La impotencia de la política…
Día a día vemos con estupor la aparición de nuevas sospechas,
contradicciones y personajes que hacen más sombrío el caso de la muerte del
Fiscal Nisman. Mas allá de las distintas hipótesis que se dispararon desde el
terrible hecho, me quedan con nitidez tres tristes conclusiones.
Argentina esta indubitáblemente prisionera de una guerra de mafias y de
poder, ajenas a la vida democrática. Se trata de una disputa en las sombras
donde se mezclan operaciones de servicios de inteligencia nacionales y
extranjeros; intervención irresponsable del Estado argentino en conflictos
internacionales estratégicos; corrupción del Poder político y de las Fuerzas de
Seguridad e intervención del Gobierno con total impunidad en un conflicto
sórdido de criminales, corruptos, estafadores y viejos y nuevos ricos, donde se
usa al Estado como una trinchera más.
El país empieza a desbarrancarse desde el estupor y el asombro, pasando por
un peligroso acostumbramiento y resignación hasta llegar a la última estación
lógica de este recorrido "destructor de democracia": el miedo.
El miedo todo lo corroe. Frena investigaciones. Agiganta la impunidad.
Envalentona a los que actúan en las sombras. Adormece conciencias. Es el mejor
trampolín de los oportunistas. Y profundiza una espiral de descreimiento de la
democracia y viralización de la violencia.
Por último, una conclusión tan preocupante como las anteriores: la
impotencia de la política.
Yo no tengo una visión binaria del kirchnerismo (a pesar del esfuerzo
permanente que dicho espacio político hace para que así sea). Soy un opositor
orgánico al actual proceso político argentino, no sanguíneo o epitelial. Por
eso no interpelo a los viejos dirigentes, a los ideologos o a los que se
enriquecieron en estos últimos años (esos no tienen retorno y los espera la
justicia) sino a los muchos militantes, simpatizantes y votantes con capacidad
de seguir fieles a una idea política, pero con capacidad también, de critica a
dicha idea. A ellos va mi mensaje de que recuperen un camino de interpelación a
esta etapa del gobierno, que es producto de anteriores, claro está, pero que es
menester corregirla ahora antes que sea demasiado tarde. Salir de la impotencia
de la política frente a esta situación es una tarea de muchos simpatizantes de
este Gobierno.
Pero en donde es más peligrosa la visibilidad de la impotencia de la
política, es en el amplio espectro de la oposición. Oposición que no tiene la
responsabilidad de administrar el Estado, pero si de ofrecer una salida a la
crisis desde la alternancia democrática.
Impotencia de la vieja oposición salida de las fauces del actual gobierno,
pero también impotencia de todo el espacio progresista y por lo tanto, no lo
digo desde una lógica de comentarista de la realidad, sino que lo digo desde la
autocrítica de alguien que pertenece a ese espacio (incluyo por supuesto al
Partido Socialista).
Si, cero respuesta de la oposición en todas sus variantes, por lo menos hasta
hoy, de ponerle un freno desde el Congreso al país mafioso que avanza. Como si
eso fuera una contradicción con la construcción de un proyecto progresista.
Como si la participación institucional en una comisión del Congreso, después de
una muerte conmocionante de un fiscal de la Nación, truncara el futuro de un
ideal político.
Sencillamente infantil, miope e irresponsable.
Dije al principio de estas lineas que eran conclusiones tristes,si, pero al
mismo tiempo útiles para saber lo que hay que corregir. Y a lo que hay que
combatir. Combatir al país mafioso, combatir el miedo y combatir la impotencia de la
política. Y por supuesto buscar el recambio que nuestra democracia necesita.
© Escrito por el Diputado
Nacional del Partido Socialista Roy Cortina el domingo 25/01/2015 y publicado por facebook.