobierno hizo para
convocar a referentes de la oposición a la polémica misa de hoy en Luján que,
además, generó una intensa discusión y enojo al interior de la Iglesia
argentina, cuyo episcopado expresa una fenomenal falta de liderazgo que
alimentan internas que la carcomen.
La convocatoria por la
paz y la unidad hecha por la Iglesia fue transformada en una misa por el
kirchnerismo, en un acto de apoyo a CFK. Por eso nadie respondió a los muchos
llamados que el ministro del Interior –un exégeta del doble discurso– hizo en
las últimas horas para convencer a opositores de participar en la ceremonia
religiosa en la Basílica de Luján. ¿Cómo creerle a alguien que un día señala
que las críticas del periodismo al Gobierno fueron la base del atentado contra
CFK, que además afirmó que si condenaban a Cristina quemaban todo, y que luego
invita a la oposición a “bajar un cambio”?
El kirchnerismo ha
observado que el abyecto uso político que ha hecho del repudiable –y
afortunadamente fallido– atentado contra su vida sufrido por CFK no ha tenido el
resultado esperado. Las encuestas encargadas por el Gobierno muestran un alto
grado de incredulidad de los sectores que no le son afines que, hoy en día, son
mayoritarios.
La intención del
Gobierno de aprovechar el estrépito producido por el intento de magnicidio para
tapar la dura realidad socioeconómica del país ha fracasado. Cuando esta semana
que comienza se conozca el índice de inflación, el Gobierno se verá otra vez
con la cruda realidad que complica la vida de toda la ciudadanía y para la cual
las soluciones no aparecen.
Magdalena no solo fue una persona de intachable rectitud, valentía y honestidad
periodística, sino también de coraje ciudadano. Esta columna está dedicada a su
memoria.