sábado, 7 de enero de 2012

Autos caros... Motos caras... Barcos caros... De Alguna Manera...

A los autos de lujo los corre el impuesto...



El gobierno cambió el régimen imponible para autos, motos y barcos. El vicepresidente Amado Boudou firmó ayer su primer decreto como jefe de Estado, en reemplazo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en reposo por su intervención quirúrgica. El decreto fija un nuevo piso a partir del cual autos y motos tienen que pagar impuestos internos.

La medida establece que todos los vehículos que se vendan en el país, cuyo valor sea superior a 150 mil pesos, calculado sin IVA ni margen de ganancia de los concesionarios –199 mil pesos en la calle– y las motos desde 22 mil quedarán alcanzados por el gravamen de 10 por ciento para los de motor a nafta y 22,5 para los gasoleros. El año pasado el piso era de 212 mil pesos. Con este impuesto se prevé recaudar más de 700 millones de pesos al año, aunque fuentes oficiales aseguran que el motivo no es obtener mayores ingresos fiscales, sino desincentivar la compra de vehículos importados e impulsar los nacionales. El tope utilizado deja afuera a todos los vehículos producidos en el Mercosur, dado que también están exentas las pick-up.

La ley de impuestos internos establece un precio mínimo sobre el cual se grava un 0 km, el cual además está subdividido por el tipo de motorización, sea naftero o gasolero. Se cobra un mayor impuesto a los gasoleros para guiar la demanda hacia los nafteros, dado que el gasoil es necesario para la producción rural y la generación de energía. A esto se suma que los motores gasoleros son más eficientes y, por ende, tienen una ventaja sobre los nafteros. El precio mínimo del impuesto se actualiza los meses de enero, dado que su vigencia es anual, teniendo en cuenta el aumento en los valores de las unidades. En caso contrario, regiría el valor que está dispuesto en la ley, establecido en unos 15.000 pesos, lo que equivale a que todos los 0 km deberían pagar el tributo.

En esta oportunidad no se ajustó al alza el piso, sino que por el contrario, se redujo para ampliar la base imponible. “El objetivo es que el impuesto alcance a una mayor cantidad de vehículos, y principalmente desalentar la importación de autos de alta gama, como una manera de redistribuir la carga impositiva”, explicaron a este diario fuentes oficiales. La medida alcanza a un universo de 58.000 vehículos, de los cuales el 95 por ciento son importados de extrazona. Sólo queda alcanzado un modelo de la Toyota Hilux (4x4), que se produce en el país. Los autos importados que entran en el impuesto representan el 6,7 por ciento del total vendido en el mercado nacional en 2011, donde el nivel de patentamientos arrojó un record de 857.000 unidades.

Este decreto mantiene el valor de las alícuotas: los nafteros pagarán el 10 por ciento del valor y los gasoleros, el 22,5 por ciento. El desglose indica unos 48.000 vehículos nafteros y unos 11.000 gasoleros del universo de importados de alta gama. Los gasoleros están vinculados más con vehículos de tracción integral, denominados comúnmente 4x4. En este segmento compite BMW, Porsche, Audi y Mercedes Benz, con unidades que van desde los 150 mil a los 365 mil dólares. “La base se definió para que queden afuera todos los vehículos nacionales y producidos en el Mercosur”, señaló la fuente. Debido a que es difícil estimar la elasticidad que tendrá la demanda respecto del encarecimiento en el precio de salida de la unidad de la concesionaria, desde el Gobierno prefieren no definir un cálculo exacto, pero estiman que se recaudarán algo más de 700 millones de pesos.

La norma también afecta a las motos que tienen un precio de fábrica, sin IVA, superior a los 22 mil pesos y que llegan al consumidor por encima de los 30 mil. En este caso, están alcanzadas la mayoría de las unidades de alta cilindrada –por encima de los 500 centímetros cúbicos o modelos exclusivos–, dado que no se fabrican motos de este tipo en el país. Hasta ayer, las motos a la salida de fábrica por debajo de los 25 mil pesos estaban exentas de este impuesto interno. Por último, para las embarcaciones se mantuvo la base imponible en 22 mil, pero la alícuota sube de 8 a 10 por ciento.

© Escrito por Cristian Carrillo y publicado por el Diario Página/12 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el sábado 7 de Enero de 2012.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Por favor, indicar Nombre Completo y Lugar de Origen. Muchas Gracias