Alianzas que tensionan al FAP...
Hermes y Pino.
El lanzamiento de la candidatura de Pino
Solanas, el ingreso de Estenssoro en el interbloque de senadores y las
diferencias internas exhibidas en el Congreso reabrieron la discusión sobre el
perfil y la estrategia electoral del Frente Amplio Progresista.
El Frente Amplio
Progresista se dedicó este año a institucionalizar su propia estructura para
intentar saldar las diferencias internas, pero el lanzamiento prematuro de la
candidatura a senador de un potencial aliado como Fernando “Pino” Solanas y la
inclusión de María Eugenia Estenssoro (Coalición Cívica) en el interbloque de
senadores reavivaron la discusión sobre el perfil de alianzas que se propone el
frente de centroizquierda en la ciudad de Buenos Aires. Un territorio donde el
FAP apuesta a disputar en las legislativas de 2013 uno de los dos primeros
lugares en el podio de las preferencias ciudadanas para consolidarse como “alternativa
de gobierno” en 2015, en la Ciudad y en la Nación.
“Todo proceso de
construcción política, especialmente entre fuerzas de distintas procedencias,
necesita un tiempo prudencial para consolidarse.” La frase resume las opiniones
que las distintas vertientes del FAP –Partido Socialista, GEN, Unidad Popular,
Libres del Sur y el juecismo cordobés– usan para justificar las diferencias que
subsisten dentro de la alianza electoral. Que también se traducen en posturas y
votaciones diferentes –ante un mismo proyecto– de las fuerzas que conforman su
interbloque en el Congreso. Incluso, divisiones entre quienes impulsan y los
que se abstienen de participar en campañas como la junta de firmas contra una
posible re-reelección presidencial.
El FAP aspira a cerrar gran
parte de esas diferencias en el congreso nacional del 24 de noviembre, que
culminará una serie de encuentros regionales en todo el país y elaborará un
programa, para abrir paso a otro gran debate interno: la política de alianzas
con vistas a las elecciones legislativas del año próximo.
- Boinas blancas.
Allí vuelve a surgir la vieja discusión al
interior del frente: si acordar o no con el radicalismo. Cada tanto, desde el
socialismo, especialmente su presidente y principal referente del FAP, Hermes
Binner, deja abierta la posibilidad de reeditar a nivel nacional la
“experiencia” santafesina del Frente Progresista, que gobierna la provincia e
incluye a la UCR.
Una postura a la que
adhiere pragmáticamente Libres del Sur, que mantiene contactos propios con
referentes de la estructura radical. La idea genera resistencia en el GEN –un
desprendimiento de la propia UCR– que no quiere volver a lidiar con ese
partido, aunque tampoco abandonará su estrategia de estrechar posturas con el
PS. En cambio, la mayor oposición la presenta el juecismo, que confronta en
Córdoba con el PJ y la UCR. Lo mismo que la Unión Popular (UP), que prefiere
explorar y tentar a algunas figuras radicales menos identificadas con su
estructura partidaria.
- Los sueltos.
Pero la coyuntura volvió a mostrar fisuras en el FAP y adelantó el debate
interno sobre las alianzas. El PS, GEN, Libres del Sur y el juecismo decidieron
no quedar rezagados en plantear su oposición a la posible reforma
constitucional y la re-reelección, lanzando una campaña de recolección de
firmas bajo las consignas de “no a la re-re” y “cumplamos la Constitución”. La
UP comparte su oposición a la re-reelección, pero decidió no participar de la
campaña con dos argumentos centrales: no lo consideran prioritario –junta firmas
por el 82 por ciento móvil para los jubilados– ni tampoco están dispuestos a
“sacralizar la Constitución neoliberal del Pacto de Olivos”.
El lanzamiento de la
campaña de recolección de firmas se hizo en la sede porteña de la fundación
(Cemupro) que creó y dirige Bi-nner, con su presencia, la de Margarita
Stolbizer (GEN), Luis Juez (Partido Nuevo cordobés) y Humberto Tumini (Libres
del Sur). Y en primera fila se sentó Estenssoro, que adhirió a “título
personal” a la movida. Al día siguiente, la senadora y ex candidata a jefa de
Gobierno porteña por la CC pidió y difundió su incorporación al interbloque del
FAP en el Senado.
Los senadores del FAP –el
socialista santafesino Rubén Giustiniani, el bonaerense Jaime Linares (GEN) y
los cordobeses Juez y Norma Morandini– le dieron la bienvenida. En Libres
consideraron “excelente” la incorporación de Estenssoro, a la que califican
como “una figura política” que aporta a un frente que “hay que ensanchar”. La
UP –que comandan Víctor De Gennaro y Claudio Lozano– pidió explicaciones a la
mesa nacional del FAP sobre la incorporación de la que se enteraron por los
diarios. La discusión quedó “saldada”, porque fue un pedido al bloque de
senadores pero no al FAP como alianza.
Pero la situación provocó
preocupación en la UP por el perfil político del frente: consideran a
Estenssoro una referente conservadora que acompañó en las listas de candidatos
a Domingo Cavallo y fue legisladora por Recrear, de Ricardo López Murphy.
Además de “reivindicar” la gestión de su padre al frente de YPF en los ’90 que
“de-sató el desguace y la privatización” de la entonces petrolera estatal.
- Regar a Pino.
El lanzamiento de la candidatura a senador porteño de Pino Solanas –a
quien todos en el FAP quieren dentro de la alianza electoral– también generó
debates sobre la estrategia de la alianza de centroizquierda en territorio
porteño, aunque a la mayoría de los integrantes les cierra y les conviene la
ecuación. Estiman que estrechar filas con Solanas les suma a todos en las
legislativas del año próximo y especialmente porque postergaría la disputa de
2015, donde Lozano y el socialista Roy Cortina aspiran a ir por el Gobierno de
la Ciudad. Si no aparece una tercera opción, como la de Pino, ambos competirían
el año próximo por posicionarse para la elección de jefe de Gobierno porteño.
Cortina fue uno de los
primeros en volver a acercarse a Solanas, con el que compartió varias actividades
en las últimas semanas, incluida una charla en un ateneo socialista el jueves
pasado, cuando el cineasta ya había anunciado su postulación a senador en 2013
por Proyecto Sur. El socialista considera que con Solanas en el Senado se le
despeja el camino en la Ciudad.
En el PS y el GEN están
dispuestos a sellar un acuerdo con Proyecto Sur en la Ciudad, donde pretenden
pelear por las dos, o al menos una, de las tres bancas en el Senado que el año
próximo elegirán los porteños. Consideran que una excelente elección en Capital
los ayudaría a consolidarse como segunda fuerza política nacional y como
alternativa de gobierno en la Ciudad y en la presidencial de 2015. Algo que se
complicaría si dividen un electorado, que consideran común, con Solanas. Aunque
internamente se preguntan si la performance que Solanas alcanzó en 2009
(segundo) y 2011 (tercero) se mantendría entre los votantes porteños. Por eso
piensan que un acuerdo debería incluir la posibilidad de dirimir candidaturas
en las internas abiertas. Una fórmula que comparte el resto de las fuerzas del
FAP.
En Proyecto Sur también
están dispuestos a disputar en internas abiertas las candidaturas, si
finalmente se logra un acuerdo con el FAP. Incluso entre los aliados de
Solanas, como el Partido Socialista Auténtico (PSA): uno de los más golpeados
tras la ruptura de 2011. Además, en Proyecto Sur consideran que Solanas logró
reponerse de haber quedado afuera del ballottage por la jefatura del gobierno
porteño y de que su fórmula presidencial no haya logrado superar el piso de las
primarias para competir electoralmente. “El petróleo e YPF, la crítica
situación de los trenes y la resistencia a la minería a cielo abierto son temas
que instaló Pino y que en los últimos meses estuvieron en el centro de la
agenda nacional”, afirman. Aseguran que la “recuperación” electoral de Solanas
se refleja en sondeos que ellos mismos han encargado.
© Escrito por Miguel Jorquera y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires el lunes 24 de Septiembre de 2012.