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martes, 9 de julio de 2019

Fernando De la Rúa (1938 - 2019) Q.E.P.D. @dealgunamanera...

Murió el expresidente Fernando De la Rúa a los 81 años…


Cordobés, abogado, radical y primer jefe del Gobierno porteño, su presidencia y carrera política no sobrevivieron a la peor crisis social desde la caída de la Dictadura.

© Publicado el martes 09/07/2019 por el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El expresidente Fernando de la Rúa falleció en la madrugada de este martes 9 de julio a los 81 años, después de una larga batalla contra una afección cardíaca que se agravó en las últimas horas. El exmandatario radical se encontraba internado en la Clínica Fleming desde el 28 de enero y luego fue trasladado al instituto Fleni de Escobar. En la noche del lunes se había informado que se encontraba "en muy grave estado por una descompensación cardíaca y renal".

La noticia fue confirmada esta mañana por su sucesor, el presidente Mauricio Macri, con un mensaje en su cuenta de Twitter. "Lamento el fallecimiento del ex presidente Fernando de la Rúa. Su trayectoria democrática merece el reconocimiento de todos los argentinos. Acompañamos a su familia en este momento", escribió el líder de Cambiemos.

El radical, nacido en la provincia de Córdoba, fue miembro de la Unión Cívica Radical desde su juventud, funcionario del ministerio del Interior durante la presidencia de Arturo Frondizi en los años 60, legislado en los 80 y el sucesor de Carlos Menem en la presidencia de la Nación desde el 10 de diciembre de 1999 hasta su renuncia el 20 de diciembre de 2001.

La última aparición pública del exmandatario fue el 30 de noviembre de 2018 cuando asistió a la función de gala en el Teatro Colón ofrecida en honor a los mandatarios extranjeros que vinieron a Buenos Aires para participar de la Cumbre del G20. En 2015 había sido invitado a la ceremonia de asunción de Mauricio Macri como presidente.

A lo largo del año 2018, el expresidente había sufrido dos infartos, uno en octubre y otro en mayo. Sin embargo, los problemas cardíacos para De la Rúa habían empezado en 2001, cuando todavía era presidente y fue sometido a una angioplastia para desobstruir la arteria coronaria derecha.

Funcionario de Illia y contrincante de Perón


Nacido en Córdoba el 15 de septiembre de 1937, en el Liceo Militar General Paz y a los 21 años se graduó en Derecho, igualmente con altas calificaciones, por la Universidad de Córdoba. Desde esa época militó en la UCR del Pueblo (UCRP) de Arturo Illia, así llamada para diferenciarse de la UCR Intransigente de Frondizi.

Tras dedicarse a la abogacía, durante la presidencia de Illia, entre 1963 y 1966, De la Rúa trabajó como asesor en el Ministerio del Interior. Guiado por Ricardo Balbín, líder de la UCR desde 1957 y candidato presidencial, en abril de 1973 fue elegido senador por Buenos Aires.

En las segundas elecciones presidenciales de aquel año, el 23 de septiembre, que restituyeron a Perón en el poder tras 18 años en el exilio, De la Rúa integró la fórmula radical encabezada por Balbín, que obtuvo el 24,3% de los votos.

Fue senador hasta marzo de 1976, fecha del golpe militar que derrocó a María Estela Martínez de Perón, y tras el retorno de la democracia De la Rúa compitió por el liderazgo de la UCR para las elecciones presidenciales de octubre de 1983, que ganó Raúl Alfonsín.

El primer jefe de gobierno porteño y carrera a la presidencia


El 30 de junio de 1996, De la Rúa se convirtió en el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires al derrotar con el 39,9% de los votos al peronista Jorge Domínguez, siendo el primer mandatario municipal elegido directamente por los porteños.

Durante este período, la UCR aceptó trabajar conjuntamente con el Frepaso para desplazar al peronismo de la Casa Rosada, naciendo de esta forma en 1997 la“Alianza por el Trabajo, la Justicia y la Educación” (ATJE), más conocida como simplemente la Alianza, que se convirtió en la primera fuerza política con el 45,7% de los sufragios en las elecciones legislativas de ese año.

El 6 de diciembre de 1998 De la Rúa fue elegido presidente del Comité Nacional de la UCR en reemplazo de Rodolfo Terragno, el sucesor de Alfonsín. Era el primer paso hacia la Casa Rosada.

Cauteloso, sobrio, austero y “aburrido”, según un spot de campaña, De la Rúa ganó las elecciones del 24 de octubre de 1999 con el 48,5% de los votos frente a la fórmula peronista, integrada por Eduardo Duhalde y el cantante “Palito” Ortega.

Un radical sucede a un peronista


El 10 de diciembre de 1999, después de entregar el mando del gobierno porteño a Enrique Olivera, y la presidencia del Comité Nacional de la UCR al expresidente Alfonsín, De la Rúa se convirtió en el primer presidente radical que sucedía a un peronista y el primero de un gobierno de coalición. La UCR se quedó con ocho de los 10 ministerios, mientras que el Frepaso obtuvo Trabajo y Acción Social.

En noviembre de 2000, la Alianza llegó a un acuerdo político con la oposición para “congelar” por cinco años el gasto público y en diciembre consiguió el apoyo del PJ para aprobar el Presupuesto 2001, clave para recibir la ayuda financiera del Fondo Monetario Internacional.

El primer aniversario de su gobierno estuvo plagado de dificultades políticas y económicas y marcado por medidas económicas impopulares y contrarias a sus promesas electorales, entre las cuales había destacado reducir a la mitad el desempleo.

El año trágico


Aumento de impuestos a la clase media, recortes salariales en el sector público comenzaron a afianzar una crisis. El 18 de diciembre de 2000, recibió una ayuda financiera, un “blindaje” internacional de 40.000 millones de dólares y cuatro meses después De la Rúa afirmaba que el país vivía una situación “crítica y difícil”.

El año 2001 comenzó con la aprobación de los “poderes especiales” para aplicar grandes reformas económicas y el proyecto del ministro de Economía, Domingo Cavallo, de una reducción del 18,8 por ciento del gasto público.

Una violenta ola de saqueos los días 19 y 20 de diciembre, que dejó 23 muertos, obligó a De la Rúa a decretar el estado de sitio, pero la situación era insostenible. Diputados derogó parcialmente los poderes especiales de Cavallo, tras lo que el gobierno renunció. Al no conseguir el apoyo del PJ, De la Rúa renunció como presidente.

D.S. 




jueves, 20 de diciembre de 2012

Los muertos del 19/20 de diciembre de 2001... De Alguna Manera...


Los muertos del 19/20 de diciembre de 2001...

 Argentina, Diciembre 2001.

- ACOSTA, Graciela, 35 años. Militante de DDHH. Estaba con una amiga buscando a sus hijos. Se acercó a un supermercado frente al que unas mil personas reclamaban comida. Recibió dos impactos de bala, disparados rodilla en tierra por un policía al que su amiga vio perfectamente. Provincia: Santa Fe

- ALMIRÓN, Carlos “Petete”, 24 años Petete era militante de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) y de la Coord. de Desocupados 29 de Mayo. Recibió un disparo de la policía en el pecho en Av. 9 de Julio y Av. de Mayo cuando encabezaba una columna de manifestantes que intentaba volver a la Plaza de Mayo.

- ALVAREZ Villalba, Ricardo, 23 años Asesinado en Rosario, Santa Fe.

- ARAPI, Ramón Alberto, 22 años Estaba con amigos tomando tereré en el Barrio Nuevo de Corrientes. Entró al barrio una camioneta Ford F-100 bordó sin leyendas identificatorias y sin patente, con cinco hombres, cuatro con el uniforme de combate azul-celeste de la policía de Corrientes. Arapi trató de esconderse, pero dos de los policías lo corrieron y alcanzaron. Uno lo golpeó y le pegó un tiro que entró por el pecho y salió por la espalda.

- AREDES, Rubén, 24 años Fue asesinado por la Policía federal mientras participaba en un corte de calles en Ciudad Oculta, Ciudad de Buenos Aires. Recibió cuatro balas de plomo por la espalda.

- AVACA, Elvira, 46 años Recibió un escopetazo frente a un supermercado frente al que pasaba con su hija en Cipolletti, Río Negro. Recibió el disparo en la zona lumbar. El calibre de la bala es policial.

- AVILA, Diego, 24 años Asesinado en Villa Fiorito, Buenos Aires.

- BENEDETTO, Gustavo Ariel, 30 años Se encontraba en la esquina entre la Avenida de Mayo y Chacabuco, Ciudad de Bs. As., donde se estaba llevando a cabo una manifestación. Recibió un balazo en la cabeza que le provocó la muerte, disparado desde el interior del Banco HSBC, donde prestaba servicios como custodio privado el ex militar Varando, represor de La Tablada.

- CAMPOS, Walter, 17 años Estaba esperando cajas de comida junto a cientos de personas frente a un supermercado en Rosario (Sta Fe), cuando un tirador de elite de las TOE (Tropas de Operaciones Especiales) le disparó a la cabeza.

- CÁRDENAS, Jorge, 52 años Fue herido la noche del 19 en las escalinatas del Congreso de la Nación, y falleció varios meses después.

- DELGADO, Juan, 28 años Estaba con otras personas reclamando alimentos frente a un supermercado en Rosario, Santa Fe. Llegó un camión que aparentaba traer comida. Cuando los manifestantes se agolparon alrededor, de atrás aparecieron seis móviles policiales que dispararon contra la gente. Delgado fue herido con balas de goma cuando huía de la represión. Un policía lo tumbó de un cachiporrazo en las piernas, lo apuntó con su itaka, pero se había quedado sin carga, por lo que sacó la pistola y le disparó a menos de un metro de distancia.

- ENRIQUEZ, Víctor Ariel, 21 años Asesinado en Almirante Brown, Buenos Aires.

- FERNÁNDEZ, Luis Alberto, 27 años Vendía sandías frente a un supermercado en la provincia de Tucumán. Durante la represión a manifestantes, un gendarme le disparó a poca distancia en la cabeza. Murió dos días después.

- FERREIRA, Sergio Miguel, 20 años Baleado durante la pueblada del 19 y 20 de diciembre de 2001. Murió un año después a raíz de una complicación hepática desencadenada por el balazo en el hígado recibido cuando la policía cordobesa reprimió duramente un saqueo a un supermercado del barrio Villa El Libertador.

- FLORES, Julio Hernán, 15 años Asesinado en Merlo, Buenos Aires.

- GARCÍA, Yanina, 18 años Recibió un disparo en el abdomen cuando, desesperada por los ruidos de las balas, salió a la vereda a buscar a su pequeña hija. En Rosario, Santa Fe

- GRAMAJO, Roberto Agustín, 19 años Un grupo de jóvenes estaba siendo perseguido por la Policía, que les disparaba balas de goma, en Alte. Brown, Buenos Aires. A la corrida se tuvieron que sumar todos los que estaban en la calle, ya que la Policía disparaba a mansalva. Un vecino pudo observar que en una obra en construcción que está ubicada en diagonal a su ventana había dos policías escondidos en las columnas. Uno de los policías disparó con balas de goma para lograr la retirada de los jóvenes, mientras que el otro policía se quedó escondido en la tercera columna de la obra en construcción y sacó el arma reglamentaria y efectuó tres o cuatro disparos. Uno de los disparos atravesó la cabeza de Roberto, que iba de su casa a la de su tío.

- GUÍAS, Pablo Marcelo, 23 años Asesinado en San Francisco Solano, Buenos Aires

- ITURAIN, Romina, 15 años Asesinada durante la pueblada del 19 y 20 de diciembre, mientras estaba en su casa, adonde ingresó una bala policial disparada contra quienes protestaban frente a un supermercado en Paraná, Entre Ríos.

- LAMAGNA, Diego, 26 años Murió después de haber sido herido en el pecho con un perdigón de plomo. Según testigos, le dispararon policías de civil desde un auto particular en la Ciudad de Buenos Aires.

- LEGEMBRE, Cristian, 20 años Asesinado en Castelar, Buenos Aires

- LEPRATTI, Claudio “Pocho”, 35 años Militante comunitario. Estaba en la terraza de la escuela en la que colaboraba (era profesor de filosofía, y ayudaba como cocinero) cuando el móvil n° 2270 del Comando de Arroyo Seco se dirigía a reprimir un corte de calles de los vecinos del barrio. Los policías detuvieron el móvil y empezaron a disparar. Pocho gritaba que no lo hicieran porque había muchos chicos. Velásquez, el efectivo condenado a 14 años de prisión, dijo en la reconstrucción que disparó sin apuntar y que no sabía si tenía balas de goma o de plomo. El proyectil que lo mató ingresó por la garganta. Fue en Rosario, Santa Fe.

- MÁRQUEZ, Alberto, 57 años Durante la manifestación en la Ciudad de Buenos Aires, de una camioneta salieron civiles y uniformados que empezaron a disparar indiscriminadamente. Alberto Márquez recibió dos balazos en el tórax a consecuencia de los cuales murió. Uno de los autores es el comisario Oliverio, jefe de asuntos internos de la PFA, quien está detenido.

- MORENO, David Ernesto, 13 años Salió corriendo cuando la policía empezó a disparar contra los vecinos que se agolpaban frente a un supermercado en la provincia de Córdoba. La autopsia determinó que David fue herido con cinco proyectiles, algunos de goma y otros de plomo. De la nuca le extrajeron una posta de plomo que pertenecería a un cartucho disparado por una escopeta calibre 12/70 de la Policía. Los impactos en su cuerpo y en los de los otros heridos fueron por la espalda, por lo que se descarta que hayan sido lesionados por otras armas que las que disparaban los uniformados.

- PACINI, Miguel, 15 años Asesinado durante en la provincia de Sta Fe, recibió varios disparos en el cuello.

- PANIAGUA, Rosa Eloísa, 13 años Había ido con su familia a buscar comida en un supermercado en Paraná, Entre Ríos, porque el comisario del barrio había hecho correr la voz de que entregarían mercadería. Al llegar los esperaban policías y gendarmes. La bala entró por la parte superior de la cabeza y salió por la boca.

- PEDERNERA, Sergio, 16 años Baleado durante la pueblada del 19 y 20 de diciembre en la provincia de Córdoba. El menor se encontraba en la calle buscando comida para su familia en el marco de los reclamos masivos que se realizaron en supermercados, cuando recibió una bala policial en el tórax que le produjo una paraplejia. Un año después falleció en el hospital.

- PEREYRA, Rubén, 20 años Baleado por la policía cuando regresaba a su casilla llevando al hombro una caja con alimentos entregados en un supermercado. En Rosario, Sta Fe

- RAMÍREZ, Damián Vicente, 14 años Asesinado de un balazo en el cuello en la esquina de Maciel y Cristianía, Gregorio de Laferrere, Buenos Aires.

- RIOS, Sandra, Asesinada durante la pueblada del 19 y 20 de diciembre. Sin datos.

- RIVA, Gastón Marcelo, 30 años Circulaba en moto por la Avenida de Mayo en la Ciudad de Buenos Aires, cuando recibió un disparo en el pecho proveniente de alguna de las armas de un grupo de cuatro policías que estaban disparando.

- RODRÍGUEZ, José Daniel, Asesinado en Paraná, Entre Ríos.

- ROSALES, Mariela, 28 años Asesinada en Lomas de Zamora, Buenos Aires.

- SALAS, Ariel Maximiliano, 30 años Asesinado en la esquina de Maciel y Cristianía, Gregorio de Laferrere, Buenos Aires.

- SPINELLI, Carlos Manuel, 25 años Fusilado desde un Gol blanco durante la rebelión popular del 19 y 20 de diciembre. Sucedió en Pablo Nogués, Buenos Aires.

- TORRES, Juan Alberto, 21 años Sufrió una herida de arma de fuego en la zona abdominal. En Corrientes.

- VEGA, José, 19 años Asesinado en Moreno, Buenos Aires.

- VILLALBA, Ricardo, 16 años En Rosario, Sta Fe, recibió un tiro en un ojo cuando vecinos manifestaban pidiendo alimentos frente a un autoservicio. Murió el 23 de diciembre.

© Fuente: Correpi y publicado por http://lavaca.org el domingo 4 de Septiembre de 2011.



domingo, 16 de diciembre de 2012

Diagnóstico y remedio… De Alguna Manera...


Diagnóstico y remedio…

PRIMERO, AUXILIO. Cristina Fernández de Kirchner. Dibujo: Pablo Temes.

Kirchneristas y ex, dentro y fuera del Gobierno, marcan errores y esperan decisiones de Cristina. Escenario opositor.

El discurso extremo, que identifica a grupos críticos con su peor sector, puede valer para la tribuna propia, pero produce contraindicaciones severas. Meter a todos los asistentes a las manifestaciones del 8 de noviembre en la misma bolsa que Cecilia Pando es un error de análisis, amén de una táctica boomerang.” “El error de diagnóstico aleja o enfada a los no encuadrados o dubitativos y, a menudo, a quienes ‘balconean’ desde afuera.”

Es infrecuente que desde una columna de un diario se recomiende la lectura de un “competidor”. Pero el valioso texto del comienzo pertenece a Mario Wainfeld y fue publicado el domingo pasado en Página /12 bajo el título de “Sanguchitos y política”. Se trata de un trabajo que coloca en el “ágora”, como le gusta decir a él, un debate que hierve casi clandestinamente entre los cuadros con más historia dentro del peronismo. Son los que apoyan con toda lealtad a Cristina, pero ven con preocupación el creciente sectarismo de la Presidenta y el consecuente desembarco como funcionarios  de jóvenes que en muchos casos tienen como única virtud la de pertenecer a la agrupación que lidera (¿) Máximo Kirchner.

Nadie podría acusar a Wainfeld de ser un gorila destituyente. Todo lo contrario, es uno de los analistas que mejor defienden al Gobierno porque se permite ciertas disidencias aunque sean escritas con prudencia, algún eufemismo y sin responsabilizar jamás a Cristina de esas fallas. De hecho, cuando señala a los autores materiales del “discurso extremo y los errores de diagnóstico” apunta a “ciertos bastiones oficialistas” que no comprenden que “a veces la épica o la voluntad de hacerse cargo de conflictos inherentes a la lucha política se confunde con carecer de aptitudes para la negociación, la articulación, los canjes lícitos. O de ciertas destrezas más sutiles, como trabajar a los adversarios por líneas internas. En ciertos bastiones oficialistas se lee eso como fuerza, cuando puede ser una debilidad o una falta de ductilidad, cuando menos”.

La columna funciona como un resumen de lo que pude recoger hablando con peronistas que no descubrieron a Perón hace cinco minutos, como Amado Boudou o Beatriz Rojkés, quienes sólo le han aportado dolores de cabeza al Gobierno y que fueron designados por la propia Cristina en los dos lugares institucionales más importantes abajo de ella. Cristina carece de olfato para elegir a sus colaboradores. Tal vez su mayor pecado sea privilegiar demasiado la obsecuencia por sobre los méritos.

Wainfeld, en su estilo prudente, también se mete con los cambios de gabinete que en voz baja muchos kirchneristas reclaman. Dice el periodista que “quizá sea el momento de analizar si es necesario renovar elencos, manejar más recursos políticos”.

Es curioso pero es posible encontrar este pensamiento crítico en ambas orillas. Los que están afuera del kirchnerismo y fueron ministros como Roberto Lavagna, Alberto Fernández o Alberto Iribarne piensan parecido a los que callan porque están adentro: Carlos Tomada, Florencio Randazzo, Julián Domínguez. Jamás lo dirán, pero todos ellos, genéticamente peronistas, se sienten más cerca entre sí que con los recién llegados de La Cámpora o sapos de otro pozo como Héctor Timerman o ex funcionarios de la Alianza, como Nilda Garré y Juan Manuel Abal Medina. La clave, por ahora indescifrable, es por qué Cristina confía más en los amigos de sus hijos que en esos dirigentes históricos. Y la gran pregunta es si a medida que se acercan las elecciones de medio tiempo, finalmente con pragmatismo, va a abrir sus puertas para todos o va a profundizar el aislamiento.

Mario Wainfeld en su nota pone como ejemplo a uno de ellos. Rescata “la vocación de diálogo” de Julián Domínguez y “una capacidad de contactarse con el adversario no siempre visible en el oficialismo”. Recuerda los elogios de sus pares a la hora de reelegirlo al frente de la Cámara de Diputados y las buenas relaciones que supo tejer con los productores agropecuarios cuando fue ministro del área, después de la guerra de la 125. Eso no lo convierte en un traidor a Cristina ni en un kirchnerista de paladar negro, es según el columnista “un conservador popular con agenda actualizada”.

La columna desborda observaciones críticas (siempre respetuosas y en lenguaje casi académico) ya planteadas por otros periodistas (tal vez en forma más insolente y descarnada),  fusilados mediáticamente por el aparato propagandístico K.

La rigidez dogmática, la desmesura épica que pretende ocultar ineficiencias y actos de corrupción, la falta de cintura para cortar menos grueso en los conflictos y aislar a los grupos minoritarios ( como los de Cecilia Pando, por ejemplo) son situaciones que siempre estuvieron en el ADN peleador de Néstor, pero que Cristina elevó a la enésima potencia y lo transformó en goles en contra. La Presidenta pierde el rumbo porque no encuentra la única respuesta que la tranquilizaría, que es la manera de autosucederse en el poder. Su furia, muchas veces sólo le sirvió para unir en la otra vereda lo que estaba dividido: Magnetto y Lanata; Moyano y Patricia Bullrich (en la mesa de diputados esta semana); Biolcati y Buzzi; Barrionuevo y Micheli (en la marcha que viene), Binner y Macri (el lunes en la UCR); y hasta Majul y Wainfeld, cuando en su nota dice que “la demanda del titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, contra los periodistas Matías Longoni y Luis Majul es algo peor que un error de manejo. Es una conducta intolerable e incongruente en un gobierno que despenalizó las calumnias e injurias”.

La mirada de Wainfeld es un buen termómetro de lo que está ocurriendo en las entrañas del peronismo, dentro y fuera del poder. Planteó que “no todos los que pararon el 20 de noviembre ‘son’ Hugo Moyano o Luis Barrionuevo o Gerónimo Venegas. No todos sus reclamos son absurdos, no todos son irrecuperables políticamente. Tratarlos de ese modo, así fuera en el discurso, resta en vez de sumar”.

Todos los caminos conducen a Roma. O a ese empeño en achicarse con alegría que suele exhibir el oficialismo. Los convencidos, o las minorías intensas, sirven para potenciar la mística, pero no para ganar elecciones y menos para administrar un gobierno. El infantilismo revolucionario ya parió un fracaso generacional feroz y una tragedia horrorosa. En la legendaria revista Unidos, que dirigía Chacho Alvarez, el mismo Mario Wainfeld (ambos de la JP Lealtad, en su momento) escribió en diciembre de 1985 que los Montoneros se fueron del peronismo “porque al pasar a la clandestinidad,  el 6 de septiembre de 1974, abandonaron la lucha de masas para convertirse en un movimiento elitista que no representaba a los sectores populares”. La misma soberbia pero sin armas.

© Escrito por Alfredo Leuco y publicado en el Diario Perfil de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el domingo 16 de Diciembre de 2012.