martes, 29 de septiembre de 2009

Los Artistas... Los Nocheros... De Alguna Manera...


Corría 1996, llega a manos de Hugo Casas, Director Artístico de EMI Odeón de Argentina un demo de un grupo folclórico salteño que había obtenido el Premio Revelación en el Festival de Cosquín en 1994…

Ese demo llega por intermedio de un importante miembro del Gobierno Nacional, riojano él, al igual que Hugo… “Vean que pueden hacer…” habrá sido la intención del funcionario y como de oír se trataba… Oímos todos y realmente “sonaba” distinto a todos los grupos de folclore que habíamos conocido…

El representante artístico del grupo, Norberto Bacón, nos insistía que debíamos viajar a Salta y verlos actuar “in situ”… Convencimos al Director General de la compañía, Eduardo Hütt Dorado, mejicano y excelente persona, por su proactividad y actitud para los negocios y para allí partimos… Cabe destacar que muy pocos creíamos en ellos, ya que nuestra compañía estaba para otra cosa ¿vio?... Somos una compañía de origen inglés… Esto no es para nuestro sello muchachos… ¿Para que invertir aquí, si podemos invertir allá?... Mérito de Hugo Casas y Eduardo Hütt Dorado en apoyar la cruzada… El tiempo nos dio la razón… Los Nocheros eran muy buenos como artistas y como personas…

Bella provincia Salta, bellos paisajes Salta, bellas las salteñas, ni que hablar de sus vinos y sus empandas… El evento era en el estadio Delmi, un estadio con muy buena capacidad, 15.000 personas cómodamente ubicadas, con un escenario muy visible a los ojos de todos y con un sonido aceptable… El Delmi lo llaman y las casi 20.000 personas rebozaban el lugar… Mujeres, hombres, niñas y niños, jóvenes copaban el lugar la fiesta era increíble, similar a cualquier recital en Obras Sanitarias en Buenos Aires, salvando las respetuosas distancias entre ambos lugares…

La artista telonera fue Yamila Cafrune, apellido ilustre en salta, en honor a Jorge “El Turco” Cafrune, un hombre de decir, entonar y movilizar con sus canciones y poesías… Yamila no hizo esa noche honor a la entonación, pero de atrás de escenario surgieron dos integrantes de aquel grupo musical, se pusieron a la par y levantó al público, que ya había empezado a murmurar el desentone de la cantante salteña… Toda un actitud de generosidad de Rubén Sergio y César Kike, con bombo y guitarra respectivamente…

Y el tan esperado momento llego. Se apagan las luces del Delmi… El silencio fue total… De pronto desde la oscuridad se escuchan los sonidos de dos guitarras, bombo, batería y percusión…

Tanto Hugo Casas como quien suscribe nos quedamos atónitos, no ya por la instrumentación, las voces y las diferentes coreografías del recital, sino por la reacción del público presente… Llantos, corpiños que volaban, niños cantando las canciones, jovencitas gritando y llorando al mejor estilo del público femenino inglés cuando The Beatles se presentaban en cualquier parte del mundo… Hombres emocionados, gente bailando en los pocos lugares libres… Sobre nosotros recaía la mirada del representante artístico, que sin mediar palabra nos hacía entender un… “¿Vieron?”… -Yo les decía y Ustedes no quieren invertir un peso…-, razonamiento lógico de cualquier representante de artistas, aunque en este caso más que justificada la “mirada parlante…” de Norberto Bacón.

Esto escribía en el Diario La Nación Héctor Cuevas el 16 de noviembre de 1996 de este año sobre los principios del grupo…

“Sorprendieron a su propia compañía discográfica, que sólo se fijó en ellos cuando alcanzaron el primer disco de oro, sin más apoyo que su intenso recorrido por el circuito folklórico. Se llaman Los Nocheros, visten informalmente y son Mario y Kike Teruel (guitarras y coros) y Jorge Rojas y Rubén Ehizaguirre (en voces).
Con una formación tradicional, generaron un fenómeno nuevo, que no se registraba en este movimiento desde la época dorada de los sesenta. Tienen dos discos editados, "Con el alma" (1994) y "Tiempo de amor" (1996), que en total alcanzaron las 150 mil copias vendidas, y lograron armar su propia productora, aunque el verdadero suceso hizo eclosión en los multitudinarios festivales que se realizan en el interior del país en el año.

Cada vez que tocan en vivo, un público adolescente llena los teatros y miniestadios. El nivel de euforia en sus conciertos se asemeja al de los grupos de rock. En el norte argentino son verdaderos ídolos populares, tanto que no pueden caminar tranquilos por la calle. Y en la reciente gira por Jujuy, Tucumán, Córdoba, La Rioja y Catamarca no bajaron de un promedio de cinco mil espectadores por función. En septiembre festejaron su década de vida, en Salta, y reunieron a más de diez mil personas en el estadio Delmi. La frutilla de la torta será la llegada al teatro Coliseo, el 23 de este mes, donde quieren repetir estos antecedentes: "Queremos conquistar al público capitalino", dicen con su particular tonada.

La historia de Los Nocheros comenzó en la Feria de la Cocina Regional de Salta, en el invierno de 1986, con ponchos, guitarras, bombo y canciones tradicionales. Pero el tiempo los transformó en esta versión aggiornada, con bajo eléctrico y batería.

Cuidadosos arreglos vocales y un tono erótico en letras como "En suspenso"-propiedad de Yuyo Montes- le dieron un sello personal al grupo. Una fórmula que les permitió conectarse de una manera especial con los adolescentes. Sin embargo, en el repertorio del grupo salteño también abundan zambas históricas, como "La nochera", y melodías urbanas compuestas por Mario Teruel.

Para muchos, Los Nocheros son el referente de una nueva camada que asoma con fuerza y apuesta a las fuentes originales de la música nativa con cierto desparpajo. Para otros, un producto de la música popular alineado con el género romántico.

-Este fenómeno que viven ustedes, al igual que el de los festivales del interior, parece reflejar un resurgir del folklore ¿Piensan que se puede repetir el boom de los años sesenta?

Mario: -Creo que todas las situaciones son muy distintas, y responden a una época determinada. Para nosotros, la música es una expresión de lo que una sociedad quiere y necesita. Y en la medida en que se les dé la posibilidad de elegir a los chicos y conozcan algo que es realmente suyo, es posible que exista una apertura hacia el género folklórico. Estamos viendo que se están acomodando muchas cosas. Como decía la frase, hay que volver a las raíces. Y creo que en este caso las raíces se van imponiendo de a poquito.

Rubén
: -Para eso es necesario ofrecer otras cosas. Ya no puede haber sólo cuatro personas arriba del escenario con tres guitarras y un bombo. Hay que hacer espectáculos como los que traen de afuera y trasladarlos al contexto de la música popular. Hay que cambiar la mentalidad dentro de lo que puede ser un show de folklore. Porque todo eso lleva a que los chicos se identifiquen con esta música.


-¿Esos cambios los ubica en otro lugar que no tiene que ver con ser sólo un grupo de folklore?

Mario: -En realidad, somos un grupo de música popular y no de folklore. En la medida en que nos da el cuero tratamos de hacer lo mejor dentro de nuestras limitaciones. Por ahí se nos ocurre cantar cualquier canción que no esté encasillada dentro del folklore, y nos gusta hacerlo. No nos interesan los límites que se les pone a los músicos. Por eso también invitamos a León Gieco para que toque armónica en uno de los temas del último disco. Y soñamos con que la zamba y la chacarera formen parte reconocida de todo el universo musical. Además, me gustaría que no se confundan más los conceptos. No se puede hablar de un folklore tradicional y uno de proyección. ¿Qué es eso? Algunos escuchan un acorde raro a cuatro voces y dicen que es música nueva. Hay que dejarse de discutir y ver cómo reaccionan los más jóvenes. El 70 por ciento de nuestro público son menores de 20 años y pueden disfrutar tanto de una chacarera, una zamba y las canciones lentas como de un rock que viene de afuera.”

Estamos ya en el año 2009, el grupo realizó cambios en sus integrantes, Jorge Rojas fue reemplazado por Álvaro Teruel, cometieron algún “error técnico” de realizar Play Back en su propia tierra y el mismísimo Delmi… Aunque no por eso se los puede dejar de reconocer como “bisagra” en el repertorio de la música popular de Argentina, criticados duramente en aquella época por casi todos los referentes “del palo”…

Recuerdo una mañana en LRA Radio Nacional (870 Mhz. en A.M. y 98.7 en F.M.), un conocido conductor de la radio, nos negó a Hugo Casas y a mí la difusión de Los Nocheros, por no considerarlos intérpretes de música folclórica… (Ay Omar… Omar… cuanta petulancia maestro querido…)

Biografía.

En 1986, la tierra salteña, abrazada por el trópico, fue testigo de los primeros acordes de Los Nocheros.
El ámbito de sus comienzos estuvo musicalizado por Los Chalchaleros, Los Fronterizos, Los de Salta, Los Cantores del Alba, Los Nombradores, Daniel Toro; fue entonces cuando supieron forjar esa personalidad y ese sonido auténticamente salteño, que los llevo a recorrer todo el país.
Sus primeras incursiones artísticas, luego del coro polifónico de Salta, fueron como dúo, conformado por Mario y Rubén. Al poco tiempo fueron integrando nuevas voces hasta conformar el cuarteto actual.

La agrupación está integrada por Mario Teruel (barítono, guitarra-arreglos, composición), Jorge Rojas (tenor, voz y composición), César Kike Teruel (barítono, guitarra/charango, composición), y Rubén Sergio Ehizaguirre (tenor, voz y composición). Participó originalmente Enrique Aguilera, reemplazado luego por Jorge Rojas.

Con una dinámica artística asombrosa fueron colmando todo tipo de festival, teatro, estadio o anfiteatro en el que actuaran.

En 1994 irrumpieron en Cosquín y obtuvieron la consagración, éste galardón sirvió para certificar el comienzo de un éxito imparable. Obtuvieron, entre otros premios, el Francisco Canaro (S.A.D.A.I.C), el Olimpia (Salta), el Pampa (Córdoba) como artista revelación en 1997 y el Premio Gardel como Mejor Grupo de Folklore y Mejor Álbum del año 1999; y como Mejor Grupo de Folklore en el 2001. También fueron nominados para los Premios Grammy Latinos (2000) en el rubro Mejor Álbum Folklórico.

Buenos Aires fue el siguiente destino. En el año '97 actuaron en el Coliseo, en el '98 lo hicieron en el Teatro Gran Rex, en el '99 llegaron al Luna Park realizando 5 shows.

En abril del 2000 presentaron un mega espectáculo en el Estadio de Vélez Sarsfield y a fines del 2000 volvieron al Luna Park con 8 presentaciones.

En el mes de septiembre del 2001 en el mismo estadio (Luna Park) 7 noches recibieron a un total de 49 mil personas, superando las anteriores cantidades de público convocadas.

Anualmente, Los Nocheros recorren el país con una gira que abarca todos las provincias y los escenarios imaginables. Esta gira se lleva a cabo con un staff de 20 personas y con toda la técnica que se emplea en los grandes escenarios. En el año 2000, la promoción del disco Nocheros llevo al conjunto a viajar por Colombia, Venezuela, Paraguay, Chile y México.

Los Nocheros han editado: Con el Alma (1994), Tiempo de Amor (1996), Ven por Mí (1997), Signos (1998), Nocheros (1999), Señal de Amor (2001) y Estado Natural (2003) que contiene doce nuevas canciones con el estilo que los caracteriza y con un sonido que crece disco a disco.

La producción de cada uno de sus discos es un cuidado trabajo en el que converge un nuevo repertorio y clásicos del folklore argentino.

En el año 2004 lanzan Noche Amiga Mía, un recorrido por todos los ritmos de América: carnavalitos, chacarera, zamba, bolero y cumbia. Para este disco invitan a Alejandro Lerner y Alfredo Rojas. Daniel Magal y Rubén H. Lotes son los autores del primer corte, "Cara De Gitana", un éxito de hace años.

En marzo de 2005 Jorge Rojas decide alejarse de la banda para lo cual se organiza la última presentación en el estadio de Ferro el 30 de abril, recital que queda registrado en un disco titulado Vivo y así le dan la bienvenida a la banda a Álvaro Teruel, hijo de Mario.

En mayo de 2006 lanzan "Crónicas", primer disco luego del recambio de integrantes y que sirve para presentar oficialmente en sociedad al joven Álvaro.
En esta nueva produccion, Los Nocheros vuelven a experimentar con ritmos latinoamericanos y baladas melódicas. Sin Rojas, la fórmula no cambia: música popular argentina con percusión pop y teclados. Con arreglos cuidados, prolijos y simples, las canciones recrean un sonido nochero que lleva más de quince años de vigencia y una eficacia comprobada a la hora de sumar admiradores.

El primer sencillo fue presentado en la entrega de los premios Gardel y se titula "Crónica de las cosas que pasan en la ciudad cuando no me respondes".
"Gen" es el siguiente trabajo discográfico de los salteños, y marca el regreso a sus raíces musicales proponiendo la vuelta a los inicios como grupo.

Apartados un poco de lo melódico, esta placa retoma las canciones clásicas, con 14 temas de autores como los hermanos Abalos, Atahualpa Yupanqui, Montbrum Ocampo y Videla Flores, César Perdiguero y los hermanos Núñez, entre otros.
"Las 2200 noches" es el siguiente disco editado en octubre de 2008. Recorre 15 temas en vivo del pasado y el presente, con la participación de invitados de lujo como Abel Pintos, Roxana Carabajal y el grupo Las 5 voces.


Espacio dedicado a los Artistas que han pasado por nuestro Programa De Alguna Manera, 97.1 Mhz. F.M. Latinoamericana... "La Radio del barrio de Saavedra"... Ciudad Autónoma de Buenos Aires. República Argentina.

LAC & Co.


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