domingo, 9 de enero de 2022

Es indio, creó el algoritmo por el cual existen las videollamadas y vive en Tucumán… @dealgunamaneraok...

Es indio, creó el algoritmo por el cual existen las videollamadas y vive en Tucumán…

Nasir Ahmed y su esposa Quelita caminando por Tucumán, donde viven. Captura.

Pocos saben que Nasir Ahmed, un ingeniero indio reside con su esposa en Argentina. La historia de su "invención" fue reflejada en la serie "This is Us".

Publicado el sábado 08/01/2022 por el Diario Popular de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos.

Quienes hayan tenido la posibilidad de ver la temporada 5 de la serie "This is us" o sólo se habrán emocionado con la historia de esta familia estadounidense tan particular, sino que quizá también lo hayan hecho con la de Nasir Ahmed. 

En el capítulo 8, titulado "In the room" se cuenta el caso de de este ingeniero indio que estudió en Estados Unidos y cuyo trabajo acabó -años después- ayudando a la humanidad. 

Fue el autor principal de un algoritmo que -mediante su aplicación- permitió enviar imágenes por computadora o realizar las ahora tan tradicionales videollamadas, que vivieron su pico durante 2020 en pleno aislamiento.

 

Lo curioso del caso es que Ahmed está casado con Quelita, que es argentina, y viven en Tucumán, donde pasan desapercibidos. Hasta ahora. 

Al ver su historia en la serie, el realizador y publicitario argentino Gastón Bigio decidió buscarlo y realizarle una de las primeras entrevistas grabadas; no sólo lo visitó en su casa de Yerba Buena sino que le compartió mensajes de la gente que -al ver el capítulo de "This is us"- le agradece su esfuerzo y dedicación por una creación que los acercó a sus familiares en plena pandemia.

 


El breve documental muestra también la historia de su esposa, quien no oculta la admiración y orgullo que siente por su marido, a quien no le importó nunca el reconocimiento académico sino el de la gente común. 

El video se viralizó en los últimos días en redes sociales y es una buena oportunidad para conocer a un personaje tan particular y único como la de su algoritmo. Un auténtico y merecido homenaje.



sábado, 8 de enero de 2022

Buques y aeronaves de la Armada continúan realizando tareas de Vigilancia y Control del Mar Argentino… @dealgunamaneraok...

Buques y aeronaves de la Armada continúan realizando tareas de Vigilancia y Control del Mar Argentino…


Se trata de los patrulleros Oceánicos A.R.A. Bouchard (P-51) y A.R.A. Piedrabuena (P-52), que junto a un avión B200F realizan tareas de vigilancia y el control de los espacios marítimos de jurisdicción nacional.

Publicado el jueves 23/12/2021 por Periódico Digital Gaceta Marinera de la Ciudad de Punta Alta, Provincia de Buenos Aires, República de los Argentinos.

En virtud de la reducción de la afluencia de buques pesqueros de distintas nacionalidades que navegan desde la boca oriental del estrecho de Magallanes en demanda de altamar, a través del Mar Argentino, los patrulleros oceánicos A.R.A. Bouchard (P-51) (POBD) y A.R.A. Piedrabuena (P-52) (POPB), dependientes de la División Patrullado Marítimo (DVPM), luego de efectuar un encuentro en el mar, realizan patrullas en la zona de mayor concentración actual lindante con el limite exterior de nuestra Zona Económica Exclusiva, garantizando la vigilancia y control de los recursos naturales de nuestros espacios marítimos de jurisdicción nacional.


Asimismo, una aeronave B-200 perteneciente a la Escuadrilla Aeronaval de Vigilancia Marítima, dependientes de la Fuerza Aeronaval N°º1 con asiento en Punta Indio, desplegada desde la Base Aeronaval Almirante Zar en Trelew, realiza sobrevuelos a la flota pesquera, en coordinación con los patrulleros oceánicos, manteniendo un monitoreo en cada uno de sus vuelos de la actividad que realizan los buques de distintas nacionalidades.



La tarea que realizan las unidades de la Armada permite la identificación de buques, entre los que se encuentran poteros, de arrastre y palangreros; los cuales ingresan al Mar Argentino en tránsito hacia alta mar.

Las patrullas se efectúan durante todo el año (a través de un convenio interministerial entre el Ministerio de Defensa y la cartera de Seguridad, en forma coordinada con la Prefectura Naval), dado que la presencia de estos buques es casi permanente en la zona. 


Relevo en el mar


El patrullero oceánico A.R.A. Bouchard (P-51) de la Armada Argentina, luego de una escala logística zarpó el jueves de la ciudad de Ushuaia, dando de esta manera finalizada su permanencia en la boca oriental del Estrecho de Magallanes; la cual tenía como el fin de identificar y acompañar a los buques que ingresan al Mar Argentino en su tránsito hacia la milla 200, los cuales utilizan ese espacio como paso marítimo desde el Océano Pacifico al Atlántico. 


Durante su navegación, el POBD efectuó un encuentro en el mar con el aviso A.R.A. Estrecho de San Carlos (A-22) (AVES), el cual fue destacado para reemplazarlo como buque de estación en Ushuaia a fin de efectuar los relevos en los puestos de vigilancia y control del tráfico marítimo.



 

El POBD tomará puerto próximamente en la Base Naval Mar del Plata, siendo relevado en sus tareas de vigilancia y control del mar argentino por el POPB que continuará en tareas de patrulla.

 

En total, se llevan navegadas 245.000 millas en 146 días en el mar, cubriendo 685.000 millas cuadradas de espacio marítimo de jurisdicción nacional. En tanto, por aire se cubrieron 268.000 millas cuadradas, con unas 33 horas de vuelo.





Política sin calidad… @dealgunamaneraok...

Política sin calidad… 

‘Box Populi’... Juan D. Perón. Dibujo: Pablo Temes.  

Un problema del país es que oficialismo y oposición comparten la pobreza con que representan a la gente.

 

“Siempre es bueno contar con liderazgos que no se agoten en una sola persona. La diversidad de figuras capaces de sostener un liderazgo ejecutivo es una fortaleza de JXC. Luego la gente decidirá quién los representa mejor”.


La frase pronunciada en plena campaña de cara a las primarias pertenece a uno de los dirigentes de la provincia de Buenos Aires, pero por aquel entonces, todos en la coalición opositora repetían un eslógan similar con la convicción –ilusión en realidad– de que para el 2023 faltaba mucho tiempo y que las internas se aplacarían con un triunfo en las elecciones de medio término.

 

El triunfo llegó pero, lejos de amainar, la interna recrudeció. La división del radicalismo es solo una muestra de ello. Tanto es así que, hace apenas unos días, se modificó la conducción de la mesa nacional de Juntos por el Cambio que quedó conformada así: Mauricio Macri –listo para salir a jugar su “segundo tiempo”–Horacio Rodríguez Larreta, como jefe de Gobierno porteño; los titulares de la UCR, PRO, CC y el Peronismo Republicano; los gobernadores; los presidentes de los bloques e interbloques de diputados y senadores de los partidos miembro, en líneas generales. La ausencia de María Eugenia Vidal ya era un secreto a voces. Sin el cargo de gobernadora y con un año para el olvido, la ex mandataria ex orgullosamente bonaerense, no tenía ninguna chance de ocupar algún cargo de relevancia partidaria.

 

Dentro de la coalición opositora se molestan con su silencio respecto del último escándalo protagonizado por uno de los ministros de su gestión. La AFI reveló las imágenes del ex ministro de trabajo Marcelo Villegas expresando su deseo ante un grupo de empresarios de “armar una Gestapo” para terminar con los gremialistas. “MEV se expresó en duros términos por la derrota respecto a la reelección de los intendentes que tendrán una chance más de seguir al frente de sus municipios, pero no dijo nada de Villegas que era su ministro de Trabajo. 


El repudio debió haber sido inmediato. Se dilató y ahora sería un bluff por la falta de timing político. Hizo lo mismo cuando tuvo que definir su salto de la provincia de Buenos Aires a la Ciudad. Demoró tanto en dar una noticia controvertida que se la terminó devorando la expectativa que ella misma había generado” –aseguró en duros términos un dirigente bonaerense del espacio que supo tener peso dentro de su gobierno.

 

Lo de la restauración de la re-reelección de los intendentes bonaerenses marca que, en más de un aspecto, hay muchos dirigentes de No Tan Juntos por el Cambio que son iguales a los que pueblan la geografía política del Frente de Todos contra Todos.  

 

Pero los problemas de la oposición no se agotan en el radicalismo ni en Vidal. Sino en las disputas internas por el poder de cara a las presidenciales. Esa urgencia por resolver una interna todavía muy caliente los hace tropezar con errores de conducción política en todos los niveles. Son errores garrafales que termina pagando la gente.

 

El Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto oficialista de modificación del impuesto a los Bienes Personales por falta de cohesión y de estrategia política. Un calco de lo que ocurrió en Diputados. Posibles soluciones y excusas pueriles para traspiés que nunca deberían haber ocurrido. El senador Martín Lousteau aferrándose a la idea de que el quórum se había logrado pasado el tiempo reglamentario y ya, sobre la leche derramada, el liberal José Luis Espert convocando a una rebelión fiscal para boicotear el avance del Gobierno. El aumento de la alícuota del impuesto a los bienes personales va a afectar a mucha gente de clase media que ha hecho su patrimonio en base a mucho trabajo y esfuerzo.

 

En el Frente de Todos Contra Todos también se vive la fiebre de la interna, por eso festejaron a viva voz el amateurismo de sus rivales. “Nos daban por muertos y terminamos cerrando el año mejor de lo que cualquiera esperaba y con una victoria importante en el Congreso” –se escuchó decir en el entorno de un envalentonado Alberto Fernández.

 

El año cerró sin haber alcanzado el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que es imprescindible para que la Argentina recupere la posibilidad del acceso al financiamiento internacional.

 

La nueva ola de la pandemia causada por el covid-19 expone –día tras día– las incongruencias del Gobierno. Las desvaídas conferencias de prensa de la ministra de Salud, Carla Vizzotti constituyen un aporte notable a la confusión general. Desde ayer, rige en el país el pasaporte sanitario.

 

Nadie en el ámbito del Ministerio se tomó la molestia de preparar una campaña de información clara y sostenida para ilustrar a la ciudadanía sobre cómo, por qué y para qué usarlo. Lo mismo viene aconteciendo con el tema de los autotesteos, un instrumento lleno de grises al cual la mala comunicación oficial logra con gran éxito hacer aún más gris. Uno de los puntos confusos es el precio al público, que representa una sideral diferencia con el precio de costo.

 

Los que piensan mal –y aciertan–, no dejan de sospechar acerca de la existencia de un posible negociado. Las “grisuras” no terminan ahí sino que se extienden a la inexplicable diferencia entre la cantidad de vacunas distribuidas y las aplicadas, algo que a más de un año de haber comenzado la vacunación nunca pudo ser enmendado.

 

Los hechos de estos días demuestran que la Argentina tiene un grave problema con la calidad de su representación política que abarca tanto al oficialismo como a la oposición. “Cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecen pierden el respeto”. (Georg Lichtenberg).





domingo, 26 de diciembre de 2021

Macri, ¿es o se hace?... @dealgunamaneraok...

 Macri, ¿es o se hace?... 

Mauricio Macri. Fotografía: Franco Fafasuli

Las conclusiones del informe del FMI sobre el préstamos de USD 44 mil millones de 2018 fueron tan duras que, tal vez, lo lógico, hubiera sido que el ex presidente dijera algo sobre el asunto.

Escrito por Ernesto Tenembaum el domingo 26/12/2012 y publicado por el Portal de Noticias Infobae de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos. 

Desde el momento en que inició su gobierno, Mauricio Macri estableció un modelo económico con todas las condiciones para generar una crisis muy seria. Luego, cuando ya estaba en medio del estallido, malgastó un préstamo de dimensiones gigantescas que le había sido otorgado para frenar esa crisis. Esas dos conclusiones no fueron parte de un discurso de Cristina Kirchner, ni de Nicolás Maduro, ni de Alberto Fernández. Esta vez no fue un izquierdista, ni un populista, ni un kirchnerista ni ninguna persona que estuviera interesada en decir “ah, pero Macri”, cada vez que alguien critica al gobierno actual. Al contrario: fueron los equipos técnicos del Fondo Monetario Internacional, en general integrados por economistas de una ortodoxia bastante poco flexible, quienes cuestionaron de este modo a la gestión presidencial de Macri. Las conclusiones fueron tan duras que, tal vez, lo lógico, hubiera sido que el ex presidente dijera algo sobre el asunto. ¿Enloqueció el FMI o Macri hizo todo realmente mal? La reacción de Macri, como se verá a continuación, habilita a formular preguntas relevantes sobre algunas de sus cualidades personales.

El documento emitido por el Fondo Monetario Internacional esta semana, como parte de un proceso habitual de auditoría, es muy claro al adjudicarle al gobierno de Cambiemos una responsabilidad central en la crisis que estalló en 2018. Hay dos frases, en ese sentido, que lo explican bien. 

“El Gobierno elegido a fines del 2015 rápidamente abrió la cuenta de capital y tomó créditos fuera del país, mientras adoptaba un enfoque gradual para abordar los desequilibrios económicos -especialmente el déficit fiscal- preparando el escenario para un sudden stop”.


(N. del A.: Sudden Stop, o freno súbito, es como se denomina en Economía a una situación en la que, de manera sorpresiva, los capitales huyen de un país y eso provoca una crisis muy rápida y profunda).

 

La segunda frase del Fondo, se refiere al 2018, cuando Macri ya había recibido el crédito:

 

”Una temprana operación de deuda, combinada con la reintroducción de medidas de gerenciamiento del flujo de capitales podrían haber robustecido el programa”. En palabras más sencillas: al recibir el dinero del Fondo, el Gobierno debería haber defendido las reservas mediante la implantación de nuevas medidas de control de cambios y la renegociación de la deuda adquirida desde 2015.

 

Los dos momentos en los que se detiene el documento del Fondo merecen un debate en detalle. Ya antes de la asunción de Macri, muchos economistas de primera línea señalaron su preocupación por la manera en que liberó el cepo: uno de ellos fue Carlos Melconian, que no es precisamente un populista. Es que está muy estudiado que esos procesos que se apoyan en capitales golondrina son muy frágiles. Pero el segundo señalamiento es especialmente sorprendente. Si, a mediados de 2018, cuando empieza a recibir dinero del fondo, Macri hubiera establecido controles de cambio, podría haber defendido las reservas sin que el dólar volara por el aire. Eso hubiera evitado el brote inflacionario y él habría tenido más chances de permanecer en el poder luego de 2019. ¿Por qué no lo hizo?

 

Sus enemigos más duros creen que Macri llegó al Gobierno para hacer lo que hizo: generar ganancias impensadas para el mundo financiero. La participación de muchos funcionarios que provenían del sector financiero -Nicolás Dujovne, Luis Caputo, Alfonso Prat Gay, entre otros- y la cercanía de otros, que defendían la solidez del programa económico mientras batían récords en colocación de deuda –el ex titular del HSBC, Gabriel Martino, por ejemplo- habilita a pensar que esa mirada al menos tiene un punto. Pero, ¿un líder político es capaz de suicidarse en función de esos supuestos intereses que defiende?

 

Otras interpretaciones sostienen que Macri y su entorno estaban presos de un esquema ideológico muy poco flexible, que le impedía tomar medidas racionales en un momento de crisis, aun cuando esas medidas fueran defendidas por el Fondo Monetario, o fueran claves para su propia supervivencia. Otros piensan que Macri no quería romper un contrato electoral en cuyo centro figuraba la liberación del cepo cambiario.

 

Para despejar dudas, era necesaria la palabra del ex presidente.

 

Macri tuvo dos participaciones públicas durante esta misma semana. La primera fue antes del pronunciamiento del FMI, en un reportaje de antología con Baby Etchecopar, donde dijo que “hasta el peor de los planeros” quiere que sus hijos reciban buena educación. En esa nota hay tres referencias indirectas al contenido del documento que, horas más tarde, emitiría el Fondo Monetario.

 

Macri junto a la ex directora del FMI Christine Lagarde y el ex ministro de Hacienda Nicolás Dujovne 


Macri dice:

 

-”Cuando administro lo que no es mío he sido siempre muy cuidadoso. Por eso festejé el sobrenombre que me puso el Bambino Veira pero que hizo famoso Diego Armando Maradona, ¿te acordás?... ’el cartonero Baez’, pero te quiero decir que yo siento que cuando uno administra lo que no es es de uno, uno tiene que ser muy cuidadoso. Es fácil ser generoso con la plata ajena. Yo invito, vení, con plata que no es tuya. ¡¡¡Se generoso con la tuya viejo!!!”.

 

Y luego:

 

-”Si hay mentira, y entre nosotros hay mentira, no hay confianza. Y si no hay confianza, no sucede nada en la vida. Vos no vas a ir a un lugar al que alguien te convoca si no confiás. Imaginate invertir, imaginate poner una fábrica en un país donde vos no confiás porque sentís que los dirigentes que conducen el país te van a robar la fábrica”.

 

Finalmente:

 

-“La crisis se produjo porque los inversores huyeron ante la posibilidad de que regresara el populismo”.

 

Las tres frases son realmente discutibles. Un Presidente que toma montañas de deuda de corto plazo y a altísima tasa de interés no es alguien que cuida el dinero que no es suyo. Mucho menos si, luego, cuando recibe un préstamo que él no va a pagar personalmente, lo entrega a los fondos de inversión en lugar de usarlo para fortalecer reservas. Si, además, durante su Gobierno se produce una crisis de confianza, y los capitales huyen despavoridos, tal vez no sea el más indicado para pontificar sobre la desconfianza que generan otros. Finalmente, Macri se confunde, por decirlo de manera educada: la crisis empezó en marzo del 2018, luego de su victoria electoral de 2017. Casi nadie creía en ese momento que volvería el peronismo al poder. El populismo no tuvo nada que ver. Por momentos, parece que Macri no sabe quién es Macri o disimula quién es Macri o buscas excusas infantiles o no tiene un registro muy claro de las cosas que hizo y las consecuencias que tuvieron para el país.

 

¿Entonces?

 

Entonces, nada.

 

Macri prefiere hablar de otros temas.

 

Horas después del documento del Fondo, el ex presidente distribuyó un saludo por fin de año donde, una vez más, apeló al “ah, pero Fernández”. El texto del saludo es un balance lapidario de los dos años de gobierno actual. Cada frase de ese texto podría ser discutida o relativizada (eso de la economía “completamente destruida”, por ejemplo). Pero, en todo caso, es la herramienta que Macri utiliza para sintonizar con un sector importante de la sociedad que está muy enojado con el Gobierno. Tiene todo el derecho a hacerlo. En todo el mundo hay líderes con discursos indignados, lineales, binarios, que estimulan la bronca contra el Gobierno de turno, destacan únicamente sus barbaridades, ocultan sus logros y así. Es la lógica de la polarización, que se ha demostrado rentable para quienes la usan, aunque no tanto para sus países. En muchos textos teóricos, esos discursos simplistas son enmarcados dentro del concepto de “populismo”. Pero, ¿y lo otro?

 

Patricia Bullrich, Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta y Jorge Macri

Esto, que podría ser una discusión histórica, tiene una actualidad inquietante. Porque, como están las cosas, es posible que Macri vuelva al poder, o que lo hagan personas muy influenciadas por el mismo pensamiento económico. Macri falló allí donde creía que era más fácil. Pero no fue solo él. Todo un equipo de economistas –el “mundo de la ortodoxia”, como se lo podría definir- fue parte del problema. Explicaban que todo era sencillo, que ellos sabían cómo funcionaban las cosas, que no había nada de qué preocuparse. Mucha gente les marcaba: que la deuda era demasiada, que el interés era alto, que ante el menor estornudo todo estallaría. Pero ellos que no, que calma, que la confianza, que solo se trataba de dejar de emitir y ajustar.

 

Todo estalló.

 

Pasó hace muy poco tiempo.

 

El documento del Fondo amplifica un debate imprescindible que, sin embargo, casi no existe en el entorno de los discípulos del ex presidente, aquellos que se ilusionan con acceder al poder en 2023. Por eso, es toda una advertencia: sería bastante esperable que las mismas ideas, y muchas de las mismas personas, produzcan los mismos resultados.



  

País de Fantasía... @dealgunamaneraok...

Señales de amateurismo en medio de un río revuelto…

 

Delivery Klauss (Lo pedís, lo tenés). Dibujo: Pablo Temes

Oficialismo y oposición acumularon pasos en falso en los últimos días, y siguen divididos por duras internas. 

Escrito por Nelson Castro el sábado 25/11/2021 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República de los Argentinos. 

La Cámara de Diputados de la Nación volvió a dejar vencedores y vencidos esta semana. Juntos por el Cambio había llamado a una sesión especial para avanzar con un proyecto propio que permitía la baja del mínimo no imponible del impuesto a los Bienes Personales. Pero el viento a favor que sopló con fuerza luego de la sesión del presupuesto 2022 no fue suficiente y terminaron perdiendo por un voto ante el Frente de Todos contra Todos que impuso el proyecto oficialista. Se adujo un poco de todo. 

El propio Martín Tetaz enumeró algunas de las falencias opositoras que cabalgaron entre la falta de coordinación y de viveza política. Entre los casos resonantes por las ausencias se contaron tests positivos de coronavirus –única causa atendible– casamientos de familiares en Alemania y, aunque resulte difícil de creer, un viaje relámpago a Disney. 

La protagonista fue la diputada cordobesa Gabriela Brouwer de Koning, del sector radical que se separó de sus pares para formar un nuevo bloque y que se identifica con el senador Martín Lousteau. El blooper desató la furia dentro de la oposición y, muy especialmente, dentro de los liderados por Mario Negri que aprovecharon para darle una mano de cal al también miembro de Evolución Radical Rodrigo De Loredo: “La actividad parlamentaria no es para cualquiera, lo de Brouwer de Koning es de un amateurismo total -en el mejor de los casos- pero también es hora de marcar la falta de profesionalismo de Rodrigo De Loredo en sus intervenciones en la sesión de presupuesto queriendo argumentar cuando no se podía e intentando diferenciarse de nosotros en cada intervención como si fuera un chico” -se le reprochó cerca del radicalismo tradicional. 

La irresponsabilidad de los diputados opositores tendrá consecuencias muy concretas que afectará a la clase media con la que el ensañamiento del kirchnerismo no cesa nunca.  

En el PRO las fiestas tampoco se pasarán en paz. La reelección indefinida de los intendentes y los vericuetos de la ley sancionada en tiempos de María Eugenia Vidal ha generado ya nuevos y vehementes cruces. El martes habrá sesiones extraordinarias en la Legislatura Bonaerense para tratar el proyecto de Presupuesto 2022, la Ley Impositiva y la reforma de la Ley de Ministerios. 

Diferentes fuentes indican que podrían colarse en la agenda las modificaciones en la ley que limita las reelecciones de los jefes comunales para asegurarse que el primer mandato a considerar sea el iniciado en 2019 y, de esta manera, poder aspirar a una nueva reelección. En este aspecto coinciden tanto intendentes que responden a la Rosada como a la oposición. Nada nuevo bajo el sol.

A la hora de conservar privilegios los colores políticos se confunden en una grisura poco saludable para la democracia. 

En su mensaje, un canto a la hipocresía, el Presidente habló de una bonanza que no existe. 

En el oficialismo, reanimado tras la victoria legislativa de la semana, no cesan las peleas internas ni los intentos por destruir a JXC. Son varias las voces calificadas que han alertado sobre la posibilidad de una eventual salida a la luz de una denuncia complicando a uno de los ministros importantes durante la gestión de la ex gobernadora Vidal y, por ende, a ella misma. Los que conocen el tema hablan de escuchas encontradas en las cuevas de la Agencia Federal de Inteligencia, AFI. Habrá que estar atentos. De concretarse, sería una más de las tantas historias producto de la utilización política de los servicios de inteligencia, algo que este gobierno prometió terminar y, que como tantas otras cosas, no cumplió. 

En ese mismo tren de chicana permanente hay que ubicar la ida y vuelta generado por el crítico informe que el Fondo Monetario Internacional emitió sobre el crédito que le otorgó al país durante la gestión de Mauricio Macri. Ese crédito sobrepasó las normas de procedimientos habituales del organismo. La sintonía política entre Macri y Donald Trump fue un elemento clave para su concreción. La necesidad de apelar al FMI fue consecuencia de los errores cometidos en ese gobierno. Pero es también cierto, que el endeudamiento que dejó el kirchnerato fue un salvavidas de plomo que Cristina Fernández de Kirchner le dejó a su sucesor. 

El informe del Fondo no sólo es autocrítico y crítico de la gestión económica del macrismo sino que también lo es del actual gobierno y, en definitiva, de toda la clase política. Queda claro la falta de confianza que la Argentina genera en el mundo y del papel clave que juega esa confianza en la posibilidad de encarar la búsqueda de las soluciones que se requieren para lograr la consolidación de una economía lo suficientemente sólida que permita acabar con los insoportables niveles de pobreza que hoy padecen millones de ciudadanos. 

Donde no hubo mayores divisiones fue en la decisión de los legisladores de otorgar un bono de 22 mil pesos a los empleados del Congreso. La medida irrita no porque no lo necesiten para enfrentar lo que significa vivir en un país con una inflación del 50% sino por el bochornoso privilegio que ello representa frente al miserable bono de 8.000 pesos otorgados a los jubilados que ganan la mínima. 

El mensaje con musicalización que dio el Presidente por cadena nacional en la noche del 24 fue un canto a la hipocresía y a la fantasía. Alberto Fernández habló de una bonanza que no existe y de un llamado a la unidad que, en los hechos, contraría día a día. Nada que sorprenda. Al fin y al cabo es lo que hace habitualmente un mentiroso.