sábado, 7 de octubre de 2017

La avidez de la AFIP parece no tener límites… @dealgunamanera...

La avidez de la AFIP parece no tener límites…

Alberto Abad, titular de la AFIP. El organismo recaudador sigue cazando en el gallinero y aumenta la presión entre los monotributistas.

La AFIP aumenta las exigencias y complica a los pequeños y medianos contribuyentes del monotributo. La apuesta de Alberto Abad para que todos integren el régimen general y paguen ganancias e IVA.

© Escrito por Mario Rodríguez Muñoz el miércoles 20/09/2017 y publicado por la Revista Fortuna de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El gobierno nacional habla permanentemente de la alta presión impositiva que hay en el país. Incluso propone una reforma tributaria para hacer menos pesada esta carga. Sin embargo, la AFIP parece ir en sentido contrario. Con la intención de transparentar y de incrementar la base impositiva, oscurece y complica la ya pesada carga, en especial para los pequeños y medianos aportantes que contribuyen al fisco con el monotributo.

El 20 de septiembre se venció el plazo  para la modificación de las categorías (de todas). Para controlar que el aportante esté en la categoría que le corresponde, el organismo recaudador va a controlar sus gastos, tanto por su actividad como los  personales, y los movimientos bancarios. 

A esto le va a sumar un 20% para los prestadores de servicios y un 30% para los que venden bienes. Lo que no explica la AFIP es qué pasa si el contribuyente tiene un trabajo en relación de dependencia. Parecería que no cuenta ese ingreso para calcular los gastos personales (por lo menos no está aclarado). 

Por ejemplo, si se paga una obra social privada con la tarjeta de crédito, la autoridad tributaria no discrimina un gasto y otro, entonces considera ese costo dos veces, incrementando los gastos personales. Como este se pueden mencionar muchos ejemplos más. “La culpa es de los contadores, que complican todo”, dicen en la AFIP.

Si no coinciden los gastos personales o por venta y los movimientos bancarios con la categoría en la que está el monotributista, el organismo que encabeza Alberto Abad lo recategoriza de oficio.

De a poco, la Administración de Ingresos Públicos va agregando obligaciones que tiene que cumplir el pequeño y mediano contribuyente que, en lugar de simplificar, complican el panorama, como la adhesión obligatoria al Domicilio Fiscal Electrónico desde el 1 de octubre o el pago electrónico obligatorio a partir del 1 de noviembre.

Toda esta maraña de trámites (que en la categoría más baja y si el contribuyente está en relación de dependencia tiene un costo de $ 68), hacen necesaria la contratación de un contador, con el consiguiente costo de honorarios

La Justicia pone un defensor público gratuito para el acusado que no quiere pagar su propio abogado; la salud en los hospitales públicos es gratuita (el paciente no le paga al médico ni paga los remedios); la educación es pública y gratuita; ¿por qué la AFIP no dispone de contadores gratuitos para los contribuyentes más chicos?

Los que lo conocen dicen que este embrollo cada vez más complicado que es el pago de impuestos, por lo menos en lo referente a los monotributistas, es porque Abad quiere que el régimen simplificado desaparezca y que todos pasen al régimen general (y que paguen ganancias e IVA). Es decir, más impuestos, al revés de lo que declama el propio presidente Mauricio Macri.


martes, 3 de octubre de 2017

Dos alemanes recorren Argentina en Furgones Piaggio APE 50… @dealgunamanera...

Dos alemanes recorren Argentina en Motonetas…
  
 Piaggio Furgón APE 50

Ricardo Suter y Richard Kreassmann, ambos son oriundos de Alemania, más precisamente de Würzburgo, una ciudad de Baviera (capital de la Baja Franconia a orillas del río Meno, antigua sede episcopal y hoy ciudad universitaria con mucha animación y unos 125 mil habitantes).

© Escrito por Sergio Miranda el  sábado 23/09/2017  y publicado por www.infomalargue.com de la Ciudad de San Rafael, Provincia de Mendoza, República Argentina.


¡Vaya sorpresa que nos dieron estos dos personajes alemanes, al verlos en sus llamativas motonetas Piaggio circulando por nuestra ciudad! Sin dudas era para hacer una nota, ya que no es muy común ver gente recorriendo nuestro país de esa manera.

Es así, que junto a mi colega y amigo Max Belaeff, nos dispusimos a hacerles una entrevista, a la cual accedieron muy gustosamente y pasamos una tarde verdaderamente diferente.


Ricardo Suter y Richard Kreassmann iniciaron su viaje el 15 de mayo, partiendo de Würzburgo y fueron conduciendo sus motonetas hasta Hamburgo, donde tomaron un carguero de la línea italiana Grimaldi, en el que estuvieron durante 5 semanas.

El barco los llevó a tocar distintos puertos. En primer lugar visitaron África, pasando por Senegal y Freetown, en Sierra Leona; desde ahí fueron hasta Brasil y posteriormente a Montevideo, Uruguay, lugar donde desembarcaron y comenzaron su travesía en las motonetas. Es importante decir que el carguero que los trasladó, transporta alrededor de 4 mil vehículos entre automóviles y camiones, los cuales estaban destinados a los países que iban visitando.


Desde Montevideo, emprendieron la travesía, recorriendo Salto, Concordia, Paraná, Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero, Tucumán, Jujuy, la Quebrada de Humahuaca y llegaron hasta La Quiaca, regresando por Salta, Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza y por supuesto a nuestro querido San Rafael, donde se alojaron en un hostel. Desde nuestra ciudad partirán hacia el Sur de nuestro país, comenzando por Malargüe, y siguiendo por Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, con la intención de llegar en diciembre o enero de 2018 a Ushuaia.

La vuelta es por la costa atlántica argentina –por supuesto en sus motonetas– hasta llegar a Buenos Aires, lugar donde se embarcarán nuevamente a Montevideo y desde ahí enviaran las Piaggio en un contenedor de barco hasta Alemania, mientras que ellos, ya habiendo cumplido con su sueño, se irán en avión, calculando llegar en el mes de abril a Würzburgo, tras lo que será sin dudas, toda una travesía.


Ricardo Suter, de 65 años está casado con Michèle, mujer con quien tiene tres hijos, de 39, 37 y 31 años. Es ingeniero civil y trabajó durante 20 años en una empresa de construcción de acero, haciendo techos para estadios y establecimientos sin columnas, llamadas “Mero” (“como el pez”, aclara); además ha trabajado en distintos lugares de mundo, como Kuwait, Arabia, Irán e Irak. Posteriormente estuvo 5 años en Singapur y China y luego cambió de profesión y comenzó a dictar clases en una facultad de Ingeniería y Arquitectura, donde se desempeñó durante 22 años.  En el caso de Richard Kreassmann, tiene 64 años y vive solo. También es ingeniero, pero mecánico y trabaja en una empresa privada como inventor.

Son amigos desde hace aproximadamente 20 años. Según cuentan, se juntan todos los viernes en una bodega de Würzburgo, ya que es una zona donde tienen muy buen vino blanco. Allí comenzó la charla que motivó este viaje. Ricardo comenta que hace muchos años tenía la idea de venir a Argentina, ya que él nació en Buenos Aires en 1952, pero cuando tenía 3 años, en 1956, sus padres (que eran suizos), decidieron regresar a Europa, a vivir en Alemania. “Siempre tuve el sueño de regresar y conocer mi tierra de nacimiento; ahora que soy jubilado tengo tiempo para hacerlo, esa era la idea que he tenido por muchos años. Con mi amigo Richard lo habíamos hablado, ya que yo no quería viajar solo y él me ha acompañado en esta travesía”, señala.


Ambos viajeros se mostraron asombrados por las bellezas que posee nuestro país, especialmente por la diversidad de paisajes con los que se encontraron en su recorrido. ¡Y pensar que todavía no han visto el Sur! Además, dejaron en claro que se encontraron con mucha gente que los ayudó en su momento y que no tuvieron ningún sobresalto. En nuestro departamento antes de seguir viaje, conocieron el Cañón del Atuel y visitaron la bodega Suter. Si bien no es pariente, Ricardo quería conocerla, es por eso que allí se tomaron un tiempo para recorrerla.

Como otro dato curioso, podemos decir que sus vehículos no viajan a más de 50 kilómetros por hora (sí, leyeron bien), y cuando hay subidas pronuncias, no pueden ir a más de 10 o 20 kilómetros. Esto es porque los vehículos tienen un motor de 220 centímetro cúbicos y pesan alrededor de una tonelada en virtud de todo lo que llevan: tienen una pequeña cocina que funciona con alcohol, una heladera y una ducha exterior que les permite bañarse (aunque sólo con agua fría). Previsores ante todo, también llevan repuestos para las motos, que en la parte superior tienen panales solares. Por todo esto, el tiempo de viaje parece interminable, aunque Ricardo aclaró que no tienen ningún tipo de apuro.


Bueno, la verdad es que a nosotros nos ha parecido una nota realmente interesante, distinta, de color (como se le dice en nuestra jerga). Dos “locos” alemanes recorriendo nuestro país en sus motonetas, en el contexto envidiable de una verdadera aventura.

Para ver la galería de imágenes, haga clic en la foto de abajo...



lunes, 2 de octubre de 2017

Justicia se busca… @dealgunamanera...

Justicia se busca…

Alta Tensión. Julio De Vido. Dibujo: Pablo Temes

Impunidad y poder de dirigentes gremiales que contaron con protección política y judicial.

Comienzan a desplegarse los lineamientos de lo que será la esencia de la campaña electoral que desembocará en los comicios del 22 de octubre. En el oficialismo reina el optimismo. Los números de la incipiente y sostenida recuperación de la economía no podrían haber llegado en mejor momento. La caída de la pobreza y la reactivación de algunos sectores claves de la economía se aúnan para generar un ambiente de esperanza en aquellos sectores que decididamente no quieren la vuelta del kirchnerismo.

Esta combinación de factores ha generado una situación que motiva una paradójica preocupación dentro del oficialismo: que la dirigencia y la militancia se relajen, circunstancia que sería fatal a tres semanas de una elección que de ninguna manera está aún definida. “Nos dicen que estamos un punto y medio arriba de CFK pero las cifras verdaderas son más holgadas y están guardadas bajo siete llaves”, reconoce una fuente de Cambiemos. Desde la mesa chica del oficialismo bonaerense, compuesta por María Eugenia VidalFederico SalvaiJaime Duran Barba y su socio Santiago Nieto, se baja la orden de que se debe trabajar como si estuvieran un punto abajo. La tarea pues es levantar a los candidatos todos los días para ir a hacer campaña a los lugares más recónditos y adversos del conurbano bonaerense con toda la energía. El objetivo no es sólo electoral: se busca un cambio de la cultura política en esos bastiones cuasi inexpugnables del peronismo.

Las dos últimas semanas están guardadas para el Presidente. Volverán los escenarios en 360 grados y los encuentros cuidadosamente estudiados. Su presencia en el Gran Buenos Aires será preponderante en los lugares más ásperos en donde, de a poco, Cambiemos va haciendo pie.

Por su parte, Cristina Fernández de Kirchner concedió dos entrevistas como parte de su campaña. Tanto en la que realizó Carlos Cué para El País como en la de Chiche Gelblung para Crónica dijo cosas que indignaron y que lograron un efecto claro: no sumar un solo voto más. ¿Quién la asesora?


En las filas del randazzismo reina la calma. Allí la apuesta es a mediano plazo y comenzará a perfilarse mejor luego de la elección. La convicción es que, si no hay sorpresas, Cristina Fernández de Kirchner pasará a formar parte del pasado y a partir de allí comenzará una etapa de verdadera renovación dentro de las filas del peronismo. 

En el massismo, por su parte, la decisión es dejar de hablar de CFK. “Cada vez que volvemos sobre la corrupción, las denuncias y los discursos gastados de Cristina, le hacemos el juego al Gobierno”, señala una voz cercana a Sergio Massa.

La detención de Juan Pablo “Pata” Medina, el poderoso e intocable secretario general de la seccional La Plata de la Uocra, tiene un valor fáctico y otro simbólico.

El fáctico a los hechos de corrupción y de comportamiento mafioso sobre los que armó su emporio este nefasto personaje al que aguarda una larga estadía –años– en alguno de los presidios del país. Está claro que todo el entramado que armó para lograr el fenomenal poder del que hizo gala durante  los veinte años que duró su despótico reinado, contó con una escandalosa protección política y judicial. Ahí están los videos en los que se lo ve al ex gobernador Daniel Scioli agradecer a la Uocra La Plata.

Tanta impunidad fue posible también por la complicidad de jueces que dieron vergüenza. Son muchos los que recuerdan aquel cumpleaños del hoy destituido juez César Melazo, al que Medina fue invitado y en el que se codeó con el ex ministro de Justicia Ricardo Casal, y el entonces jefe de la Policía Bonaerense, comisario Juan Carlos Paggi.

El Pata Medina no sólo se enriquecía vilmente, sino que, con sus formas, tenía atemorizado a todo el vecindario de la sede de la Uocra La Plata que padeció durante años la prepotencia y el patoterismo que impuso en ese lugar. 


Claro que el hecho se proyecta más allá del dirigente sindical hoy preso. Es útil conocer cómo fue el proceso a través del cual Medina sumó poder y acuñó riqueza. La metodología la aprendió de sus mayores, y aquí mayores significa la conducción central de la Uocra. Las obras se cotizaban y después se arreglaban los sobreprecios con los empresarios. La Cámara de la Construcción –que sistemáticamente niega estos hechos– ha sido copartícipe de todo este engranaje de corrupción.

Tampoco hay que olvidar el caso de Omar “Caballo” Suárez, secretario general del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) y hombre de cercanía de CFK. Las sospechas sobre otros dirigentes gremiales a veces quedan transformadas en evidencias a partir de circunstancias impensadas. He ahí el  caso de Gerónimo Venegas, el histórico secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre), de quien ahora se confirma un patrimonio enorme que se encuentra en disputa entre sus hijos. ¿Cuántos más hay en la misma situación?

¿Qué esperan jueces y fiscales para investigar y avanzar en causas que duermen hace mucho tiempo en cajones y archivos?

Las razones que se esgrimen desde algunos ámbitos tribunalicios para explicar semejante molicie es que este despertar se debe a que ahora  están dadas las condiciones políticas para avanzar en las causas e investigar. El argumento es ominoso.

Si hay algo que no puede resignar la Justicia, es su independencia. Si ese concepto no se modifica, la Argentina se queda sin un instrumento clave para combatir el grave delito de la corrupción. Y esto es peligrosísimo no sólo desde el punto de vista político e institucional, sino también social y personal, porque la corrupción mata. La tragedia de Once nos lo recuerda todos los días.

Producción periodística: Santiago Serra.


  

¿Cómo lograr el orgasmo femenino ideal?... @dealgunamanera...

¿Cómo lograr el orgasmo femenino ideal?


Un estudio científico contesta lo que muchos hombres quieren saber sobre el placer de las chicas.

© Publicado el lunes 02/10/2017 por la Revista Hombre de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

¿Existe el orgasmo ideal?

¿Pueden lograrlo las mujeres?

¿Podemos ayudarlas?

La búsqueda de respuestas a estas preguntas les quita el sueño a los varones desde siempre. Por suerte, la revista científica “Journal of Sex & Marital Therapy” investigó las preferencias de las mujeres para el sexo y cuáles son sus tipos de estimulación favoritos y algunas respuestas encontró.

En un estudio realizado a más de mil mujeres con edades que van de los 18 a los 94 años, heterosexuales, mitad casadas y mitad solteras, dieron el siguiente resultado:

- El 36% de las mujeres necesita estimular el clítoris para lograr un orgasmo durante el coito con su pareja.

- Otro 36% no necesita estimular el clítoris para llegar al orgasmo, pero sí recurría a él para alcanzarlo antes.

- La mayoría de las mujeres no se consideraba heterosexuales.

- La mayoría de las entrevistadas resaltaba la importancia de comunicación con su pareja para alcanzar mayor placer y satisfacción.

Los movimientos más importantes a realizar en el clítoris, antes que revolverlo como si fuera un spinner:

- Dos tercios de las mujeres prefieren la estimulación directa, al 63% le gustaba de arriba a abajo y al 51% en forma circular.

- Un gran porcentaje de mujeres señaló que también disfrutaban de la estimulación de la zona de alrededor. 


- Con respecto a la presión, la mayoría afirmó que les gustaba que sea suave o media, mientras que solo un 16% afirmó que prefería movimientos rápidos.






domingo, 1 de octubre de 2017

Cataluña: el viejo truco de la patria… @dealgunamanera...

Cataluña: el viejo truco de la patria…

El presidente del gobierno catalán, Carles Puigdemont, urge a sus seguidores a dar el sí a la independencia catalana en un discurso durante una manifestación, el 22 de septiembre en Sant Cugat. Fotografías: Albert Gea / Reuters

Nada nunca empieza, todo sigue, pero si esto fuera un cuento se podría decir que empezó hacia 2010, cuando la crisis económica global se ensañó con España. Ese año el Partido Popular consiguió que el Tribunal Constitucional anulara el Estatuto de Autonomía que los catalanes habían votado cuatro años antes. Gobernaba Cataluña el mismo partido de la derecha catalanista que ya lo había hecho durante más de dos décadas y nunca había hablado de independencia para su región. Tampoco lo hizo entonces.

© Escrito por Martín Caparros el miércoles 25/09/2017 y publicado por el New York Times (edición en Español) de la Ciudad de New York, U.S.A.

Pero la crisis arreciaba, y el Govern catalán decidió cortar por lo más débil.

Entre 2010 y 2015 redujo los presupuestos de vivienda, educación y salud públicas más del 15 por ciento. En ninguna otra comunidad española los recortes fueron tan brutales.

Hubo protestas, miles, en las calles. El Govern se asustó: debía hacer algo. Freud –cuánto hace que no citábamos a Freud– habló de los recuerdos pantalla, esos que sirven para tapar lo que no soportamos recordar. Más universales aún son los proyectos pantalla: los que sirven para tapar lo que no soportamos prever, las amenazas del futuro. Cualquier religión, muchos discursos políticos son buenos ejemplos. El partido de la derecha catalana recurrió al más clásico: el viejo truco de la patria.

Toda la culpa, dijeron, era de Madrid. Y allí el gobierno de la derecha española, también golpeado por la crisis, vio la oportunidad y saltó sobre ella: ¿qué mejor que imitar a sus correligionarios catalanes y agitar el mismo espantajo? Fue una curiosa coincidencia: Artur Mas en Barcelona y Mariano Rajoy en Madrid pensaron que los fantasmas patrios les servirían para disimular otros fantasmas, y los llamaron a los gritos. “El patriotismo es el último refugio de los canallas”, repite el doctor Samuel Johnson. A estos dos les convenía pelearse, revolear banderas: así empezó esta carrera de provocaciones, bravatas y tonterías que amenaza con crear nuevas fronteras.

La patria es una idea paranoica –funciona en referencia a una amenaza externa– y la paranoia siempre vende bien. Es fácil entusiasmarse con la patria. Es fácil imaginarnos distintos de los otros; es fácil imaginarnos mejores que los otros. Es fácil suponer que todos los males vienen de los que están más lejos, los que no son nuestros parientes, nuestros vecinos, los nuestros. Es más cómodo, más tranquilizador: evita ciertos roces y evita, sobre todo, el esfuerzo de pensar.

El mayor efecto de la patria es aplastar las diferencias, los matices: hace que cualquier consideración desaparezca ante la fuerza de esa banda de –supuestos– iguales. Frente al aumento de la desigualdad en la sociedad catalana –como en el resto de la sociedad española– en los últimos años por la concentración de la riqueza y la pérdida de empleo y los errores económicos, lo más fácil para muchos catalanes es decir “Espanya ens roba” (España nos roba). Es lo mismo que hicieron los británicos que votaron el brexit, los estadounidenses que votaron a Trump, y siguen los éxitos.

Así que la gran derecha catalana, extrañamente aliada con la izquierda republicana, con mayoría en el Parlament autonómico, convocó un referéndum para que los catalanes voten si quieren o no la independencia. Lo anunciaron para el domingo 1 de octubre y la ley que lo prevé dice que si gana el sí –por mayoría simple de votos, sin mínimo de participación–, el Parlament debe declarar, en menos de 48 horas, la independencia.

Independencia es un concepto vaporoso. Creo que muchos catalanes no se imaginaban el esfuerzo, el costo, la voluntad que requiere poner en marcha un país nuevo. No se veía –viví allí varios años– en la sociedad catalana esa energía y esa urgencia necesarias para inventar un país, para construir la realidad de una idea. Parecía que se imaginaban la independencia como un estado idílico, de amor y tradición, de retorno a un pasado que nunca existió. Que no consideraban que los obligaría a crear un gran aparato de Estado, a salir de la Comunidad Europea, a perder por un tiempo su mercado principal –España–, a resignar nivel de vida. Y que el Barça tendría que jugar un campeonato de segunda.

Por eso, hace unos meses no habría sido difícil contener ese impulso o, por lo menos, encauzarlo. El gobierno central podría haber buscado las maneras: informar sobre las complicaciones de una separación, insistir en que España quiere y necesita a Cataluña, discutir mejores términos de convivencia. Y, en última instancia, organizar un reférendum legal, consensuado, que aceptara que para plantear su secesión la población de una región necesita dos tercios o tres cuartos de los votos, con un mínimo de participación. Al fin y al cabo, todas las encuestas dicen que tres de cada cuatro catalanes quieren votar y decidir, pero menos de la mitad elegiría la independencia. Votar y votar por la independencia son dos cosas radicalmente distintas; la testarudez de Rajoy y los suyos las ligaron.

Un grupo de ciudadanos se reúne en Barcelona para mostrar su apoyo al referéndum del 1º de octubre por la independencia catalana, el 24 de septiembre de 2017. Fotografía: Susana Vera / Reuters.

Tenían muchas opciones y las despreciaron: se creen que para complacer a su público les conviene mantener la imagen de caballeros altivos inflexibles —que tan bien sirvió a sus ancestros para construir la famosa leyenda negra—. Y ahora insisten en su exquisita mezcla de sordera y agresión: siguen negándose a cualquier diálogo, secuestraron millones de boletas y carteles electorales, mandaron fuerzas de intervención policial con helicópteros y barcos, acusaron a más de 700 alcaldes, detuvieron a una docena de dirigentes, crearon un clima de ocupación que solo favorece a los otros nacionalistas. La imagen de la Guardia Civil española impidiendo votar a los ciudadanos de Cataluña es de esas que pueden durar décadas.

El gobierno del Partido Popular insiste en que el referéndum es inconstitucional. Lo es, según la ley, pero el texto de la ley no siempre traduce su espíritu. Es difícil, en una democracia, sostener que un pueblo no tiene derecho a expresarse en las urnas. Y es más difícil todavía reprimirlo por intentarlo. El referéndum puede ser ilegal; con su violencia, el Estado central lo está legitimando.

Siempre se dijo que la principal característica de los catalanes era el seny –el sentido común, la razón serena–; en este caso, la intolerancia centralista está acabando con él. Más y más catalanes se deciden por un independentismo que, hace unas semanas, los asustaba o no les interesaba. Más y más personas dicen que ya no importa lo que les cueste; que no quieren seguir tolerando los agravios y ataques españoles. Si alguna vez queremos saber cómo se llega a situaciones que parecían imposibles, el caso catalán será objeto de estudio: de cómo dos bandos que creyeron que podrían mantener controlada una pelea de baja intensidad rodaron al abismo.

El viernes Mariano Rajoy anunció que su intervención policial y judicial ya había logrado desarmar el referéndum. Es probable que el Govern, acorralado, no consiga realizarlo. La votación será remplazada por los intentos de votar: el próximo domingo esos intentos se convertirán en marchas, acampes, ocupaciones varias —como la que ya empezó en la Universidad de Barcelona—.

Así que nunca se sabrá qué habrían votado los catalanes. No habrá datos ni hechos ciertos sino nuevas ilusiones: lo que podrían haber logrado si no los hubieran reprimido. Los hechos se pueden discutir; las ilusiones no.

Y nadie descarta que el lunes 2 el president Puigdemont declare la independencia de Cataluña y que España intervenga manu militari y que catalanes resistan y que quién sabe qué. Mariano Rajoy pasará a la historia como ese necio que de tanto escalar una suave colina la convirtió en el Everest: gracias a sus esfuerzos los independentistas están ganando esa legitimidad que solo consiguen, en nuestras sociedades, las víctimas.

Nada le sirve tanto al viejo truco de la patria.