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domingo, 5 de noviembre de 2017

Documentos inéditos de 1767 ratifican la soberanía de Argentina sobre las Islas Malvinas… @dealgunamanera...

Documentos inéditos de 1767 ratifican la soberanía de Argentina sobre las Islas Malvinas…


Se trata de tres cartas entre el gobernador de Buenos Aires y de las islas. El gobierno recibió el material y ahora podría intervenir para hacer un reclamo ante la ONU.

© Escrito por Martín Dinatale el domingo 05/11/2017 y publicado por el Portal de Noticas Infobae de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Son tres cartas inéditas fechadas en 1767. Tres documentos escritos en español antiguo que incluyen un intercambio epistolar entre el primer gobernador de las Islas Malvinas y el entonces mandatario de Buenos Aires. Los tres escritos llegaron a manos del gobierno hace pocos días y revelan un hecho inusitado para la historia nacional: ratifican la soberanía geopolítica de la Argentina sobre las Islas Malvinas.

El presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete Marcos Peña y el canciller Jorge Faurie ya fueron informados del tema. También está al tanto el senador radical Julio Cobos, que fue quien ofició de nexo entre un coleccionista privado de obras históricas que dio con el hallazgo y el Estado argentino. El dato político más significativo de esta revelación histórica que pudo conocer en exclusiva Infobae es que en el futuro inmediato, el Gobierno podría utilizar estos documentos como nueva base de sustentación para darle más sustento a la pelea en las Naciones Unidas por el reclamo de la soberanía argentina en las islas del Atlántico Sur.

El primer documento está fechado en Buenos Aires el 18 de febrero de 1767 y es una carta del entonces gobernador bonaerense Francisco Bucarelli y Ursúa (expulsor de los Jesuitas) a Felipe Ruiz Puente, primer mandatario de las Islas Malvinas. El texto al que accedió Infobae, y que se halla bajo estricto resguardo en el Archivo General de la Nación, sostiene que desde Buenos Aires se enviarán ocho prisioneros "a ración y sin sueldo" como mano de obra para la flamante gobernación de las Malvinas, creada cuatro meses antes por orden del rey Carlos III. "Señor mio: con destino a servir en las Reales obras de las Islas Malvinas a ración y sin sueldo remito a Usted los individuos señalados en la adjunta relación para [que] disponga la conducción y permanencia allí de estos reos el tiempo de su condena", firma el gobernador de Buenos Aires al tiempo que da la lista de ocho presos.


El segundo documento es una carta fechada en Malvinas el 25 de abril de 1767 enviada por el gobernador de Malvinas Felipe Ruíz Puente a su par bonaerense Bucarelli y Ursúa. En esa misiva le explica la necesidad de levantar una capilla en Malvinas "para todo el pueblo, pues solo se cuenta con una muy precaria, con una imagen de San Luis". Y solicita a la vez "un pequeño sagrario o tabernáculo con su copón correspondiente y una imagen de la Advocación que V.E determinare para Patrono de esta posesión". Cabe destacar que el Puerto Soledad se bautizó como Saint Louis cuando fue descubierto por los franceses. Sucede que las islas luego fueron transferidas a la corona española por Francia.

Y el tercer documento hallado, que obra en poder del Estado en estos momentos, está datado en Buenos Aires el 2 de diciembre de 1767. También se trata de una carta dirigida por el gobernador de Buenos Aires al primer gobernador de Malvinas. Allí se sostiene que desde la capital argentina se enviarán los vasos sagrados y ornamentos para "erigir una nueva capilla en esa Colonia", así como una imagen de la Virgen de la Soledad para que sea declarada patrona de la población. Quizás esta sea la única pista para descubrir el origen del nombre de la Isla Soledad.

Por otra parte, las fuentes consultadas por Infobae para realizar esta investigación destacaron que entre los detalles importantes de las cartas, uno de los documentos menciona la enumeración de "reos" que fueron a trabajar ya que entre ellos sólo uno era de origen noble y de apellido Díaz. No sólo estos reos fueron a Malvinas, sino que comenzaron las primeras obras de la Capilla y está mencionado que fueron los Franciscanos quienes aportaron su asistencia espiritual al comienzo de dominio de la corona española. El documento está datado el 25 de Abril de 1767, la fecha del traspaso de dominio francés de las islas al reino español, y para los historiadores y el arco político, estos documentos revelan una posesión del territorio español, por lo que tras la independencia de la Argentina, pasó a ser la república poseedora de las islas Malvinas.


"La particularidad del documento es el uso de la palabra 'Colonia', calificativo de los Borbones, reinantes en esa etapa en la península Ibérica. Ese término es vital para reconocer a las islas como dependientes de una gobernación bonaerense, luego del Virreynato del Río de la Plata, más tarde de las provincias Unidas y por último de la Nación Argentina", expresó a Infobae el coleccionista privado que encontró los documentos y que se los donó al Estado. Por razones de seguridad, el anticuario prefirió denominarse con las iniciales N.L.D a fin de no revelar su identidad.

El Gobierno tiene conocimiento de estos documentos que ahora están en poder del Archivo General de la Nación. Una fuente calificada de la Casa Rosada admitió a Infobae que "hay altas posibilidades de que estas cartas puedan ser usadas para presentar en naciones Unidas como nuevos elementos de defensa de la soberanía de la Argentina en las islas Malvinas".

Por otra parte, el senador Cobos destacó a Infobae que "los documentos recibidos tienen el valor histórico de que ratifican la posesión de las Malvinas por parte de lo que luego sería el territorio argentino y es un hecho que sin dudas marcará un antes y un después en la diplomacia".

La ex canciller Susana Malcorra fue la que recibió el año pasado esta documentación, y la diplomática expresó en diálogo con Infobae que "los documentos hallados pueden llegar a tener un peso político muy fuerte". Es que si el gobierno lleva esta documentación a las Naciones Unidas se podría modificar el voto de algunos países del Comité de Descolonización que hasta ahora estuvieron alineados con Gran Bretaña. Malcorra dijo que si se ratifica la autenticidad de esos documentos "el tema se torna interesante".


Anteayer, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) terminó de analizar científicamente los documentos inéditos para autentificar su identidad y reveló que son reales. Se realizaron "análisis cual/cuantitativo de fibras mediante la observación con micropio optimo (MO) y microfotografias". El informe técnico al que accedió Infobae es el SOTN 18-5230. "Se tomaron muestras con algunos escasos milímetros cuadrados en zonas de reborde y sin escritura tratando de no afectar las dimensiones originales ni su aspecto", dice el documento.

A su vez, el Archivo General de la Nación avaló esa documentación y la resguardó en su poder bajo llave. Ahora espera que el Gobierno tome el tema y se avance con el reclamo político ante Gran Bretaña en el Comité de Descolonización de Naciones Unidas.

Desde la Fundación Nuestra Historia y la Confederación de Entidades patrióticas, Raúl Eugenio Daneri dijo a Infobae que "la validez de estos documentos es que tienen el peso político de que el reclamo argentino sobre las islas ya se sustentaba desde 1767 y no hay dudas de esto". La palabra de Daneri tiene un valor adicional: fue capital del Regimiento 7 de Infantería Coronel Conde que combatió contra el Reino Unido en las Malvinas en la guerra de 1982. Daneri acompañó a N.L.D en una parte del hallazgo.

¿Cómo llegaron a manos del gobierno los documentos que pueden hacer un ruido diplomático de gran envergadura con Gran Bretaña?


Según pudo reconstruir Infobae a lo largo de varios meses de investigación, N.L.D adquirió en marzo de 2015 estas tres cartas a un anticuario del microcentro porteño que desconocía el valor histórico de esos documentos. El coleccionista empezó a averiguar el origen y la validez de los documentos y una vez que tuvo la certeza de que tenía entre manos una gran historia se la llevó a Cobos, que lo recibió tras un acto que compartieron en el Senado por la conmemoración del hundimiento del Crucero General Belgrano.

"Recuerdo que al principio tuvimos muchas dudas de la autenticidad de los documentos", sostuvo el senador de Mendoza. Pero con el tiempo las dudas se fueron disipando. De la mano de Cobos, el 21 de marzo del año pasado N.L.D le llevó los documentos a la entonces canciller Malcorra, luego accedió al tema el director del Archivo General de la Nación Emilio Perina y finalmente se recaló en el INTI para las pruebas científicas de las tres cartas.

Desde septiembre de 2016, los documentos fueron cedidos por N.L.D al Estado argentino y están bajo llave en el Archivo General de la Nación. Cobos informó del tema al jefe de Gabinete y al canciller Faurie que ya han avisado a Macri. El viernes pasado hubo una comunicación oficial del senador de Mendoza a Presidencia.


El coleccionista privado ya casi puede respirar tranquilo. No fue una aventura tan fácil. Recibió atentados en su domicilio y finalmente pudo salvar las cartas para donarlas al Estado. El 23 de noviembre presentará en sociedad esta documentación que hasta ahora eran secretos junto con la Fundación Nuestra Historia.

Luego le tocará el turno al Gobierno para avanzar en la batalla diplomática por las islas Malvinas. Los documentos que hoy se revelan pueden cambiar el curso de la historia.

Estas son las cartas inéditas recuperadas para el patrimonio histórico de nuestro país. #MalvinasArgentinas pic.twitter.com/vSFYj1GXqt
— Julio Cobos (@juliocobos) 5 de noviembre de 2017



domingo, 24 de agosto de 2014

Veinte Años Después… La contrarreforma K… De Alguna Manera...


Veinte Años Después… La contrarreforma K…

Palos para todos... y todas, Cristina Fernández. Foto: Dibujo: Pablo Temes

Cristina dilapidó el capital simbólico de la Constitución del ’94 y reabrió heridas.

Cristina es una experta en construir poder apelando al temor y los latigazos. Disciplina a la tropa con la fusta, como hacen los señores feudales en sus inmensas posesiones. Esa es la mayor herencia que le dejó Néstor, además de las millonarias e inexplicables cuentas bancarias. Es asombrosa la falta de estómago y escrúpulos que ambos evidenciaron a la hora de conducir. Llevaron al éxtasis aquello de que “al enemigo ni justicia”. Pero lo que casi no tiene antecedentes es la ferocidad implacable que tiene a la hora de castigar a los propios, a los que se diferencian con cualquier excusa y pasan a la categoría de traidores.

Ese ADN se formó con el aporte de tres vertientes:

1) La formación setentista, con un desprecio hacia la democracia formal, partidocrática, liberal o burguesa, como se decía entonces.

2) Esa actitud de patrones de estancia desarrollada en Santa Cruz, apoyada en su poder económico y en su actividad de abogados buitres para quedarse con muchas propiedades de deudores hipotecarios que no pudieron cumplir con sus compromisos.

3) Las características personales de poca generosidad y afecto hacia los demás que, sobre todo Ella, pagaron con la ausencia casi total de amigos.

Ese camino la llevó a dinamitar varios de los aportes más trascendentes que hizo la nueva Constitución Nacional, que mañana cumple veinte años. Identificar esos aspectos nos puede ordenar este balance político semanal.

Los convencionales constituyentes del ’94 construyeron un producto único por su nivel de consenso y la mirada hacia las próximas generaciones, lejos del chiquitaje del poroteo electoral. Forjaron lo más parecido a esa “unidad nacional”  tan proclamada desde la retórica. Tuvo la impronta de uno de los hombres más sabios que exhibió este tiempo: Carlos Nino. Representantes del peronismo, el radicalismo, el socialismo, el conservadurismo y hasta los extremos parlamentarios del comunismo y el carapintadismo llegaron a un texto que votaron por unanimidad, salvo la experiencia singular del venerable obispo Jaime de Nevares, que renunció al amanecer las deliberaciones. Podría decirse que aquella iniciativa de Raúl Alfonsín, que se concretó bajo el gobierno de Carlos Menem, fue una especie de Nunca más constitucional, una lápida definitiva que se le puso al terrorismo de Estado (junto al Juicio a las Juntas y la Conadep) y el momento de mayor acercamiento y consenso del multicolor abanico democrático.

La fractura social expuesta entre peronismo y antiperonismo que tanto odio y daño produjo se fue cerrando en etapas:

1) Con el abrazo Perón- Balbín y el legendario discurso “de este viejo adversario” que despidió “a un amigo”.

2) Con Antonio Cafiero en el balcón de la Casa Rosada, pero defendiendo a un presidente radical, Alfonsín, frente a la sublevación subversiva de Aldo Rico y sus comandos.

3) Con ese texto de la nueva Constitución que Carlos Menem y Alfonsín sellaron con un apretón de manos y con un Pacto de Olivos y una reelección que nublaron mediáticamente el paso gigantesco que se había refrendado en el Palacio Urquiza en Entre Ríos.

El matrimonio Kirchner será responsable ante la historia de haber reabierto aquella vieja herida, que tiene una profundidad mayor que la de los años 50 y que hoy se expresa, entre otras cosas, en la soledad parlamentaria y el aislamiento político con los que Cristina va a hacer votar la ley que sus defensores llaman “de pago soberano”. Ni un solo dirigente opositor representativo compró esta vez esa manzana envenenada que alguno había adquirido en otra ocasión. Es que la Presidenta abusó del recurso de vestir de gesta heroica y emancipadora cada macana irresponsable que salió de su gobierno.

Pero Cristina no sólo dilapidó el principal capital simbólico de esta joven Constitución de veinte años. También ignoró y malversó otros capítulos de la Carta Magna. La jefatura de Gabinete en manos de Jorge Capitanich llegó a ser una caricatura de lo que habían previsto los constituyentes. Es una suerte de vocero desmesurado de las desmesuras de Cristina, en lugar de cumplir con su rol de articulador del tráfico de sugerencias e ideas entre el Congreso y el Poder Ejecutivo.

El Consejo de la Magistratura, los organismos de control y hasta la Justicia misma sufrieron los embates del oficialismo, que nunca abandonó la idea de colonizarlos y domesticarlos pese a las derrotas que sufrió en ese intento.

El centralismo extorsivo reemplazó al proclamado fortalecimiento del régimen federal. Las provincias hoy reciben las migajas del 24%, mientras que el Estado nacional se lleva la parte del león del 76%; pero, además, esa distribución es absolutamente discrecional y arbitraria. Por eso, muchas veces se vio a gobernadores o intendentes arrodillados ante el altar de Cristina. Sin que se le caiga la cara de vergüenza, Miguel Angel Pichetto dio como normal y legítima esta actitud perversa: cuando Alberto Weretilneck –el gobernador de Río Negro, su provincia– anunció su pase al massismo, lo criticó duramente. Pero no fue por su falta de lealtad o de convicciones, sino porque ahora la provincia se iba a ver perjudicada y Cristina no le iba a mandar un peso para atender todas las deudas que tiene. Estaba cometiendo sincericidio: “Por la plata baila el mono”.

La Ley de Coparticipación que ordenaba la Constitución hace veinte años ni siquiera se pudo discutir. Y hace 11 que gobiernan los Kirchner. Fue muy lúcido Martín Dinatale en La Nación cuando reveló que Cristina Fernández como convencional, en el recinto, se preguntó, montada en sana rebeldía: “¿Cómo no va a haber provincias inviables si nos federalizan los gastos y nos centralizan los recursos?”. ¿Qué diría esta presidenta de aquella joven convencional levantisca y justiciera? ¿Qué piensa de las provincias petroleras que reclaman lo que les corresponde? La respuesta hasta ahora ha sido ningunearlos primero y perseguirlos después. Más allá de que sea cierto que el gobernador Martín Buzzi tiene un millón de dólares flojo de papeles, lo cierto es que la AFIP recién se movió ahora por orden de una presidenta que acostumbra utilizar estos mecanismos de apriete.

Ese mismo doble discurso, esa idéntica malversación de las promesas de un país serio parecido a Alemania por un país en joda similar a Venezuela se repite en muchos de los aportes constitucionales más valiosos. Es lo que hay.

© Escrito por Alfredo Leuco el Sábado 23/08/2014 y publicado por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.