A Facundo Diz le cayó la pelota en el área tras un centro y no perdonó. Más tarde, Caneo clavó el segundo y Quilmes le ganó 2-0 a Huracán, que sufrió la expulsión de Lemos a los ocho minutos del segundo tiempo. El Cervecero llegó a los once puntos.
En un partido que tuvo un primer tiempo parejo, Quilmes derrotó 2-0 a Huracán por lo hecho en el segundo cuando supo aprovechar las jugadas que tuvo a su favor.
Quilmes buscaba la recuperación tras caer en la fecha pasada con Ferro, mientras que Huracán venía de golear a Independiente de Mendoza. Estos antecedentes hacían prever un partido emotivo en la cancha del Cervecero, pero el primer tiempo se caracterizó por el juego dividido. Los dos equipos abusaron de pelotazos para llegar al arco contrario, pero esto hizo que el juego fuera desprolijo, con escasos pasajes de buen fútbol. Así y todo, alguna situación tuvieron.
En los de Caruso Lombardi el más incisivo era Cauteruccio, ayudado por la movilidad de Caneo, mientras que en los de Parque Patricios, Machín desplegó toda su voluntad en la mitad de la cancha y hasta estuvo merodeando el área rival para asistir a Milano y Oviedo. Pero se fueron al descanso empatados sin goles.
La segunda parte tuvo mayor movilidad por parte de los dos equipos. Se hizo de ida y vuelta pero Huracán se quedó con un jugador menos por la expulsión de Lemos a los ocho minutos. Pero el triunfo de Quilmes fue indiscutible. Porque aprovechó mejor las jugadas de pelota parada. Huracán tuvo algunas chances de contra pero falló a la hora de definir. Si bien los de Apuzzo jugaban bien, tenían juego asociado, se mostraban algo débiles y así fue como Quilmes llegó a vulnerar la valla de Gastón Monzón en dos ocasiones.
Con esta victoria, Quilmes se trepó al tercer puesto de la tabla, al menos hasta que se desarrolle el resto de la fecha. Los de Caruso llegaron a las once unidades y suben de a poco. Por su parte, Huracán se quedó en los siete puntos y, además de eso, con la preocupación de no poder encontrarle regularidad a su funcionamiento.
© Escrito por Andrés Garavaglia y publicado por el Diario Deportivo Olé el viernes 23 de Septiembre de 2011.
Noche sin espuma...
Los hinchas de Huracán tuvimos una semana dulce luego de la victoria ante los mendocinos. El técnico había encontrado la vuelta al parecer a un equipo que no tenía el norte bien definido y le dio orden y vino la goleada y la esperanza para el próximo partido con Quilmes que figuraba como uno de los mas difíciles del campeonato.
Y venía bien la cosa, en el primer tiempo el equipo estaba bien parado y se arrimaba al área de ellos pero López, Milano y Oviedo no tuvieron el partido que yo esperaba. López al principio anduvo bien pero después se cansó y aflojamos en ataque. Me parece que Lucas Nania debería tener una oportunidad en los segundos tiempos cuando cae el rendimiento del diez. Pero lamentablemente (para mi) el partido cambió con la expulsión de Lemos, ya que Apuzzo no pudo ya frenar el empuje del rival y con pelotas paradas –todas con jugada preparada- nos empezaron a meter en el fondo y los goles llegaron por decantación.
La mitad del vaso lleno me muestra que ante un equipo jodido solo se definió cuando quedamos con diez y que con trabajo se puede salir. Ya perdiendo 2 a 0 Huracán tuvo un par de jugadas (entre ellas una muy buena de Villegas) y creo que con la vuelta de Campora mas la levantada física de Milano y la frescura del pibe Oviedo vamos a levantar.
La mitad del vaso vacío me muestra que, si bien esto recién empieza, los puntos no aparecen y ya incomoda el tema de la llegada del nuevo técnico. No es que no quiera a Apuzzo –todo lo contrario- sino que lo quiero donde mas rinde, en la búsqueda de jóvenes talentos para subir a primera.
El párrafo aparte va para Rodrigo Battaglia, que volvió a ser lo que nos tenía acostumbrados y, además de ser la figura del equipo, se paró con autoridad en el medio y mostró la calidad que tiene. Este pibe es la llave para el salto de calidad. Tiene que juntarse más con Leiva en la recuperación y con López en el ataque. Es fundamental que esté a full porque para nosotros es irremplazable. Es el despliegue físico con magia.
Parece que volvemos a jugar el viernes que viene. Ahora de locales ante Merlo. Los vi por la tele contra las gallinitas y son un equipo muy jodido, se corren todo y son muy ordenados tácticamente. Nosotros tenemos que salir de esta irregularidad y empezar a ganar tres partidos seguidos para estar mas tranquilos y la Comisión Directiva tiene que contratar a alguien de categoría para ordenar aún mas los buenos jugadores que, para mí, tenemos. Se están tomando su tiempo para no equivocarse y me parece muy bien pero no quiero quemar a Apuzzo con un par de derrotas.
Sigamos adelante, sigamos apoyando y el viernes llenemos el Ducò.
¡Saludos Quemeros!
Quilmes.
Un 27 de Noviembre de 1887 se fundó el Quilmes Atlético Club, una de las instituciones más antiguas del país.
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