Documento histórico: así enterraron los soldados británicos a sus pares
argentinos caídos en Malvinas…
Fue el 19 de
febrero de 1983. Hasta ahora sólo se conocían algunas imágenes. Por primera vez
y en exclusiva el Video de la Ceremonia.
@ Escrito por Alicia Panero y Juan Parrilla el 23/04/2017 y publicado por Infobae de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
@ Escrito por Alicia Panero y Juan Parrilla el 23/04/2017 y publicado por Infobae de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Pasaron 35 años de la Guerra de
Malvinas. Y aunque mucho se ha hablado del final del combate, un capítulo poco
explorado de ese pasaje trascendental de la historia argentina fue el destino
de los soldados argentinos que murieron en las Islas, cuyos restos todavía
descansan en el cementerio militar argentino de Puerto Darwin.
Un documento inédito, que Infobae
publica hoy por primera vez luego de varios meses de investigación, revela cómo
fue ese final para los que se quedaron en las Islas. Una ceremonia jamás vista:
el entierro de 221 soldados caídos y encontrados en tumbas colectivas y en los
campos de batalla, celebrado el 19 de febrero de 1983.
Llama la atención
el absoluto respeto de los británicos por los argentinos caídos. Con el final
del combate, desapareció la noción de enemigo. Habían vuelto a ser pares. Con
una cuota extra: el Reino Unido, por primera vez en su historia,
sepultaba soldados adversarios en un territorio administrado por la corona
británica.
La filmación que consiguió Infobae, de la que sólo se conocían algunas pocas
imágenes, tiene un audio de fondo que fue incluido por soldados ingleses,
así como también una serie de anotaciones en español. Esas inscripciones
permitieron reconstruir en qué consistió la ceremonia, encabezada por el
sacerdote católico Daniel Spraggon, que dependía del nuncio papal de
Londres, designado -a la vez-, alto observador del Comité Internacional de la
Cruz Roja. Lo secundaron el cura católico Austin Monaghan y el capellán
protestante McDowall.
Luego del ingreso de los soldados británicos al
cementerio, bajo un cielo completamente nublado, se ve la llegada del general
David Thorne, comandante de las fuerzas británicos en Malvinas, y el capitán
Geoffrey Cardozo, encargado junto a un grupo de profesionales civiles de
recuperar de los alrededores de la rocosa isla barrida por el viento los cuerpos que habían estado en las tumbas de combate durante unos 8 meses.
El Kyrie
Eleison que se recitó
a continuación es una importante oración de la liturgia cristiana, de origen
pagano. Es el famoso "Señor, ten piedad de nosotros" que se suele
cantar en las misas, una mezcla de aclamación y súplica que antecede a la
palabra de Dios.
Se puede ver también al padre Spraggon bendiciendo las tumbas,
mientras los guardias permanecen con la cabeza agachada, apoyados sobre su
arma, en un gesto de profunda introspección y respeto. El sacerdote le pidió a
Dios que "confíe estos soldados, marineros, aviadores y marinos mercantes
argentinos para al cuidado de los santos ángeles".
Lo que siguió
fueron las salvas de
honor, máxima distinción de los caídos, efectuada por el
Segundo Batallón de la Guardia Galesa, que formaba parte de la British Forces
Falkland Islands (BFFI).
Luego del rezo del Padre Nuestro, se realizó un toque de
silencio, que no es el que se suele escuchar en occidente, sino The Las
Post, el toque de clarín o corneta que en los países del
Conmonwelth usualmente se entona en los entierros castrenses, entre otras
ceremonias, publicado por primera vez en 1790. En el entierro en Malvinas fue
ejecutado por una corneta natural. Y con la lectura del Salmo 23,
se dio fin a la ceremonia.
El final del video descoloca. Es la imagen de una ofrenda
floral de los kelpers. La dejaron bajo la cruz principal del cementerio. En
contra de lo que se podría suponer y pese a la fuerte oposición de los
ciudadanos de Malvinas a la instalación del cementerio, que se hizo lejos de la
población y fuera de su vista, al final hubo una señal de respeto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Por favor, indicar Nombre Completo y Lugar de Origen. Muchas Gracias