La vida es un tablero de ajedrez en donde los cuadros blancos son los días y los cuadros negros son las noches... Nosotros, somos las piezas que vamos de aquí para allá para caer al final en el cuadro de la nada... De Alguna Manera... Una Alternativa…
Un equipo interdisciplinario realiza una
investigación sin precedentes en las Islas Malvinas…
El objetivo principal es reconstruir
históricamente los combates en Monte Longdon y Monte Tumbledown, escenarios
críticos del conflicto del Atlántico Sur en 1982.
Un
destacado equipo interdisciplinario liderado por la antropóloga social e
investigadora Dra. Rosana Guber (CONICET) y el CT (R) VGM Héctor Tessey (UNDEF)
está llevando a cabo una investigación sin precedentes en las Islas Malvinas,
con el objetivo principal de reconstruir históricamente los combates en Monte
Longdon y Monte Tumbledown, escenarios críticos del conflicto del Atlántico Sur
en 1982.
Este proyecto forma parte de la iniciativa «Los rostros y la savia de la Guerra de
Malvinas«, seleccionada en la convocatoria “PICTO 2021
Malvinas, Antártida y Atlántico Sur”, respaldada por el Fondo para la
Investigación Científica y Tecnológica (FONCyT) y la Agencia Nacional de
Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación y la
Secretaría de Malvinas, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
En palabras de Tessey, «esta empresa interdisciplinaria
profundiza en los aspectos humanos, logísticos y estratégicos de la Guerra de
Malvinas, presentando una comprensión matizada de este capítulo histórico».
Este enfoque integrador busca trascender las limitaciones de las narrativas
históricas convencionales, utilizando tanto datos tangibles como testimonios
personales para construir una visión más completa y objetiva de los eventos.
La fase de campo del proyecto fue esencial para alcanzar este
objetivo. Tessey destaca: «Hemos registrado meticulosamente cada rasgo
relevante en Monte Longdon y Monte Tumbledown, proporcionando una base sólida
para una reconstrucción histórica más completa y objetiva de los combates en
estas áreas críticas». La combinación de tecnología avanzada, incluidos vuelos
con drones y fotogrametría, ha permitido un mapeo exhaustivo que servirá como
insumo principal para comprender la dinámica de los combates.
Tessey enfatiza: «La participación activa de veteranos como el
entonces teniente Raúl Castañeda y el entonces cabo Gustavo Pedemonte ha
enriquecido significativamente la investigación con sus relatos detallados,
proporcionando una dimensión humana única al proyecto. Se trabajó en la
reconstrucción de sus combates, sin ellos hubiera sido imposible. Y para la
UNDEF y los estudios militares será central poder reflexionar a partir de esta
investigación acerca del ejercicio mando en combate y la logística en combate’.
Si bien el respaldo financiero inicial provino del Ministerio de
Ciencia, Tecnología e Innovación, el proyecto cuenta con la colaboración y el
apoyo logístico del Estado Mayor General del Ejército y el Comando Antártico y
apoyos financieros privados, como así también la donación de los pasajes aéreos
del tramo Aeroparque-Río Gallegos y regreso, por parte del senador nacional
Mariano Recalde.
La visión a largo plazo del equipo incluye la creación de un
informe final y la elaboración de un libro que consolidará los resultados
obtenidos. Además, se proyecta la construcción de un diorama del Monte Longdon
con un presupuesto estimado de un millón trescientos mil pesos, que se
presentará en el Regimiento 7 en el aniversario del combate en junio de 2024.
Este proyecto no solo representa un hito en la investigación
sobre la Guerra de Malvinas, sino que también destaca la importancia de la
colaboración entre científicos sociales y veteranos, subrayando el compromiso
continuo de Argentina en comprender y contextualizar su historia reciente
mediante la investigación científica y la preservación de la memoria histórica.
Finalmente, el equipo se integra con arqueólogos de guerra
(UBA-UNR), antropólogos (UNSAM-UNE), y Veteranos de Guerra (UNDEF). Se sumaron
a estos trabajos de campo un equipo de periodista, camarógrafo e historiadora
de la UNLa y un equipo de periodista y camarógrafo de la Editorial TAEDA.
Anoten, muchachos opositores. Compañero Mauri 15 4437
2XXX (el resto lo paso por línea privada). Ernesto Sanz: 15 2659 0XXX. Larreta:
15 4381 2XXX. Lousteau: 15 3890 7XXX. El de Lilita no lo paso porque no lo
tengo. Creo que no usa porque en general no escucha a nadie. Como otra que yo
sé.
Ahora, razonemos. Desde el domingo a la noche no paran de discutir sobre la
conveniencia, la oportunidad o el derecho de Lousteau a competir en un
ballotage. Tiraron mil argumentos. Que la estrategia del frente electoral, que
los 20 puntos, que la Constitución lo exige, que es irremontable, que no
perdamos tiempo, etc. etc. Inclusive el ministro Montenegro llegó a decir
cuántas escuelas se pueden hacer con la plata que cuesta el ballotage, sin que
ni siquiera haya aparecido una sola ambulancia con dos enfermeros y un chaleco
de fuerza para trasladarlo al manicomio más cercano. Con el mismo argumento,
podríamos ahorrarnos el Congreso Nacional ya que sólo se usa para aprobar todo
lo que a Ella se le ocurre sin tocar una coma.
Sigamos el razonamiento. Se supone que con el Compañero Mauri, con Sanz y
con Lilita, estamos todos bajo el mismo paraguas electoral. Se supone que
aunque competimos entre nosotros sanamente, en el final del camino se vamo’ a
encontrar para enfrentar al Compañero Lancha. Y se supone que le queremos
ganar. Quiero creer que tenemos un plan. Una estrategia.
La pregunta del millón es: ¿No hablaron lo del ballotage antes de las
elecciones? ¿No tienen los celulares? ¿No se les ocurrió sentarse en un bar y
acordar, por ejemplo: “Che, si sacas más del 46% el pibe se baja y si sacas
menos del 46% el pibe te la pelea y nadie lo discute”? ¿De verdad no se
hablaron antes? ¿A nadie se le ocurrió que iba a pasar esto? ¿No leyeron las
encuestas? ¿Que creían, que ganaba Recalde?
¿Cómo puede ser que hayan improvisado este papelón que ya lleva una semana?
Suerte que los kirchneristas son tan burros como ustedes (no voy a volver a
usar el “nosotros” hasta que me demuestren que se lo merecen). Es más, yo aviso
que si repiten otro error como éste, con el Compañero Lancha les vamos a ganar
de punta a punta. Putos.
¿Tampoco acordaron si hacen o no hacen debates? ¿Ahora se ponen a
discutirlo? ¿No lo tenían hablado? Si no querían hacer debate, ¿no podían
buscar una excusa mejor? Decir, como dice Larreta, que él sólo debate con los
vecinos, barrio por barrio, manzana por manzana y casa por casa, suena un poco
raro. Son como 1.000.000 de timbres en dos semanas. Casi 70.000 reuniones por
día. No digo que sea imposible, pero… tendrían que arrancar bien tempranito,
apurarse y aun así la veo difícil.
Hagan un debate, papá. Se supone que ustedes son los demócratas y nosotros,
los kirchneristas, somos los neofascistas autoritarios. Pero hay que
demostrarlo.
Reconozco que del lado de Scioli también tenemos mucho ruido. De hecho, el
kirchnerismo le viene haciendo bullying desde que se conocieron con el
Compañero Jefe, también conocido como Compañero Centro Cultural o Compañero
Polideportivo.
Acá cabe aclarar que cuando uno dice Compañero Polideportivo incluye a
todos los polideportivos del país que llevan el nombre de Néstor Kirchner: el
de Ezeiza, el de Miramar, el de Recreo en Santa Fe, el de Roldán en Santa Fe,
el de Santa Cruz, el de Baradero, el de General Lamadrid, el de Anillaco (que seguramente
incluye los vestuarios Carlos Menem) y el de Santa Bárbara en Jujuy. Juro por
la Rotonda Néstor Kirchner de Villa Gobernador Gálvez que este listado es
absolutamente cierto.
No contabilizo como polideportivo al Canódromo Néstor Kirchner de Las Heras
en Santa Cruz, donde se realizan las carreras de perros (juro que es verdad).
Ponerle Néstor Kirchner a una pista para perros es una humillación que no se
merece el prócer que un 9 de julio de 2003 logró la verdadera Independencia de
la Patria, tal como nos acaba de contar Ella. De la epopeya emancipadora a una
carrera de salchichas y chihuahuas, hay una degradación inaceptable.
Pero volviendo al tema Scioli, el tipo al menos tenía un plan. ¿Había que
comerse un pepino? Se comía un pepino. ¿Había que comerse 20? Se los comía
también. Se comió todos los pepinos que hicieron falta sin hacerle asco a
ninguno y logró lo que quería: ser el único candidato oficial. El tema de la
dignidad, después vemos. Siempre hay tiempo para repararla.
La única realidad es que si llega a conseguir los votos suficientes, él se
queda con la Rosada y la que se va a casita es Ella. Evidentemente el plan
Scioli fue mucho más exitoso que el plan K.
Por supuesto, que tanto el Compañero Lancha como el Compañero Mauri, o
cualquiera que gane, debería hacerle un monumento al Compañero Massa (sigo sin
sacarle el apodo, debe ser por eso que se le complicaron los números). Gracias
a él salvamos la Constitución y no hubo reformas ni reelecciones indefinidas.
Una pena, con lo que nos gusta el fascismo a los argentinos.
El plan de Scioli incluyó el cambio de película. De los creadores de
“Scioli no me representa” ahora llega “Scioli nos va a sorprender”
protagonizada por Forster, D’Elía, Barone y gran elenco. Son los famosos “taxis
kirchneristas”: los comprás por poca plata y se pasan de nafta a GNC con sólo
tocar una perillita.
Sin embargo, debajo de Scioli, el plan se emputece un poco. Recién arrancó
la campaña por la gobernación de Buenos Aires y entre Aníbal
Fernández/Sabbatella y Julián Domínguez/Spinoza ya se están tirando con bolsas
de cocaína. A este ritmo, en un mes estos tipos van a estar protagonizando la
remake de “Scarface”.
Mientras tanto, por afuera y de la mano de Massa, se va instalando Felipe
Solá, el mejor candidato que tenemos nosotros, los peronistas. Ojo. ¿Y si el
tipo les complica el plan? ¿Ya lo pensaron?
Pregunta para el PRO: si en las PASO a Massa le va flojito, ¿ya saben qué
van a hacer? ¿Hay algo hablado? ¿O vamos a improvisar?
Según Macri, se denomina Círculo Rojo al conjunto de personas que leen
todos los diarios, escuchan todas las radios, miran todos los programas
políticos, se informan de todo lo que pasa, opinan, debaten, influyen, exigen,
aconsejan. En fin, unos estúpidos.
Yo sólo voy a dar un humilde consejito. Se acercan las PASO. Es hora de ir
hablándose entre todos. Pídanse los celulares antes de que sea demasiado tarde.
Ya lo dijo Antoine de Saint-Exupéry: un objetivo sin un plan no es más que un
deseo.
Mientras La Gente Se Empobrece, Ellos Se Enriquecen...
Otra vez Cristina Kirchner presentó su declaración jurada y dejó en claro
que sigue creciendo su patrimonio, el declarado, claro.
La primera mandataria declaró bienes por $ 64.629.891 en el ejercicio de
2014, lo cual significa un 16% más que el año anterior. Ello significa que
creció su fortuna $ 9.325.097 sólo durante el año pasado.
Lo mismo ocurre con Amado Boudou, cuya fortuna creció un 17% en apenas un
año. Eso sin mencionar a Mariano Recalde, el dirigente de La Cámpora más rico,
quien tiene $6 millones.
¿Cómo es que los políticos se enriquecen mientras la sociedad se empobrece?
¿Cuál es el secreto de “su éxito”?
Mientras no lo expliquen, uno bien puede presumir que el dinero fue mal
habido, producto de sus cargos con sueldos millonarios e infinitas
posibilidades de hacer negocios ilegales.
Cuando a Cristina Kirchner le preguntaron cómo hizo su fortuna, en el año
2012, aseguró que fue como “abogada exitosa”. Sin embargo, no existe una sola
persona que admita haber sido representada por ella como profesional.
Tampoco se ha inscripto jamás en ningún Colegio Público de Abogados de ningún
lugar de la Argentina. ¿Entonces, cómo hizo su dinero?
El caso de Boudou es más complicado: imputado por la Justicia por
enriquecimiento ilícito gracias a una investigación de este medio, el
vicepresidente jamás podrá explicar cómo logró comprarse autos de alta gama y
motos importadas cual si fueran golosinas con un salario del Estado de poco más
de 300 mil pesos al año.
La conclusión es simple: pareciera que los políticos llegan al poder, no
para ayudar a la gente, sino para salvarse ellos mismos. Está probado que lo
logran con gran eficacia.
Siempre se hace
posible observar la mitad del vaso lleno, pero ciertas sobreactuaciones denotan
vacíos difíciles de disimular.
Con las
celebraciones que se mostraron en el PRO, en ECO y en el FpV algún desprevenido
puede llegar a creer que todos vencieron. Cierto es que siempre se hace posible
observar la mitad del vaso lleno, pero ciertas sobreactuaciones denotan vacíos
difíciles de disimular.
Está claro que
Mauricio Macri es el gran triunfador de la elección porteña. Tras ocho años de
gestión, su fuerza sumó en las PASO casi el 50% de los votos. Ganó con holgura
su candidato, un Horacio Rodríguez Larreta que hace apenas un año estaba muy
por debajo en la intención de voto de Gabriela Michetti, una de las grandes
perdedoras de este domingo.
Igual, Macri no
debería confundirse respecto a que esta foto capitalina se reproduzca en el
resto del país. Ni siquiera tendría que creer que es extensible al otro lado de
la General Paz o del Riachuelo, donde se acumula la mayor concentración de
votantes de toda la Argentina. Allí, con baile y globos no basta.
ECO también
disfrutó haber obtenido el segundo puesto. Martín Lousteau se proclamó entre
rulos y sonrisas como el principal candidato opositor al PRO. No era momento de
explicar por parte del exministro de Economía de Cristina Kirchner cómo ser
oposición al macrismo en la Ciudad y aliado en la presidencial.
Acompañado con
Elisa Carrió y Ernesto Sanz, Lousteau pasó con un aprobado su debut electoral,
con una fuerza que no se sabe bien qué es, lo que valoriza su performance.
Pero todas las
medallas escenográficas se las lleva el kirchnerismo. Salvo Cristina, todos
dijeron “presente” la noche del domingo en el comando del Frente para la
Victoria, para ensalzar la obtención del tercer puesto.
Junto a Mariano
Recalde y los candidatos K derrotados por él, aparecieron Scioli, Randazzo,
Zannini, la cúpula de La Cámpora, caciques sindicales y siguen las firmas.
Curioso que insistan con el tono épico, tan afín a la cultura kirchnerista,
cuando este domingo apenas fueron respaldados por 2 de cada 10 porteños. Acaso
ellos vean algo que el común de los mortales no vemos.
¿Y Massa? Menos mal
que tiene rápido su relanzamiento de campaña, el viernes 1 de mayo. Su
candidato en la Ciudad, Guillermo Nielsen, ni siquiera consiguió el piso del
1,5% de los votos para poder competir el 5 de julio. Otro papelón que no
contribuye a su carrera, últimamente plagada de tropiezos. Tantos, que fue al
único presidenciable que no le dio el domingo por la noche ni para aparecer.
Con lo que le gusta.
Detrás del rol de la Presidenta, de su hijo Máximo y otros candidatos
posibles está la definición de la relación del poder K con el peronismo.
La Presidenta transmite señales de que espera tener un futuro en la
política nacional. Estos días también ha sido noticia la aparición mediática de
su hijo Máximo, quien hasta ahora parecía preferir un bajo perfil, aunque las
circunstancias llevaron a levantarlo, pero no por su propia iniciativa.
Todo eso es absolutamente esperable. Todos nuestros ex presidentes han
imaginado y buscado su permanencia en posiciones de protagonismo político.
Alfonsín inicialmente coqueteó con una reforma constitucional que finalmente
consiguió años después, en beneficio del presidente Menem.
Desde el llano, Alfonsín buscó incansablemente posiciones de influencia en
su partido y en la política nacional. Menem todavía es senador nacional, y
últimamente se ha oído hablar de sus supuestas aspiraciones a la gobernación de
su provincia. Duhalde insiste en buscar protagonismo aun cuando sus
posibilidades de influir son mínimas. La resistencia de los líderes políticos a
aceptar que su ciclo concluye es un dato casi constante de la política
argentina. ¿Por qué Cristina Fernández de Kirchner habría de ser diferente?
Es bastante claro en casos como los mencionados que los dirigentes que
buscaron permanecer en posiciones de poder no tomaron demasiado en cuenta sus
efectivas posibilidades de lograr la influencia que buscaban. Y tampoco
midieron las consecuencias negativas –aun desde la perspectiva de los intereses
de sus propios grupos políticos– que esas acciones podían acarrear. No hay
fundamento alguno para pensar que eso podría ser distinto ahora.
Otra cosa es preguntarse cómo la Presidenta traza la línea demarcatoria
entre el “nosotros” y los otros. La actividad política contiene siempre una
tensión que se agudiza cuando un liderazgo ha cumplido un ciclo: el líder tiende
a imaginar que su lugar seguirá siendo ése, el de líder o conductor, pero parte
de sus seguidores considera que el futuro de su grupo requiere que el liderazgo
sea renovado.
Los seguidores deben manejar esa difícil tensión entre, por un lado, su
percepción de lo que más conviene al grupo –y a sí mismos, por cierto, porque
cada uno está donde está movido por una combinación de aspiraciones colectivas
y aspiraciones personales–, y por otro lado, su lealtad al líder.
El peronismo ha contenido, desde sus orígenes, dos líneas contrapuestas:
una “verticalista”, otra “pluralista”. En el balance de sus 12 años de
protagonismo en la política nacional, los años de Néstor Kirchner dieron al
kirchnerismo el vigor de lo plural y los años de Cristina lo llevaron a la
consistencia de lo vertical. Aunque rara vez lo expresen abiertamente, muchos
cuadros de la primera y la segunda línea del actual gobierno provienen de un
peronismo con raíces históricas más diversas que el kirchnerismo, vieron la luz
antes que éste hiciera su aparición en la historia reciente. Hoy, la
candidatura de Scioli encarna a esa tradición plural; es una opción para
avanzar hacia la reabsorción del kirchnerismo en la tradición peronista.
El futuro que la Presidenta está persiguiendo ¿a quienes incluye, más allá
de su círculo más estrecho de seguidores? A veces actúa en nombre de lo que hoy
ella misma representa, a veces en nombre de una acepción más amplia de lo que
es el “kirchnerismo”, y a veces en nombre del peronismo, como quiera que se lo
defina. No está del todo claro si la entrada en escena de Máximo busca reforzar
el círculo estrecho o es más bien un camino para hacerlo parte de una corriente
más amplia que reinserte al kirchnerismo en el peronismo.
O, en otros términos, si se trata de un desafío a parte de la tropa que hoy
se siente cercana al Gobierno o es más bien un intento de sumarlo a ella, si va
a competir por un lugar al que aspiran peronistas de vieja data que hoy se
sienten parte del oficialismo o si va a integrarse a ellos y acompañarlos
respetando títulos y trayectorias.
Todo eso se expresa en el interrogante que muchos análisis expresan
diariamente. ¿Apoyará la Presidenta a Scioli si éste mantiene posibilidades
ciertas de ganar la elección presidencial, o preferirá más bien a un candidato
perdedor surgido de entre quienes carecen de un posicionamiento propio?
Disyuntiva. Se están configurando dos escenarios del futuro político
inmediato con respecto a la relación entre el actual kirchnerismo y el
tradicional peronismo: en un escenario se mantienen separados, en el otro
vuelven a integrarse.
Por otra parte, la política es siempre una mezcla de poder y de
representación. En la actual coyuntura, en el kirchnerismo Scioli es el más
acabado producto de la capacidad de representar. La candidatura de Recalde
–para tomar un caso opuesto– es un típico producto de la verticalidad, de
ejercicio del poder.
En esos términos, tal vez estemos en un buen momento: la representación,
como fenómeno espontáneo de la sociedad, está generando límites al ejercicio
del poder. Scioli es candidato, y representa a quienes representa –tanto a
votantes como a dirigentes a lo largo y ancho del país– por gravitación propia.
También Massa, a quien nadie ungió candidato haciendo uso del poder. También
Macri.
Y con Macri sucede algo más: con algo de asombro y bastante de curiosidad,
el público sigue estos días la saga de Gabriela Michetti, que desafía a su
líder con el capital de sus propios votos. Al menos en este momento, la
tradición argentina de candidatos seleccionados a dedo está siendo bastante
neutralizada. Habrá que ver, entonces, cuál es la suerte que correrán los que
se ganaron un lugar a la sombra del poder y de la militancia organizada, como La
Cámpora y su inspirador, Máximo.
Disponen de poder, pero en materia de acumular representación todavía no
han mostrado demasiado; pero es cierto que es temprano para llegar a una
conclusión.
Otra cosa es Cristina de Kirchner. Aunque se habla mucho de su poder y su
vocación verticalista, lo cierto es que ella se respalda tanto en sus recursos
y capacidades de ejercer el poder como en su bastante notable capacidad
representativa.
Tras el cierre
de las listas de precandidatos en las Paso en la ciudad de Buenos Aires, trece
frentes electorales presentarán a 22 postulantes para ocupar el lugar de
Mauricio Macri. El PRO va con tres nombres, mientras que el FPV presentó cinco
candidatos. La sorpresa la dio la inclusión de Ivo Cutzarida en un frente de
los hermanos Rodríguez Saá. Foto: http://www.minutouno.com
Pese a que la Capital es terreno difícil para el
peronismo y para el FpV, Recalde ya le pelea el segundo lugar a Lousteau. La
Presidenta tiene un nivel de imagen positiva superior a su resultado electoral
de 2011.
A un mes de las PASO porteñas, Horacio Rodríguez Larreta
parece imponerse a Gabriela Michetti, mientras que Martín Lousteau y Mariano
Recalde se aprestan a disputar el segundo lugar. En un distrito siempre adverso
al peronismo y al Frente para la Victoria (FpV), la Presidenta logra una imagen
positiva del 35 por ciento, una cifra más que aceptable y por encima de lo que
obtuvo cuando fue candidata presidencial en 2011.
Las
conclusiones surgen de una encuesta realizada por la consultora Ibarómetro,
fundada por Doris Capurro y que ahora dirige el sociólogo Ignacio Ramírez. En
total se entrevistaron a través del teléfono a 1400 personas residentes en la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, respetándose las proporciones por edad, sexo y
nivel económico-social.
Como se
sabe, el PRO parte como favorito y en las PASO se da un fuerte choque entre
Rodríguez Larreta y Michetti. Para Ibarómetro hay ventaja clara del primero
sobre la segunda, aunque hay otros sondeos que ubican a Michetti en la
delantera. “Si bien la encuesta fue realizada antes del pronunciamiento de
Mauricio Macri a favor de Rodríguez Larreta –analiza Ramírez–, el estudio
revela una inclinación hacia la candidatura de Rodríguez Larreta, tendencia que
probablemente se acentúe. La ventaja del jefe de Gabinete revela los motivos
sobre los que descansa la evaluación positiva del PRO, más fundada en un
vínculo racional asociado con el desempeño de gestión que con un contrato moral
o una identificación afectiva y/o ideológica. Algunos atributos de Gabriela
Michetti pueden ser valorados, pero no conciernen al núcleo constitutivo de
razones por las cuales se vota al PRO.”
“Si
bien se sabe que la Ciudad de Buenos Aires no ha sido un distrito de fácil
abordaje para el kirchnerisno –continúa Ramírez–, la encuesta ilumina la
existencia de un segmento importante de adhesión al gobierno nacional, 35 por
ciento, cercano al desempeño electoral que tuvo CFK en la Ciudad en el 2011. Es
decir, el techo del kirchnerismo en la Ciudad tiene mayor altura de lo indicado
por muchas caracterizaciones, apoyadas más en mistificaciones que sobre
evidencia empírica.”
Por
último, según Ibarómetro, Recalde es el candidato del FpV mejor ubicado y le
pelea el segundo puesto a Lousteau. Para Ramírez, “Recalde es el que consigue
el mejor rendimiento, lo cual desinfla la idea según la cual la vinculación con
La Cámpora deteriora necesariamente la competitividad de un candidato. Recalde
consigue un empate técnico con Martín Lousteau, aunque habría que considerar
que el primero se encuentra en su piso electoral, con bastante terreno por
avanzar, mientras que el candidato de ECO pareciera estar más cerca de su
techo, ya que parte con un nivel más alto de instalación –que se irá
emparejando– y tiene un reducido espacio discursivo para potenciar su posicionamiento.”
“Por
otra parte, es muy probable que el crecimiento del PRO avance en detrimento de
Lousteau. La ventaja de Mariano Recalde por sobre los otros precandidatos
medidos, sumado al hecho de que la segunda precandidata mejor ubicada sea
Gabriela Cerruti, es un síntoma de la sed de recambio de liderazgos que hay
entre los votantes porteños más cercanos al kirchnerismo.”
Desperté en medio de la noche, sudado y casi a los gritos. Soñé con ella,
vestida de negro, con su máscara Lancôme de 3 centímetros de profundidad,
que se me acercaba y me decía “Lucca, I´m your mother”. Fue horrible.
Sé que usted me había pedido que, cuando tuviera situaciones difíciles de
manejar, la llame sin importar el horario. Tendría que haberme advertido que
no lo haga si son las 4,30 de la mañana, pero quédese tranquila, que esta
madrugada tuvo la oportunidad de decírmelo con tanto énfasis que me quedó
claro.
Le cuento. Todo comenzó cuando fui invitado a la inauguración de la
ampliación de las obras en aeroparque. Emocionado, llegué y me encontré con
Moria Casán, que desde la causita penal en Paraguay, pasó de bancar a los
milicos a ser más kirchnerista que stencil del Nestornauta. Entre el público
divisé a dos docentes bonaerenses. Fue fácil identificarlos: estaban junto a
Anamá Ferreyra guardándose en las carteras la mayor cantidad de sanguches de
miga que podían.
Finalmente, Cris llegó rengueando, acompañada de Rafael Bielsa -avisen
a Missing Children que apareció-, Floppy Randazzo, Julio De Vido, el genio del
déficit Mariano Recalde, el hobbit Kicillof y Eduardo Eurnekián.
La Presi contó que el Aeroparque Jorge Newbery es muy importante para el
país porque ella lo usa mucho desde 1995, que fue privatizado en 1997 -esa
parece que no les molesta- y que desde la recuperación económica, creció de la
mano de Aerolíneas Argentinas.
Mientras una de las maestras me preguntaba si me iba a comer o no el folleto
que me entregaron en la entrada, Cristina le contaba a Eurnekián que él pudo
ganar mucha plata gracias a toda la que le pagó Aerolíneas Argentinas por el
aumento de las frecuencias de vuelo, no sólo en Aeroparque, sino en todas las
demás terminales aeroportuarias que administra el empresario. O sea, todas las
del país.
Qué se yo, me resultó raro. Porque lo curioso del asunto, es que Eurnekián
concentra el mayor de los monopolios que tiene la Argentina: administra la
totalidad de los aeropuertos del Sistema Nacional y su empresita está
reconocida como la red de aeropuertos más grande del mundo. Y todo gracias a
una concesión hecha durante el segundo mandato de Carlos Menem de un modo un
tanto raro, a tal punto que a Jorge Rodríguez -por entonces jefe de Gabinete-
lo procesaron por favorecer a Eurnekián. No sé bien con qué, pero doy por
sentado que no fue a cambio de caramelos Media Hora.
Y así fue como la Presi enumeró casi todos los aspectos en los que creció
Aerolíneas. Y digo casi, porque se le pasó el punto en el que más creció: el
déficit.
Luego, contó que “cuando uno llega a Ezeiza o a Aeroparque, se da cuenta que
no está en un país de cabotaje, está en un país de nivel internacional”, y que
“uno se da cuenta como es el país por dos cosas: la modernidad de las
instalaciones y el sistema de autopistas”. Y la modernidad argentina se puede
notar por los kilómetros de villas miserias que ofician de bienvenida a lo
largo de la Ricchieri.
Eso sí que es internacional: salir de un aeropuerto y
jugar a adivinar si se está en Argentina o en Kenia.
Con la cosmovisión que le permite su vida de multimillonaria terrateniente,
la Presi tiró que “las clases medias bajas se pueden permitir viajar en avión”.
Intenté analizar el dato, pero justo me interrumpió otra vez la maestra para
preguntarme si no me sobraba un sobrecito de mayonesa.
Mal momento el mío, porque justo Cristina empezó a hablar de los alfajores
que repartían en los vuelos de Aerolíneas. “Se quejan, pero en los vuelos de
cabotaje hoy no te dan nada y, si querés algo, tenés que pagar en efectivo”.
Sí, me llamó la atención, dado que en un vuelo de tres horas a Ushuaia, los de
LAN me dieron gaseosas, alfajores y tostadas con mermelada y cuando viaje por
TAM hace cinco meses, en menos de dos horas y media me enchufaron una bandeja
de almuerzo con entrada, plato principal y postre. Le quise comentar a la
maestra que me acompañaba pero me dijo, con los ojos cerrados, que no la
interrumpiera, que estaba comiendo alfajores por telepatía.
Y mientras la maestra babeaba, la que viaja en el Tango 01 le contaba a los
que se mueven por Emirate Airways lo lindo que se viaja por Aerolíneas
Argentinas. Y todos aplaudían.
Eso no es todo. Como me quedé con ganas de más, ayer me di una vuelta por
Olivos. La primera impresión que me llevé fue que la militancia predica el
ajuste con el ejemplo: antes llenaban la Plaza de Mayo, después se juntaban a
tomar mate en Parque Lezama, luego pasaron a copar el living de la Rosada, y
ahora se conforman con el rincón trasero izquierdo del jardín de invierno de la
Quinta de Olivos.
Mientras pensaba si era realmente una buena idea hacer una cadena nacional
justo en el horario de Avenida Brasil, entre el público, hallé de infiltrados a
tres jubilados echándole mermelada a un pedazo de durlock que sobró de la
última reforma. Me dijeron que me quede tranquilo, que todos pensarán que
Virginia Lago se extendió demasiado en la presentación.
La idea era hablar de los parques industriales y los fondos destinados a los
mismos, aunque muchos sean terrenos baldíos alambrados. Tema de estudio de los
años kirchneristas debería ser el caso de Lomas de Zamora; un predio destinado
a Parque Industrial que desde 2008 es una villa que va de Camino Negro a Camino
de Cintura.
Obsesionada con los alfajores, por segundo día consecutivo la Presi mencionó
a ese obscuro objeto de deseo. Se quejó porque el dueño de Fantoche le llevó un
mini alfajor y no uno triple, mientras personal de seguridad forcejeaba con los
tres jubilados que quisieron abalanzarse sobre el único objeto sólido y
legalmente comestible que se hallaba en el lugar.
Ensañada con hablar de cosas que nadie entiende, anunció una nueva línea de
créditos para PyMes a siete años, con una tasa anual del 14%, a la cual
calificó de negativa, dando por sentado que ni en este año, ni en los próximos
tres siglos, hará algo para que la inflación baje.
Luego de que la seguridad notara que uno de los jubilados llamaba a Simón
mientras otro prendía un fueguito, los dejaron entrar de vuelta, justo cuando
Cristina contaba que en 2003, desde el helicóptero, se veía que en Puerto
Madero había sólo uno o dos edificios y que hoy no entra ni uno más. Ahí le
falló la visión estratégica, porque desde el helicóptero también puede ver que
en la Villa 31 no entra un ladrillo más, y sin embargo, siguen en permanente
expansión hacia arriba, en una clara competencia por lograr el rascacielos más
representativo de Argentina.
Tal como quien mira por la ventana del bar el desfile de pibes vendiendo
estampitas, Cristina toco de costado el tema de la quita de subsidios y nos
contó que todos los mortales pasaremos a pagar mucho más de tarifas, menos
aquellas empresas a las que les está regalando la guita -según sus propias
palabras- para que produzcan alfajores y tornillos. Por si no quedó claro,
remarcó que a las industrias no les tocarán un sólo pesito de los subsidios al
gas, y todo para que cuando la temperatura baje de los 15 grados, haya que
cerrar las fábricas para que la gente pueda prender la estufa.
Como si no estuviéramos al tanto del funcionamiento de El Modelo, la Presi
contó que el esfuerzo no lo hace ella, sino los argentinos que pagamos el 21%
de IVA. Al borde de las lágrimas dijo que “por ahí muchos no llegan al mínimo
no imponible de ganancias”, y lo hizo al día siguiente de que el Indec
anunciara que el 75% de los asalariados cobra menos de $6.500 pesos, que el 10%
de la población no llega a 9 mil, y que otro 10% hace lo que puede con 1.200
pesos. Le pregunté a unos de los jubilados qué le parecía la apreciación de la
mandataria, pero tenía la boca ocupada masticando uno de los potus del salón.
Y ahí pasó lo que nunca me esperé. Ni once años de kirchnerismo ni seis años
de discursos de Cristina me prepararon para ese momento. “Yo me siento la madre
del país, la madre de todos los Argentinos”, dijo Cristina, dejándome al borde
de un accidente cerebro vascular.
No sé cómo tomarlo ¿Me entiende? Me llené de confusiones. Ahora, cada vez
que un comentarista me dice hijo de puta siento que no me está faltando el
respeto a mí. Es como un golpe al ego. Aparte, cuando me mandan a la de mi
madre, no sé si ir Balvanera, a la Rosada, a Olivos o a Calafate.
Si bien ahora entiendo que el patrimonio de Cristina se puede justificar en
los 40 millones de regalos que recibe cada tercer domingo de octubre, también
me preocupa el tema de la sucesión. No, no estoy pensando en la muerte de
nadie, pero uno tiene que ser precavido. ¿Se imagina el quilombo que será una
división de bienes entre 40 millones de hermanos?
Después la Presi siguió con lo suyo y recordó que el país era un infierno
cuando Néstor asumió en 2003 y que Scioli puede dar fe de ello porque lo
acompañó como Vice. Scioli, justo Scioli, que venía de ser el secretario de
Turismo del gobierno anterior. ¿Entiende lo difícil que se me hizo digerir el
resto del discurso?
Mientras miraba, aturdido, como los tres jubilados se peleaban por el último
tallo de lo que alguna vez fue una planta, Cristina contaba que su madre, como
jubilada, pudo comprarse dos acondicionadores de aire para soportar el calor de
La Plata. Decir que los tres viejos estaban en otra, porque creo que pasaban a
mejor vida, que en el caso de ellos, sería literalmente una mejoría.
Si partimos de la base de que la propia madre de la Presidenta le tuvo que
hacer juicio al Anses -y lo ganó- creo que no dio el mejor de los ejemplos. O
en una de esas, en La Plata la jubilación alcanza para comprar dos
acondicionadores de aire, comer todos los días y contar con un helicóptero para
tomarse el palo cuando el agua empieza a subir.
Fueron muchas cosas para un mismo día. Hasta ayer, ayudaba a mi vieja a
llegar a fin de mes y ahora me encuentro con que mi mamá no es mi mamá, que mi
verdadera mamá es terrateniente, hotelera y multimillonaria estatal, y que mi
abuela es hincha de Gimnasia ¿Cómo no me voy a despertar de esa manera?
Usted seguro tiene algo para aconsej…si, ya sé que terminó la sesión, pero
no me puedo ir así. Miré si esta noche sueño con…¿300 pesos? ¿Qué pasó? Sí,
entiendo lo de las tarifas, pero Capitanich acaba de decir que eso no repercute
en la infl…sisi, la semana que viene a la misma hora. ¿Me baja a abrir? Bueno,
me fijo si está el portero…
Viernes. No cualquiera tiene el lujo de contar con una madre arquitecta
egipcia, papisa y exitosa abogada.