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lunes, 27 de enero de 2025

Mundo de Extremos. Favorito y privilegiado... @dealgunamanera...

 Mundo de Extremos. Favorito y privilegiado...

Desajustado, Donald Trump. Dibujo: Pablo Temes

Milei goza como pocos en el mundo de la simpatía de Donald Trump. Comparten, ideología y formas. Y como se vio en el Foro de Davos, objetivos.

© Escrito por el Doctor Nelson Castro el sábado 24/01/2025 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Es necesario detenerse a reflexionar sobre lo que ha pasado esta semana en el mundo para darle contexto a lo que representa no sólo el discurso de Javier Milei en el Foro Económico Mundial de Davos sino también la forma de exponer sus ideas, su visión de la realidad, sus proyectos y sus conductas respecto de los que piensan diferente a él. No es que sea algo novedoso. El discurso del año pasado allí tuvo características similares. Lo que ocurre ahora es que los dichos de Milei cobran otra dimensión con todo lo sucedido tras la asunción de Donald Trump como cuadragésimo séptimo presidente de los Estados Unidos. Lo que representa Trump no es sólo un simple cambio de administración con una concepción más ortodoxa de la economía.

Va mucho más allá de ello: hay un proyecto que pretende implementar cambios profundos en la cultura política y cívica de la sociedad estadounidense y de Occidente. El flamante nuevo inquilino de la Casa Blanca actúa no como un presidente sino más bien como un emperador que pretende ubicarse por arriba de los preceptos republicanos establecidos por la Constitución de su país y, por ende, considera que su poder es absoluto e intocable. Y esto lo proyecta al mundo. Quienes piensan distinto a él son sujetos de hostigamiento, amenazas, desprecio y castigos. Lo inquietante es que esta concepción política ha sido votada mayoritariamente por la ciudadanía norteamericana.

Como ya se ha dicho en esta columna, Javier Milei es hoy en día un favorito privilegiado dentro del universo de amores y odios de Trump. Comparte su ideología y sus modos. Envalentonado por esta circunstancia, el presidente argentino arremetió una vez más en Davos contra el progresismo. Los que allí estuvieron señalan que eso generó inquietud en el auditorio. La idea de que el progresismo representa un cáncer para el mundo es equivocada y peligrosa. La lucha por la igualdad ha traído beneficios enormes no sólo para sectores que históricamente fueron víctimas de discriminación, maltrato y sumisión sino también para la sociedad toda. Una sociedad más igual es una sociedad mejor. Por supuesto que también están los que han hecho una mala lectura de lo que significa el progresismo y adoptado posiciones extremas tan retrógradas y nocivas como las de los ultraconservadores. Con los extremos no se construye. El mundo de los extremos es un mundo de destrucción y penurias. Es lo que enseña la historia.

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Mientras el presidente recorre el mundo sintiéndose un rockstar, en el país se conocen algunas de las iniciativas que generan inquietud. Una de ellas, por ejemplo, la de derogar el feminicidio. Antes de pensar en eso, tanto el jefe de Estado como su ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, deberían preocuparse en qué más se puede hacer para prevenirlo. Ese es el verdadero problema, con ley o sin ley. Y de eso, lamentablemente, el Gobierno se ocupa poco, como también poco se ocuparon los gobiernos precedentes, con ley y con Ministerio de la Mujer.

Los conceptos del presidente sobre la homosexualidad ligándola directamente al abuso infantil están equivocados. Un informe elaborado por Unicef y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos en 2020 señala que “Las estadísticas indican que la mayoría de los abusadores son varones heterosexuales adaptados socialmente”.

Al presidente y a su ministro de Economía les fue muy bien en las reuniones con la Directora Gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, el domingo pasado en Washington. El objetivo que se buscaba se logró: abrir las puertas a una nueva negociación que le permita a la Argentina acceder a un préstamo que haga posible el levantamiento del cepo. Por eso, se dispuso la venida al país de una misión del Fondo para evaluar in situ los números de la Economía. Esa fue la causa por la cual el ministro Caputo decidió regresar a Buenos Aires y no acompañar al presidente a Davos. Los conocedores de la trama de esta compleja y larga negociación en Washington confirman el viento a favor para el gobierno argentino no sólo por los números de la macroeconomía sino también por el apoyo decidido de Trump. “Queremos que a Milei le vaya muy bien. Y, además, necesitamos que así sea”, señalaba el jueves al mediodía con entusiasmo una voz del entorno directo del presidente de los Estados Unidos. Como ya se dijo, la cifra de la que se habla ronda los 11 mil millones de dólares.

Donde todo es furia y fuego es el ámbito de la política. El Gobierno está trabajando intensamente en todo el armado electoral para octubre próximo. En este camino debió desistir de la eliminación o suspensión de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). Hoy los votos en el Congreso para lograr ese objetivo no están. El kirchnerismo las quiso eliminar en 2021 cuando estaba en el poder para perjudicar a la oposición, obviamente. Hoy, que está en la oposición, las quiere mantener. La doble moral es una de las esencias de Cristina Fernández de Kirchner y sus secuaces.

En la arremetida del oficialismo por construir su propio poder está claramente la idea de sacarlo del medio a Mauricio Macri. Su poder político, claramente menguado, representa para él un dilema y para el oficialismo un obstáculo. El dilema, significa que el expresidente es consciente de que La Libertad Avanza quiere –y puede– acabar con el PRO, esa construcción que es su creación. Terminar con el PRO equivaldría, lisa y llanamente, a terminar con la aspiración de Macri de ser un actor político de peso. Eso afectaría también directamente a Jorge Macri. Eso es lo que está en juego hoy en día. Macri debería haber previsto que la destrucción de Juntos por el Cambio llevaría inexorablemente al vaciamiento progresivo del PRO.

Construir una nueva estructura política no es algo que se logra de un día para el otro. Cuando Juan Domingo Perón se presentó a las elecciones de febrero de 1946, lo hizo como candidato de una estructura partidaria que no era el peronismo sino el Partido Laboralista con aliados menores. Una vez en el poder, el entonces presidente se encargó de crear el Partido Justicialista que debilitó y anuló a los partidos que le habían servido de estructura legal. Lo de Milei tiene semejanzas. La Libertad Avanza era poco más que un sello. Habrá que ver si el Presidente logra construir un partido que alcance la misma perdurabilidad que hasta aquí ha tenido el peronismo.

Hablando del peronismo, lo que domina también es el ánimo de pelea y confrontación. La disputa entre Axel Kicillof y Cristina Fernández de Kirchner no para. Kicillof no tiene otra alternativa que candidatearse a la presidencia en 2027. Lo sabe él e igualmente lo sabe ella. La fuente de poder de Kicillof es su condición de gobernador de la provincia de Buenos Aires. Terminado este mandato, la posibilidad de aspirar a una candidatura presidencial por el PJ estará acabada. Por eso es por lo que su enfrentamiento con CFK y Máximo Kirchner, es inevitable.

Cristina Fernández de Kirchner que siempre usó el poder buscando someter a propios y ajenos está bebiendo la amarga medicina de la rebelión. “Ut semens feceris, ita metes” (Cosecharás lo que siembres). Cicerón.





lunes, 29 de enero de 2018

Mucho en juego… @dealgunamanera...

Mucho en juego…

 La caladera del diablo. Dibujo: Cedoc

De la escalada con Moyano a qué hacer con Triaca, el Gobierno tiene varios frentes abiertos. Lecciones de la gira.

La gira de Mauricio Macri por Europa confirmó algo que debería ser un aprendizaje no solo para este gobierno, sino también para los que aspiren a sucederlo: si no hay previsibilidad política, el flujo de inversiones que Argentina necesita para poder revertir la dura realidad social que representa un nivel de pobreza del 30% nunca se producirá.

El mundo político y de los negocios ha quedado escaldado con los vaivenes de un devenir pendular exhibido por nuestro país en los 34 años de democracia, producto de la falta de acuerdos partidarios y de políticas de Estado. Eso es lo que le transmitieron los empresarios con los que se reunió el Presidente a su paso por el foro económico de Davos. Es lo mismo que le sucedió el año pasado, cuando se encontró con empresarios estadounidenses en Nueva York. Eso es lo que también le transmitieron los hombres de negocios que acompañaron al canciller de Alemania, Angela Merkel, en su viaje a Buenos Aires.

El Presidente ha exhibido como respuesta a esta inquietud la presencia del gobernador de Entre Ríos, Sergio Bordet, a la que también había planeado sumar la del gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, quien debió quedarse en su provincia a causa del cierre del ingenio San Isidro. Ese paso es parte de un largo camino –“Todo viaje, por largo que sea, empieza por un solo paso”, Lao Tse– por desandar en pos de alcanzar ese estado de convivencia y coincidencia que reclaman los inversores. 

Ánimos. 

El transcurrir de este enero ha tensado las cosas de tal manera que la posibilidad de lograr esos acuerdos luce aún lejana. Hay que ser claros: ninguna de esas posibilidades de acuerdo incluye al kirchnerismo. Todo lo que anida allí es resentimiento y ánimo de revancha. Sea dicho con todas las letras: en el universo K lo que importa –lo único que de verdad importa– es que el Gobierno caiga. El último estándar te de ese pensamiento fue la frase del ex ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Zaffaroni, en la que abogaba por la finalización del Gobierno. Aun cuando no sea original, es necesario insistir con esto: de haber dicho esto un dirigente opositor durante el kirchnerato, habría sido inmediatamente acusado de ser destituyente. 

Comodoro Py. 

Febrero será un mes caliente. Terminada la feria judicial, ese será el ámbito por el cual sucederán hechos de alto impacto político. A estas horas, esa es la expectativa en lo referente a las causas judiciales que perturban hoy seriamente a una buena par te de la dirigencia sindical.

La dinámica de los hechos ha dado pie a una coincidencia peculiar: la causa judicial que involucra a un verdadero peso pesado como Hugo Moyano se da en el tiempo en el que comienzan a desarrollarse las paritarias. En el Gobierno anida ya la convicción de que, para enfrentar una trama tan compleja como esta, no es lo más conveniente contar con un ministro de Trabajo debilitado. Y ese es el problema que hoy representa Jorge Triaca.

El affaire de la empleada doméstica que trabajaba en la quinta de la familia –a quien, además de insultarla de un modo descalificante, se la tuvo durante largo tiempo en negro y se la contrató en el Sindicato Obreros Marítimos Unidos (SOMU), que estaba bajo la intervención del Ministerio de Trabajo – lo ha afectado severamente.

Ninguna de las acciones defensivas y de respaldo que hasta aquí ha intentado el Gobierno ha sido efectivas. Y es lógico, porque la situación del ministro es insostenible, especialmente para un gobierno que tiene el discurso del compromiso que despliega la actual administración. 

Problemas. 

Es verdad que ningún presidente entrega a un ministro por presión mediática u opositora. Esto forma parte del ABC de la política. “El gordo es uno de los funcionarios más queridos en el gabinete. Es un buen profesional y una buena persona. Pero Macri está realmente enojado y dolido con él”, se sincera una voz que conoce la realidad interna del Gobierno. A eso se agrega otro problema: no hay nadie de igual envergadura política para reemplazarlo.

En algunos otros países del mundo, un ministro envuelto en un caso así no tiene otra opción que renunciar. Puertas adentro, en el oficialismo hay muchos que comparten este pensamiento. Es que, para el estándar ético que propone Cambiemos, el episodio que involucra al ministro no debería tener otro camino que la renuncia.

Y por supuesto que, en atención a la conflictiva relación que se viene entre el Gobierno y la dirigencia sindical a propósito de la negociación paritaria y las derivaciones de las investigaciones judiciales que comprometen en estos momentos a Hugo y a Pablo Moyano, Triaca representa un problema. Por todas estas cosas es que la ida y vuelta sobre su suerte aún no está definido. Habrá que esperar el regreso del Presidente. 

Impunes. 

Las causas judiciales contra varios caciques sindicales habrán de continuar. En el ámbito de la dirigencia gremial hay un submundo dentro del cual algunos han construido verdaderos feudos. Habitan también en ese universo quienes se han convertido en prósperos empresarios. Balcedo no es el único. Son situaciones conocidas desde hace muchos años. Y a pesar de un sinfín de denuncias, permaneció inmune –tal vez la palabra debería ser “impune”– a cualquier investigación judicial. La pregunta, pues, es: ¿por qué ahora? La respuesta es una: el temor de jueces y fiscales de sufrir represalias por parte del poder político en los tiempos en que gobernó el peronismo.

Encrucijada. 

La dirigencia sindical debería pensar y analizar detalladamente la encrucijada que enfrenta a la hora de responder a estas denuncias. Si la respuesta es el patoterismo, no hará más que sumar descrédito frente a amplios sectores de una sociedad harta de esas prácticas. “La violencia es el miedo a las ideas de los demás” (Mahatma Gandhi).




domingo, 11 de diciembre de 2016

Macri abrió las puertas… @dealgunamaenra...

Macri abrió las puertas…

Sergio Massa: No pasarán. Dibujo Pablo Temes.

Tres errores del Gobierno habilitaron la jugada de Massa apuntando a la carrera presidencialista.

© Escrito por Nelson Castro el domingo 11/12/2016 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

En las filas parlamentarias de Cambiemos hay quienes apuntan a la ingenuidad de Marcos Peña –aunque no suele ser una característica suya– y otros se quejan por lo bajo de la austeridad de la propuesta del proyecto de ley de Ganancias. “Es lo que se podía otorgar sin alterar demasiado el castigado costo fiscal, pero sabemos que tuvo sabor a poco”, aseguró un diputado que conoce el juego de la bancada oficialista. Inmediatamente, desvían la atención a la “irresponsabilidad” de Sergio Massa (impulsor del proyecto que fue votado por amplia mayoría) y a parte del PJ, que acompañó con aplausos la movida. 

“Del FpV no podíamos esperar otra cosa, durante su gestión evitaron cualquier tipo de modificaciones a Ganancias, ahora nos quieren complicar. Pero ellos no tienen nada que perder, no hubo efecto sorpresa y nadie les va a ir a pedir explicaciones. El caso de Massa es muy distinto”, continuó la misma fuente.

Deconstrucción.

El enojo con el líder del Frente Renovador se hizo explícito, desde la boca del propio Presidente. “Impostor” y, entre líneas, desagradecido, al no comprender el cambio que el propio Macri le proponía como cabeza de una oposición responsable y que había iniciado con su inclusión en el viaje al Foro de Davos a comienzos de 2016. 

Una de las espadas del Frente Renovador asegura: “Somos una oposición constructiva, pero eso no quita que tengamos que marcarle los errores al oficialismo o votar leyes de espaldas a la gente. El que prometió en campaña eliminar el impuesto al trabajo fue él, por eso le duele quedar mal parado y que otros se acerquen más a ese compromiso. 

El tiempo dirá si habrá un costo político para Sergio, el que está intentando instalar la versión de una alianza con el peronismo cristinista es el propio Gobierno”. Lo cierto es que Massa ha jugado al filo y tuvo que evitar fotos y dar explicaciones.

Ante la andanada de críticas por parte del oficialismo, desde la CGT advirtieron que “confían en un proyecto de ley con respaldo legislativo de fuerte valor institucional, y aseguraron que un posible veto presidencial dejaría muy mal parado al Presidente de cara a las elecciones del año próximo. Ya no se trata de Sergio Massa, lo que está en juego es el salario de miles de trabajadores. Si veta el proyecto, pierde las elecciones”. 

Desde la CTA, aseguran que “una medida impopular podría tener consecuencias en la calle”.

En el Gobierno esperan el regreso de Rogelio Frigerio para sumarlo a la negociación con los gobernadores de cara a lo que pueda suceder en el Senado. Pero aquí hay al menos dos problemas: por un lado, un gran número de senadores, sobre todo en provincias del norte, que no responden a sus jefes provinciales y, por el otro, si el jefe del Interior llegara a un acuerdo parcial y Macri acudiera al veto, podría dejarlo muy mal parado. 

Mientras tanto, la estrategia oficial es aprovechar el acuerdo opositor con Massa y el kirchnerismo a la cabeza para ligar al PJ a la vieja política y seguir sosteniendo que el equipo amarillo es la única fuente de un verdadero cambio.

Los errores de gestión del actual gobierno son, a veces, increíbles por lo obvios. Tres han sido relevantes a lo largo de su primer año de gestión por lo obvio de sus consecuencias. El primero fue la designación por medio de un decreto de los dos nuevos miembros de la Corte Suprema, doctores Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz. El segundo, el aumento de las tarifas de gas sin la previa realización de las correspondientes audiencias públicas que ordena la Constitución Nacional. El tercero acaba de ocurrir en la primera semana de este mes. 

Fue el envío del proyecto de ley de aumento al mínimo no imponible sobre los sueldos. “A quién se le pudo haber ocurrido mandar un proyecto de esta envergadura al Congreso cuando el Gobierno sabe que de ninguna manera teníamos los votos tanto para imponerlo como para frenar cualquiera de los proyectos de la oposición”, vociferaba un diputado clave de Cambiemos en la agitada madrugada del miércoles que pasó. Lo que el oficialismo debió haber hecho fue incluir la modificación de este tributo dentro del paquete de leyes que acompanñó el proyecto de ley de presupuesto. “En ese caso, hubiéramos podido negociar todo junto con los gobernadores, lo que nos hubiera permitido darle al tema un enfoque más técnico y no político, como terminó sucediendo”, explicó con fastidio otro diputado de Cambiemos.

Al proceder en la forma en que lo hizo, el Gobierno le dejó abierta una puerta gigante por la que se coló una oposición variopinta y desmembrada con diferentes intenciones, todas de índole principalmente política. Para Sergio Massa, abocado a su proyecto de candidatura presidencial en 2019, fue una oportunidad para llevar agua para su molino. Para el Frente para la Victoria, en cambio, fue un momento de revancha propicio para dañar al Gobierno, obsesión que persigue a Cristina Fernández de Kirchner y a sus acólitos desde el momento mismo en que dejaron el poder.

Culpar a China. 

El Gobierno enfrentó la dramática y caótica sesión que se desarrolló en la madrugada del miércoles sin ninguna capacidad de reacción por parte de sus funcionarios. Que el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que es el funcionario con mejor diálogo con los gobernadores, estuviera en China demuestra el amateurismo con el que se encaró tan delicado tema.

La foto de esa tarde durante la conferencia de prensa que brindaron los opositores luego de llegar al acuerdo que enfureció al Presidente perdurará en la memoria de muchos por lo increíble de su composición. 

Ver a legisladores del Frente Renovador compartiendo la escena con el ex ministro de Economía Axel Kicillof y con el jefe del bloque de diputados del Frente para la Victoria, Héctor Recalde, dejó pasmados a muchos. No fue casual que allí no hubiese estado Massa. Habrá que ver si al final de esta movida todo esto le suma o le resta.

Producción periodística: Santiago Serra.



sábado, 23 de enero de 2016

Foro de Davos 2016... @dealgunamanera...

El negro panorama para el empleo que pronostica el Foro de Davos…


Al menos 7 millones de empleos pueden perderse en los próximos cinco años por las transformaciones que la Economía mundial va a padecer y que el Foro Económico Mundial denomina “cuarta revolución industrial”.

© Publicado el miércoles 20/01/2016 por la Revista Cambio 16 de la Ciudad de Madrid, España.

Este miércoles comienza el Foro de Davos y sus investigadores han presentado un informe en el que se analizan las transformaciones que la economía mundial y el mercado de trabajo padecerán en el próximo lustro.

El estudio afirma que a causa de la automatización se perderán el mundo unos siete millones de empleos “de oficina”. El estudio predice el desarrollo en las áreas de inteligencia artificial, robótica, nanotecnología e impresión 3D.

Esta transformación provocará que algunos empleos sean superfluos e innecesarios, pero al mismo tiempo abrirá la oportunidad a otra gama de empleos. Es por ello que los economistas que firman el estudio advierten que esta pérdida se compensará con la creación de otros 2 millones de nuevos empleos en las áreas de computación, ingeniería, arquitectura y matemática, aunque cinco millones de empleos se perderán para siempre.

La entidad basa su análisis en decenas de entrevistas a directores de recursos humanos de una quincena de países que cuentan con el 65% del mercado laboral mundial. “Sin una acción urgente y específica para organizar la transición y contar con trabajadores con la formación necesaria, los gobiernos tendrán que lidiar con más desempleo y más desigualdad”, indicó, citado en el comunicado, Klaus Schwab, director del Foro.

La pérdida de empleos afectará casi a la par a mujeres (48%) y a hombres (52%). Sin embargo, un análisis más específico muestra que por cada cinco empleos perdidos para las mujeres, sólo se creará uno para ellas. Mientras que por cada tres empleos perdidos, los hombres obtendrán uno, subraya el estudio.

El Foro, en alerta

Más de 40 jefes de Estado y de Gobierno han empezado a llegar a la localidad de Davos, en los Alpes suizos, para participar en la 46 edición del Foro Económico Mundial, marcado por medidas de seguridad mayores que en años anteriores ante la amenaza terrorista.

La crisis de los refugiados, las tendencias migratorias y la amenaza terrorista, por una parte; y la economía mundial, de la otra, son los ejes principales del extenso programa de los cuatro días de reuniones.

Esta cita anual es considerada única en su género al hacer posible que durante cuatro días coincidan jefes de Estado, ministros y otras autoridades de más de cien países con 1.500 magnates y ejecutivos de las compañías más importantes de 25 sectores e industrias.

Los presidentes de Argentina, Mauricio Macri, de Colombia, Juan Manuel Santos, de México, Enrique Peña Nieto, y de Perú, Ollanta Humala, entre otros, asisten a la cita, en la que además participará, por ejemplo, el ministro brasileño de Hacienda, Nelson Barbosa, o la directora del FMI, Christine Lagarde.

El Foro de Davos ofrece así una tribuna sin igual tanto para hacer llegar mensajes políticos a una audiencia mundial, como para que los gobiernos expongan en reuniones privadas con inversores los atractivos de sus países.

El inicio de las reuniones, que se prolongarán hasta el próximo día 23, ha sido precedido por la divulgación por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI) de datos claves que confirman que la economía mundial crecerá menos de los esperado, 3,4 %, en lugar del 3,6% previsto anteriormente.

Los pronósticos del FMI apuntan además a que la recesión se prolongará en Latinoamérica por segundo año consecutivo en 2016, con una contracción estimada del 0,3 %, debido a la profunda recesión de Brasil, cuya economía caerá un 3,5 % este año.

Por el contrario, el Fondo revisó al alza las previsiones de crecimiento para España, hasta un 2,7% en 2016 y un 2,3% en 2017, dos y una décima más, respectivamente, a pesar de una incertidumbre política que el organismo espera ver “pronto” resuelta.

El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, y los presidentes del Santander, Ana botín, y el BBVA, Francisco González, son algunos de los asistentes españoles más destacados en el foro.

Los datos del Fondo coinciden con la que ha hecho China de su propia economía, al revelar que creció un 6,9% en 2015, la tasa más baja de crecimiento en 25 años, una noticia que de inmediato ha enfriado aún más a los inversores.

La situación de China, la segunda economía del mundo tras la estadounidense, y su impacto a escala global serán motivo de debates diarios durante el Foro, donde el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, hará previsiones para la Eurozona.

La evolución el sector energético, la posibilidad de prevenir futuros shocks económicos, la transformación de las finanzas, los cambios que sigue imponiendo la revolución tecnológica y la expansión de internet y las perspectivas de las economías emergentes, serán otros temas que se propondrán al selecto público del Foro Económico Mundial.