domingo, 16 de julio de 2023

Chicanas y Agresiones. Un espectáculo decadente... @dealgunamaneraok...

 Un espectáculo decadente…


Sin lugar a dudas estamos ante la campaña más pobre, desordenada y carente de contenido de los últimos 30 años. 

© Escrito por Nelson Castro el sábado 15/07/2023 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

En el círculo áulico que rodea al ministro de Economía había caras de alegría y un sentimiento de euforia el jueves tras la difusión del índice de inflación de junio. El 6% clavado sorprendió a propios y extraños. Por lo bajo, no fueron pocos los que en el Gobierno le bajaron el tono inmediatamente a la algazara. 

“En los bolsillos de la gente esto no hace ninguna diferencia”, se sinceraba un funcionario con contacto diario con la calle. Le asistía la razón. El índice de Precios al Consumidor toma como precios de referencia aquellos que el Gobierno congeló. El problema es que la disponibilidad de los productos que entran en ese acuerdo es siempre limitada. A muchísima gente se le hace literalmente imposible acceder a esa mercadería. Debe conformarse a comprar lo que encuentra a un valor que supera el de los precios acordados. Pero no sólo el bolsillo de la gente no guarda relación con la euforia gubernamental. Tampoco el dólar parece haber tomado nota de lo que el oficialismo presenta como una baja de la inflación. Los 27 pesos que aumentó el dólar blue en esta última semana, expresa no sólo las idas y vueltas para cerrar un acuerdo con el Fondo Monetario, sino también la vulnerabilidad de la economía argentina. Por más que el relato intenta mostrar lo contrario, todo está atado con alambres.

De nada de esto habla Sergio Massa en sus apariciones públicas. Es evidente que, aunque lo niegue, ya tiene puesto el traje de candidato y eso se deja ver en todo lo que hace. Piensa que con un sobreactuado despliegue de actos e inauguraciones todo se tapa. Esto es propio de los que se sienten en una posición de debilidad. Es la que hoy en día exhibe el ministro. Una de las consecuencias de tal debilidad es el sesgo que ha adquirido su campaña, basada principalmente en el ataque a sus adversarios. En el Gobierno han vuelto a echar mano al recurso del miedo para cooptar votos bajo pretexto de que si ellos no son gobierno, sobrevendrá la debacle.

Un Massa para cada gusto


¿Se puede estar aún peor? Todo lo que hay son afirmaciones negativas y acusaciones contra sus adversarios. Una campaña electoral pivota sobre esas premisas cuando no hay nada positivo que mostrarle a la sociedad. Es lo que le está pasando al oficialismo: no hay logros económicos; la inseguridad reina por doquier, la salud pública está colapsada, la educación pública con un deterioro imparable y el narcotráfico enseñoreado en extensas zonas del país. El nivel de desorden y decadencia que azota al país es fácilmente palpable en cada uno de los ámbitos de la vida diaria. La gente ya no puede más.

Massa está convencido de que, si en la interna de No tan 
Juntos por el Cambio se impusiera Patricia Bullrich, sus chances de ganar la elección en octubre aumentarán. Hacia ella apunta. Es la rival perfecta para polarizar en un eventual ballottage. La ideología siempre manda. En su entorno se esfuerzan por recordar las condiciones en las que asumió: “Sergio se hizo cargo de la Argentina cuando nadie más quería tomar el mando. Logró darle estabilidad a un gobierno que estaba terminado. Como dijo la vicepresidenta no arrugó y va para adelante, eso nadie lo puede negar”. La kirchnerización del tigrense tampoco es algo que se pueda negar. El ministro y candidato necesita impregnarse de kirchnerismo duro para evitar que esos votos terminen en manos de su competidor en la interna, Juan Grabois. Años atrás juró que no volvería a calzarse el traje K y que iba a “barrer con los ñoquis de La Cámpora”; ahora necesita convencer a todo su espacio que, nuevamente, es uno de ellos. La vice en funciones sabe que, por el momento, es la mejor carta que tiene en el mazo y no duda en elogiarlo públicamente aunque para ello deba taparse la nariz.

Camino largo y tedioso

La inauguración del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner es un episodio de esta campaña pobre en ideas que merece un capítulo aparte. La obra debió haber estado terminada mucho tiempo atrás. Pasaron al menos dos años de gastos innecesarios en materia energética que se traducen en más de 5 mil millones de dólares despilfarrados por la inoperancia. Hay además, una investigación muy bien documentada del colega de CNN Ignacio Grimaldi quien sacó a la luz reuniones secretas entre el Gobierno y empresarios de Techint meses antes de la licitación para la construcción del tramo final del gasoducto que terminó en manos de esa empresa. Las licitaciones en obra pública siempre fueron el talón de Aquiles del kirchnerismo y la puerta de entrada a los negocios propios y la corrupción. La Justicia deberá investigar estos últimos episodios.

En el acto inaugural se los vio “unidos y organizados”. Allí compartieron escena CFK, Alberto Fernández y el propio Sergio Massa para una simulación de puesta en marcha que fue sencillamente vergonzosa. Al día siguiente, comenzaron a circular los videos tomados por los verdaderos operarios y trabajadores del lugar que mostraban cómo se desmontaron los caños que luego fueron llevados en camiones con destino incierto. Todo fue una farsa para alimentar la campaña. Las explicaciones posteriores del Gobierno pasaron a formar parte del relato al que nos tienen acostumbrados.

Un tembladeral


La oposición tampoco fue capaz de dar una imagen superadora. Allí nadie tiene siquiera la intención de bajarle el tono a las disputas internas. Mucho menos la conciencia del daño que le están haciendo al proceso democrático lavando constantemente los trapitos al sol sin discutir ideas o proyectos de país que puedan poner a disposición de los votantes.


La ausencia de debate propiamente dicho, le quita a la campaña su razón de ser. El ciudadano deberá acudir a las urnas con muy poca información de calidad acerca de lo que realmente harán los candidatos que se disputan el poder. Sin más, lo que domina la escena es la agenda política –de los políticos– basada en la chicana, los personalismos y las agresiones que poco aportan a la esencia del proceso electoral.


La brecha que separa las preocupaciones de los ciudadanos de a pie con el espectáculo decadente que venden quienes aspiran a ocupar un cargo es abismal. Sin lugar a dudas estamos ante la campaña más pobre, desordenada y carente de contenido de los últimos 30 años. La dirigencia política toda, está en deuda con los argentinos –una vez más–.




   

sábado, 15 de julio de 2023

Torneo Binance 2023. Huracán 0 vs. Talleres de Córdoba 1... @dealgunamaneraok...

 Talleres le ganó a Huracán y evitó la consagración de River…


La "T" de Córdoba venció por 1-0 a Huracán y extendió un día la definición del título.

©Publicado el viernes 14/07/2023 por el Diario Jornada de la Ciudad de Trelew, provincia del Chubut, República Argentina.


Talleres de Córdoba venció hoy a Huracán por 1 a 0, en el partido válido por la 25º fecha de la Liga Profesional de Fútbol, y postergó así la consagración del líder River Plate que mañana deberá, al menos, empatar ante Estudiantes de La Plata en el Más Monumental para gritar campeón.

El delantero José Romero, a falta de 6 minutos, anotó el gol del triunfo cordobés en un estadio Tomás A. Ducó que se descargó con cánticos hacia el plantel y dirigentes por el mal momento futbolístico que atraviesa el "Globo".


Inclusive, los hinchas lanzaron un petardo que impactó al arquero Lucas Chaves, aunque sin mayores consecuencias.


Los dirigidos por Javier Gandolfi, de gran campaña, alcanzaron los 48 puntos para mantener la ilusión. El equipo de Barrio Jardín necesita que River no sume en lo que queda del torneo, ganar sus correspondientes partidos y superarlo en diferencia de gol (+27 frente a +19).


Huracán es la contracara: está penúltimo con 19 unidades y en zona de descenso por tabla anual. El Globo acumuló la cuarta derrota al hilo, acumula 15 cotejos sin festejos y no gana desde el pasado 28 de abril (2-1 a Arsenal).


Talleres logró su cometido en un partido discreto. El ingreso de Ramón Sosa por Valentín Depietri le dio mayor claridad en el juego y el aporte de Rodrigo Garro, en los minutos finales, resultó fundamental.


Garro aprovechó un grave error de Joaquín Novillo en su salida con pelota, quitó y asistió a Romero, quien definió ante un Chaves ya vencido.


La primera parte mostró un poco mejor a Talleres, con algunas aproximaciones a través de Diego Valoyes. El colombiano estuvo intratable ganándole la espalda a Guillermo Benítez, pero su rendimiento mermó con el correr de los minutos.


El segundo tiempo tuvo más de lo mismo. Huracán jugaba nervioso, consciente de la crisis que atraviesa, con reclamos varios al árbitro Fernando Echenique por agarrones en el área rival y Talleres recién encontró lo que buscaba sobre el final. Y tal vez haya sido un premio por no haber claudicado.


La "T" justificó el triunfo con tenencia de la pelota, mientras los hinchas de Huracán manifestaban su bronca por la campaña del equipo, que bajo la reciente llegada del entrenador Diego Martínez, aún no le encuentra la vuelta y se complica con el descenso.


En la próxima fecha, Talleres recibirá a Gimnasia y Esgrima La Plata, mientras Huracán visitará a Platense.



Síntesis:


Huracán:
0


Lucas Chaves; Guillermo Soto, Fernando Tobio, Joaquín Novillo y Guillermo Benítez; Santiago Hezze, Agostino Spina y Matías Nicolás Gómez; Juan Gauto, Matías Cóccaro y Walter Mazzantti. DT: Diego Martínez.


Talleres:
0


Guido Herrera; Gastón Benavídez, Matías Catalán, Tomás Palacios y Juan Portillo; Ulises Ortegoza y Rodrigo Villagra; Valentín Depietri, Diego Valoyes, Rodrigo Garro; Nahuel Bustos. DT: Javier Gandolfi.


Gol en el segundo tiempo:
39m. Romero (T)


Cambios en el segundo tiempo:
10m. Ramón Sosa por Depietri y Lucas Suárez por Palacios (T); 18m. Gabriel Gudiño por M. N. Gómez (H): 25m. Christian Oliva y José Romero por Ortegoza y Bustos (T); 29m. Santiago Luján por Spina (H); 37m. Nicolás Cordero por Cóccaro y Enzo Luna por Gauto (H); 49m. Matías Gómez por Garro (T).


Amonestados:
Matías N. Gómez, Tobio, Cóccaro (H); Palacios, Villagra, Ortegoza (T)


Árbitro:
Fernando Echenique


Estadio:
Tomás A. Ducó






Algo no hicieron correctamente señores... Recuerden que los "ciclos" se cumplen y eso es inexorable.


   

martes, 11 de julio de 2023

Torneo Binance 2023. Boca Juniors 1 vs. Huracán 0... @dealgunamaneraok...

Boca venció a Huracán y se subió al último puesto de Sudamericana...

El Xeneize venció por 1 a 0 al Globo, con un gol de Luis Vázquez a los 11 minutos del segundo tiempo, en un partido válido por la 24º fecha. 

© Publicado el domingo 09/07/2023 por el Diario Jornada de la Ciudad de Trelew, Provincia del Chubut, República Argentina.

Boca Juniors venció por 1 a 0 a Huracán, que se hunde en el descenso por Tabla Anual, con una buena actuación del equipo local y con gol de Luis Vázquez, una de las figuras de este partido de la 24ta. fecha de la Liga Profesional en la que el conjunto "xeneise" con estos tres puntos se subió al último puesto de la zona de clasificación a la Copa Sudamericana 2024.


Como en la novela del Dr. Jekyll y Míster Hyde, este Boca de Jorge Almirón tiene dos caras, una de local y otra de visitante, en la que nunca ganó desde su llegada, mostró esta noche su mejor versión.


El mismo equipo -con solo dos cambios-, que hace cuatro días en Santa Fe ante Unión no pateó un tiro al arco, hoy tuvo momentos de lucidez en su rendimiento, ayudado por el difícil momento de este Huracán en descenso por Tabla Anual y hace nueve fechas que no puede ganar.


Las figuras del lógico vencedor fueron su goleador, Vazquez, el juvenil Valentín Barco y Cristian Medina, su asistidor.


Desde el comienzo del encuentro los locales salieron a plantarse en el campo adversario.


Esta vez Almirón planteó un 4-4-2 para resolver la falta de extremos (siguen ausentes los lesionados Luca Langoni, Exequiel Zeballos y Norberto Briasco, el más recuperado que estuvo entre los suplentes y jugó los últimos minutos ante su exclub).


El técnico puso a Miguel Merentiel de extremo por el sector derecho del ataque a Vázquez de punta y por el otro lado a Barco como en los últimos partidos.


Huracán no encontraba la pelota en el medio - siente mucho la ausencia del fracturado Federico Fattori- y con el buen trabajo de Guillermo "Pol" Fernández, Medina y Varela, Boca era el dominador del juego.


A los 5 minutos una gran jugada de Barco por Izquierda dejó solo a Vázquez, que definió al cuerpo de Lucas Cháves.


Los de Diego Martinez no hacían pie ante un rival que a pesar de ser superior dejaba huecos en defensa que no eran aprovechados por su rival.


A los 34 minutos otra buena acción del "Colo" habilitó a Merentiel, que solo ante Cháves remató fuerte y muy alto.


En el final del primer tiempo, en la más clara de esa etapa, después de un córner, Frank Fabra encabezó una contra y se fue solo a lo largo de 20 metros mientras era corrido de atrás por el chileno Guillermo Soto, que no pudo impedir que el defensor colombiano estrellara el balón en el palo derecho del arco visitante, el rebote lo recogió el juvenil Barco, quien pateó de zurda en el travesaño y picó sobre la línea del arco.


Hubiese sido un acto de justicia para el que fue mejor en esta etapa.


En el segundo tiempo al buen juego, el ganador le agregó eficacia en la red.


Hasta que a los 11 minutos, en una buena intervención de Barco que habilitó a Medina, este con un pase "exquisito" le dio el gol a Vázquez para anotar el justo 1 a 0.


Después Boca fue graduando el ritmo, pero siempre con el control de juego.


A los 24 minutos, en una jugada fuera de contexto, tras un centro de Santiago Hezze, la pelota pegó en el brazo derecho de Marcelo Weigandt, pero el árbitro Nicolás Ramírez determinó que no hubo intención.


Almirón empezó a cuidar energías e hizo ingresar a Ezequiel Fernández, un volante, con un punta como Merentiel, y luego sacó a los más ovacionados: Vázquez, Barco y Medina.


Esta noche el "xeneize" saldó.una deuda con su juego, pero ahora se verá si la puede mantener cuando juegue el próximo domingo ante Gimnasia desde las 16.30, en La Plata.


Mientras que Huracán recibirá a Talleres, de Córdoba, el viernes desde las 21.30, ambos por la fecha 25 de la Liga Profesional.



Síntesis:

Boca Juniors: 1 

Sergio Romero; Marcelo Weigandt, Bruno Valdez, Nicolás Valentini y Frank Fabra; Guillermo Fernández, Alan Varela, Cristian Medina y Valentín Barco; Miguel Merentiel y Luis Vázquez. DT: Jorge Almirón.


Huracán: 0 

Lucas Chaves; Guillermo Soto, Fernando Tobio, Joaquín Novillo y Guillermo Benítez; Fernando Godoy y Santiago Hezze; Walter Mazzantti, Juan Gauto y Matías Gómez; Matías Cóccaro. DT: Diego Martínez.


Gol en el segundo tiempo: 11m. Vázquez (B).


Cambios en el segundo tiempo: 21m. Ezequiel Fernández por Merentiel (B), 24m. Gabriel Gudiño por Gómez (H); 33m. Nicolás Cordero por Cóccaro (H) u Jonás Acevedo por Mazzantti (H); 38m. Norberto Briasco por Barco (B), 41m. Juan Manuel García por Gauto (H) y 45m. Diego González por Medina (B).


Amonestados: Varela, Valentini, Ezequiel Fernández y Guillermo Fernández (B). Benítez (H).


Incidencia: 44m.del segundo tiempo expulsado Fernando Godoy (H).


Árbitro: Nicolás Ramírez.


VAR: Hernán Mastrángelo.


Estadio: La Bombonera.






   

domingo, 9 de julio de 2023

Un Massa para cada gusto… @dealgunamaneraok...

 Un Massa para cada gusto…


Ser o no ser, esa es la cuestión. Sergio Massa. Dibujo: Pablo Temes

La “kirchnerización” del ministro de Economía es una alerta para los empresarios que ven con buenos ojos su postulación.

© Escrito por Nelson Castro el sábado 08/07/2023 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, República Argentina.

Fue una puesta en escena como las que le gustan armar a Sergio Massa. Él ocupando la cabecera de la mesa, flanqueado a ambos lados por el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, un grupo de empresarios, que dócilmente aceptan ser tratados de extorsionadores, y sindicalistas del sector.

El que toma la palabra es el ministro de Economía –con breves intervenciones de los otros dos–, que desgrana una larga perorata con cara de circunstancia –es decir, enojo–, transmitida por cámaras propias instaladas en el despacho en donde se celebró esa reunión. Esa puesta en escena en la que aprovechó para, de paso, tirarle un palo al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, se completó con algunos títulos publicados en algunos medios en los que se decía que era Massa quien había levantado el paro. Nadie explicó por qué esa decisión del candidato presidencial del oficialismo de intervenir en el conflicto buscando una solución no se produjo en la tarde-noche del jueves, lo cual les hubiera evitado a cientos de miles de personas las penurias que tuvieron que padecer para poder llegar a sus trabajos, objetivo que muchos no alcanzaron.

Esta sobreactuación oportunista del exintendente de Tigre es una de las razones por las que muchos integrantes de la cúpula de La Cámpora, así como también militantes hacen escuchar su disgusto. Esa muchedumbre que navega por la orfandad que crea la ausencia de dirigentes con volumen político es un verdadero eufemismo, para denominar a la falta de liderazgo que existe en ese universo de la anacronía en el cual todo remite al pasado. La épica de lo que fue bueno, no puede faltar.

Camino largo y tedioso

Allí Massa genera desconfianza. Es la misma desconfianza que le tiene Cristina Fernández de Kirchner que, por las dudas, intentó blindarse y se aseguró el dominio de las listas a diputados y senadores en la provincia de Buenos Aires. Sergio Massa es una claudicación de CFK impuesta por la imposibilidad de sostener su candidatura, no por causa de la inexistente “proscripción” sino por la cruda realidad de saber que, si hubiese competido por la Presidencia, le habría aguardado como resultado una inexorable derrota. La jefa aún no puede digerirlo. La “kirchnerización” de Massa debería ser una alerta para aquellos sectores empresariales que pretenden ver con buenos ojos su postulación. No deberían olvidar que, en esencia, es un mentiroso, lo cual encaja perfectamente en la tipología K. Sin embargo, existe un Massa para cada paladar. Hay un modelo progresista que quiere, pero no logra coquetear con La Cámpora y el kirchnerismo duro. Hasta accedió a incluir como asesor al exvicepresidente condenado Amado Boudou, como una muestra de su “flexibilidad”.

Hay también un Massa más políticamente correcto que busca seducir a los empresarios y al círculo rojo y hay un Massa que quiere impregnarse de peronismo clásico, para tentar a los gobernadores. Cada uno puede identificarse con el que más le convenga, pero la pregunta que sobrevuela tanta puesta en escena es lógica: ¿cuál de todos los modelos será el real si llegara a quedarse con el sillón de Rivadavia? Probablemente uno para cada ocasión, como nos tiene acostumbrados a lo largo de su sinuosa trayectoria política.

Mientras tanto, la preocupación principal en el oficialismo pasa por llegar al proceso electoral de la forma más ordenada posible y sin grandes sobresaltos. Tarea difícil o, más bien, imposible. De ahí que haya surgido la posibilidad de generar vía FMI un acuerdo de transición con desembolso de dinero incluido para apaciguar cualquier frente de tormenta. Un detalle no menor: el ministro de Economía que es –además– el candidato del oficialismo, es el principal interlocutor con el Fondo Monetario y, como se cae de maduro, será uno de los beneficiarios directos de las políticas que puedan diseñarse. La ética y la incompatibilidad de funciones es algo que nunca le preocupó al Frente de Todos contra Todos, hoy rebautizado Unión por la Patria. El kirchnerismo sigue siendo experto en escribir relatos teñidos de camuflaje.

Un tembladeral

En la oposición la guerra de guerrillas sigue a la orden del día. Hay en el fondo un problema de base que comparten los postulantes de ambos lados de la grieta. Ninguno de los modelos que se disputan el poder supo canalizar su continuidad política generando uno o más herederos, para suplir a los ya desgastados dinosaurios que custodian la polarización. No hay figuras nuevas que hayan decantado naturalmente como cuadros políticos que aseguren el futuro. Lo de Massa fue un parto por cesárea –más traumático que consensuado– y la brutal pelea a cielo abierto entre la exministra de Seguridad Patricia Bullrich y el alcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta es una muestra de que No tan Juntos por el Cambio tampoco supo preparar un sucesor. Tanto Mauricio Macri como Cristina Fernández tienen su enorme cuota de responsabilidad por no haber sabido soltar a tiempo.

El extremo que describe esta parte de la realidad es el caso de los candidatos que saltan de la Provincia a la Ciudad para ocupar cargos ejecutivos haciendo interpretaciones bastante remanidas de la Constitución. Con un abanico de opciones representativo, esto no hubiera sido necesario.

En los últimos días la campaña ha mostrado la peor cara de la política. El ataque directo a las personas, la descalificación y discriminación por orientación sexual, condición física, color de piel y una larga lista de etcéteras, se ha intentado naturalizar y ocultar bajo pretextos pueriles y faltos de empatía. Esto pone de manifiesto la poca calidad personal y profesional de algunos dirigentes que aspiran a ocupar cargos en el país.

No podemos bajar la vara y justificar lo injustificable. Un buen dirigente político debe ser, ante todo, una buena persona.

Sin la más mínima calidez humana y sin nociones básicas de respeto, ningún país tiene destino. La Argentina no es la excepción.